Capitulo 48
Regresaron al clan Uchiha después de tres días. La gente de la aldea los recibió con aplausos y vítores algo que sorprendió al rubio. Miro fijamente hacia el azabache y este al sentir su mirada solo sonrió.
-¿Estás listo para la boda?-
Naruto lo miro horrorizado - ¿Hablabas en serio? –
-Nunca he hablado tan en serio como ahora -
La mirada seria del Uchiha le advirtió que no era buena idea negarse, así que solo suspiro por tener un futuro marido tan extremista.
-Ya tenías todo preparado ¿Verdad? – ni siquiera sabia porque preguntaba, si ya sabe la respuesta.
-Claro, lo prepare antes de irme a la batalla – Sasuke sonrió como si fuera lo mas normal del mundo – Cariño, no quieres dejarme plantado en el altar ¿Verdad? –
"¿Quién hace el papel de mujer en esta relación?" se preguntó Naruto y negó con la cabeza ante la pregunta del azabache.
Sasuke se sintió satisfecho con su respuesta y miro hacia la ventana. La gente de la aldea lo saludaban con las manos y otros gritaban "¡Que viva el emperador!" mientras tiraban serpentinas al carruaje.
El palacio Uchiha seguía siendo igual, imponente y glorioso como la primera vez que había venido. La puerta de madera se abrió ante su llegada y varios soldados aparecieron para saludar con sus armas.
Naruto no podía ocultar su sorpresa, se sentía extraño y desconocido para sus ojos. Luego se dio cuanta de algo que lo dejo mas conmocionado.
Las ventanas del palacio estaban decoradas con lazos rojos y en medio del patio había una clase de altar, los tambores que una vez vio en la boda de Sakura, estaban alineados en el patio, esperando ser tocados.
-Me prometiste que iba a hacer una boda simple, no quiero que me descubran -
Sasuke alzo una ceja -Es una boda simple, solo estaremos tu y yo -
El rubio volvió a mirar el patio y luego devolvió su mirada al Uchiha - ¿Esto es simple para ti? -
-No hay nadie más que nosotros a y algunos soldados -
Naruto se froto la sien y pensó "¿Qué será de nuestro hijo cuando nazca?, ¿Sera como su padre?" un escalofrío recorrió todo su cuerpo.
El carruaje se detuvo, dos soldados se cercaron y abrieron la puerta. El primero que salió fue Sasuke y espero a que su futura esposa saliera.
El rubio tomo la mano del azabache y salió algo tembloroso. La mirada de los soldados estaba pegada en el como si estuvieran viendo un bicho extraño.
El azabache aclaro su garganta y pregunto con voz molesta -¿Qué tanto miran? ¿No tienen nada que hacer? -
Los soldados temblaron, bajaron la cabeza sumisa y se dispersaron.
-Sasuke ¿Seguro que es una buena idea? -
Sasuke relajo su semblante -Lo es, quiero casarme contigo antes de que los ministros me obliguen a tomar esposa. Se que tienes miedo, lo se perfectamente, pero cariño, no te preocupes, yo tengo el poder de protegerte a ti y nuestro hijo -
-Sasuke – Naruto lo miro fijamente, sus ojos azules se encontraron con los ojos negros de su amante. Lo que se expreso en esos ojos, era sinceridad.
-Está bien...hagámoslo -
Sasuke sonrió enormemente, dejando en cegado al rubio por un momento. No supo cómo o cuando, pero ya era arrastrado por varias doncellas, incluyendo a su amiga, Hinata.
-Hinata...-
La chica solo guiño el ojo en respuesta.
Aturdido, lo llevaron a una habitación donde le lavaron la cara y cepillaron los dientes. Después de arreglar su cabello, le pusieron una túnica ceremonial color rojo y luego cubrieron su rostro con un velo del mismo color.
Los tambores se escucharon desde afuera. Las doncellas le pusieron el ultimo retoque y sonrieron orgullosas al ver su obra.
-¡Te ves hermoso! ¡Mas hermoso que Sakura en su boda! – grito una doncella.
Hinata le dio un leve golpe en el hombro -No lo compares con esa mujer -
La doncella guardo silencio.
-Bueno, ya es la hora-
Naruto asintió, con cada paso que daba su corazón late fuertemente, como si quisiera salir de su pecho.
Cuando llego a la escena, toda gente que conoce estaba ahí, incluyendo a algunos soldados que estaban vendados de pies a cabeza por las heridas de la batalla. Naruto fue llevado del brazo por Hinata hacia el altar, donde Sasuke lo esperaba con una sonrisa y en los lados estaba Jiraiya e Itachi.
Todos los ministros y eunucos se arrodillaron, respetuosa y lealmente gritando -¡Larga vida a la emperatriz! -
El rubio los miro extrañados.
-No saben que eres hombre, Sasuke ordeno que escondiéramos tu rostro con el velo para que no te sientas incomodo – susurro Hinata en su oído.
Se mantuvo en silencio mientras observaba al Uchiha y caminaba en la alfombra roja cuidadosamente, no quería tropezar con la túnica.
Sasuke observo al rubio acercarse, incapaz de apartar los ojos. Originalmente le encantaba que usara ropa naranja o azul y ahora que estaba completamente vestido de rojo, se sentía muy seductor.
Itachi rio a su lado – Nunca pensé que mi hermano llegara a enamorarse de esa forma -
Sasuke no aparto la mirada -No soy doble cara como tu-
Itachi iba a responder, cuando sintió un jalón en su ropa y miro hacia Deidara.
-El espectáculo de ese día, nunca se me olvida – Deidara guiño el ojo – No sabia que el emperador tenía un lado así –
Itachi solo sonrió como respuesta.
Naruto siguió caminando hasta que estuvo enfrente del azabache.
Jiraiya se puso en medio de ellos y dijo en voz alta – Estamos aquí, reunidos para unir a estas personas en matrimonio si alguien esta en contra que hable ahora o calle para siempre -
Los ministros solo miraban nerviosamente a la pareja. Como no hubo respuesta, Jiraiya prosiguió.
-Por favor digan sus votos- Jiraiya se aparto de en medio para que la pareja prosiguiera.
Sasuke tomo las manos del rubio y puso un anillo dorado en el dedo índice de su esposo -Yo Sasuke Uchiha, juro ante los cielos y la tierra que voy a amarte y protegerte ante todo que quiera hacerte daño y si llegas a morir primero, iré tras de ti para cuidarte en el cielo o en el infierno-
Naruto sintió su cuerpo temblar ante las palabras del azabache, pronto se dio cuenta que estaba llorando, agradecía que el velo cubriera su rostro. Tomo el otro anillo e imito la acción de Sasuke.
-Yo... Naruto Namikaze, te amare y te cuidare en los días de enfermedad, estaré a tu lado cuando tengas pesadillas y cuando sufras te estaré consolando. Si llegamos a morir juntos, mis sentimientos no cambiaran incluso en el más allá -
Algunos ministros que escucharon el apellido Namikaze se sorprendieron demasiado y otros lo dejaron pasar.
Sasuke sonrio con orgullo y sin esperar más, quito el velo de su rostro y lo beso.
Los soldados que participaron en la batalla aplaudieron y gritaron con alegría "¡Vivan los novios!"
Ese mismo día, se decidió hacer un banquete en la noche, fue una gran noticia para los soldados que deseaban embriagarse y para algunos servidores que querían comer algo lujoso.
Sasuke e Itachi dejaron los asuntos para después.
La noche del banquete llego. Además de los soldados y personal, también llego Gaara con Iruka, este tenia un semblante triste.
-¿Qué pasa contigo? – Pregunto Naruto.
-¡Llegamos tarde a la boda! – Iruka lloro amargamente, mientras se apoyaba en el hombro del pelirrojo.
Gaara puso los ojos en blanco, pero no aparto a su amigo -Por cierto, tengo un regalo para ti – le hizo señas a un soldado y este obedeció, en sus manos llevaba una caja de madera bien hecha.
El soldado lo dejo en el suelo, frente al rubio y abrió la caja.
-Felicidades por tu boda -
Dentro, estaba la cabeza de Fugaku Uchiha.
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Ya, dos capítulos y adiós a esta obra. Gracias por todo.
psdt: ¿Alguien juega amoung us?
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