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Paris, Texas


Rosalie percibe cómo sus párpados se alzan ligeramente antes de erguirse. Sus piernas, de manera inconsciente, se entrelazan alrededor de Edward. Es consciente de que está emitiendo sonidos, aunque no puede discernir si son estridentes o apenas audibles, mientras sus labios se separan sin esfuerzo. Observe la formación de puntos oscuros en el borde de su visión, que eventualmente la sumergirá en la oscuridad total. Experimenta básicamente la blancura de sus ojos antes de tener la capacidad de procesar lo que está ocurriendo.

Al alcanzar finalmente la cúspide, inhale profundamente y perciba una sensación cálida deslizándose por sus muslos. Poco después, el agotamiento se apodera de ella, y sus ojos se cierran con dificultad, atreviéndose apenas a entreabrirse. Un suave zumbido resuena por encima de ella, desvaneciéndose lentamente en sus sentidos.

Rosalie despierta y Alice le dedica una sonrisa.

Debería estar más preocupada por múltiples razones. Cuando quedó dormida, estaba desnuda de cintura para abajo y estaba bastante segura de que había algún rastro de Edward en alguna parte de ella. Eso y todo el concurso de camisetas mojadas al que se había unido en contra de su voluntad. Debería estar mortificada. En cambio, ella experimenta una sensación cálida, confusa y fatigada. Es el tipo de cansancio que penetra profundamente en los huesos de una persona. No está segura de si alguna vez abandonará la amalgama densa que ahora considera la cama, compartida con Edward.

Sin su consentimiento consciente, comienza frenéticamente a buscarlo a su alrededor, obligándose a levantarse en su búsqueda. Aunque su cuerpo le duele, eso no la detiene al arrojar al suelo la mitad de la ropa que había acumulado.

—¿Rosalía?—

Edward no está a su lado. Podría haberlo descubierto con una simple mirada, pero en retrospectiva, la situación es desagradable. Se tambalea fuera de la cama, casi tropezando y cayendo al suelo.

—¡¡Rosalía!!—

Siente que sus piernas se convierten en fideos y terminan cayendo directamente sobre su trasero. Aunque intenta con todas sus fuerzas reprimir el gemido de dolor que surge.

Finalmente, decide que, dado que le llevará un tiempo ponerse de pie, se sienta por un momento en el piso, mientras reconoce la voz que llama su nombre. Cuando sus ojos se encuentran con los de Alice, ella parece alarmada. No se ha lastimado, está bien. Simplemente no había pensado bien en todo esto.

—Qué?—finalmente suspira, tratando de no parecer tan avergonzada como se siente, mientras Alice la sigue mirando como si fuera a romperse en un millón de pedazos.

—Edward está preparando el desayuno—Le informa, y ​​Rosalie desearía que Alice salga después de aquello pero, por supuesto, ella aparece frente a ella, ofreciéndole sus manos para ayudarla a levantarse.

—Estoy bien.—

Rosalie no está bien. Siente dolor en las rodillas, la espalda baja y el trasero, pero prefiere guardar esa información para sí misma.

—Bueno, tal vez, pero ¿cómo le voy a explicar a Edward cómo caíste al suelo?— Alice mira a Rosalie como si entendiera exactamente lo que quiere decir. Tal vez lo haga, pero ella no quiere hablar de eso. Así que toma sus manos sin más protestas y trata de contener cualquier gruñido de dolor mientras se levanta.

—No lo sé— La forma en que ella se mueve la hace sentir cohibida mientras regresa a donde estaba antes, esperándola pacientemente. A regañadientes y lentamente se abre paso a través de la cama.

Cuando finalmente se siente cómodo, vuelve a mirarlo. Ella tiene una mirada de lástima en su rostro, y Rosalie casi se siente a la defensiva. Su movilidad no era tan mala.

—Tal vez deberías descansar, te ves un poco cansada.—Alice le da lo que probablemente se supone que es una sonrisa tranquilizadora, pero después de ver la expresión de su rostro, se convierte en una mueca de disculpa. Klaus decide continuar explicando por qué está aquí en primer lugar.

—Klaus dejó algunas cosas más para el bebé—Alice menciona mientras se da vuelta para recoger algo. Rosalie nota que es otro bolso hecho a mano. El recordatorio la hace querer retroceder mientras recuerda la noche anterior.

—Klaus me dijo que te dijera que Elijah envió esto.—

Alice coloca la bolsa sobre la cama y luego se voltea para salir de la habitación. Rosalie casi se sorprende al darse cuenta de que ella no se queda para mostrarle las cosas como si fuera la presentadora de un programa.

No quiere abrir la bolsa. No está segura de por qué, pero sabe que lo que hay dentro la va a perturbar. En lugar de eso, pasó la vista por el material, parecía piel de vaca. Observa los diseños, le recuerdan a su casa en Mystic Falls. Deja de mirar la bolsa para mirar al vacío.

En realidad, nunca había sentido nostalgia, no desde que se mudó con los Originales. Pasaba todo su tiempo en la casa de Klaus, sus amigos siempre estaban ahí, dando vueltas, haciéndole compañía, asegurándose de que todos estuvieran bien. Siempre estaba ahí. Definitivamente, esperaba que estuviera allí cuando ella... cuando tuviera su primer hijo. Esperaba que fuera protector con cualquier compañero que trajera a casa.

Sabía que resguardarían a su descendencia con el mismo celo que dispensaban a los miembros originarios. Imaginó que estarían presentes en el hogar cuando diera a luz a su bebe.

Un nudo se gestó en su garganta pero con firmeza, se rehusó permitirse llorar, optando por sofocar la emoción. Tomó el bolso con una determinación quizás un tanto más enérgica de lo prudente, y desparramó su contenido sobre la cama sin pensar demasiado. Al posar la mirada en lo que se presentaba ante ella, experimentó una nueva punzada en el pecho.

—Joder—

Se trataba de diminutos objetos fabricados a mano. Klaus, en sus explicaciones, reveló que durante milenios había perfeccionado la talla de pequeñas obras. Entre ellas, reconocía juguetes que, en otro tiempo, pertenecieron a Hayle. Había prendas diminutas y mocasines cuidadosamente seleccionados por Elijah, de una delicadeza que rebosaba elegancia y lujo. Estuvo al borde de las lágrimas al descubrir, entre todas las cosas, un dije que simbolizaba el linaje de los Michaelson.

Los inspeccionados fijamente durante lo que parecieron minutos. Quizás esperaba que su familia simplemente se sustrajeran de este involucramiento. Era extraño; lo comprendía. Por lo tanto, no los reprocharía por aparentemente "olvidarla" hasta que un día se presentará con su primogénito. Tal vez, los venerarían como hacen cuando un nuevo miembro joven se une al clan Original.

Mira el otro bolso que está sobre la cómoda. Se levanta, agarrándolo antes de que pueda arrepentirse de haber estado de pie, y se deja caer de nuevo en la cama. Tira lo que parece ser un papoose.

Casi se sorprende cuando Edward empuja la puerta para abrirla, con la bandeja llena de desayuno en sus brazos. Edward parece igualmente sorprendido por alguna razón y rápidamente se acerca, abandonando la bandeja en la cómoda.

¿Estás bien?- Edward ya tiene una mano recorriendo el cabello de Rosalie antes de que pueda siquiera pensar en responder.

Estoy bien-Suena sin aliento mientras aleja la mano de Edward.

Edward no se molesta en preguntar otra vez mientras mira las cosas en la cama.

¿Un regalo?-

Un pequeño lobo de peluche llama su atención y el lo levanta con una sonrisa de complicidad.

Sí, tengo hambre- Desea que Edward parezca menos sonriente pero él continúa sonriendo cuando toma la bandeja y se la entrega a Rosalie.

-Klaus realmente no estaba bromeando ... - Rosalie piensa que debe ser un comentario dicho en voz baja sin pensarlo mucho mientras continúa revisando todo sin más explicaciones.

- ... tengo que decir que a estos les irá mucho mejor que a algunos viejos juguetes de guerra que Jasper planeaba regalar... - Esa parte fue apenas audible cuando inclinó la cabeza y examinó otro de los juguetes.

¿Qué?-La voz de Rosalie era pequeña. No fue intencional, pero era como si estuviera hablando sin oxígeno.

¿Eh?-Edward mira como si acabara de darse cuenta de que Rosalie todavía estaba sentada allí.

Quiere saber qué están planeando, pero ya había tenido un comienzo difícil en la mañana, así que se mete una cucharada de huevos en la boca y mira fijamente las ventanas cubiertas por cortinas.

—¿Estás segura de que te sientes bien?—Murmura Edward, su mano se posa ligeramente en la frente de Rosalie.

—Cansada, me caí de culo hace como diez minutos—Rosalie se lo hizo saber antes de tomar su tostada y darle un mordisco anormalmente grande.

—¿Te caíste?—Edward estaba completamente atento ahora y Rosalie estaba agradecida de que su distracción hubiera funcionado.

—Relájate, Paris, me golpeé la rodilla y caí directamente sobre mi trasero. Lo único que me lastimé fue mi orgullo—Siguió metiéndose una cucharada de arroz en la boca y deseando que hubiera mayonesa en algún lugar de este plato.

Para cuando pensó en mirar hacia arriba, las bolsas estaban de nuevo en la cómoda y Edward estaba tirando insistentemente de las piernas de Rosalie para que las pusiera sobre la cama.—Te dije -!

—Relájate, Helena, si pensara que me estabas mintiendo, habría llamado a Carlisle—Los dedos de Edward se clavaron en la parte posterior de las rodillas de Rosalie antes de que pudiera pensar en una respuesta. Si no fuera por el agarre férreo de Edward, Rosalie estaría desayunando en su regazo.

El masaje que Edward estaba tratando de darle no estaba funcionando muy bien.

¿Podrías simplemente- Edward tiró del pie de Rosalie hacia su regazo-relajarte por mí?-

La última vez -!

La última vez fue diferente, no estabas desayunando- Lo dice casualmente como si se supusiera que tuviera algún tipo de sentido.

Rosalie todavía no confía en él, pero intenta relajarse de todos modos, poniendo toda su atención en el tocino de su plato.

Tenía unos dos bocados de arroz, la mitad de un panqueque y una loncha de tocino metido en la mejilla cuando un gemido lo invadió.

¿Te sientes bien?-Podía escuchar la voz de Edward en alguna parte, pero se estaba concentrando en no morir ahogada.

Rosalie podía sentir que su cuerpo se estaba calentando cuando Edward masajeo sus muslos

—Se acabó el tiempo.—resopló, levantando las manos, con su plato abandonado en la mesa de noche.

—¿Se acabó el tiempo?-Podía sentir la risa de Edward contra su frente, alborotando su cabello.

—Sí, me voy a desmayar-Edward finalmente hace una pausa para evaluar si Rosalie, efectivamente, se va a desmayar.

Debe haber lucido bastante rudo porque Edward se aleja de ella, deslizándose hacia abajo en la cama. Rosalie cree que está a punto de irse hasta que siente unos dedos fríos levantando su camisa holgada.

Rosalie quiere gemir, esta vez menos por placer y más por molestia, porque sabía que accidentalmente Edward había comenzado algo con el incidente del pezón.

Es por eso que casi se sobresalta cuando siente un rápido beso en el costado de su estómago.

—Yo también te amo.-Es un susurro silencioso solo entre ellos dos.

Oh, ¿no es eso dulce?

El sonido de la voz de Klaus la sobresalta lo suficiente como para que Edward levante la cabeza para mirarlo. No está segura de que abarca exactamente la mirada, pero está demasiado aturdida para pensar demasiado en ello.

¿Klaus?

N/A:

Antes que nada, gracias por seguir aquí, si aún están leyendo esto. En segundo lugar, quiero disculparme por no haber publicado antes. La verdad es que soy bastante cambiante; un día me puede gustar algo y al siguiente no. Había dejado de leer fanfics de Crepúsculo, lo que hizo que se me fuera la inspiración. Pero releyendo esta historia, decidí retomarla porque tengo capítulos sin continuar y los estoy terminando. Además, decidí crear una historia paralela para explicar la problemática de por qué el bebé fue cambiado de Bella a Rosalie. En esta nueva trama, estará involucrado un poco el universo de Harry Potter, específicamente incluiré a Theodore Nott. Esta historia se llama 'Seven' y la encontrarán próximamente en mi perfil.

Habiendo dicho todo esto, gracias de nuevo y espero que les guste.

Ah, y se me olvidaba, si les gusta el mundo de la Fórmula 1, estoy planeando escribir algo. Será de la categoría boys love y tratará sobre Max y Lewis. Por si les interesa, también estará en mi perfil. Pido disculpas por adelantado si no publico con mucha frecuencia.

T.P.WK.

ALL LOVE,DAYANA"

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