Destructor: ¿POR QUÉ LA TIENEN?

Garra de Tigre: La habíamos capturado, señor.

Destructor: Si me fui de viaje corto fué para encontrarla aquí devuelta. ¡No me recuperé de mi incapacidad para que haya errores como éstos!

Garra de Tigre: Lo sé.

Destructor: ¿Quiénes la sacaron?

Garra de Tigre: Shinigami y la chica de la que Hun nos advirtió hace tiempo. Ella fué quemada junto con el lugar.

Destructor: Pudiste haberla matado tú mismo.

Garra de Tigre: Es una niña muy escurridiza, pero no volverá a darnos problemas con Karai.

Destructor: Splinter cree que la batalla a terminado con sólo mandar a su absurda familia a rescatarse entre sí. Pero aún recuperaré a mi hija.

Garra de Tigre: ¿Qué tiene en mente maestro Destructor?

Destructor: Reúne a todo el Clan. Si Yoshi quiere una guerra, eso conseguirá. Tendré que arrebatar lo que es mío.

Garra de Tigre: Enseguida.

---

Donnie: No pude... Es mi culpa.

Leo: Lo lamento, Donnie.

April: No, fué mi culpa. Pude haberla salvado y no lo hice.

Donnie: Yo la tenía conmigo. Creí que me escucharía pero...

Splinter: Hijos míos, no se atormenten. Ella no habría querido verlos así.

- 13 horas antes -

Eran las 11 a.m. cuando el día aún era tranquilo. Había pasado una mañana agradable con las Tortugas y las chicas lleno de convivencia. El entrenamiento de nuevo había sido cancelado, por lo que Leo habló con Splinter en un momento de esa mañana.
April cuando tenía la oportunidad, me demostraba la importancia que le daba a lo que me había dicho la noche anterior. La supuesta "guerra" que permanecería hasta que encontráramos una forma de frenar.
Tomaba a Donnie de la mano y le abrazaba constantemente, él se sonrojaba y sonreía nerviosamente. Los actos de ambos me inquietaban un poco, era como si no quisiera verlos juntos. A pesar de todo intentaba mantener una faceta gustosa, es decir, no quería hacer obvia mi irritación hacia ese par.

Hablamos de cosas divertidas, pero en un instante, sentí mi celular vibrar. Al mirar la razón del ruido pude notar que era el mismo mensaje de mí madre "Que Bryanna cuide bien de ti, no lo olvides". Y así fué cómo un sólo instante derrumbó toda una mañana de alegría. Inmediatamente me había adentrado a un estado reflexivo y melancólico.
Me dirigí al laboratorio para evitar llamar la atención con algún gesto o actitud irregular. Reflexioné sobre mi vida desde el punto en el que dejamos Londres.

De nuevo me sentí dentro de cuatro paredes. Comencé a tener dudas del por qué permanecía en Nueva York, sentí que tal vez "vivir la vida" sólo era una pérdida de tiempo. Había conseguido amigos, confianza e incluso experimentar un enamoramiento primerizo. Sin embargo, sentía que entre más experiencia obtenía, menos comprendía.
Un ejemplo claro era ¿Cómo puedo confirmar que las tortugas son mis amigas? ¿Cómo saber si son amistades de verdad? Ya tenía un cariño hacia todos ellos, pero eso no me parecía suficiente. ¿Quien puede confirmar que es necesario tener amigos o perder el tiempo en una ciudad fuera de tu casa para poder cumplir un sueño? Sentía que mi presencia en Nueva York era en vano. Qué tal vez el director era un adulto demente que solo quería hacerme perder el tiempo.
Y mis padres... No tenían idea de dónde estaba. Bryanna estaba sufriendo en su apartamento mientras que ellos sólo se satisfacían mandando un mensaje diario cómo señales de vida.
Muchas cosas pasaron por mi mente, hasta qué escuché unos golpes en la puerta que me sacaron de mis pensamientos.
Una persona especial asomó su rostro.

Donnie: Ahm, ¿Rose? -Era Donnie. Verle me hizo recordar su situación con April, así que mi melancolía permaneció dentro de mi pecho.

Rose: ¿Si? -Pregunté mirándole.

Donnie: Splinter quiere verte. -Sus palabras me decepcionaron un poco, creí que preguntaría lo que acostumbraba decir siempre. Un "¿Estás bien?" Pero, no lo recibí. Suspiré y le hice una mueca mientras asentí.

Rose: Iré enseguida. Gracias. - Me levanté y me dirigí al Dojo. Donnie no hizo más que ir al lado de April.

Toqué la puerta deslizante y entonces entré encontrándome al maestro sentado frente al árbol.

Rose: Buen día, Sensei. ¿Quería verme? -Pregunté antes de pararme frente a él.

Splinter: Buen día, Rose. Si. Toma asiento. -Asentí y obedecí. - Noté hace un momento que te retiraste de los demás. -A eso agaché mi cabeza y suspiré.

Rose: Lo lamento. Sé que no le agrada que me aleje cuando estoy aquí por qué prefiere verme conviviendo, pero había cosas que debía pensar.

Splinter: Entonces te ocurre algo malo. -Dijo alzando sus orejas al igual que sus cejas. Suspiré y miré el suelo.

Rose: Hoy se cumplen dos semanas. -Dije en otro suspiro. -Dos semanas de problemas consecutivos, Sensei. No es posible que tantas situaciones hayan pasado tan pronto. -Le miré. -Durante este tiempo, he conseguido, perdido y recuperado muchas cosas nuevas y viejas. Pero a pesar de todo aún siento que algo falta. Siento que no comprendo lo suficiente. Además, mis padres me mandaron hoy el mismo mensaje de siempre. -A eso suspiró. -No puedo creer que puedan vivir pensando que con un texto todo estará en orden. Me siento algo... Resentida por su abandono. -Miré el suelo de nuevo. -Y... he pensado. ¿Por que tengo que estar aquí? Es decir, aún siento que esto de "vivir la vida" es sólo pérdida de tiempo. Pero, a pesar de ello, quiero cumplir... Estoy confundida grandemente. -Un nudo en la garganta estaba presentándose, más no lo suficiente para hacerme llorar.
Splinter pensó.

Splinter: Bien, comprendo cómo te sientes. Estoy de acuerdo con que tus padres cometieron un error, sin embargo, debes entenderlos. -Le miré algo confundida. -Puede que el trabajo no les permita hacer ciertas cosas, así que lo mejor es no juzgar. Y respecto a la semana de tormento, intenta aprender algo nuevo de cada día.

Rose: Es lo que acabo de decir, Sensei. He aprendido mucho... -Entonces me interrumpió.

Splinter: Pero de todo hay algo que no entiendes. Búscalo. -Tenia razón. Tal vez no buscaba lo suficiente. Asentí.

Rose: Entiendo. ¿Usted cree que pueda encontrarlo? -Sonrió y asintió.

Splinter: Eres muy inteligente. Claro que sí. Y si me dejas darte un consejo, te diría que despejes tu mente. -Hice una mueca.

Rose: Por supuesto que le permito aconsejarme. Sus palabras son refuerzos para mi.

Splinter: Entonces escucha. -Me miró fijamente. -No te dejes creer que la vida no vale. -Miré el suelo por un instante. -Todo tiene un sentido y una dirección que respetar y que es necesaria. Todo lo que ocurre en la vida es un misterio, más hay cosas que debemos dejar sin explicación. -Fruncí el ceño confundida. -Recuerda la frase "Todo importa y a la vez no" -Me confundieron un poco sus palabras, sin embargo no hiba a oponerme. Así que solo le sonreí.

Rose: Gracias, Sensei. -le dije en una pequeña reverencia.

Splinter: ¿Te gustaría que te prestara el Dojo?

Rose: ¿Disculpe? ¿Prestármelo?

Splinter: Despeja tu mente. Tal vez entrenar te ayude un poco.

Rose: Si usted lo dice, estoy de acuerdo.

Splinter: Suerte. -Entonces salió. Miré el suelo.

Pensé por un momento. Creí que tal vez tenía razón, debía apartar mi mente de lo negativo y ver lo positivo.
Alguien entró por la puerta, esperé que fuera Donnie por lo que miré hacia atrás ansiosa, pero era Rafael.

Rafa: ¿Que tal? -Decepcionada saludé.

Rose: Buen día Rafael, ¿El sensei te mandó?

Rafa: No, supuse que querías entrenar por qué entraste. -Dijo al cerrar la puerta y acercarse frente a mí.

Rose: Entiendo. -Dije mirando el suelo.

Rafa: ¿Te sientes bien? Pareces decaída. -Dijo cruzándose de brazos.

Rose: No, sólo... -Le miré. -He estado reflexiva. Es todo. -Dije alzando los hombros.

Rafa: Oh, entonces ¿Esa es la razón por la que siempre te vas? -Me confundí.

Rose: ¿Que? -Pregunté. Soltó un suspiro de risa.

Rafa: Siempre creí que te alejabas cuando Donnie te molestaba. -Alzó las cejas con una leve sonrisa. Al parecer le parecía gracioso.

Rose: Ah, no. Es por que prefiero reflexionar en ausencia de todos. Donatello ha provocado muchas confusiones en mí y creo que es notorio. -Dije algo apenada. Era verdad, anteriormente me aislaba por acciones de Donnie.

Rafa: Ah, ya entiendo. -Dijo al poner ambas manos en su cinturón y alejarse acercándose al estante de armas. -No quiero meterme en tus asuntos florecita, pero creo que deberías escuchar a Splinter y entrenar.

Rose: ¿Cómo supiste que pidió eso?

Rafa: Es Splinter. Cuando nos desanimámos pide que nos alejemos de los pensamientos negativos. -Alcé las cejas.

Rose: Vaya. Pues tienes razón.

Rafa: ¿Lista? -Preguntó antes de lanzarme un bastón de madera. Lo atrapé por suerte. Le miré y entonces se posicionó con su Sai. Le sonreí levemente antes de posicionarme igual.

Rose: Adelante. -Dije antes de comenzar.

Entrenamos por unas cuantas horas. Debo decir que perdí la noción del tiempo. Estaba algo molesta por el hecho de saber que April estaba con Donnie abrazándolo mientras miraban televisión. Creo que estaba celosa. Mi enojo lo demostraba con fuerza en el entrenamiento, así que Rafael se sorprendía. A pesar de mi dificultad interna, mantuve mi faceta.
Una vez terminando el entrenamiento. Rafa habló.

Rafa: Has mejorado.

Rose: Gracias. -Respondí exhausta.

Rafa: Es todo por hoy. Salgamos de aquí. -Dijo antes de que saliéramos hacia la sala de estar donde Leo nos recibió.

Leo: Por fin salen de ahí. Estamos por patrullar, apresúrense.

Rafa: Entendido, jefe. -Dijo sarcástico y algo irritado para irse a su habitación por sus cosas. Desde lejos pude ver a la pareja algo indecisos, no pude entender que decían.
--
Donnie: Espera April, quiero...

April: No, Donnie. Vamos.

Donnie: Sólo quiero preguntarle...

April: Allá lo haces, no la hartes.
--
Una vez viendo que se retiraban, miré a Leo.

Rose: Tendrán patrullaje hoy, por lo visto.

Leo: Si. -Entonces frunció el ceño confundido. -¿"Tendrán"? ¿No vendrás con nosotros? -Preguntó. Alcé los hombros.

Rose: Temo que no, Leo. Lo lamento. -Dije haciendo una mueca. Pude sentir la mirada de Splinter.

Leo: ¿Sucede algo?

Rose: No, es sólo que tengo que terminar algunas cosas. Siempre salgo a patrullar con ustedes así que...

Leo: Entiendo, suerte.

Rafa: Oye, Leo! Tu novia y los demás están fuera esperándote. Ya vámonos.

Leo: Hasta luego.

Rose: Tengan cuidado.

Rafa: ¡No prometemos nada! -Sus palabras me parecieron graciosas, más no tuve reacción. Una vez que se fueron tomé camino al laboratorio.

Rose: Sensei, ¿le gustaría ver en qué trabajo? No me sentiría bien dejándolo aquí solo.

Splinter: Adelante, estoy bien aquí.

Rose: Entiendo. Como guste.

Splinter: Rose. ¿Por qué no fuiste con los demás a patrullar? -Una pequeña tensión acompañada de nervios me hizo sólo verle. - Es sólo una pregunta. Espero que no pienses en huir de tus problemas.

Rose: No, para nada. Es sólo que... Decidí cambiar de rutina hoy. Ya sabe, proyectos que terminar. "Darle vuelta a la página"

Splinter: Bien, eso espero. Suerte con tus proyectos. -Asentí y me dirigí al laboratorio.

Me encerré para trabajar. Me dediqué a aplicar más calmantes en el Bolígrafo, rociar el Disparador K con el aerosol para registrarlo en el escáner y luego registrar el número telefónico de todos los integrantes del Clan Hamato incluyendo a Gami y Casey para saber sus ubicaciones por si una emergencia podría surgir.
Una vez terminando de registrarlos, pude notar unas pequeñas luces junto a las suyas, creí que se trataba de un error del invento, pero por más que intentaba "arreglarlo" este no desaparecía. Mi preocupación surgió e inmediatamente corrí con Splinter para avisarle del peligro que estaba por ocurrir.

Rose: ¡Sensei! -Le llamé. No estaba en la sala frente al televisor. -¡Sensei! -Volví a llamarle por el Dojo, no estaba. -¿Sensei? -Pregunté buscándolo aún, hasta qué salió de la cocina.

Splinter: ¿Qué sucede? -Dijo tranquilo sorprendiéndome. Creí que había desaparecido. Corrí hacia él con el escáner en mano.

Rose: Estaba registrando las ubicaciones de todos, hasta que encontré esto... -Le mostré el registro. Al parecer no lo entendía.

Splinter: Tienes todas sus ubicaciones, felicidades. -Suspiré.

Rose: Cada luz es uno de ellos, Sin embargo, cada una de esas luces rojas son del Clan del pie.

Splinter: Pero...

Rose: Son muchos y están acercándose a ellos. Creo que piensan emboscarlos.

Splinter: ¿Estás segura?

Rose: Es la única explicación.

Splinter: Debemos apresurarnos. Toma tus armas y vamos por ellos. -Asentí y corrí por mis cosas.

Tomé todas mis armas e inventos; el Bolígrafo, el Disparador, los tubos de sustancias, el escáner, las estrellas, la Katana y por supuesto el Metali-Bo. Cada una de las cosas las acomodé rápidamente en el cinturón. Exitosamente todo tubo un lugar.
Una vez lista, Splinter salió con su bastón y salimos corriendo a las calles con el escáner en mano para buscar a todos.

Splinter: ¿Hacia dónde? -Preguntó mientras corríamos. Con el escáner en mano, respondí.

Rose: Siga rectamente, estamos cerca. -Preocupados, seguimos con nuestro camino. Tal vez podríamos salvarlos.

Seguimos corriendo por los tejados hasta qué encontramos siluetas familiares. Estaban vigilando en el mismo edificio. Al llegar frente a ellos exhaustos, sólo preguntaron confundidos.

Leo: Sensei, ¿Qué ocurre? -Preguntó el líder confuso. -Splinter tomaba aire, así que yo proseguí con la explicación. Nos alegraba verlos a salvo.

Rose: Leo, el Clan del pie. Ellos... -Intenté decir con el escáner en mano. Pero una voz gruesa impidió la continuidad. Habíamos llegado justo al inicio de una larga noche.

Destructor: Parece que hemos venido en buen momento. -Habló el maestro oscuro frente a todos. Su presencia era confusa, no teníamos idea del por qué planeaba emboscarlos. Solo le vimos asombrados y asustados.

Detrás de él, venían miles de robo-pies y también venían todos los mutantes. Era horrible. Tal vez querían asesinarnos.

Splinter: ¿Que es lo que quieres Saki? -Le desafió nuestro maestro.

Destructor: Sólo vine en son de paz aunque no lo parezca, Yoshi. Tu Clan se aparece constantemente en mi camino, por lo que sólo vengo a reclamar algo que es mío.

Splinter: Deja en paz a mis hijos, tu pelea es conmigo. -Dijo honorablemente colocándose frente a todos al lado de Leo y Miwa.

Destructor: Que curioso que lo menciones. Por que no todos aquí son exactamente... -Miraba a todos. -...tus hijos. -Sabíamos que se refería a April, Casey, Shinigami y a mi. Pero nos sorprendió con su línea siguiente. -Karai, todo depende de ti. Me eliges por las buenas, o te tendré por las malas. -Inmediatamente Leo se colocó un poco frente a ella con su katana en mano.

Leo: No te queremos aquí, Destructor.

Destructor: Cómo si eso me interesara. Hija, estoy esperándote. -Sus palabras nos dejaron atónitos a todos. Miré a Miwa preocupada, justo eso era algo que ella quería evitar. Suspiró y me miró primero confusa, le asentí refiriéndome a que eligiera y entonces frunció el ceño para ver a Shinigami y a Leo quienes estaban a sus lados para tomarlos a ambos de las manos. Miró a su padre adoptivo molesta.

Karai: Ninguna de tus opciones. Me quedo con mi familia. -Pude notar como Leo se sonrojó levemente por sentir sus manos. La decisión de Miwa en gran manera me alegró al igual que a todos sus hermanos y padre biológico, sin embargo, Destructor se enfureció.

Destructor: Bien, si eso quieren. Será por las malas. -No teníamos idea de sus intenciones, a decir verdad, estábamos preocupados por lo que podrían hacer, pero la actitud de Destructor era extrañamente desesperada.

Shinigami: Si de verdad amas a tu hija, déjala ir. -Agregó Gami molesta antes de que Miwa le tomara del hombro para que callara.

Splinter: La batalla terminó Saki. Miwa sabe lo que es correcto, así como lo sabía Shen. -Las palabras de nuestro maestro le enfurecieron más. Debo decir que nunca había visto a Destructor tan fruncido. Era espeluznante.

Destructor: Tal vez la batalla terminó. Pero no la guerra. -Dijo furioso con su voz oscura y profunda. Se volteó de espalda para ver a su gente. -¡Clan del Pie! ¡Preparen sus armas! -A todos nos pareció una verdadera declaración de guerra, así que atemorizados nos preocupamos. Docenas de integrantes malvados estaban por atacar. En lo personal. Estaba terriblemente asustada y preocupada. Estaban por herirnos y nosotros estábamos por herirlos a ellos. Con Temor sólo miré el suelo, escuchando las palabras de cada uno.

Rafa: ¿Qué está haciendo? -Preguntó Rafa mirándolo.

April: ¿Pelearemos con ellos? -Le preguntó April a Donnie.

Donnie: Espero que no. -Le contestó justo cuando Mikey habló.

Mikey: ¡Van a destruirnos! -Exclamó aterrorizado.

Karai: Padre... -Todos miraron a nuestro Sensei. Le miré igual. Sentía que la batalla era muy forzada, repentina.

Leo: ¿Qué hacemos Sensei? -El maestro suspiró. Cómo yo estaba junto a él, me miró y notó mi expresión de temor, así que volvió a mirarnos a todos.

Splinter: Tendremos que pelear. Sólo así no dejarán por un tiempo. -Me asombré al escuchar. Me pregunté una y mil ocaciones; ¿Por qué estaban dispuestos a pelear? Podían huir, podían salvarse. Podíamos dejarlos ahí sin que se dieran cuenta, pero sus palabras eran grandes. "Sólo así nos dejarán por un tiempo".

Leo: No descansará hasta tener a su hija a las malas, y si sólo así nos dejará en paz, entonces lo haremos. -Dijo respondiendo las dudas de todos.

Casey: ¡Acabemos con él!

April: No es tan sencillo, Casey. Tiene a toda su gente aquí.

Karai: Padre, si vencemos a Destructor todos retrocederán. -Dijo rápidamente mientras Leo se dirigía a Donnie por detrás.

Leo: Donnie... -Le susurró algo al oído y entonces ambos me miraron. Donnie asintió y se acercó.

Donnie: Rose, ven conmigo. -Dijo algo preocupado, paso por mi lado y me tomó de un brazo. Confundida le miré.

Rose: ¿Qué? -Pregunté confusa, mis palabras no le impidieron llevarme a la orilla del edificio. Miré atrás.

Splinter: ...sean fuertes, recuerden su entrenamiento. Puede que sea la última batalla... -Pude escuchar mientras nos alejábamos. Me alteré internamente.

Destructor: ¡ATAQUEN! -Escuché el grito de todos sus secuaces.

Leo: ¡A ELLOS! -Aquellas palabras me erizaron y efectivamente me preocupé y atemorizé más de lo que ya estaba. Donnie estaba por llevarme al suelo, lejos de todo, confusa y asustada decidí preguntar.

Rose: ¿Qué estás haciendo? -Pregunté mientras seguía con su camino.

Donnie: Mi trabajo es protegerte. -Dijo sin verme.

Rose: ¿Disculpa? -Fruncí el ceño. -Aguarda.

Donnie: Tengo que alejarte de aquí.

Rose: ¿Estás...? Suficiente. -Retrocedí jalando mi brazo soltándome de él. Confuso me miró.

Donnie: ¿Qué haces? -Dijo estando de frente.

Rose: Lo lamento, Donnie. Pero no voy a dejar que me alejes. ¿Dejarás que peleen solos? -Estaba algo molesta, ¿Cómo se atrevía a dejarlos? Era su familia.

Donnie: Regresaré, pero por ahora...

Rose: No voy a alejarme. -Dije firme. No estaba dispuesta a sólo aceptar los acontecimientos sin hacer nada. Si ellos peleaban y optaban por quedarse, yo lo haría igual. No quería que les hicieran daño.

Donnie: Esta pelea no te corresponde, es nuestra. -Se refirió a los asuntos con Oroku Saki, más no lo acepté.

Rose: Te equivocas. No dejaré que lo hagan solos. -Frunció el ceño.

Donnie: ¿A qué te refieres? No estamos solos.

Rose: Estoy involucrada en esto desde que salvé a Karai por primera vez, ¿Lo olvidas?

Donnie: Splinter y los demás...

Rose: ¿Los demás? ¿Acaso no creen que...?

Donnie: No quiero que te suceda nada. ¿Entiendes? -Atónita le miré. -Splinter y todos te consideramos como parte de la familia, pero tienes tu vida. -Familia. Me consideraban parte de ella. -Yo sé que no quieres esta vida. Y... No me gustaría que fueras infeliz. -Suspiré. Estaba algo confundida. Querían alejarme a pesar de considerarme parte de ellos, pero igual se preocupaban por ayudarme a cumplir mis metas. Algo que me cautivó.

Rose: Donnie. -Me acerqué un poco. -Tal vez esta no es la vida que siempre he querido, pero ustedes igual se han convertido en algo importante en mi vida. -Confecé. -Soy parte de su clan y no dejaré que peleen sin mi. -Insistí. Me miró preocupado.

Donnie: Pero si...

Rose: Si salimos heridos, será defendiendo. -Solo siguió mirándome. Entonces entendí. Yo también tenía opción de escapar de los problemas tanto como ellos, pero aún así decidí quedarme a pelear por que me importaban. Ellos se quedaron por el bien de Splinter y Miwa, su empatía por ambos era tan grande que decidieron arriesgar su vida y sueños por sus amigos y maestro. Al igual que yo lo decidí. - Comprende, te lo pido.  Tengo una deuda que pagar. -Suspiró, miró el suelo y entonces regresó a mí con la mirada. Asintió.

Donnie: Entiendo. Debemos apresurarnos. -Asentí.

Ambos regresamos lo más rápido posible. Llegando al tejado de la guerra, decidimos separarnos.

Donnie: Hay que esparcirnos. Que nuestra presencia no llame la atención.

Rose: Entendido. -Le miré. Tenía un mal presentimiento. Me correspondió la mirada. -Hasta luego. -Dije antes de comenzar a tomar camino. Su mano tomando la mía y me detuvo. Me sorprendí y le miré.

Donnie: Rose... -Nos miramos. -Estaremos bien, volveremos a vernos. -Me sonrojé levemente. No había hablado conmigo durante todo el día, pero al saber que probablemente moriríamos y que por eso dedicara su tiempo a mí, era apreciable. -Lo prometo. -Dijo con una voz seria. Le sonreí muy levemente.

Rose: Igual yo. -Dije antes de soltar su mano y retirarme hacia la guerra. Pude sentir como él también se alejaba.

Al entrar al conflicto, muchos robopies me atacaron. Con el Metali-Bo me defendí derribándolos uno por uno abriendo camino. De lejos pude notar a Shinigami peleando con Rahzar y muchos robopies detrás. Cruelmente la lastimaban, me molesté. Corrí hacia ellos separándola del monstruo para que se recuperara un momento. Rahzar chocó con Garra de Tigre, Casey los atacó a ambos alejándolos de nosotras. Al ella notarme, cansada se sorprendió.

Shinigami: Gracias.

Rose: ¿Necesitas ayuda? -Dije antes de levantarla mientras golpeaba todo robot que intentaba rodearnos.

Shinigami: Estoy bien. -Respondió antes de comenzar a atacar a los robots conmigo. Ambas pelamos cubriéndonos la espalda.

--
Rahzar: Garra de Tigre, ¿No se supone que asesinaste a esa chica?

Garra de Tigre: Lo hice. Debieron sacarla.

Rahzar: Destructor se enfurecerá.

Casey: ¿Qué pasa gatito? ¿Una niña te asusta?

Garra de Tigre: ¡Silencio, niño! Eso puede remediarse. ¡Bebop!

Bebop: !Yo me encargo amigo felino¡
--

Mientras peleaba al lado de Gami, muchas cosas podía ver. Era un caos.
Docenas de robopies rodeaban toda la zona acompañando a los mutantes con sus ataques. Cada uno de nosotros no lidiaba con un sólo rival, mínimo peleaba con 4 o 5 a la vez. El plan de Destructor seguro era destruirnos, asesinar al Clan entero por recuperar a su hija. Cada uno de nosotros ya estaba herido, golpeado y ligeramente cansado.
Gami y yo éramos las únicas que se mantenían pegada una a la otra. Sólo así podíamos evitar tanto daño.

Shinigami: Son muchos, nunca se acaban. -Dijo de pronto detrás de mí mientras forcejeaba con uno de los ninjas.

Rose: Los robo-pies no son infinitos, en algún momento tendrán que perecer. -Dije pegada a su espalda mientras derribaba a todos los que tenía en frente con el Metali-Bo.

Shinigami: Espero que lo hagan pronto. -Respondió antes de saltar y volver a su posición. Sacó su arma y con ella atacó a todos de una. Guardé el Metali-Bo y saqué la Katana. Con ella corté la cabeza de uno y la lancé hacia otro para que chocara con algunos más.
Sólo miraba ninjas, no miraba al resto del Clan.

Rose: No veo a los demás. -Dije mientras tomé un cuerpo entero y con él golpeé a quienes se ponían enfrente.

Shinigami: Splinter está peleando con Destructor. -Respondió antes de saltar y ponerse frente a mi para lanzarles polvos púrpuras y atacarlos mejor. -Karai y Leo están juntos como nosotras. -Agregó después de atacarlos pegando su espalda con la mía.

Rose: Ya veo. Pero saldremos de esta. -Dije antes de patear.

Shinigami: Como si fuera tan sencillo. -Respondió antes de volver a atacar.

Rose: Debemos mantener esperanzas, pero a pesar de eso, estoy de acuerdo con que Destructor sea un completo demente. -Me miró antes de golpear a uno.

Shinigami: Y que lo digas.

Seguimos peleando. Por un momento me dí cuenta de que tenía más armas en el cinturón, así que hice provecho de algunas. Usé el disparador para derribar a varios y algunas estrellas para desvalancearlos. Decidimos no quedarnos en el mismo lugar, corríamos cambiando de posición y yo con las estrellas apuntaba a otros mutantes para darle ventaja a nuestro clan. Debíamos apoyarnos todos.
En un momento. Shinigami y yo nos vimos frente a Mikey y Casey, les ayudamos un poco pero segundos después nos perdimos entre los robots. Instantes después de defenderme de algunos, Shinigami también desapareció de mi vista. Me alarmé. Seguí peleando para despejar el camino y buscarla, una vez encontrándola, estaba en el suelo aparentemente inconsciente a unos metros de April quien peleaba contra "Cara de pez" y muchos robots. Donnie estaba cerca también, sin embargo no le dí importancia.

Rose: ¡Shinigami! -Exclamé al notarla en el suelo. Corrí hacia ella para ayudarla, pero algo me impactó en el brazo derecho de forma que me derribó lejos de ella y April.
El golpe había sido fuerte. Aún así intenté levantarme.

Bebop: Te estás tomando esto muy enserio a pesar de ser nueva en el Clan de la rata. -Escuché una voz semi aguda y presuntuosa. Mientras él habló intenté levantar mi pecho del suelo con mis manos. Volteé hacia la derecha para verle. Era el jabalí.

Rose: Lo sé. -Dije afirmando lo que expresó. Era verdad.

Bebop: Me sorprende que sigan vivos, les enseñaron bien. -De pronto exclamó con un grito algo extraño liberando láseres de su cinturón. Intenté evitarlos pero algunos llegaron a tocarme.

Los robo-pies también atacaron sin piedad y extrañamente no pude evitar ninguno de sus ataques, me golpeaban consecutivamente hasta que decidí poner un alto sacando el disparador para salir de ahí. Bebop apareció repentinamente detrás intentando lanzar su puño, pero lo esquivé. Nuestras miradas se cruzaron. Fruncí el ceño grandemente, la forma en cómo me lastimaron todos los robots había sido cruel.

Bebop: Estás perdiendo fuerza. ¿Qué pasa?¿Cómo se siente saber que tu maestro y tus amigos estén al borde de la muerte? -Sus palabras me enfurecieron más, sin embargo me desvalancearon un poco. Detrás de él podía ver a Splinter pelear con Destructor.

Rose: El futuro siempre es incierto. -Dije antes de golpear su rostro, una vez que su cabeza dió la vuelta, saqué el Metali-Bo cerrado. Abrí el arma cerca de su pecho para que retrocediera con dolor, lo cerré para acomodarme en el suelo y abrí el arma para que está golpeara su cara. Me levanté y con la misma arma le tiré al suelo. Le golpeé en la cara dos veces y al ver que intentaba levantarse volví a cerrar el arma para abrirla y que esta le impactará en la quijada. Su dolor fué grande. Le derribé de nuevo y al tenerlo débil, preparé el Metali-Bo como si fuera un bat de béisbol e impactarle en la cara.
Cuando me dí la vuelta para tomar vuelo en el golpe, pude ver a Donnie salvar a April a unos metros de distancia. En unos instantes, ella se le lanzó en un abrazo muy apretado. O al menos eso creí al inicio. Fijé bien mi mirada a sus rostros... Sus labios estaban unidos. Ella estaba besándolo. Donnie impactado sólo miró la nada.
Ese sólo segundo inmediato de distracción fué suficiente para que Bebop me pateara por las piernas y me derribara.
Estaba cegada, aquella imagen de Donatello y April unidos boca a boca era penetrante. Sentía un dolor profundo en el pecho, tan fuerte que los golpes del jabalí no eran suficientes para igualarse a lo que sentía en mi interior. Mi contrincante siguió lastimándome. Parecía disfrutarlo. Por más que intentaba defenderme no podía hacerlo, me sentía débil. Una vez que notó mi debilidad, me dejó.

Destructor: ¡RÍNDETE, YOSHI! Tú clan está cayendo, cada uno cae en su propio peso. ¿Dejarás que mueran así?

Splinter: No sabes lo que dices, Saki. Hagas lo que hagas sólo le demostrarás a Miwa quien eres en realidad.

Destructor: Me quitaste una parte de mi Clan y te devolveré el favor. ¡Garra de tigre!

Garra de Tigre: ¡Acaba con ella! -Pude escuchar a unos metros, creí que se refería a Karai o Shinigami, pero en realidad no. Bebop corrió a mi, tomó mis dos brazos y me lanzó hacia cualquier otra parte.
El aterrizaje fué doloroso. Al abrir los ojos me dí cuenta de que había caído del edificio y que ahora estaba encima de una tapa de alcantarilla floja. Al recuperar la conciencia pude ver al jabalí cayendo con dirección hacia mi abdomen. Intenté inmediatamente sacar el Metali-Bo, pero logró aplastarle tan fuerte que la tapa de alcantarilla se abrió llevándonos hacia un conducto que no parecía tener fondo.

--
Splinter: ¡No!

Karai: ¡No tienes honor! ¡Eres un cobarde!

Destructor: Retírate Karai.

Karai: ¡Tú no eres mi padre¡
--

Durante la caída intenté atacar a mi enemigo, pero no lo lograba. Entonces al ver el suelo, saqué el Metali-Bo y lo abrí estancándome con él para no caer en el río de agua sucia a la que estábamos por llegar. Bebop cayó ahí dentro mojándose completamente.
Miré hacia arriba para ver la forma de salir, pero el Metali-Bo no aguantó por más tiempo y me resbalé con él hasta el agua sucia. Caí casi de pie. Bebop extrañamente ya no estaba, aún me dolía todo el cuerpo por los ataques que me habían dado.

Me dediqué a ver la zona rápidamente. Una parte que nunca había visto de las alcantarillas, debo decir. Era como un río de aguas verdosas encerrado entre paredes y túneles, un poco asqueroso.
El agua cubría más allá de los tobillos pero no alcanzaba las rodillas, podía sentir el agua fluir dentro de mis zapatos. No era nada agradable.

Bebop: ¿No soportas unos cuantos golpes? Te cansas muy pronto para ser alguien tan obstinada. -Escuché detrás de mí. Me paralicé. -Que cosas tienes ahí, el felino no exageraba con decir que eres una cerebrito. Parecen, ¿tubos de ensayo?

Rose: No te atrevas a... -Volteé hacia atrás, pero no había nadie. Extrañada busqué. Estaba confundida. Entonces, sólo podía pensar en algo obvio. -Te haces invisible. -Dije para mí. Escuché su risa.

Bebop: No necesitas ser un genio para saberlo. -volteé de nuevo detrás de mí, estaba recargado en una pared. Muy relajado. -¿Sabes? Me dí cuenta de que somos parecidos, ambos usamos nuestra tecnología para pasar nuestras batallas. Pero, ¿por qué desperdiciarte en esta?

Rose: No lo hago por mi, sino, por mis... amigos.

Bebop: ¿Amigos? Al parecer les tienes mucho cariño, o algo así. -Fruncí el ceño. No comprendí su última expresión.

Rose: No entiendo a qué se refiere.

Bebop: Oye, me doy cuenta de muchas cosas. No soy tan cerdo. No creas que no me dí cuenta cuando miraste a una de las tortugas y por eso no terminaste tu ataque, pudiste haber ganado, pero al parecer el amor te detiene ¿no? -Mis ojos se abrieron más de lo que ya estaban. -Será muy sencillo cumplir con la petición de Destructor.

Rose: ¿Petición?

Bebop: El Rey te quiere muerta, linda. -Sus palabras me sorprendieron. Eso era serio. Traté de guardar mi temor.

Rose: Al parecer estás sólo ganando tiempo... -Me lancé sobre él, pero desapareció.

Bebop: Si, si. Dime lo que quieras. Sólo creo que es una lástima que en realidad no te aprecien cómo tú a ellos.

Rose: ¿Disculpa?

Bebop: No por nada tu amado se besó con la pelirroja. Tal vez creíste que te quería, pero no es así.

Rose: No tienes idea de cómo es mi vida.

Bebop: No necesito saber eso, querida. Si de verdad les importaras, no estarías aquí. No me refiero a esta batalla, sino, aquí en las calles. Las tortugas y la rata saben mejor que nadie que una vida en las calles es mortal y dolorosa, aún así te aceptaron en su clan. -Quedé perpleja, mirando ciegamente el agua. Tenía algo de razón. -Y sobre la tortuga más grande, creo que no le interesas. -Cerré los ojos por dos razones; una por dolor, y otra, para detectar su ubicación con el oído. -Es lógico que te sientas atraída por sus tecnológicos logros, pero tal vez... Te usa a su beneficio. -Volví a sentirme confundida. Era probable. -La verdad duele, ¿cierto nena? ¿Que te hace creer que son tus amigos? -Entonces me enfurecieron sus palabras, tanto esfuerzo por comprenderlos, por quererlos, por ayudarlos, no debían ser en vano.

Rose: No me abstengo a las posibilidades. Sin embargo... -Preparé el Metali-Bo en mi mano. -...No es bueno dudar de quien se preocupa por tí. -Con la mitad del arma sumergida en el agua, giré para levantar una brisa que al salpicarlo me permitió verlo frente a mí. Golpeé su abdomen y su invisibilidad terminó, luego golpeé en forma de "x" lastimando sus dos hombros. Alcé el arma para golpearle como a una pelota de golf, pero este se bloqueó y al intentar atacarle siguió bloqueando.

Bebop: ¿Te gustan mis láseres? -Dijo con su irónico tono para dispararme en el abdomen haciéndome retroceder adoloridamente. Sentía una parte casi arder,  sentía como la piel estaba consumiéndose por el fuerte calor del láser. Choqué con la pared impactando la espalda igual, tomando aire me miré el abdomen para verificar si me había herido, pero sólo estaba algo quemada la blusa.

Mi enojo permaneció. Guardé el Metali-Bo y saqué la katana velozmente mientras corría hacia él.
Quise atacarlo con el arma, pero me bloqueó con su brazo derecho haciéndonos quedar frente a frente forcejeando.

Bebop: Veamos que dice la rata cuando se dé cuenta de que una de sus aliadas fue asesinada. -Dijo cruelmente mirándome a los ojos a través de sus lentes. Dejé que hablara mientras tomaba la katana con la mano izquierda y así preparar el puño derecho.

Rose: Veamos que dice Destructor cuándo se percate de que han fracasado con una niña de 15 años. -Junto con un pequeña exclamación le golpeé con el puño en la cara, aprovechando bajé el codo del mismo brazo impactando de nuevo su rostro.

Giré alejándome de él y tomando uno de los tubos de ensayo esperé a que reaccionara para lanzarlo hacia sus piernas que tocaban el agua para congelar esas extremidades, velozmente guardé el arma y con el Metali-Bo le golpeé una y otra vez en la cara para después golpear el hielo y descongelar sus piernas al quebrarlo.
Él se lanzó sobre mi, me moví a un lado. Sentí cómo tomó algo del cinturón, le miré de inmediato.

Bebop: interesante, veamos que puede hacer esta pequeña cosa. -Había tomado uno de los tubos de ensayo, de ácido para ser exacta.

Peleé mano a mano contra él, con uno de sus brazos me lanzó hacia la otra pared y sacando la katana la perforé en el suelo cubierto de agua deteniendo mi choque. Guardé el arma y corrí hacia él. Le tomé de los hombros bajándolo mientras alcé velozmente la rodilla izquierda impactando su pecho, tomé y torcí su brazo para patearlo con la misma rodilla y con la mano derecha golpear su cuello afectando su atención. Soltó el tubo dejándolo caer en el agua.

Rose: No vuelvas a meterte conmigo, ¿Quieres? -dije antes de ponerme de lado y con la pierna derecha patear fuertemente su pecho. El impacto fué tan grande que su cara se inflamó y su boca expulsó saliva, además, flotó hacia la pared dejándolo inconsciente.

Mirándolo caído en el agua me enderecé. Tomé el tubo que ahora estaba en el agua y lo miré reflexiva. Dirigí mi mirada hacia el lugar donde entramos y recordé la guerra que aún permanecía en las afueras.
Cerré la mano con el objeto dentro para meterlo en el cinturón. Tomé el escáner y busqué las ubicaciones de todos.

Aparentemente la mayoría de los robots del clan del Pie estaban derrotados por que no se movían, pero mis amigos tampoco lo hacían mucho al igual que los demás mutantes. Splinter, Leo, Karai y Destructor aún se movían.
Lo visto indicaba que la guerra no terminaba.

Suspiré preocupada y adolorida. El agua aún fluía en las piernas, la mitad del cabello aún escurría al igual que los brazos. Me dolía el abdomen y la espalda.
A pesar de todo, al guardar el escáner tomé el Metali-Bo y con su ayuda al abrirlo subí por el largo tubo hacia la salida.
Tardé aproximadamente seis minutos, abriendo la tapa de alcantarilla pude ver desde abajo lo que sucedía.

Shinigami: ¡Blake! -Escuché una voz conocida, pude ver a Gami bajar de uno de los edificios y correr hacia mi.

Rose: Gami... -Dije mientras me esforzaba por salir. Ella al llegar conmigo, me ayudó a salir. - Gracias.

Shinigami: Creí que te habíamos perdido. -Dijo tomándome del torso una vez fuera del túnel casi recostada en el suelo. Me dolía absolutamente todo el cuerpo.

Rose: En batallas cómo esta no podría. ¿Qué ha pasado? -Pregunté mirándola preocupada.

Shinigami: Desde que Bebop te atacó, Splinter se concentró más en Destructor, Karai ha intentado intervenir, pero los ninjas no lo dejan. Déjame subirte, estás muy herida. -Entonces me cargó en su espalda y subimos el edificio. Una vez llegando al tejado, me dejó recostada en el suelo, se sentó conmigo.

Lo extraño era que aún quedaban pocos robo-pies, las tortugas restantes estaban aún peleando con los mutantes.

Leo: ¡Casey! ¡Ve por el tortumóvil, ahora! -Gritó el líder mientras forcejeaba con Rahzar, Casey asintió desde lejos.

April: ¡yo voy contigo, Casey! -Entonces juntos se encaminaron hacia las alcantarillas.

Destructor y Splinter pelaban fuertemente, en un movimiento el maestro oscuro le derribó fuertemente así que todos quedamos en shock mirándolos. Incluyendo los mutantes enemigos.

Destructor: Es suficiente. Has perdido, rata. -Sacó sus enormes cuchillas de sus manos, se acercó a él lentamente.

Sabíamos que tal vez era el final. Todos, incluyéndome, nos negamos a gritos. Los mutantes villanos no permitieron que ninguna de las tortugas pasara cerca de ambos, cosa que tornó más cruel y oscuro aquel momento.

Rose: lo asesinará... -Dije en una respiración intentando tomar camino, pero Gami me tomó.

Shinigami: No nos dejarán llegar a ellos... -Dijo al abrazar mi rostro y cuello. -No podemos hacer nada.

Rose: pero... -Mire al Sensei, estaba mirando a su oponente desde el suelo, sus orejas estaban caídas. -...Sensei. -Dije para mí. Sentí un dolor inmenso en mi pecho, un temor grande que me obligaba a querer llorar. Las tortugas estaban igual.

Entonces, tras el temor de cada uno, se escuchó un estruendoso grito femenino. Karai furiosa se puso frente a Destructor y con su arma le atacó vorazmente.

Karai: ¡ALÉJATE DE ÉL! ¡MONSTRUO! -Le gritaba en cara mientras perforaba y rasgaba su armadura con el arma que tenía en manos. Él se bloqueaba con sus enormes garras de los puños.

Destructor: Niña ingenua, estás mejor con el clan del pie. -Le dijo mientras se forcejeaba con ella. La mirada de Miwa era tenebrosa, estaba por transformarse en serpiente.

Karai: ¡Prefiero morir que volver contigo! -Le gritó antes de sacar su lengua y transformarse justo ante sus ojos. Las tortugas también sacaron lo más feroz de sí y pelearon contra los mutantes. Leo se encaminó con Karai y ayudándola lograron vencer a Destructor y retirarle su característico casco. Lo derribaron y ambos le dejaron en el suelo con katanas en su cuello.

Leo: Todo terminó, Destructor. -Le dijo antes de que ambos se retiraran a levantar a Splinter y que Garra de tigre tomara a su maestro.

Splinter: Sé que no será la última vez, Saki. -Le dijo nuestro maestro a su enemigo, él le miró furioso.

Destructor: No lo será. Volveré y recuperaré a mi hija, cueste lo que cueste. -Entonces todos se retiraron fugazmente. Leo y Karai llevaron a Splinter a donde Gami y yo nos encontrábamos, las tortugas restantes igualmente se dirigieron al mismo punto.

Rafa: ¿Se encuentra bien, Sensei?

Mikey: ¡Está vivo! -Llegaron abrazándose con su padre. El maestro correspondía dulcemente a cada uno.

Rose: ¿Cómo se siente maestro? -Dije mirando al Sensei. Él suspiró y cerró los ojos.

Splinter: Estoy bien... -Dijo relajado. - pelearon honorablemente y no cedieron ante las dificultades, actuaron en equipo e individualmente. Estoy muy orgulloso de todos. -Nos miró sonriente. Todos le sonreímos. -Y... Rose. -Escuché y le miré confundida.

Rose: ¿Si? -Pregunté. Me miró.

Splinter: Te quedaste por defendernos, dejaste a un lado todos tus sueños y arriesgarse tu vida por nosotros. Estoy orgulloso de ti. -Sus palabras me hicieron sacar una gran sonrisa, asentí.

Rose: Gracias. -Me sentía un poco más liberada. Sentía un alivio que nunca había experimentado. Por una vez, entendí que ellos eran realmente mis amigos. ¿Cómo lo confirmaba? Estaban dispuestos a cuidarme e incluso arriesgar su vida por la mía. Quisieron alejarme del peligro desde un inicio, siempre estaban para ayudar. Splinter, siempre estaba para aconsejar. Eso era suficiente para entender.

Disfruté esos momentos de alegría y entendimiento. Entonces Karai habló.

Karai: Será mejor volver a casa. -Leo y Splinter asintieron. Nos levantamos y comenzamos a caminar. Miwa y Leo ayudaron a Splinter al igual que Donnie y Gami me ayudaron.

Shinigami: ¿Donde están Casey y April? -Preguntó a mi lado. Todos nos detuvimos.

Leo: fueron por el tortumóvil. -Respondió tranquilo. Hasta que...

Casey: ¡CHICOS! ¡CHICOS! -Todos escuchamos los gritos. Miramos alterados a quien se acercaba.

Rafa: ¿Que ocurre Casey? -Respondió Rafa confundido.

Casey: No pude traer el auto. La pelirroja, la tienen. -dijo alterado frente a todos. Sentí el escáner vibrar así que con la mirada le indiqué a Gami que lo tomara y lo hizo.

Donnie: ¿Qué? -Dijo a mi lado asustado.

Leo: ¿Por que la querría el Clan del Pie? -Preguntó por todos mirando a Splinter. Gami al encender el escáner, vimos algo extraño.

Rose: Ahm, chicos... -Dije llamando su atención. Nos miraron.

Shinigami: No fué el Clan del Pie. -Dijo mi compañera.

Donnie: ¿Entonces quién fué? -Nos miramos ambas. Era extraño y muy peligroso para April.

Shinigami: ...El kraang. -Todos se miraron.

La confusión invadió el momento. Apenas habíamos terminado una guerra y estábamos por entrar a otra.
No podíamos dejar a April, era igual de importante...

Pero, bueno.
Ya veremos qué pasa.