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IV. Conversaciones puristas


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Lydia Malfoy se miraba fijamente en el espejo mientras terminaba de cepillar sus cabellos platinados, al terminar soltó un leve suspiro y analizo por quinta vez su vestimenta. Había elegido un vestido corto blanco con algunos adornos dorados en la cintura que daban la ilusión de ser un cinturón, algo que iba demasiado a su estilo. 

—Te vez bien, si es lo que te preocupa—escucho la voz de Lily Evans desde el marco de la puerta. 

—Yo se que me veo bien, es solo que...—hizo una breve pausa—No se por que estoy nerviosa.

—Tal vez por que pasaras tiempo con Black, tu prometido—la pelirroja se acerca a ella y comenzó a acomodar su cabello.

—Quiero conocerlo más a fondo, solo he hablado con el en las reuniones que hacen las familias sangre pura cada año.

—¿Realmente estas segura de casarte con el?—le pregunto su mejor amiga con preocupación—Tu amas a James, no a Régulus. 

—Lo hago por mi familia, lo sabes Lily.

La rubia salió del cuarto de baño y tomo su pequeño bolso dorado que combinaba perfectamente con su vestido, para después acercarse a Lily y despedirse con un beso en la mejilla.

—Nos vemos en la cena.

Lydia salió de su habitación en dirección a la torre de astronomía, el lugar donde había acordado encontrarse con Régulus. Iba tan metida en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando paso junto a los merodeadores, James hizo ademan de acercarse a hablarse, sin embargo, Sirius lo sostuvo del hombro impidiéndoselo. 

Sirius y Lydia no habían vuelto a hablar luego de su discusión en medio del pasillo, ambos se distanciaron del otro. 

Cuando la chica Malfoy llego a la torre de astronomía noto que en las escaleras había pequeños pétalos, frunció el ceño confundida pero siguió subiendo las escaleras hasta que se encontró cara a cara con Régulus, el lugar estaba adornado con rosas flotantes que brillaban. El techo estaba encantado dando la ilusión de un cielo estrellado, mientras que en suelo se encontraba una manta azul con un canasta de comida. 

—Creí que seria buena idea adornar el lugar...—murmuró Régulus mientras se acercaba a ella. 

—Quedo muy lindo, supongo que gracias. 

—No hay de que, y... esto también es para ti.

El azabache le entrego una pequeña rosa roja, provocando que Lydia sonriera levemente mientras la tomaba entre sus manos. 

—¿Cuándo vas a dejar de darme rosas?

—Nunca. 

Lydia soltó una leve risita y se acerco a la manta para después tomar asiento encima de esta, no estaba muy acostumbrada a sentarse en el suelo pero hizo el intento.

—Y dime, ¿Qué es lo que te gusta hacer en tus tiempos libres?—le pregunto Régulus le daba una cajita de fresas con chocolate. 

—¿Cómo sabes que me gustan las fresas? 

—Tengo mis contactos...—Lydia lo miro con una ceja alzada—Tu hermano me lo dijo.

La rubia asintió: —Respondiendo a tu pregunta... me gusta pintar, aunque es un talento mediocre. 

—¿Por que piensas eso?—pregunto el chico Black con el ceño fruncido—Recuerdo haber visto algunas de tus pinturas cuando las reuniones de navidad se organizaban en la mansión Malfoy, y no creo que tu talento sea mediocre. En realidad, ningún talento lo es, por algo les llama talentos, por que no cualquiera los tiene. 

—Hombre o mujer yo tengo un talento mediocre—insistió la rubia—Y no lo discutiré contigo.

—Entonces... ya que abandonaste tus esperanzas artísticas, ¿Qué vas a hacer con tu vida luego de la graduación.  

—Pulir mis otros talentos y volverme la mujer que mis padres quieren que sea, ¿Y que hay de ti?

Régulus sonrió de lado: —Al contrario de ti yo quiero comenzar a escribir una novela. 

—Es una perdida de tiempo. 

—¿Disculpa?

—Podrías... no lose, trabajar en el Ministerio de magia. James quiere ser auror—murmuró la ultima frase pero Régulus no logro escucharla.  

—Es una de mis opciones, no te lo negare, tal vez trabaje en el departamento de derechos y creare una ley donde los magos respeten a los elfos domésticos—Régulus asintió levemente—Pero por el momento quiero escribir mi novela.

Lydia se quedo en silencio y siguió comiendo sus fresas, mientras tanto el chico Black no despegaba su mirada de ella. 

—Se que estamos prometidos pero... ¿Aceptarías si te lo pidiera como debe ser?, ya sabes, arrodillarme con un anillo.

—Yo siempre supe que me casaría con un sangre pura, ¿Por que no aceptaría?

—Siempre y cuando ames a tu prometido no hay ningún problema. 

—Pues...—la rubia apretó un poco sus labios—Yo pienso que nosotros tenemos el poder de decidir a quien amamos, no es algo que sucede simplemente.

Régulus sonrió de lado: —Creo que los poetas podrían estar en desacuerdo. 

—Bueno, no soy poeta, solamente una mujer—dijo Lydia soltando un leve suspiro—Y siendo una mujer no hay modo que pueda ganarme mi propio dinero, todo lo que tengo ahora le pertenece a mi padre, no es mío y nunca lo será, cuando el muera todo será heredado a Lucius. 

» Si llego a conseguir mi propio dinero de inmediato le pertenecería a mi esposo en el momento de la boda. Y de tener hijos serian de el, no míos, serian de su propiedad, asi es como funciona todo esto de las uniones entre familias sangre pura y lo sabes—Régulus bajo un poco la mirada pero la alzo en cuanto la rubia volvió a hablar—Asi que no me digas que el matrimonio no es algo que le favorecerá únicamente al hombre y el no tendrá todo el poder, por que asi será. 

Ambos se quedaron en silencio mientras seguían comiendo los postres de la canasta, Régulus sabia que Lydia tenia razón, en la gran mayoría de los matrimonios sangre pura el hombre es quien lleva el mando en la familia.

Sus padres formaban parte de ese tipo de matrimonios y definitivamente no quería que asi fueran las cosas entre el y Lydia. Régulus quería que la rubia siguiera su sueño de pintar y ganar su propio dinero.











MARX.BLACK━━━━27/11/21


Nota de la autora:


Hello!

Si se dan cuenta Lydia es muy 50/50, respeta a los nacidos de muggles y mestizos pero también tiene pensamientos puristas. Aunque los tiene por que asi la educaron :(

Todo eso de que ¨el hombre es quien tiene el poder en el matrimonio¨ es machista y patriarcal, mi intención no es normalizarlo ya que estoy totalmente en contra de eso, recordemos la época en la que esta ambientada esta historia y lamentable asi eran las cosas en esos tiempos. Incluso actualmente en algunos matrimonios asi sigue siendo. 

Quise añadirlo para que vayan notando la evolución en la relacion de Lydia y Régulus. 

Opiniones y teorías aquí...

Kisses!

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