三 : Lluvia sobre pétalos
Hyeju ha tenido un mal día. Está molesta. La universidad no suele ser su fuerte, pero nunca ha reprobado y se mantiene en calificaciones no lo suficientemente bajas pero ha tenido un muy mal día. Era 12 de abril, y lo unico que estaba llevando a Hyeju al final del día sin gritarle a nadie era que al día siguiente solo tenía una clase a las 4:30 y que la noche hoy bebería con sus amigas.
Si no fuese por eso, probablemente le hubiésemos gritado hasta su profesor de anatomía.
Para empezar el día, su hermana luego del evento que dejó a todos los padres encantados con el detalle de las rosas. Por el cual todavía no recibe el dinero. Hyesook había estado recibiendo aquellas flores de sus alumnos de vuelta en lo que lleva de la semana, Hyeju aprecia el detalle pero quiere que todas se marchiten y tirarlas a la basura lo más rápido posible.
Lo que más había arruinado su día había sido otra cosa... más bien una persona. Choi Yerim. Choi era su compañera en Química cuántica, a ella no le caía mal aquella chica pero definitivamente preferia pasar el tiempo con cualquier otra persona.
Choi le recordaba mucho a ella.
Una chica popular con una sonrisa de aquellas que hacen caer a cualquiera, esa por la que Hyeju alguna vez habia caido hace muchos años. Ella y Yerim eran simples compañeras, hablaban de vez en cuando, Hyeju confirmaba que eran más las veces en contra de su voluntad. La chica se había sentado junto a ella y no contenta con poner incomoda a Hyeju le había regalado una rosa roja pidiendole una cita en frente de todo el curso de Quimica cuántica al salir.
Hyeju enrojeció, y no de vergüenza, sino de rabia. Golpeó la mano de Yerim para tirar aquella rosa y entre los murmullos de los demás universitarios se fue a su siguiente clase deseando tener una botella de soju en la mano lo más antes posible.
Por suerte sus demás clases pasaron lo suficientemente rapido para poder irse a casa una hora para prepararse antes de ir al bar. Hyesook no le había hablado, se había dado cuenta de su ánimo y se compadeció de sus amigas que tendrían que soportar a Hyeju bebiendo con esa actitud pesimista.
En fin.
Hyeju llegó unos diez minutos antes de la hora acordada y no se sorprendió en ver a Jungeun y Jinsol allí. Jungeun como siempre ignorando a la de cabello oscuro. Jinsol la eterna enamorada hacia Jungeun. Que ironía. Hyeju se sentó frente a ellas con un suspiro y dejando su chaqueta en el respaldo de la silla. La rubia desvió la mirada de la pantalla para mirarla. "Hey, ¿no saludas?"
"Hola". Saluda con una sonrisa sarcastica. Jungeun se mofa. "Son hoy rechazó a una chica popular de Ingenería Civil Quimica. Todos hablan de eso". Jungeun le informa a la peliengra que frunce el ceño. "¿Por qué la has rechazado?"
La azabache toma aire y luego sacude la cabeza jugando con las puntas de su cabello. "Ni siquiera me gusta, me incomoda... Me ha dado una rosa". Ambas sisean.
Hyeju conoce a Jungeun desde niñas, fueron siempre amigas desde primaria. Hyeju fue la primera en salir del closet, Jungeun lo hizo unos años después. La historia con Jinsol era más complicada, Jinsol se había unido al grupo con una fachada antes de revelar su verdadera intención. Jungeun no se lo había perdonado, pero tampoco la habían excluido y a Hyeju le caía bien, era como Hyesook... pero más torpe. Ambas sabían la historia detrás de las rosas. Y Son agradecía que ellas lo entendieran y no divagaran, no le exigían hablarlo, ni contarle detalles. Así Hyeju se mantenía tranquila.
"Heejin dijo que invitó a alguien más". Jinsol comenta. Ambas chicas se miran con el ceño ligeramente fruncido. "¿A que te refieres con 'alguien más'? ¿otra novia del hermano de alguien?" Jinsol hace una mueca algo dolida por las palabras pero ignora el comentario carraspeando. "Dijo que es alguien nuevo en el pueblo, Heejin dice que tiene nuestra edad. Seguro necesita amigas". Comenta Jinsol con un brillo de dolor en los ojos moviendo el vaso con algo de cerveza.
Hyeju resopla. "¿Necesitar amigas?¿Estamos en primaria? No somos el ideal grupo de amigas de este pueblo". Hyeju apunta a las tres en la mesa con Jungeun dandole la razón. "Sin duda el grupito queer de un pueblo retrograda no sería una buena idea, ¿que si ha venido de Seúl porque está aburrida de la vida liberal y quiere un pueblo homofobico retrograda?"
Jinsol rueda los ojos llenandose de paciencia. "Suenan como unas maniáticas. Heejin tiene un buen ojo en la gente, no traerá un asesino serial, Dios mío".
[ ... ]
Chaewon no sabe porque se encuentra nerviosa, bueno, si lo sabe. Pero admitirlo es diferente. Ella nunca fue de tener muchos amigos, incluso había perdido contacto facilmente con sus 'amigos' de la escuela, los que por cierto se seguían viendo sin invitarle. Sus únicas amigas eran Sooyoung y Jiwoo y podía considerar a Hayoon su compañera de laboratorio en medicina clínica. aunque no asistiría mas entonces.... Tal vez no.
Como gesto de bienvenida y obvio una referencia al pueblo de rosas, Chaewon había decidido llevar 5 rosas de un color rosa no tan claro, para las chicas que estuviesen allí. Se encaminó al lugar donde la chica del mensaje le esperaría; afuera del recinto para no entrar sola. Se dió ánimos todo el camino, pensando buenas maneras de comenzar una conversación sin sonar rara, no dar tantos detalles pero tampoco parecer fría, ser una chica normal.
"¡Hola!" La voz de la chica la sacó de sus pensamientos, ella le saludó efusivamente, tanto que Chaewon sonrió sintiendo una calidez en el pecho al compararla con Kim Jiwoo en su mente por un segundo. "Creo que he llegado un poco tarde". Park dice a lo que la de cabello claro hace un gesto de desinterés.
"Pff, claro que no. Solo son unos minutos. Ven, creo que las demás chicas ya están aquí... ¿Chaewon verdad?" La más baja asiente. "Y tu eres Heejin". Confirma, Jeon asiente con una sonrisita. Heejin la guía por las mesas del lugar ágilmente hasta llegar a una mesa con 4 personas. Tres pelinegras y una rubia.
Chaewon mira a cada una hasta que su mirada cae en la azabache sentada al lado de la pared. Era aquella chica del sábado. Chaewon seguía recordando, pues aún estaba molesta por aquella actitud despectiva por su simple amabilidad. De todos modos. Tomó aire para tranquilizarse.
Hagamos como que nunca pasó, todo está de maravilla.
Heejin posa sus manos en sus hombros. "Okay, chicas ella es Chaewon. Chaewon, ellas son Jungeun, Jinsol, Hyeju y Hyunjin". La de cabello cobrizo hace una reverencia como saludo a las demás chicas que ondean su mano excepto por Hyeju que también la ha reconocido. "Parece una muñeca". Jungeun comenta con una sonrisita.
"Sean amables con ella". Heejin la sienta al lado de Hyeju que se remueve incomoda en el asiento. Jeon le sonríe y luego se estira en la mesa para darle un suave beso en los labios a Hyunjin. Las demás chicas esperan a ver la reacción de la 'chica nueva' Pero Chaewon no parece reaccionar negativamente por lo que la charla comienza ligera mientras escala a una más amena.
Hyeju hablaba poco, Chaewon estaba algo incomoda a su lado así que hablaba con Jungeun y Jinsol más que nada. Todo iba bien, bebieron Soju y cerveza, comieron cerdo verduras salteadas. Park estaba contenta, se dió la vuelta para sacar el pequeño ramo improvisado de rosas. "Quería causar una buena impresión, les traje unas rosas. Dicen que este color ayuda a la actitud positiva". Heejin chilla emocionada tomando una rosa, cada una toma una rosa menos Hyeju.
Chaewon se queda mirandole y ofreciendole la ultima rosa que queda. Sus amigas se quedan expectantes y Jungeun murmura una grosería por lo bajo. Hyeju deja en la mesa el vaso de Soju. "No me gustan las rosas".
"Oh..."
"¿Horrible verdad? Lamento romper tu corazón". La azabache dice con un tono mordaz seguramente porque está un oco borracha pero que hace a Chaewon fruncir el ceño. Esto es para lo que Sooyoung me entrenó. "Hyeju, detente". Jinsol le dice con la mesa quedando en silencio. Si Jinsol se molesta, es serio. "Sí, Son. Solo quiere ser amable". Hyunjin dice despreocupada tomando su cerveza.
"No estoy diciendo nada malo, solo que no tomaré la rosa". Son se encoge de hombros mientras se sirve otro shot. Jungeun le da una mirada a Chaewon de: No tiene remedio. Así que la cobriza no insiste y la pequeña reunión continúa.
Cuando da la media noche las chicas se van. Heejin la invita a su proxima reunion, Jungeun se emociona con la idea. Jinsol parece feliz pero Park nota que no está tan contenta, no con ella, sino con la reacción de la rubia de verla de nuevo. "¿vives por aquí?" La chica pelinegra de mano con Heejin le pregunta. Chaewon apunta a la dirección contraria. "Unas cuatro calles más abajo".
"Oh puedes irte con Hyeju". Jungeun dice. La azabache rueda los ojos ligeramente, van hacia la misma dirección, de todos modos sería incomodo caminar hacia el mismo lugar fingiendo que no se conocen. Así que Chaewon no tiene más opciones. La azabache camina a su lado en silencio. La calle está en silencio, es media noche en un pueblo costero con una gran cantidad de ancianos, la mayoría de gente debe estar dormida.
"Oh nunca había visto esto". Chaewon murmura cruzando la calle rápidamente hacia el parque. Hyeju por alguna razón le sigue y en parte Park agradece que no la deje sola en aquella calle oscura. "Es el parque Heungnam". Hay dos fuentes circulares a cada lado con el cesped alrededor y un sendero. El parque no es especial en sí, pero el cesped está repleto de rosas en degradado de colores, de rojas, rosas y blancas. Chaewon queda anonadada con los lindos colores, aunque sea de noche y la poca luz de aquel poste no le de crédito, Chaewon da una nota mental de ver aquel parque de día. "¿Siempre hacen esto?"
Hyeju asiente. "Sí, cada año".
"Es hermoso...". Murmura. "¿Por que odias las rosas? Son preciosas de verdad". Hyeju aprieta los puños, obviamente no va a responderle. "¿Que te importa?"
Chaewon resopla. "¿Sabes? nos conocimos ese día en la floristeria, y no entiendo porque pareces odiarme, no he hecho nada más que ser amable contigo". Se defiende. Son se mofa. "No te lo tomes personal, no tenemos cinco años".
"No es por eso, es porque no hay una razón para que me trates de esta manera. No tengo que ver con que odies las rosas, solo trabajo en una floristería y me gustan".
"Siento que regalar flores es una estupidez". Hyeju la corta mordaz. "Una flor no sirve para explicar nada y puedes simplemente salir de tu burbuja para darte cuenta de que toda la maldita gente que regala flores son siempre los que más mienten y engañan". Hyeju se detiene a sí misma. No quiere contarle toda su vida amorosa a una completa extraña, su día estaba siendo lo demasiado malo y se había estado desquitando con ella sin razón alguna. Bien, ella entiende que probablemente se ha pasado un poco. Chaewon por su parte había escuchado todo atentamente y empieza a atar cabos.
No es muy dificil hacerlo. Hyeju se ve herida, dolida, probablemente pasó hace mucho o no, ¿quien sabe? Pero Chaewon no es ciega y adivina fácilmente que sea lo que sea que haya pasado aún la atormenta.
"A no todos nos gustan los mismos regalos... y está bien. Tampoco todas las personas pueden recibir flores. Es el gesto lo que lo hace especial... ¿sabes? Las rosas blancas significan muchas cosas... pureza, amor puro y-"
"Inocencia, lo sé". Hyeju la interrumpe. Park sonríe ligeramente y asiente. "Pero también significan un nuevo comienzo... dejar ir el pasado y ver nuestro presente". Chaewon se agacha para recoger una de las rosas blancas fuera del cesped que se ha caido. Se la tiende a Hyeju.
Hyeju titubea pero finalmente se da la vuelta y la rosa queda en manos de Chaewon intacta.
Chaewon no va a rendirse facilmente.
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