Unico.
Creo que muchos estarán confundidos por el hecho de presentar esta historia bajo el Ship Jack x Riddle, que hasta el momento no he visto dentro del fandom, pero que a mi me gusta. Se me hizo muy tierno cuando Jack dijo que a pesar de ser pequeño Riddle daba miedo. Suena raro, pero desde hay los quiero shippear.
La verdad, entiendo porque algunos prefieren a Riddle con Floyd, pero creo que Floyd solo le gusta molestar a Riddle (Y a medio mundo, siendo honestos) sea malintencionadamente o no. No creo que Riddle se interese genuinamente en él.
Este fic no tiene lemon, la etiqueta de "Contenido adulto" es por que estaré tocando mucho la relación que tiene Riddle tiene con su madre y los efectos negativas de esta sobre él. Ya que todos los que jugamos el juego, sabemos que ella es una bruja que ninguna canción del Disney moderno la va a reformar. (Porque si fuera del Disney clásico, esa mujer ya estaría muerta) Por más que parezca que el padre se haya ibo a comprar cigarros, lo de esa mujer es abuso familiar. No me gusta que enserio la justifiquen con eso.
Por cierto este fic se desarrolla en medio del cap 5, ósea Pomefiore.
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¿Otra más? Esto del admirador secreto no le hacía ni la más mínima gracia a Riddle, el no tenia mente para pensar en un romance juvenil de preparatoria, era un hombre de tomarse las cosas importantes en su vida enserio, y un "Noviazgo" Y más con otro hombre era lo último que le importada. Total, no es como si fuera a durar, de una u otra forma no iba a durar luego de graduarse y volver a sus casas con sus respectivas familias...
- "Madre..."- Su madre nunca le hablo de la mínima oportunidad de una pareja o llegando más lejos, incluso casarse, y es algo que a su vez rara vez se le cruzo por la cabeza. A la final, apenas lo dejo tener amigos, siempre concentrándose de forma estricta en ser un mejor mago que supere a la grandeza que siempre hablaban de su padre.
- "¿Cómo reaccionaría mi madre al saber que tenía un pretendiente?"- Si bien, una simple carta no era algo por lo cual ameritada siquiera darse el lujo de comentarle a quien sea. Desde el Overblot esos recuerdos de infancia son incluso más agrios; Sabiendo la naturaleza del fenómeno estada seguro que era por eso, sabiendo que a Leona, Azul y Jamil les paso lo mismo, pero sin saber como reaccionaban a ese hecho. Seguramente su madre la sola idea la desaprobaría en el primer segundo, cosa que en ese momento no le importada del todo porque igual ni sabia quien era para mostrar un interés real y no podía dejar que le afectara algo trivial en su estricto horario.
Mirando a los lados una sonrisa forzada se grado en el rostro de Riddle ante ese agrio pensamiento, buscando en su bolso donde había guardado la última carta que le llego aun sin abrir buscando leerla.
Todas las cartas que le llegaban de este admirador dejaban en claro que era un estudiante de primer año, muy seguramente de otro Dormitorio, porque solo decía cosas de querer conocerlo, hablar con él y saber qué había detrás de ese "Aterrador y estricto enano"
Como le daba rabia el apodo de "Enano"
Suspiro, leyendo una ultima vez lo escrito en papel, sonriendo de forma torcida antes de terminar apretando la carta en su mano ignorando ya todo el tema.
- "¿Quien será quien guste de mi?" - Inconsciente su rostro se sonrojo era un sentimiento extraño para si mismo. De lo único que se podía lamentar era no tener como rechazarlo de forma directa, tenia que esperar a que se presente, a la par que de lo único que podía sacar bueno es saber que como Prefecto había logrado imponer respeto y admiración a los nuevos.
Así que por si acaso, revisaría el libro de reglas de la reina de corazones, necesitada asegurarse si había alguna regla sobre relaciones entre estudiantes al ser todos varones para saber como actuar cuando lo tenga frente.
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Una pequeña vena saltada de la frente del Prefecto Roseheart como de costumbre sufriendo desde que Ace entro al dormitorio Heartslabyul, era el único chico que tenia la osadía de llevarle la contraria ante el control de las reglas. Desde el primer día, y aun no entrada en razones por más que ya le haya cortado la cabeza ya.
Solo esperada que no fuera su dolor de cabeza toda la colegiatura, así como ya sufría la falta de respeto recurrente de Floyd.
- Están en una biblioteca, tengan respeto. - Sentenció, dejando a Ace y Deuce solos junto a sus compañeros de Pomefiore, SavanaClaw y Diasomnia junto a Yuu y Grimm.
- El Prefecto Roseheart debería unirse al ejército, tiene todo el temperamento para él cargo. - Jack y Epel miraron raro a Sebek tras ese comentario, pero decidieron ignorarlo. Mientras Ace y Deuce empezaron a sudar frio al imaginar eso.
- Sera que quieres que todos salgan espantados. Riddle es un tirano en miniatura. - Refunfuñando entre dientes sujeto los libros antes de sentarse de forma brusca.
- El viejo Lilia... - Y así comenzó a relatar sobre todo lo que el hombre les comentada cuando les entreno como guardianes del reino de las espinas. Teniendo que callarlo para empezar a estudiar.
- Epel, Deuce, Ace, Vil nos espera. - Recordó el humano, sujetando a su compañero felino que se estaba muriendo en flojera ante la idea de ir con esa rubia histérica.
- Adiós, y suerte. - El hombre lobo y el hibrido grifón les despidieron, llevándose cada uno por su lado.
Aunque, de parte de Jack su atención de fue desviada cuando por un movimiento de sus orejas al notar que la presencia de Riddle. Seguía en la biblioteca por lo que notada. Volteándose lentamente a donde él estada, caminando a paso ligero esperando que este no lo echara, buscando en su bolsillo una de las cartas que había escrito específicamente para él.
- "Podría entregarle la ultima de forma personal" - Se dijo a sí mismo, ya a unos pocos pasos del hombre pelirrojo, suspirando, alentándose a avanzar, pidiendo sentarse a su lado. - Disculpa la interrupción. ¿Te puedo acompañar?
- ¿Ummm? - Parecía analizar de más la situación, mirándolo detalladamente al lobo blanco antes de aceptar a los pocos minutos.- Lamento mi desconfianza, pero me tomo por sorpresa que específicamente quisieras hablarme a mí.
- Descuida, entiendo porque lo dices. Pero desde lo del torneo te ganaste mi respeto al verte actuar por lealtad a tus compañeros, y digamos que he querido hablarte. Eres muy intimidante.
- Supongo que gracias. - Riddle torció las cejas, era desde su propio punto de vista todo eso junto era una extraña declaración que no espero llegar a residir de alguien. No obstante no por eso lo alago menos. - Siempre me he esforzado por ejercer el respeto como Prefecto ante mi dormitorio y el legado de la reina de corazones. - Declaro con un total orgullo al borde de parecer prepotente. - Aunque espero entiendas que no podre hablar mucho tiempo con contigo, soy una persona estricta y tengo que estudiar.
- Lo comprendo, ahh... - Lamiéndose los labios empezó a tartamudear. - ¿Qué te...? - Mostrando un sobre lo dejo sobre la mesa al lado del pelirrojo. Entiendo rápido a que quería llegar el licántropo. - ¿Te han gustado mis cartas?
- Así que eran tuyas. - Adoptando una postura firme y por sobre todo inexpresiva, dejo los libros de lado para darle su atención a Jack. - Lamento romperte el corazón. Me alagas pero no estoy interesado en un romance escolar.
- ¿Estás seguro? En las cartas de te lo exprese, yo no te estoy pidiendo un noviazgo en este momento, te estoy pidiendo conocerte. Una cita tal vez.
- No lo necesito. Solo me estorbaría. - Afirmo. Jack sonrió, mirando enternecido al hombre frente suyo apoyando su cabeza en su mano. - ¿Por qué me miras de esa forma? - Se cruzo de brazos.
- ¿Nunca has tenido enserio una cita? Sé que eres buscas siempre la perfección, pero una relación no tiene nada de malo, yo no te estorbaría.
- En situaciones normales te cortaría la cabeza por ser tan insolente, pero no hay alguna regla en Heartlabyul relacionada para eso.
¿La reina roja tenia reglas que rozaban lo absurdo, pero no para un romance entre estudiantes? Eso era lo que pensada Jack. El creyó que por lo menos tenía unas 15 sobre qué pasos tener al relacionarse amorosamente con hombres de otros dormitorios y/o especies.
- Y claro que me estorbaría, yo no puedo darme el lujo de distracciones.
Las cosas que pasaban por la mente de los 2 eran muy diferentes. Ya Riddle se estada impacientando de la insistencia del licántropo, si seguía muy seguramente le aplicaría su magia única con él. Mientras Jack pensada en el actuar del pelirrojo, notando como su rostro se empezada a mezclar con el color de su cabello.
A sí que solo sonrió, parándose de la silla sujetando la mano del pelirrojo para robarle un beso en el dorso de ella, viendo como ahora sí, todo su rostro estada igual que su cabello.
- Entiendo tus deseos. Pero mi propuesta sigue en pie. - Guiñándole el ojo se fue. Riddle quedo en un pequeño Shock cuando eso paso, solo llegando a escuchar el fuerte bombeo de sangre por su sistema. Atinando de forma tardía a volver a su rutina, sintiendo una muy extraña sensación que se albergada en su pecho.
Los próximos días, aunque ni lo quisiera admitir la imagen junto a los atrevimientos del estudiante de SavanaClaw se quedaron de forma muy recurrentemente en su cabeza y era algo que le fastidiada de sobre manera. Era algo a lo que no estada acostumbrado, su concentración flaqueada de lo que considerada importante y era algo que no se podía permitir. Para su fortuna solo Trey y Cater se vieron cuenta, mientras tratada de buscar que su concentración volviera a la normalidad teniendo todo un evento a pocas semanas que tenía que tener su atención.
- Es algo que no le comentado a nadie, y quiero que en extremo nadie lo sepa. Solo ustedes y yo. - Ambos le habían pedido
- Te escucho. - Clover era de los pocos amigos que siempre tuvo Riddle desde su estricta infancia, eso lo hacía fácil de tratar pues conocía como este podía reaccionar, al escucharlo tan serio busco servirle un té para ayudarlo a que se desahogara. Cater por su parte solo se quedo callado.
- Gracias. Y... Ahh... Es una tontería. Pero hace tiempo, uno de los estudiantes de SavanaClaw me ha estado pretendiendo.
- Ohhh... Eso es genial. Los hombres bestia son parejas sumamente cariñosas debido a su lado animal, a su vez pasionales. Si mal no recuerdo generalmente tienen ciertas conductas por especie. Es perfecto para ti. ¿A qué tipo de criatura le robaste el corazón? - Diamond pregunto, sonriendo jovial y alegre por la idea de que su Prefecto sea feliz con un hombre hecho para él, pero que el pelirrojo no se lo tomo de a bien y Clover lo sabía. - ¿Dije algo malo?
- Cater... No sé como decírtelo...
- No quiero estar pensando en Jack, ni en ninguna de sus cartas o... Ese beso.
- ¿¡Te beso!?
- ¡En la mano! - Luego de ese grito el ambiente necesito de unos minutos para relajarse y volver a hablar. Pregunto Cater sobre a qué se refería con cartas. - Ósea... Cada tanto me venían cartas diciendo cortas sobre que me admirada. Solo eso.
- Pero eso no tiene nada de malo. Parece tratarte con respeto al solo querer acercarse y conocerte. - Cater apoyo. Trey quería tocar el tema de lo estricta que era la señora Roseheart, sabiendo todas las formas que eso afectada a su hijo.
- Riddle... ¿Estás seguro que no quieres, o solo te estás negando? - Se estada arriesgando mucho con esa pregunta, pero Trey sabía que valdría la pena. - Te conozco. Sé tus problemas. - Los ojos azules del pelirrojo se fueron al piso sintiéndose acorralado. Trey había tocado las palabras correctas para llegar a su punto. - Dime, ¿Genuinamente no deseas darle la oportunidad a Jack? Estamos en la edad en la que eso es normal. Y Jack o te esta pidiendo un noviazgo, te esta pidiendo estar cerca porque sabe que aun no te conocen del todo.
Suspiro. - No sé qué decirte...
- Tengo una idea. - El hombre con el signo del diamante hablo, sacando su teléfono. Sabiendo Riddle que lo que sea que tenga en mente no le iba gustar. - Tendrán una cita, y hablaran de todo.
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Su viva siempre había girado en torno a complacer las aspiraciones que habían dejado sobre él, si bien de eso no se quejada y estada orgulloso del poder mágico que había adquirido, el mismo se admitía que había cosas de las cuales se privada a si mismo por ejercer una estándar algo toxico sobre perfección. No importa donde este, o si en la escuela tuviera más libertad que en casa, eso era algo que se esforzada en cumplir: Perfección.
- "¿Qué es lo que TU quieres?" - Cater prácticamente le había obligado a pensar en la respuesta a esa pregunta antes de venir. No negada que se sentía tenso, y de forma casi inconsciente termino pensando en su madre.
- "¿Qué pensara cuando vea a Jack a mi lado?" - Su relación con Trey se había visto afectada por ella. No quería que otra vez alguien que le estada ofreciendo su sincero apoyo terminara alejado. Pasando sus 2 manos por su cara, afligido entre varias emociones conjuntas, solo esperada no entrar en un Overblot por segunda vez.
- Gracias por invitarle. - Sonriendo cordialmente el licántropo se sentó al lado del pelirrojo, siendo guiado por Jade a su mesa.
- Dentro de poco mi hermano les traerá la comida. - Dijo este, para confusión de los 2.
- No hemos pedido nada.
- Quien me llamo para pedir la "Reservación" Me pidió específicamente lo que les sirviera. - Dicho esto, hizo una ligera reverencia y se fue. Dejando al pelirrojo con mala espina, pero sin poder prestarle la atención debida, por quien tenía en frente, sonriendo casi de una forma galante esperando a que le hablara.
¿Por qué se tenía que interesar en él?
- Asumo que ya sabes por lo que te pidieron verme.
- Casi. Siéndote honesto, dije que mi propuesta seguía en pie hace unos días porque asumía que no te sentías cómodo o seguro.
- ¿Qué estas queriendo insinuar? - Otra vez a la defensiva, cruzandose de brazos.
- Que sé que eres tan estricto contigo mismo que nunca te has tomado la molestia de pensar en algo más personal como lo sería una cita. Y lo entendí. Ya te había dicho lo que sentía y no te iba a presionar.
- Lo agradezco...- Susurro, pues tanta mentira no era. Maldiciendo el no saber qué hacer ahora, ¿De qué podía hablarle? En teoría esto era como una reunión donde ambos terminarían por expresar sus pensamientos, siendo la diferencia que Riddle no encontrada palabras para empezar.
Siendo convenientemente interrumpidos.
- Ahhh... Que lindos. GoldFish en su primera cita.
- Floyd... - Riddle frunció el ceño al tener al hombre sirena en frente. Dejando la comida en la mesa.
- Ya todo está pago. No tienes que preocuparte. - Mirando ahora a Jack rio. - Vaya que gustan grandotes para ser tan enano. Jajaja. - Riendo se burlo, provocando el enojo de Jack y escapando antes de que pudiera pasar que implicaría que Azul lo regañara. Floyd sentía lástima de que ya no podría molestar con tanto gusto al pez dorado porque ahora tendría al erizo de mar para cuidarlo.
- ¿Siempre es así contigo? - De mala gana Riddle asintió.
- Es mi dolor de cuello cada que me ve. Mejor comamos. - No más dijo esto y se puso a detallar lo que le habían traído su cara se torno en una mueca de asco al ver la presencia del tipo de comida que más odiada.
- ¿Qué pasa?
- No tolero la comida grasosa. Es solo eso.
- Supongo que eso es lo mío entonces. - Entre los platos que Floyd les había traidor había una hamburguesa con papas y un pescado acompañado con ensalada, junto a lo que le aguo la boca a Riddle: Un pastel de fresas con crema.
Sabiendo que fueron Cater y Trey los que organizaron esto, lo más seguro es que Jack estada en lo cierto habiendo pedido esos 2 lo que solía estar en las dietas de cada uno.
Normalmente a Riddle no le gustada hablar a la hora de la comida, siempre guardada silencio mientras haya comido en su plata, pero por esa vez hizo una excepción conversando con Jack pero quedando confundido entre más seguía la plática.
En sentido de esto, era que el aclarara lo que quería, lo que sentía por como el acto que tuvo el licántropo con él lo dejo tan confundido.
¿Era su deseo aceptar y dejarse adorar por una persona ajena a su círculo familiar, más el miedo de que pasara se lo impedida?
¿Se estada auto negando cosas que su propio corazón quería?
¿O simplemente estada confundido por la novedad de que una persona lo admire al gravo de llamarlo amor, a pesar de siempre tener la idea de negarlo?
No sabía cuál era la más real. Pero, aun con esas rutas que su mente tomada, su corazón se sentía cómodo con la presencia del lobo. Era caballeroso a su forma mientras hablaban, él le hablada de su familia y gustos, haciendo que se sienta incomodo sin saber cómo tocar a la suya cuando no quería pensar en ella.
- Jack... - Seriamente quiso llamar su atención, queriendo dar ya su veredicto, ya luego de terminar de comer, pareciéndole tan tierno al hombre lobo el gesto de Riddle a comer el pastel de fresas. Como si probara el cielo. - Quiero decirte algo, pero quiero hacerlo afuera.
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- Gracias. - Empezó por eso, en ese momento estaban en el salón de los espejos que los llevarían a sus respectivos dormitorios, pero para su fortuna ningún estudiante estada cerca. Riddle estada rompiendo un par de reglas que se iba a dejar pasar. - Quiero empezar por eso, porque disfrute tu compañía. Dime, ¿Fui lo que esperaste al conocerme mejor? ¿O quedaste decepcionado viendo la realidad luego de unos 2 meses enviándome cartas?
- No, no me decepcione. De hecho, entendí una cosa que me gusto más de ti.
- ¿Qué?
- Lo que dije cuando llegue. Por tu forma de comportarte me quedaron claras muchas cosas, más también vi ese lado tuyo que casi no muestras, ese dictador lin...
- Ya. No hace falta que lo digas. Y bueno, admiro que seas tan suspicaz e inteligente para darte cuenta de mucho con solo prestar atención. Espero que en próximas citas se mantenga. - La cola del hombre lobo se empezó a mover como señal de alegría, a la par que una enorme y jovial sonrisa se grado en el rostro, mostrando sus colmillos. - Aun no te emociones del todo, he pensando y aunque solo hasta el próximo año que tendré que dejar Night College para hacer mi último año, y luego por regresar a casa quiero darme una oportunidad contigo.
- No me molesta. Si para eso seguimos saliendo, prometo ir a visitarte seguido cuando yo me gradué. También llamarte. Mientras estemos aquí me tienes para lo que necesites. - Y haciendo algo de lo que probablemente se arrepienta, el Prefecto de Haertslabyul sujeto al alumno de SavanaClaw para besarlo en la boca. Un beso lento y placentero, aunque suene como algo muy infantil, era algo en lo que nunca tuvo experiencia, nunca imagino, pero que había sido delicioso de probar.
Esperada que al momento de Jack cumplir su promesa, al los ser jóvenes adultos graduados, ya todos sus demonios personales ya estén en su jaula. Y tal vez, su relación con el hombre lobo si prospere.
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