En una noche calurosa como las de verano, en una casa grande y hermosa, un ser intentaba respirar, viendo hacia su alrededor con confusión, su mirada apagada y su llanto no le permitía pensar con claridad, todo su mundo se iba abajo una vez más, ya que, "la pesadilla había comenzado".
Geno despertaba después haberse desmayado hace unas horas, su memoria estaba borrosa, solo recordaba haber golpeado contra una pared, de ahí, todo era borroso. Intentaba moverse, pero al hacerlo su cabeza dolía, solo se limitó a quedarse acostado en la cama, no había más que pudiera hacer.

Mientras divagaba, notó dos cosas. Número uno, traía una de las túnicas de Reaper, y dos, no sentía su pierna izquierda, pensó que estaba dormida, ya que al intentar moverla sentía dolor.

Intentó ignorar su estado, recostándose en el respaldo de la cama, pero al hacerlo, su cuerpo le dió un pequeño shock de dolor al hacerlo, solo volvió a dejarse caer en la cama con algo de calor.

No sabía que hacer, se sentía cansado, demasiado como para siquiera levantarse o moverse siquiera. Su pierna izquierda le daba alguno que otro pinchazo y picazón por la zona del talón, el cual, no sentía, pero creyó que era porque su mano estaba adormilada, ya que sentía el talón en una posición específica, que, aunque no pudiese sentirlo, intentaba rascárselo.

Suspiró pesadamente, hoy no sería un bueno día. Vió a su alrededor, notando una cosa en la mesa de noche, un bote de pastillas con una nota al lado, la tomó y comenzó a leer de manera meticulosa y en repetidas ocasiones por si se comía alguna palabra.

Espero hayas despertado mejor que hace unas horas, te deje el medicamento en la mesa, espero no lo vomites esta vez.

Su mente estaba en blanco, "¿ya había despertado hace unas horas?", no lo recordaba por más que quisiera.

Pensó un poco, tomó el frasco de las medicinas, leyó su contenido y miró al techo agradeciendo que por lo menos la muerte había hecho algo bien en estos días. Eran medicinas hemostáticas y para el dolor, (Hemostático: sustancia utilizada en la medicina para mantener la sangre en lo vasos sanguíneos). Se tomó una en seco, y mientras tanto, se plateó la pregunta, "¿por qué un Hemostático?, con el de dolor bastaba", supuso que solo era para sus manos o hasta para su cicatriz torácica.

El dolor comenzó a disminuir, su cuerpo se calmaba, hasta se podría decir que se estaba relajando, Se relajó tanto que volvió a caer dormido.

Hasta que un sonido sonó en la puerta, alguien había tocado desesperadamente, despertando al moribundo.
-pase.-dijo con la voz algo ronca y nadie respondió-
-Pase- repitió-
-¡que pase!.-volvió a repetir, está vez, el cerrojo se intentó abrir, pero la puerta estaba cerrada con llave.
-¡está cerrado!.
Mencionó una voz, está era diferente a cualquier otra, estaba casi seguro que nunca la había escuchado pero la conocía de algún lado, tal vez estaba alucinando.
-voy- se levantó de lo más tranquilo, de la nada, nada le dolía. Tomó las llaves de la mesa de noche y abrió el cerrojo de la puerta, esta poco a poco se fue abriendo y:

Despertó en la vida real, todo había sido un sueño, su cabeza daba vueltas. Pero un sonido familiar lo sorprendió, era esa voz tan extraña y familiar a la vez.
-¿Quieres que venga después?, ahg, ¡REAPER ABRE LA PUERTA NO PUEDO ESPERAR TODO EL DÍA!.
Golpearon la puerta con fuerza.
-El no está.
Dijo lo más fuerte que pudo, su garganta estaba algo adolorida, parecía como si anoche hubiera estado gritando toda la noche o por lo menos un buen tiempo.
-¿eh?, ¿quién anda ahí?.
-soy, soy yo, Geno.
-¿Geno?, oh, claro, lo olvidé, Reaper es tu pareja, y supongo que duermen juntos, tiene sentido, uh, ¿Sabes a qué hora va ha llegar Death?.
-n-no, acabo de despertar, no supe cuando se fue, sólo sé que se fue a trabajar.
-okey, okey, uh.......espera un momento.
Hubo un silencio de unos minutos.
-¿te dormiste a las siete de la noche?.
-¿qué?.
Esto le causó sorpresa, no pensaba que había dormido tanto tiempo.
-Bueno, voy a, ya sabes, irme, uh, dile a Death que "Ink" lo vino a buscar para nuestro acuerdo.
-¿Ink?, espera, ¿eres Ink?.
-si, ¿por qué?.
-¡ESPERA!.
Gritó lastimando sus cuerdas vocales, salió de la cama, cayendo de golpe al suelo, causando un gran estruendo, volteó a ver porque no había pisado bien y...

Notó su inconveniente, una parte de su cuerpo vendado, una parte de su cuerpo faltante. Quería gritar del horror, pero no salían las palabras de su boca, estaba en shock.
-¿Geno?, ¿estás ahí?.
-si, solo, sólo...... ¿vas a volver?, ¿cierto?.
-oh, claro, de hecho, me estoy mudando para acá, así que técnicamente no me voy a ir.
-bien, gracias, ¿en qué planta estarás?.
-eh, en la uno.
-Gracias, ya puedes irte.
Mencionó melancólico.
-le diré a Reaper que lo necesitabas.
-¿en serio?, ¡Gracias!.
Se emocionó, y se fue dando pisadas fuertes en el suelo, no esperaba esa reacción.

-¿Qué pasó?.

Laguna mental traumática, esto sucede cuando el cuerpo tiene un recuerdo tan traumático que lo reprime hasta ser olvidado, pero se recuerda con ver, sentir, oler o tocar algo que recuerde el momento del suceso.

Se tiró al suelo, riendo, intentaba calmarse y respirar, pero, no podía, se levantó como pudo, miró hacia una esquina de la habitación, había un balcón, caminó hacia ahí, agarrándose de todo lo que pudiese sostenerlo.
Abrió la puerta corrediza y salió hacia lo que era el balcón, ya podía respirar un poco, se sentó de a poco, tomando aire, e intentando mantener la cordura.

Miró hacia el cielo, las estrellas se asomaban, la noche estaba ya casi cubriendo por completo el cielo, una vista hermosa para una noche desastrosa, sentado en el suelo frío, intentando no derramar lágrimas aunque se sentía igual de mal la primera vez que su humano hacía la ruta genocida, se sentía igual de mal que cuando perdió su mundo e igual cuando no pudo morir.

En una noche tan calurosa como las de verano, en una casa grande y hermosa, un ser intentaba respirar, viendo hacia su alrededor con confusión. Su mirada apagada y su llanto no le permitía pensar con claridad, todo su mundo se iba abajo una vez más, ya que, "la pesadilla había comenzado".