___________________________

"Significado de Familia"
________________________________________

Un punzante dolor de cabeza la hizo abrir los ojos con pesar, su cuerpo estaba entumecido sólo pudiendo tratar de enfocar su vista al su alrededor mientras lo último que recordaba era a Leonor del lado de Dreykov mientras Katya había sido capturada y más bien parecía un maldito sueño.

"Ojalá hubiera sido así..." suspira en su mente al verse envuelta entre cadenas de energía que parecían absorber la suya al sentirse debilitada, seguro eran obra de Melina, su mente era sin igual.

Y tuvo que forzar a su ser en no sucumbir ante el frenesí de su corazón,  la presión en su pecho y la punzada en su estómago frente al pánico querer dominarla, no era tiempo ni el lugar para eso, debía mantenerse cuerda y poder eludir una nueva faceta de su plan para salvar también a Katya mientras averigua lo que ocurrió.

—Al fin despiertas—suspira una voz a su lado y puede ver a la pequeña rubia mirándola expectante

—Katya—murmura la Stark antes de acercarse a admirarla en búsqueda de alguna herida—¿Estás bien?, ¿Te hicieron algo?—pregunta suavemente mientras toma delicadamente su mentón para la niña limitarse a negar

—Dasha—susurró la joven—Dasha no despierta—dijo para su voz quebrarse y  por sus mejillas correr lágrimas

Mientras Verónica trataba de asimilar todo de forma fugaz—¿Dónde está ella?—musita para la pequeña tomarla de la manga y llevarla hasta una cama al otro lado de la celda de cristal, en la cual reposaba una niña con el rostro sonrojado y su respiración agitada mientras todo a su alrededor levita como sus mechones rojizos

—Siempre queda así cuando la hacen usar sus poderes de más—solloza—debes ayudarla

La Stark miró a la pequeña Dasha y llevó su mano a tocar su frente, comprobando la fiebre que había intuido que tenía mientras recordaba que era una de las repercusiones que tuvo al comenzar a manejar los sueros como sus habilidades y el manejo de las gemas, lo cual podía llegar a ser fatal y aún más en una infante, debía hacer algo al respecto.

—Trae algo de agua, ¿Al menos tenemos un baño en la jaula?

—Si, ¡Voy!—dice Katya al sorber su nariz y correr por su pedido mientras la castaña le quitaba las mantas y la dejaba en ropa ligera

Le dejo una compresa en la frente y otra en el estómago mientras buscaba alguna forma de poder comunicarse con Leonor en el exterior, debía obtener respuestas y una posible ayuda para Dasha, aunque ahora dudaba de su posible cooperación...

Hasta que un grito la saca de sus pensamientos para la pequeña pelirroja estar en pie mientras su rostro pálido parecía estar sumergido en el terror al ver a Verónica.

—Tranquila—la castaña no alcanza a susurrar para ser mandada a volar por un golpe de energía invisible

—¡Dasha No!—Katya trató de acercarse al interponerse entre ambas pero sufrió el mismo destino para la nombrada seguir avanzando con su vista pérdida hacia la Stark mientras los objetos a su espalda la apuntaban

—tranquila pequeña, no soy una enemiga—murmura Verónica con toda dulzura al levantarse y avanzar pausadamente mientras sus manos se encontraban alzadas, pero una fuerte ráfaga la ataca y esta vez rodea su cuello, alzando su cuerpo al aire por la presión que cada vez era más fuerte

—¡No te me acerques!—gruñó al cerrar su mano para ahogar a la castaña, la cual buscó su mirada mientras trataba de seguir consciente para al tornarse sus ojos en un destello dorado con los verde agua de la infante todo parecer detenerse

Oh lúgubre oscuridad, era lo único que podía ver a su alrededor en vastas distancias hasta que el frío terminó de calar en su alma cuando sintió un llanto que no tardó en seguir para sus pisadas retumbar en ecos como si de latidos tratara.

Una pequeña pelirroja lloraba aferrada en sus rodillas mientras una nube negra parecía envolverla, su corazón no tardó en estremecer al sentirse identificada, pero más que ello ver a la niña que poseía un mar de poderes tan frágil y vulnerable dolió en su pecho, necesitaba hacer algo por ayudarla y tal vez como Katya decía, ella era la única que podría ayudarla porque sabía perfectamente como podía sentirse.

—Dasha—susurró delicadamente al acercarse antes que pudiera escuchar sus pasos como ver venir sus acciones cuando ya la tenía envuelta en un abrazo, no lo había hecho pensando, su corazón fue el que tomó el poder de su conciencia en contenerla—Tranquila pequeña, todo está bien—murmura mientras esta batalla en golpearla entre gritos mientras Verónica sólo susurró palabras de calma mientras acariciaba suavemente su espalda hasta que la menor se cansó y se dejó llevar por la relajante muestra de afecto.

Uno cual no sentía hace mucho y fue el factor gatillante en cambiar el escenario de su alrededor...

Dasha siendo una infante de no más tres o cuatro años era abrazada por su madre quien acariciaba su pelirroja cabellera mientras lloraba.

—Tranquila cariño, no temas porque yo y papá te protegeremos de todo siempre—susurró con una sonrisa dulce—Nunca te sientas mal por tus poderes, son un obsequio y lo que te hacen muy especial porque son parte de ti, ¿Entendido cielo?

—Si mami—respondió la pequeña al calmar su llanto con una gran sonrisa antes de abrazar a su madre cuando su padre llegó agitado

—¡Debemos irnos ahora!—dijo al correr por una mochila y su mujer no tardar en seguirlo

—¿Papá?—murmuró la niña al verlos dar vuelta la casa en ir de un lado para otro buscando ropa y comida

—Vamos—susurra el hombre al tomarla en brazos—¿A dónde te gustaría viajar, pequeña ratón?—sonrió al pellizcar su nariz mientras la infante parecía meditarlo

—¡A un campamento!

—¿Quieres acampar?

—¡Y comer malvaviscos rostizados con chocolate!—víctorea

—Entonces eso será, un campamento en el bos...

Un fuerte estruendo a las afueras los hace sudar en frío mientras una luz roja entraba por la ventana.

—Vayan al sótano ahora—susurró el hombre al entregarle la niña a si madre quien temblaba al hacerlo para ya no poder aguantar sus lágrimas como él no pudo hacer al verlas—Estarán bien—aseguró al retener un sollozo con una sonrisa en besar a su esposa y la frente de su pequeña antes de dejarlas ir para sacar el arma que había comprado hace un tiempo, la que aún  o sabía manejar bien, pero haría todo lo que estuviera a su alcance para salvar a su familia...

Más todo fue en vano en cuanto las viudas negras ingresaron junto a un hombre de sonrisa siniestra quien rió de su disparo fallido antes de abrir fuego y acabar con su vida en un segundo.

Uno eterno para una aterrada niña quien vió el pánico de su madre al escuchar los disparos antes de que las encontraran y a su madre quien gritaba su nombre desesperada cuando el hombre de gafas la tomaba entre sus brazos llevándola afuera cuando lo último que vió fue el cuerpo teñido de rojo de su padre y su mamá llorando a su lado de rodillas antes de la puerta ser cerrada seguida de un disparo en seco para los gritos ya no escucharse más...

Luego de ello tal como si tratara de una película se mostraba la vida de la pequeña al ingresar a la habitación roja como un experimento donde si bien nunca le tocaron un cabello, explotaron sus habilidades hasta arrastrarla a sus límites y obviamente no entregarle un rastro de lo que era una relación más allá del personal que se encargaba de su cuidado personal, los cuales iban rotando para no generar ningún apego.

Ahora entendía el porqué de su descontrol, sólo necesitaba ser querida y si quería lograr brindarlo debía ser fuerte.

Y fue como si algo cambiará en el interior de Verónica, como un click en su mente y alma que activó una gran dosis de seguridad en su pecho para sus propios miedos quedar distantes en adaptarse a la actitud que debía mantener para lograr calmar y contener a la niña que le arrebataron su vida.

Ella sería la encargada de entregársela y orientarla a ello.

Así al verla aumentar su llanto como la nube negra que la rodeaba acarició su cabello y secó sus lágrimas con sumo cuidado mientras le regaló la más dulce como sincera sonrisa porque fue desde su alma.

—Tranquila cariño, no temas porque yo te protegeré —susurró para los ojos de la menor abrirse y parecer brillar como dos estelas frente a su cristalino estado—Nunca te sientas mal por tus poderes, son un obsequio y lo que te hacen muy especial porque son parte de ti, ¿Entendido cielo?

Donde Verónica mantenía abrazada a una ya calmada Dasha quien escondió su rostro en su abdomen mientras un cálido silencio las envolvía.

—¿Estás mejor, linda?—susurró al despejar su cara al peinar su cabello con sus manos mientras la niña asentía deteniéndose a mirar a la castaña con más detalle notando sus cicatrices y acercar su mano a la mejilla de la mayor al conectar sus miradas

—¿También te ocurrieron cosas malas por tus poderes? —susurró —Tranquila, nunca temas por tus poderes porque te hacen especial al ser parte de ti—sonrió para el dañado corazón de Verónica latir en la más grande ternura y regocijo mientras sus orbes se llenaron de lágrimas de emoción antes de asentir con una sonrisa

Aunque el momento no tardó en romperse al unos pasos acercarse.

—Vuelve a la cama y quédate con Katya, yo me encargo—murmura al hacerle una señal a la pequeña rubia quien o tardó en volver a armar la escena del malestar de Dasha

Cuando al momento ingresó Leonor junto a un grupo de viudas armadas a sus espaldas.

—Iremos a dar un paseo—exclama la pelinegra con un semblante de suma frialdad, uno del cual no podía leerse ni interpretarse al ser completamente inexpresivo y con ello ser intimidantemente frustrante

—Uy que recuerdos, hasta me emocioné —murmuró Verónica al simular que secaba una lágrima—¿Este es de los momentos de tortura o los que me hacías ponerme en cuatro?—murmura con ironía para Leonor tomarla bruscamente de la barbilla

—Si cooperan todo saldrá bien, al menos para mí —sonrió siniestra

—Mira hasta siento algo en el pecho, creo que...—murmura agitada—Oh, solo es repulsión de ver que ahora eres la perra de Dreykov

—Esa boquita sigue igual de desafiante, tendremos que enseñarle a respetar—gruñó antes de hacer una seña para las viudas inmovilizarla y arrastrarla hasta la salida donde la castaña pudo soltar un suspiro al Dasha no ser involucrada

Donde suspiró en cuanto la llevaron a un cuarto con más que conocidas tácticas de tortura mientras se obligaba así misma en no detonar el traspié de sus miedos.

Para Leonor de todas formas no permitírselo al empujarla a esta de una patada que la hizo caer de cara al sus manos estar aprisionadas.

—Mierda ya me rompiste la cara por segunda vez en menos de medio día—susurró al escupir sangre—¿Desesperada por lamer las botas de tu nuevo dueño?—murmura al señalar la cámara en el techo

—Te haré sufrir tanto que ya no podrás responder más que para obedecernos completamente, por eso fue que me eligieron, soy la única quien puede doblegar la arrogancia de una Stark—gruñó al tomarla bruscamente del cabello y obligando a encontrar sus miradas para Verónica no aguantar más en romper en llanto cuando a la azabache le entregaron un bastón de electricidad

—No... porfavor—pidió en un hilo de voz cuando una gran corriente de este traspasó su cuerpo

—ahora aprenderás quien manda—dijo entredientes al aumentar los volteos y los gritos de la Stark empeorar con ello para las viudas al ver a la castaña caer de rodillas retirarse y Dreykov tras la cámara sonreír triunfante

—¡No porfavor! ¡Piedad por lo que más quieras!—Chilló la menor al su cuerpo temblar con cada golpe mientras su cabeza se azotó en el suelo al empezar a convulsionar...

—Fue suficiente drama, Dreykov ya está con los videos—murmura Leonor al cruzarse de brazos y la Stark suspirar al estirarse antes de levantarse

—¿Cómo estuve?—susurró al una sonrisa de arrogancia posarse en sus labios—Digna de un oscar, estrella—imita la voz de Leonor—Lo sé, lo sé—musitó al agitar su cabellera castaña

—¿No crees que fue mucho el drama?

—Puede ser... sólo faltó el aire y una rosa para vendérselo a la Rosa de Guadalupe

—¿Qué cosa?

—Se me olvidaba que no tienes vida como lo hija de puta que puedes ser—suspira—Aunque lo de involucrar a la niña fue bajo hasta para ti—dice Verónica al cambiar drásticamente su expresión risueña a una sería y casi déspota

—Katya es la única quien puede controlar a Dasha, además ella se ofreció

—Y vas tu y la dejas, tienes que seguir aprendiendo mucho para lograr cuidarla como la figura materna que ve en ti, porque para ella eres lo más cercano a eso, su familia y por tanto debes protegerla—suspiró antes de mirar como sus zafiros parecían temblar en procesar sus palabras—Disculpa, sé que es algo nuevo para ti y lo sigues procesando como todo esto en que te involucré al buscarte, pero joder,  ya te desquitaste golpeándome, estamos a mano

—Deja de llorar y sigamos con el plan, la peste risa se está demorando—suspira

—Es curioso, Nat te llama igual—rió la Stark antes de volver a su actuación en salir con Leonor

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Natasha miraba la nada cuando todos los problemas que había querido evitar la golpearon en la cara en cuanto la cena de reencuentro se convertía en una verdadera masacre de realidades de la familia falsa que habían creado como un experimento los cuales como Yelena dijo, fueron de los mejores años de su infancia.

¿Por qué Verónica le había creído e incluso dicho que se parecían?...

Claro que no lo hacían si ni siquiera un lazo adoptivo las unía, ni uno amistoso mientras podía apostar su cabeza aque todo este montaje era una trampa para hacer tiempo en que los de la habitación roja vinieran...

"—Ronnie está vez haz fallado, no tengo más familia que tu y los chicos", susurró en su mente antes de levantarse como Yelena había hecho hace un rato, pero a su diferencia ser a la puerta de salida

—¿A dónde vas?—escucha la voz de Melina por lo que gruñó molesta

—A hacerlo yo misma—dice determinante como su caminar

—No, no vas a sobrevivir

—Ojalá pudiera creerme tu preocupación, pero no eres la primera madre que me abandonó—susurró para dejar salir todo lo que tenia guardado desde hace años en su corazón y aunque doliera como un infierno, no mostró evidencias de ello...

O al menos trató de hacerlo, pero fue en vano frente a la confesión de la azabache.

—Tú madre jamás te abandonó—declara para todo el mundo que Natasha creía como real estremecer bajo sus pies mientras su corazón tambaleante estaba expectante de caer en la emoción que esa ilusión que siempre espero pudiera ser...—fuiste elegida por un programa que evaluaba el material genético

Dijo para la menor ya no poder aguantar más en voltear con sus ojos cristalinos, su alma parecía comenzar a unirse en los fragmentos que creía ya olvidados de tener un origen ...

—¿Me robaron?—susurró

—Creo que hubo un trato, a tu familia le pagaron, pero tu madre nunca dejó de buscarte—Melina hace una pausa en tratar de no mostrar su sonrisa y con ello debilidad antes de ver las grandes y esperanzadas esmeraldas de su pequeña—Se parecía a ti en eso, era incansable

—¿Qué le pasó?—musita la pelirroja en tratar de asimilar todo colo empezar a comprender el porqué Verónica había insistido en este encuentro, era para obtener las respuestas que siempre había buscado.

Aunque en estos momentos fueran un desconcierto...

—Dreykov ordenó matarla—confiesa sin titubeos para Natasha suspirar porque aunque su corazón sufriera, lo intuía—Su existencia amenazaba con revelar la habitación roja, normalmente los actos de un civil curioso no suelen requerir una ejecución, pero como te dije—la mira y la rusa menor es capaz de ver toda esa dulzura maternal que la azabache luchaba por ocultar con su característica frialdad—era incansable...

—Pensaba en ella todos los días de mi vida—suspira al luchar una vez más contra sus lágrimas y la opresión de su pecho el cual sólo deseaba estar en brazos de Ronnie como su más dulce calma, pero como ella siempre le decía, debía comenzar a ser franca con sus sentimientos frente a otras personas que no fueran ella...—lo asumiera o no, siempre lo hacía—asumió con una triste sonrisa que más buen salio como una nostálgica mueca en lo que Melina aprovechó de acercarse lentamente

—Siempre he preferido no mirar el pasado—murmura en cuanto Natasha saca un álbum de fotos que reconoció al instante para toda su alegría que quiso mantener a raya, salir a flote como todos sus sentimientos encontrados por las memorias plasmadas en el papel de esa vida en familia que habían creado esos tres años de maravillas que le dieron esperanza de seguir cada día hasta que llegó a Shield y conoció a Verónica...

—¿Entonces por qué guardas esto?—dijo al comenzar a hojearlo, la mujer que decía que ser su madre sólo fuenun teatro experimental, ya no podía mantener su mentira

—recuerdo este día, fotografiamos Navidad, pascua, acción de gracias y verano, todo en un mismo día con distintos fondos—suspira al ver las imágenes de su día especial recorriendo su mente como una tierna película—sabía que los regalos eran cajas vacías, pero me daba igual quería abrirlos todos para que...—sonrió sin poder evitarlo, sentia sus latidos y sangre volver a su cuerpo—pareciera real ...

—Vamos a dejarlo—suspira Melina al cortar todo rastro de la emotividad que Natasha le estaba causando para cerrarlo y quedar en evidencia para si misma al no poder dejar de mirarlo con nostalgia, lo que la pelirroja pudo percibir aún cuando no veía su rostro conmocionado porque después de todo... se parecía a ella.

—¿Por qué haces esto?—se acercó a desafiarla, era hora de que asumiera que tenía sentimientos igual que ella y que todo lo que vivieron si había tenido importancia, necesitaba oírlo aunque en su interior ya lo supiera al fin...

—¿Por qué un ratón que nace enjaulado da vueltas en esa ruedita?—mira a Natasha con los ojos rojos para todas las barreras que quiso mantener caer una por una como si de piezas de dominó tratara mientras intentaba no romperse—Sabes que pasé cuatro veces por la habitación roja antes de que tú nacieras?—murmura para su hija poder terminar de comprender lo que su madre en verdad sentía, era tortuosamente real, pero al serlo una alegría cargada de plenitud —solo conozco esas paredes,
Nunca tuve elección

—Pero no eres un ratón, Melina—murmura Natasha en su calma como ella había conseguido con sus palabras—naciste en una jaula pero eso no es culpa tuya—dijo con toda la comprensión que la mujer necesitaba, no una de lastima, si no de suma empatía...

Para la azabache bajar la mirada en retener sus lágrimas antes de atreverse a mirarla sin decaer, pero aún así sus cristalinos ojos la delataban como lo quebradiza de su voz...—Dime cómo haz conservado el corazón

Natasha tragó sus lágrimas mientras lo recordaba—El dolor sólo nos hace más fuertes, ¿No nos decías tú eso?—susurró para la sorpresa y emoción tomar el control de Melina como ella también se sentía—Tú lección me mantuvo con vida ...

La azabache no aguantó más un sollozo por lo que suspiró en tratar de calmarlo antes de una risa golpearla—Mierda, menuda esposa tenías que encontrar —carraspea para la pelirroja adoptar el color de su cabello por lo que corrió la mirada —esa mocosa planeó todo ésto, le cobraré cada lágrima—susurró para Natasha volver al plano terrenal

—¿Me dirán ya cuál es su plan y por qué no está aquí asumiendo su rol de esposa?—gruñó al cambiar su expresión para ya no haber rastro alguno de sus lágrimas

Por lo que la azabache al verla fue directamente al grano—Se adelantó en ir con Dreykov, dijo que tenía que solucionar algo con él antes de que fuéramos por lo que...—no pudo seguir al ver como el rostro de Natasha se tornaba pálido

—Verónica... ¡¿Qué?!

—Está en la habitación roja como un acto de entregarse para infiltrarse y poder actuar desde dentro en prepararnos en camino como...

—¿Verónica está en la habitación roja, en manos de Dreykov y todo el peligro que ello conlleva?—murmuró antes de su voz cortarse como su respiración mientras la desesperación se iba apoderando de su ser en lo que procesaba su confesión

Mientras Melina no podía creer en ver a Natasha de la forma que nunca imaginó, mostrándose aterrada tanto en sus expresiones como expresión corporal que siempre trataba de controlar, pero ahora no parecía obtener resultado alguno...

—¡Debo encontrarla!—jadeó con los ojos llorosos—Si le ocurre algo yo.... será mi culpa, debí acercarme de que regresara aunque fuera amarrada...—empieza a decir rápidamente mientras la azabache se había acercado a tomar su hombro donde dejó una suave caricia que no supo donde tuvo el coraje de mostrar...

—Tranquila, ella sabe lo que hace

—No, ¡Tiene una maldita obsesión a la adrenalina!, no voy a tranquilizarme hasta comprobar que esté buen y lo haré con o sin su ayuda—gruñó histérica al partir nuevamente a la salida por lo que Melina la detuvo y al no obtener más respuesta la abofeteó

—¡¿Madre?!—Chilló la rusa menor completamente desconcertada al tomar su mejilla

—Ahora hasta me dices mamá—sonrió Melina—Me emocionaría, pero tu desplante de hormonas fue humillante, te haz vuelto más blanda de lo que había pensado—murmura al encarnar una ceja—deberé hablar seriamente con Verónica al respecto por hechizar a ... mi niña—susurró antes de bajar la mirada

—¿Qué haz dicho?

—¿No íbamos a salvar a tu novia?—murmura al cambiar el tema de forma efectiva para su alivio al Natasha ya no poder pensar otra cosa...

—Ronnie...

—Hasta le tienes un apodo soso y todo—suspira la azabache al acariciar el puente de su nariz—Ahora cállate, céntrate y escucha como es el plan...

Que tal querides? ^^

Aproveche un lapsus de inspiración en escribir e inicie y lo termine todo hoy así que si hay errores los iré corrigiendo.

¿Qué tal les pareció el capítulo?, ¿Les gustó el encuentro con Dasha y reencuentro ruso?....

Próximo capítulo y espero que pronto... "Red moon" con toda la acción a venir!

Gracias por sus votitos y comentarios ya que me alegran y ayudan a seguir escribiendo ♡

♡Un abrazo ♡