七 : El Jardín secreto
En los demás días el pueblo se vuelve una locura con el festival cada vez más cerca. Hyeju sigue ayudando a Chaewon regularmente incluso un día habla por teléfono con Sooyoung, su prima. Fueron a comer todas juntas, el cambio de Jinsol y Jungeun estaba en proceso pues ambas estaban bastante acarameladas en la cena que tuvieron.
Ya era 26 de abril, Jiwoo y Sooyoung habían planeado venir el 28 en la tarde para estar hasta el 1 de mayo con vacaciones, además de que celebrarían que Jiwoo había sacado un aprobado en su examen de grado y pronto se graduaría en junio. Hyeju les prometió llevarlas al mejor lugar de Gunsan para comer y emborracharse y Sooyoung le dijo que invitara a sus demás amigas, por lo que tendrían una noche divertida el 31 de abril entre chicas.
"Ya está listo". Chaewon le dice mientras Hyeju estaba moviendo las macetas con lirios a la repisa. La azabache frunce el ceño. "¿Listo que?"
"La sorpresa, ven". Chaewon abre la puerta que lleva a su pequeño Jardín y Son no duda dos veces en dejar allí los lirios para acercarse rápidamente a la puerta que la lleva al pequeño espacio. Espacio que está lleno de rosas, en su mayoría rosas y blancas. Hyeju se queda congelada al ver la cantidad de rosas ordenadas en distintos cajones por su color. "Dios, esto es bellísimo...". Hyeju balbucea sin poder creerselo. Se acerca al cajón de rosas color rosa claro tocando los suaves petalos. "Ahora entiendo porque te dolian las manos si cortaste todas estas espinas".
Chaewon se ríe asintiendo y frotando sus manos adoloridas por las tijeras especiales con las que cortaba los tallos y espinas. Aún no estaban todas las rosas, pues no durarían tanos días pero aún así eran bastantes y las serían más en el festival. "¿Sabes algo? Este mes que he pasado en Gunsan ha sido uno de los mejores de mi vida... Sonará tonto si te digo que te lo agradezco?" La azabache sonríe y un pequeño sonrojo se instala en sus mejillas.
"Debería pedirte perdón por como te traté al principio... creo que siempre me pillabas en malos momentos, aunque no sea una excusa".
"Está bien, ya pasó". Ambas se sonríen de nuevo.
Chaewon sabe que lo que siente por Hyeju no es amistad, tampoco es que esté perdidamente enamorada de ella pero sabe que van por un buen camino por ahora, ninguna de las dos se ve apresurada y Chaewon está feliz de que así sea. No tuvo muchas citas significativas en el pasado, en su mayoría porque sentía que las cosas iban demasiado rápido, pero Hyeju estaba tomandose su tiempo y ella también. No necesitaban ponerse un titulo hasta que los descubrieran y con eso ella estaba bien.
Ambas se encuentran chocando sus hombros mientras ordenan más rosas, hablan tranquilamente mientras sus hombros se rozan y se miran de vez en cuando siempre terminando sonrojadas.
[ ... ]
Los días siguientes por temas de la universidad Hyeju no pudo ir y ayudar a Chaewon con el resto de flores, sin embargo hablaban por mensajes hasta la madrugada. Hyeju había hablado de la más pequeña con su hermana, que estaba ansiosa de conocerla el día del festival y muy feliz de que Hyeju se viese tan feliz y hubiése superado aquel contratiempo con las rosas.
Aunque había sido una desición completamente personal lo de superar las rosas, era obvio que Chaewon había influido en eso. Luego de aquella salida pensó en lo dificil que debía ser estar enamorado de una persona y sentir que nunca te correspondería y que había dejado que pasara frente a sus ojos tanto tiempo, por eso decidió ayudar a Jinsol con aquel plan, que de seguro si Jungeun lo supiera la mataría, pero había funcionado bastante bien, había visto las fotos en instagram de Jungeun con Jinsol en una cita el día anterior.
"¿Sabes? Aún no me das el dinero de las rosas y aquí estoy yo, otra vez, ayudandote a hacer 100 kimbap... debería comenzar a cobrarte los favores con más insistencia". Hyeju dice, es 28 de abril, ella debería haber salido con Chaewon ahora mismo y ayudarle con las rosas, en cambio, estaba a mil grados dentro de la cocina junto a su hermana que estaba preparando comida para sus estudiantes para el día del festival, mañana, y como hermana menor lamentablemente no tenía otra opción más que ayudar si quería seguir viva y teniendo un hogar. "No te quejes, además lo de las rosas ya te lo pagaré, aún no es fin de mes".
La menor la mira esceptica, Hyesook finge demencia.
'Con que así están las cosas'.
"¿Como van las cosas con Chaewon?" Hyeju frunce los labios armando uno de los kimbap. "Sería mejor si estuviera ayudandole en la floristería en vez de aquí". La castaña le pega en el hombro con fuerza lo que hace a la más pequeña sisear. "Debe gustarte bastante si vas todos los días a ayudarle".
La azabache sonríe suavemente. "Espero que sea así... es muy pronto para decir que estoy enamorada, pero me gusta pasar tiempo con ella". Hyesook deja el cuchillo con el que está cortando los rollos y se da vuelta para mirarla. "¿Puedo decirte algo?"
"¿Decirme que?" Hyeju dice no quitando la vista del rollito que está preparando pero Hyesook le obliga a mirarla. "Cuando estabas en secundaria, y estabas con esa imbecil... un día luego de la universidad, de vuelta a casa... yo la vi con esa chica". La mas joven se queda en silencio, su ceño fruncido. "No te lo dije porque no quería hacerte daño, yo nunca podría, sabía que eso te rompería el corazón, debería habertelo dicho. Tenía miedo de que si te lo decía me odiaras también".
Hyeju no habla por varios minutos. "¿Y por qué me lo dices ahora?" Pregunta con la voz baja y airada.
"Cuando trajiste la rosa blanca... wow, me sorprendí mucho. Nunca creí que te volvería a ver sosteniendo una a voluntad propia. Me contaste sobre Chaewon y me di cuenta de tu cambio, has cambiado mucho estas semanas, te ves... más viva que nunca, vamos, ¿cuando has llegado feliz después de trabajar?... Te lo digo, porque estás feliz ahora, y debes saber que esa idiota no lo está".
"¿No lo está?¿Como lo sabes?" Pregunta de nuevo confundida.
"Fui a un bar en Jeolla el fin de semana pasado, ¿te acuerdas? Fue divertido ver como su ex novia le tiraba una cerveza encima por haberle sido infiel". Las dos se ríen por lo bajo. "Quiero que seas feliz, Son Hyeju. Que la persona con la que estes sea la que te ayude a superarte a ti misma, y si es Chaewon, entonces espero conocer pronto a mi futura cuñada".
Hyeju sonríe y le da un golpecito en el hombro. "Dios, odio cuando te pones cursi, ya cállate".
"Idiota".
[ ... ]
El festival comienza temprano pero Hyeju y Chaewon han programado encontrarse a medio día. Jungeun y Jinsol llegaron juntas a su casa, de la mano y fueron a la florístería para ayudar a Chaewon con todas las rosas. Sooyoung y Jiwoo también ayudaron, llevaron las casi 600 rosas que Chaewon había plantado y pedido en esas ultimas semanas. Fueron regalando rosas en el camino y se colocaron en el parque para seguir regalando las flores. Muchos niños llegaron con dibujos para dar de vuelta e incluso algunos adultos con golosinas y demás, obvio con forma de rosas.
Muchos reconocieron a Hyeju y estuvieron felices de verla allí después de tantos años. Hyeju se sentía explotar de alegría. Sus amigas felices, Chaewon a su lado con una sonrisa enorme, incluso Sooyoung y Jiwoo de las cuales aun no era muy cercana pero estaba feliz de que estuvieran allí.
Estaba feliz de haber ido otra vez.
Hyesook conoció a Chaewon y le regaló unos de los Kimbap que había traido con la indicación de no darle a Hyeju ni un bocado.
"¿Quieres un peluche?" Jinsol pregunta, Heejin y Hyunjin habían llegado temprano ya que la madre de Heejin era una de las organizadoras, habían ido a comprar algo de comida mientras las demás seguían dando vueltas. "Claro". Jungeun dice arrastrandola con ella.
Hyeju sonríe y siente el brazo de Chaewon engancharse al suyo. "¿Seguimos caminando?" Pregunta la más bajita. La azabache asiente quitando unos pocos mechones de los ojos de Chaewon y siguen caminando por los distintos puestos. Juegan a los dardos y Chaewon gana un llavero y Hyeju una libreta. Ven a Sooyoung y Jiwoo pelear con pistolas de agua, Hyunjin siendo una pobre víctima, también su pobre pastel de arroz.
Hyeju siempre se divertía con sus amigas, pero haber vuelto al festival era una emoción distinta, se recriminó por perderselo tantos años. Eunji ya no debía afectarle, no lo hacía justo en ese momento, las rosas le habían traido algo mucho mejor.
Gunsan era un pueblo que dormía temprano excepto para el festival. Por eso, cuando oscurecía a las ocho vieron los fuegos artificiales. Las rosas se habían acabado a eso de las cinco y Chaewon era la más feliz, había sido el mejor día después de todo lo que le había ocurrido en esos años.
Hyeju carraspeó para llamar su atención y saco una rosa de color rosa palido que había guardado toda el día. Se la entregó a Chaewon. "Sé que la rosa roja significa amor profundo... pero aun no creo que sienta algo así, pero quiero hacerlo, Chaewon. Quiero que sigamos juntas... me enseñes sobre flores y pueda darte las flores más bonitas".
"Hyeju...".
"La rosa color rosa significa también un nuevo comienzo... quiero que esta rosa sea el inicio de nosotras".
Chaewon sonríe con los ojos levemente humedos, no toma la rosa, sin embargo se lanza a los brazos de Hyeju para abrazarla fuertemente. Hyeju corresponde con cuidado de no aporrear la fragil flor entre sus dedos.
Las rosas significaban algo nuevo desde ese día para Hyeju.
Son Hyeju amaba las rosas, y también comenzaba a amar a Park Chaewon.
FIN
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