Hola a todos, gracias por su paciencia con esta actualización. Prepárense porque este cap es largo y muy especial.
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"Tú...qué haces aquí!?" Preguntó Helga con sus cejas arqueadas en desagrado.

El joven se levantó de la cama mirando a Helga enervada en la entrada del cuarto. "Que haces tú aquí!?" Le devolvió la pregunta el joven confundido por verla.

"Este es mi cuarto!" Afirmó Helga molesta. Ella quería descansar y en encontrarse al joven empalagoso de la fila la llenaba de nervios.

"No puede ser?" Comento el muchacho confundido.

"SALTE!!" grito Helga con sus manos cerradas del coraje.

"Lo siento güerita, pero este es mi cuarto. Cómo crees que pude abrir la puerta." Le respondió el joven dándole una mirada seria con sus cejas gruesas.

"¡No puede ser tu cuarto también, tiene que haber un error!" Reclamo Helga furiosa.

Helga agarró su celular y su pequeño bolso y se salió del cuarto en desesperación. El joven cerró la puerta del dormitorio y se fue corriendo atrás de ella. Helga caminaba con velocidad por el edificio para alcanzar la oficina del registro abierta. Durante el recorrido a la oficina ella no se daba cuenta que el joven la seguía.

La oficina estaba a punto de cerrar cuando llegó Helga apresurada.

"Necesito que me den mi cuarto correcto! ¡Acabó de entrar al cuarto 2009 y ya le pertenece a un muchacho!" Le reclamo Helga al encargado.

"Cuál es tu nombre?" Preguntó el señor.

"Helga G Pataki." Contestó ella.

"Así que ese es tu nombre." Comento el joven de ceja gruesa atrás de ella.

"Que haces tú aquí!?" Preguntó Helga con la mirada en cólera, enseñando sus dientes en desagrado.

El muchacho se dirigió al encargado de la oficina. "Yo también tengo cuarto 2009. Me acaban de entregar la llave hoy. "Añadió el joven.

El encargado buscó los archivos en la computadora y encontró la información. "Helga G Pataki y Elizer Verdugo." Confirmo el encargado de las llaves. "La información es correcta...el cuarto es de, ustedes."

"QUE!?!?" Respondieron los dos al mismo tiempo.

"Yo debí de haber estado con una alumna! ¡No con un chavo!" Se quejo Helga sorprendida.

El señor de la oficina acomodó sus lentes diciendo. "Ustedes son mayores de edad verdad?"

"Si, pero......." comentaba Helga.

"Este es el último cuarto que tengo disponible. En la aplicación de la habitación los dos contestaron, no, a preferencias de compañero o compañera de habitación así que.....ahí está la habitación."

"Pero yo no puedo estar con un hombre en mi cuarto!" Dijo Helga en furia.

"Perdón Señorita Pataki, pero no tendremos más cuartos hasta quizás para el siguiente semestre. Si no le gusta puede rentar una habitación afuera del campus y pagarlo de su bolsillo ya que sus becas no cubren cuartos afuera del territorio universitario."

"Criminal tiene que haber otra manera que tenga otro cuarto!" Exigió Helga poniendo sus manos con fuerza sobre el escritorio.

"Tranquilizase Señorita Pataki. Llené una solicitud y si acaso ay un cuarto disponible le notificaremos. No ay más que yo pueda hacer por usted."

El joven miraba las mejillas rojas de Helga por el coraje. "Yo puedo aguantar estar con una chica durante el año." Respondió el joven muy seguro.

Helga agarró la solicitud sobre el escritorio y se salió de la oficina. El joven se apresuró para alcanzarla.

"Cuál es el problema güerita?" Preguntó el joven.

"En serio...no ves el problema!?" Reclamo Helga sin parar de caminar.

"La verdad no. ¿A que le temes?"

"Yo quiero mi privacidad y comodidad!"

"Podemos acomodarnos...yo puedo hacer un sacrificio." Sugirió el joven.

Helga suspiro en desesperación rodando su vista en fastidio. "No me digas, que sacrificio el tuyo."

"Eres graciosa." Dijo el joven riéndose. "Soy Elizer Verdugo." El muchacho se detuvo enfrente de ella, deteniéndole el paso.

Helga miró al chico con la mano extendida. "Soy Helga, y no saludo de mano."

"Yo tampoco, pero...en este caso, hare una excepción."

Helga lo ignoro y siguió caminando.

"A dónde vas tan rápido?" Pregunto Elizer.

"A mi cuarto." Contesto Helga apresurada.

"Te refieres a....nues-tro cuarto." Añadió el joven con una mirada picara.

"Ya cállate por favor me tienes fastidiada...desde que te metiste en mi camino me encabronaste. ¿¡Que no te puedes ir tú a otro lado afuera del campus!?" Comento Helga.

"Déjame lo pienso..........hmmmm...no." Contestó el muchacho.

"Criminal!" Se exalto Helga frustrada.

"Porque dices criminal?" Pregunto Elizer.

"Porqué.....eres un tipo que no necesito este año!" Exclamó Helga molesta mientras seguía caminando.

"Ni siquiera me conoces. Creo que empezamos mal..." Elizer se detuvo enfrente de ella de nuevo. "......déjame te invito a cenar. Debes de tener hambre."

Helga cruzo los brazos. "Que te crees que soy! ¡Te metes en mi fila y después de aguantar en ver tu pinché nuca por media hora piensas que muy campante aceptaré en cenar contigo!! ¡Quién piensas que soy, una chava muerta de hambre cualquiera...pues no! ¡Y esto no se quedará así Elizer! Cuando tenga la primera oportunidad conseguiré otro dormitorio. Hasta entonces, ni me hables, ¡¡Ni voltees a verme!!" Helga siguió caminado dejando al joven atrás.

Elizer se quedó congelado en la banqueta.
"Que carácter, me recuerda a mí. Pero dijo mi nombre. Me pudo haber dicho cualquier otra cosa, pero, no. Quizás, aparente ser dura por afuera pero....." Elizer sonrió mientras pensaba.

Helga llego a la habitación, sacó un cambio de su maleta y se metió al baño para cambiarse a unos pantalones flojos de tela. Acomodó sus maletas a lado de su cama y puso sus cobijas sobre el colchón de abajo y se acostó con la aplicación que ella había llenado de su cuarto. Estando acostada ella miraba detalladamente la forma.

No puede ser....veo el error que hice cuando llene la aplicación, marqué no a preferencias de compañero de cuarto. Que pendeja fui. Pensaba Helga.

La habitación era amplia, tenía camas gemelas, una arriba de la otra con una escalera para subir a la cama de arriba. El cuarto tenía un escritorio grande, un sofá y un baño. En la esquina del dormitorio había una televisión pequeña vieja.

"Solo esto me faltaba, tener que verle la cara a un estúpido iniciando el año." Se quejaba Helga acostada en la cama.

De pronto sonó su celular. Helga contesto.

"Bueno."

"Helga como está todo, te mande un texto y no me lo contestas." Comento Arnold.

Helga puso sus manos sobre su rostro. "Diablos! Perdón no me di cuenta de que me habías testeado cabeza de balón."

"Todo está bien?" Preguntó Arnold.

El joven Elizer entró a la habitación diciendo. "Ya veo que escogiste la cama de abajo."

"Que fue eso?" Preguntó Arnold por el celular.

Helga se levantó de la cama y camino al pasillo de afuera. "No fue nada....tenía, la, televisión prendida." Comentó Helga inquieta.

"Cómo te fue durante en camino? Estaba esperando que me enviaras un mensaje por lo menos, pero.....pensé qué tal vez estabas hablando con tu papá y....no quería interrumpir tu momento de platica con él."

Helga miraba al rededor y observaba a varios estudiantes metiendo cosas en sus cuartos.

"Dame un segundo cabeza de balón....es que, estoy en una área incómoda para hablar."

"Ya te dieron tu cuarto?" Preguntó Arnold.

"Uhg......" Helga encontró una pequeña sala al final del pasillo de los dormitorios y se sentó ahí para platicar. "Cielos este día fue una de los días más irritantes de mi vida o tal vez fue el peor, ya no se que pensar."

"Que pasó Helga?"

"Durante todo el camino y literalmente todas cinco horas. Mi papá no paraba de recordarme porque debo de estudiar y poner toda mi atención en mis estudios. A veces creo que Bob se quedó traumado con la decepción de Olga. Más aparte...me dijo que no podía....."

Arnold se quedó esperando a que Helga terminara de decir la palabra.
"Que no podías que Helga?"

"Queee....no podía..........tener amistades."

"¿Pero si te dejo tener amigos en la prepa, porque sería la universidad diferente?"

"No se cabeza de balón...Te digo que Bob se quedó mal de la cabeza con el fracasó de Olga." Helga soltó un respiro relajándose sobre el sofá. "Pero...dime sobre tú, día Romeo."

"Helga...le comentaste a tu papá sobre nosotros?"

Los ojos de Helga se abrieron pensando que contestarle. "Este, Uhg....con tanta platica sobre la universidad y lo que él espera de mí, creo que no....mmm...."

"No me digas que no le dijiste nada!"

"Si le dije Arnoldo!"

"Entonces que le dijiste?" Preguntó Arnold.

"Porque te importa tanto cabeza de balón! Realmente importa que Bob sepa sobre nosotros."

"Claro que si Helga. Tú sabes que te amo y....quiero que tus papás sepan de nuestra relación. Yo no quiero estarme escondiendo de ellos para verte."

"Comoquiera no podemos vernos." Añadió Helga.

"Pero qué tal cuando te vengas un fin de semana o, durante la cena de gracias que descansaremos unos días sin escuela, podríamos vernos o quizás yo compartir la cena de gracias con tu familia........."

La respiración de Helga se empezó a agitar solo en escuchar todo lo que Arnold decía de un sueño que no se cumpliría. Ella sabía más que bien, que Bob nunca aceptaría a Arnold y en tal solo exponer a su amado al león agresivo de la familia, la angustiaba. Helga seguía escuchando la voz animada de su Arnold sin poder comunicarse con él de lo que ella más temía.

"Arnold....casi no tengo batería, necesito cargar mi celular y....no encuentro mí, cargador...después te marco."

"Está bien amor, báñate, descansa y ya en la noche platicaremos. Yo sé que te sientes nerviosa de estar haya pero....ya verás que después de unos días, ya te sentirás mejor. Te amo Helga."

Los ojos de Helga se humedecieron de escuchar la voz suave pasiva de Arnold decir, te amo, sabiendo que estaba a una distancia muy lejos de él.

Helga se limpió sus lágrimas sin querer demostrar que ella lloraba y suspiro agarrando fuerzas para contestarle. "Yo también te amo Arnold. Después hablamos, adiós."

Helga colgó la llamada antes que su voz se empezara a quebrantar del sentimiento. Lo último que ella quería era que Arnold se preocupará por sus problemas.

Helga regreso a su habitación mirándose triste. Cerró la puerta atrás de ella y empezó a desempacar su ropa para acomodarla en los cajones. El cuarto tenía una cajonera grande con cinco cajones y un pequeño ropero para colgar la ropa. Helga abrió los cajones para ver cuántos quedaban vacíos con la sorpresa que Elizer ya había ocupado cuatro cajones.

"Maldición!" Exclamó Helga. "Hey tú!" Le gritó ella a Elizer que estaba acostado en su cama de arriba. "Elizer te estoy hablando!" El joven ni volteaba a verla. "ELIZER!" Le volvió a gritar Helga y nada. "Criminal que se cree ese estupido!!"

Helga miró un zapato de él y se lo aventó en la cara a Elizer que estaba acostado con los ojos cerrados.

Elizer abrió los ojos y se levantó molesto. "Que diablos tienes!?" Preguntó él.

"Te estaba llamando inútil." Le dijo Helga con sus manos en la cintura.

Elizer se bajó de las escaleras y camino a donde estaba Helga parándose muy cercas del rostro de ella. "Miras estos......se llaman audífonos tonta!"

"'No me digas tonta!" Exclamó Helga levantando su voz.

"No me digas inútil!" Se lo regreso Elizer.

"Para que tomas todos los cajones!" Exigió Helga.

"Porque yo fui el primero en tomar este cuarto." Elizer se volteó para dirigirse a su cama.

"Hey no te puedes ir todavía!" Helga lo jalo de la camiseta para detenerlo.

Elizer se volteó. "Si tanto quieres mi camiseta solamente quítamela güerita. Que más quieres ver?"

"Para de decirme güerita!" Gritó Helga

"Pues para de fastidiarme!" Le dijo Elizer.

"¡Tú eres el que se metió en mi fila, me robó mi primer lugar y tomó todos los cajones! ¡Ahora quita tu ropa!"

"Todavía estás lastimada por eso! Shish...que no tienes un novio con quien discutir!"

"Saca tu ropa de los cajones!"

"No lo aré güera." Respondió Elizer cruzando sus brazos enfrente de ella.

"Criminal! ¡Esta bien...sacare tus mendigos trapos viejos de los cajones extras que agarraste!" Helga abrió los cajones y empezó a sacar la ropa.

"Déjame mis cosas!" Le exigió Elizer arrebatando la ropa de las manos de Helga.

"Entonces....saca, tu ropa de mis cajones!" Dijo Helga forcejeando con él.

"Deja mis cosas Helga! ¡No puedes conmigo!" Le dijo el joven agarrando las manos de Helga para que soltara su ropa.

El joven volteó a ver la maleta de Helga y la saco de abajo de la cama para abrirla.

"No te atrevas a sacar mis cosas!" Dijo Helga soltando la ropa de él.

Elizer sacó el osito que le había regalado Arnold y extendió su brazo hacia arriba para que Helga no lo pudiera alcanzar.

"Dejas mis cosas en el cajón o yo destruyó tu oso. ¡Escoge!"

Helga bajo la mirada en derrota y acomodó las cosas de Elizer en los cajones. "Así me gusta güerita. Hasta te ves más bella con tu carita triste."

"Dame mi oso." Le exigió Helga.

"La próxima vez que agarres mis cosas agarrare tu oso y no lo volverás a ver!"

Helga decidió en morderse el labio en vez de decir algo contra él. Lo último que ella quería era su osito dañado.

Elizer aventó el oso en la cama de Helga y se subió a su cama de arriba para seguir escuchando música.

Helga agarró el osito y lo abrazó oliendo el perfume de Arnold. Que más me puede pasar en este colegio maldito. Pensaba Helga sentada en su cama con el osito de consuelo en sus brazos.

Más tarde en el edificio de huéspedes Arnold estaba en su recámara con Gerald y Harold mirando una película de horror.

"Como se quedó Pataki en su uni nueva?" Preguntó Gerald.

"No sé todavía Gerald pero parece que Helga está, batallando."

"Que no hablaste con ella hoy?"

"Si pero....no pudimos platicar mucho y...la sentí, nerviosa."

"Me imagino. Pero ella quería estar en esa universidad desde un principio no."

"Si, pero no bajo estas circunstancias."

"Así pasa hermano. La vida cambia y un día crees que las cosas siempre serán de una cierta manera y después de un tiempo todo cambio."

"El amor que tenemos nunca cambiará." Añadió Arnold.

Gerald se quedó callado mirando la película.

"Patty también está estudiando en otra universidad." Comento Harold.

"Que tan lejos esta?" Preguntó Arnold

"A una hora. Es un colegio de mujeres."

"Por lo menos sabrás que nadie te la robará......oops. Perdón viejo." Dijo Gerald mirando el rostro serio de Arnold.

"Está bien Gerald. Yo tengo plena confianza en mi Helga."

"Si, pero ya sabes cómo son algunos perros."

"Gerald está platica no me ayuda."

"Lo siento viejo."

"A qué universidad se fue Helga?" Preguntó Harold.

"Alcalá Universidad." Respondió Arnold.

"Está en L.A?" Preguntó Harold.

"La conoces?" Preguntó Arnold.

"Es una universidad muy exclusiva, únicamente la gente con dinero entra, o los que tienen calificaciones altas. Mi primo está en esa universidad, ya lleva un año ahí."

"Y cómo te ha dicho que está?" Comento Arnold.

"El campus está inmenso Arnold, nada que ver con las universidades de aquí.

"Tú has estado ahí?"

"No...pero me comunicó con mi primo por Instagram y a cada rato baja fotos del campus. Que no tienes cuenta de Instagram."

"Tengo una página de Facebook que no utilizo."

"Arnold nunca fue social del internet. " Añadió Gerald.

"Creo que yo soy de otra generación Gerald." Dijo Arnold.

"Estas bromeando?"

"Habló por el lado mental." Respondió Arnold sereno.

Gerald y Harold se quedaron viendo entre ellos y se rieron. "Ja Ja Ja....No será que en realidad eres un hombre en sus treintas disfrazado de joven. Enserio viejo, en ocasiones eres demasiado aburrido."

Arnold se carcajeó del comentario con su mano atrás de su cuello. "Quizás."

Lejos de la casa de huéspedes en una traílla pequeña, Laila conversaba por el celular con su mejor amiga encerrada en su habitación.

"Te dije que Helga se estaba metiendo con Arnold y no me creíste!" Le comentó la joven a Laila por el celular.

"Yo nunca pensé que Arnold me fuera a engañar con esa traidora de Helga." Dijo Laila enfurecida. "Si no hubiera sido porqué miraste el auto de Arnold afuera de su casa, yo nunca me lo hubiera imaginado Jessica."

"Te dije que lo iba a estar checando...ya vez que los chavos más buenos por lo que aparentan en ser, nunca son honestos." Afirmó Jessica. "Y ahora que arras sobre Arnold? ¿Lo dejarás estar con Helga?"

"Con esa puta nunca!" Respondió Laila. "¡Si Arnold no quiere estar conmigo, no dejare que sea feliz!"

"Sabes si aquella perra irá a la misma universidad que ustedes?"

"No lo creo Jessica, parece que ella tenía en mente en ir a otra universidad, como quiera averiguaré. ¡Esto no se quedará así! ¡Si Arnold no es mío, tampoco será de ella! ¡Yo buscaré la manera en que se arrepienta de haberse metido en mi relación con mi osito!"

"Que tienes en mente?" Preguntó Jessica.

"Todavía no se....buscaré una oportunidad, y la aprovecharé." Comentó Laila con una sonrisa malévola en su rostro.

"Y qué pasó con Arnie siempre?"

"Le dije que no podía seguir viéndolo. En realidad, me canse que me siguiera comparando con Helga."

El papá de Laila toco la puerta de su recámara.

"Si." Gritó Laila estando acostada en su cama con el celular en su mano.

"Ya rezaste el rosario hija?" Preguntó el señor atrás de la puerta.

"Si papi...ya pedí por los pecados del mundo!" Dijo Laila.

"Que bien hija. Buenas noches, que sueñes con los angelitos."

"Lo haré papi, te amo."

El papá de Laila se fue a acostar. Sin saber que su hija seguía despierta hablando con su amiga.

En el cuarto del campus, Helga acomodó su ropa en el cajón que sobraba y acomodó algunas cosas en el ropero que estaba vacío.  El joven Elizer se había salido del cuarto y Helga aprovechó el momento para relajarse y marcarle a Phoebe.

"Helga cómo estás?" Preguntó Phoebe.

El escuchar la voz de su mejor amiga le daba una sensación de hogar a Helga.

"Cielos Phoebe que bien es en escucharte hablar."

"Enserio Helga. Tú nunca me habías dicho eso antes."

"Yo se pero ahora todo es diferente. Nunca pensé que extrañaría tanto mi cuarto, mi privacidad y....mi mejor amiga."

"Entonces realmente extrañas tú hogar?"

"Si Phoebe desesperadamente. Me tocó un compañero de cuarto que me tiene harta."

"Compañero?"

"Así es Phoebe, llené mi aplicación mal y no le marqué preferencia de compañero de cuarto y ahora estoy atorada con un chavo."

"Por todos los cielos Helga! ¿¡Has intentado en agarrar otro cuarto!?"

"Claro que lo hice y no tengo alternativa más que compartir mi habitación con ese bruto de Elizer."

"Y como es él!?" Preguntó Phoebe.

"Es un pendejo incompetente que se cree muy astuto. ¡Si mi papá hubiera pagado mi habitación de su bolsillo yo no hubiera tenido un acompañante de cuarto y no tuviera este problema, pero noooooo......todo su dinero se lo gasto en Olga y su educación! ¡Para que! ¡Para que se fuera Olga con aquel guey! Grrrrr.... siento que voy a explotar del cólera!"

"Y ya sabe Arnold?" Preguntó Phoebe.

"Claro que no sabe Phoebe! Imagínate si Arnold supiera que tengo a un hombre como compañero de cuarto. Se volvería loco del coraje, y para que lo hago pasar corajes si no puedo hacer nada para cambiar mi situación."

"Pero como quiera es bueno que sepa Helga. ¿¡Que pasará cuando se entere que le escondiste eso!? No es como si se lo puedas esconder por semanas o meses."

"Tal vez si pueda Phoebe. Si le escondí mi amor pasional por años que no pueda esconder esto."

"No se Helga, consideró que es mejor que Arnold...."

"No lo digas Phoebe. Esto se queda entre nosotras nada más."

"Claro Helga."

Después que Helga termino de hablar con Phoebe se metió a bañar aprovechando que estaba sola en el cuarto.

Esa misma noche millas lejos de ahí Arnold se acostó en su cama pensando en cómo estaba descansando Helga en su nueva habitación.

-Helga ya podemos hablar? -

Arnold le envió un texto a Helga.

-Si. Pero por texto, no quiero despertar a mi compañera de cuarto. -

-Cómo está todo. ¿Ya te sientes mejor? -

Helga cerró sus ojos con el celular en su mano pensando en su largo desagradable día.

-Creo que si -

-Que bueno me tenías preocupado-

-No tienes por qué preocuparte por mí, estoy bien -

-Que bueno ya me siento más tranquilo. ¿Cómo es tu cuarto del colegio? -

-Amplio con un escrito grande y dos camas-

-Y tu nueva compañera de cuarto, te calló bien?.

-Más o menos....ya me conoces a mí, soy muy especial con las personas.-

-Ya se encanto.-
-Te extraño Helga, sigo pensando en la última noche que nos vimos en tu cuarto 😊-

-Sobre cuál parte sigues pensando 😏? -

-En....todo 🤗❤️-
-Tienes tu osito contigo? -

-Por supuesto, no me iría sin él. -

-A qué hora te levantarás mañana?-

-Temprano, tengo que estar en mi clase para las siete de la mañana 😣-

-Desayuna en la mañana Helga, no quiero que te mal pases-

-No lo haré-

-Que cenaste? -

-Necesitas saber Arnold. -

-Si-

Helga pensaba en cómo no había cenado del coraje que sentía.

-Cenaste Helga?

-Si cene una ensalada de pollo-

-En dónde? -

-Tienes que saberlo todo Arnoldo 😠-

-Amor en donde cenaste? -

-En una cafetería aquí en el campus-

-Y todo estuvo bien, nadie te molesto?

-No Arnoldo, a nadie le importe-
-Contento? 🤨-

-En realidad, no, porque no estás conmigo pero que bueno que nadie te molesto. -

-Y tú me dirás cuando alguien te moleste? -

-Nadie me molestará Helga-

-Yo no se eso cabeza de balón-

-No te preocupes por eso Amorcito-

Si claro. Pensó Helga.

-Quiero que me llames mañana amor. Aunque me gustaría seguir comunicándome contigo ya es noche y prefiero que descanses. -

Helga se apretaba los dientes queriendo decirle a Arnold toda la verdad.

-Arnold? -

-Si mi vida -

Helga suspiraba con el celular en la mano recordando todo lo que le había sucedido ese largo desagradable día.

~ESPERO EN NO ENTERARME QUE ANDAS CON UN JODIDO MUERTO DE HAMBRE!~
~.......no termines desperdiciando tu educación como le pasó a Olga al final!!~
~Perdón Señorita Pataki, pero no tendremos más cuartos hasta quizás para el siguiente semestre.~
~La próxima vez que agarres mis cosas agarrare tu oso y no lo volverás a ver!~

Arnold le envió otro texto.
-Que necesitas amor? -

-Tú compañía Arnold-
-Te necesito conmigo abrazándome -

Helga cerró sus ojos dejando que las lágrimas rodaran por sus mejillas.

Arnold miró el mensaje y presintió un escalofrío en su corazón.

-Helga déjame marcarte, necesito escucharte. -

-No-
-Mejor descansa mi Arnold-
-Ya mañana será otro día-

-Estás segura, Helga solamente llámame amor-

-Mañana hablaremos Romeo-
-Buenas noches-

Arnold soltó un fuerte respiro leyendo el mensaje de Helga.

Será que me esconde algo?...Pensaba Arnold.

-Buenas noches, mi princesa-

Al siguiente día Helga se despertó extra temprano para poder salir del cuarto antes que Elizer se despertara. Se encaminó a una cafetería adentro del campus y se sentó a comer. A los minutos se le acercó una joven.

"Hey...está alguien contigo?" Preguntó la joven estudiante.

"No."

"Me puedo sentar?"

"Claro." Respondió Helga

La joven miraba lo sería que estaba Helga tomando chocolate caliente con un pan dulce.

"Es tu primer año aquí?" Preguntó la joven.

"Se nota." Respondió Helga.

La joven sonrió. "Yo ando igual que tú por eso pregunto. Mi nombre es Yalali."

"Helga." Respondió ella sin ganas.

"Que clases tienes?"

"Puras básicas aburridas." Comento Helga.

"Puedo ver tu lista de clases?"

Helga sacó la lista del bolsillo y se la dio a ella.

"Tenemos tres clases juntas." Comento Yalali con entusiasmo.

"Que emoción." Respondió Helga sería sin mostrar sentimiento alguno.

"Deberíamos de caminar conjuntas. Así podemos acompañarnos y no mirarnos como solitarias trastornadas por el campus." Sugirió Yalali.

Helga sonrió. "Tienes un cuarto en el campus?"

"No, me estoy quedando con una amiga en su apartamento."

"Enserio." Helga se animó del comentario. "Tienen espacio para una chava más?"

"No, el apartamento es pequeño y está ella y su novio ahí. ¿Porque lo dices?"

Helga se recargo hacia atrás desanimada. "Fui una pendeja y llené mi aplicación de cuarto mal y ahora tengo a un compañero para compartir mi cuarto de campus."

"No jodas en serio! Que mala suerte por ti...o, tal vez buena suerte. ¿Cómo está el chavo?"

"Como de que cómo está?" Preguntó Helga confundida.

"Esta guapo, feo, alto, chaparrito...cuenta."

Helga levantó su ceja recordándolo. "Él es...alto....pelo.....bueno que diablos importa cómo está!?"

"Claro que importa Helga. Si el chavo es parecido no está del todo mal que lo tengas como roomie."

"Roomie?" Helga levantó su ceja confundida.

"Si quiere decir compañero de cuarto en inglés."

"No sabría decirte, yo no tome inglés en prepa."

"¡Tengo que conocerlo, ya me dejaste con la tentación de saber quien es!" Exclamó Yalali intrigada. "Como se llama?"

"Elizer Vergudo." Respondió Helga .

Yalali se le quedó viendo con sus ojos grandes. "Ya se lo viste!?" Preguntó ella tapándose su boca.

"No!" Contestó Helga con sus mejillas rojas. "Quise decir Verdugo! ¡Se llama Elizer Verdugo!"

Yalali se arrancó riéndose. "Por un momento me daba un ataque de pánico amiga." Dijo ella con risa.

Helga respiro profundamente intentando en no reír. "No es chistoso Yalali."

"Claro que lo es!" Respondió la joven con el café en su mano.

"Oye me caes bien, deberíamos de ser amigas. Aparte no conoces a nadie aquí igual que yo.."

"De dónde eres?" Preguntó Helga.

"De Hillwood." Dijo Yalali.

Helga se sorprendió de la respuesta. "Yo también soy de ahí. ¿Manejaste con tu carro paraca?"

"Si."

"Y regresarás pronto para Hillwood en estos días?"

"¿Todavía no se, porque lo dices?"

"Para irme contigo de raite. No tengo coche y estaba pensando en tomar el autobús para visitar a mi...." Helga suspiro con el recuerdo de su amado. ".....a mi novio."

"Tienes novio! ¿No me digas...y ya sabe que tienes un compañero de cuarto?"

"No sabe."

"No le dirás verdad."

"Claro que no." Respondió Helga pensativa.

"Que duro debe de ser para ti en tener que esconderle eso a tu pareja."

"Si...pero únicamente estaré en esta universidad por este semestre. Así que se lo esconderé por estos cuatro meses...no creo que sea difícil."

"Te irás a un colegio en Hillwood?"

"Si, mi novio y yo tenemos planeado en ir a la misma universidad."

"Y cuál universidad es?" Preguntó Yalali.

"Universidad siete."

"Pues suerte en eso. Te vez como una chava tranquila no creo que tengas problemas con tu compañero de cuarto."

Helga movió su cabeza a los lados. "Ni me recuerdes."

"Porque...qué pasó?" Preguntó Yalali.

"Ya tuve un pleito con mi roomie como tu le llamas."

"Hablas en serio, tan pronto. ¿Tienes que decirme cómo pasó?" Insistió Yalali.

Helga miró su celular y observo la hora.
"Es mejor que nos vallamos a clase. Más vale que lleguemos temprano." Comento Helga

Yalali agarró su maletín de tirantes y Helga su mochila y se salieron de la cafetería.

La clase era inmensa con un escritorio largo de madera que recorría para los ciento veinte estudiantes. El salón tenía siete hileras de sillas y escritorios. Con el escritorio del profesor en el centro del salón.

"Criminal! La clase es más grande de lo que pensé." Comento Helga.

Las chicas se sentaron en medio de la clase para tener mejor acceso al pisaron sin que tengan que estar enfrente del profesor. De pronto Helga miró a Elizer sentado a unos escritos lejos de ella.

"Maldición tiene que estar aquí?" Comentó Helga poniendo su mano sobre su rostro para que él no alcanzara a mirar.

"Sobre quién hablas?" Preguntó Yalali.

"Elizer...está sentado en aquel lado." Comento Helga en voz baja.

"Quien?" Volvió a preguntar Yalali.

"El chavo de playera negra con la camiseta azul abierta."

Yalali se volteó a la dirección en donde estaba Elizer. "Que pinche suertuda eres Helga."

"Loca, suertuda de dónde?"

"Esta muñecón el chavo."
Comentó Yalali. "Tienes que introducirme"

"Jamás! Lo que no quiero es tener comunicación con él."

"Yo no veo como si están viviendo juntos."

"Cállate Yalali!"

"El chavo es un galán Helga y tú no lo quieres ver." Añadió Yalali sonriendo.

"Como sea para mi...él es un bruto. Espero que no se de cuenta que tenemos esta clase juntos."

La clase inició, el profesor anunció su presentación y ordenó que todos los estudiantes sacaran sus libros de materia. De pronto algo captó la atención del profesor, dirigiendo su mirada hacia la fila en donde estaba una joven rubia con camiseta roja de rayas puesta y luciendo una gorra azul.

"Señoría!" Exclamó el profesor. "Usted la de camiseta roja y gorra azul!"

Helga levantó su rostro con la atención de todos los estudiantes mirándola.

"Uhg...si maestro."

"Dígame Profesor." Añadió el señor.

"Disculpe. Profesor." Se corrigió Helga apenada.

"Cuál es su nombre señorita?"

Todos los estudiantes la miraban incluyendo Elizer.

"Soy...Helga."

"Helga, ¿cuál es su apellido?"

"Helga Pataki." Finalmente dijo Helga su nombre completo con la tensión de tener toda la clase mirándola.

"Helga Pataki, leyó la póliza de la universidad antes de venir a mi clase?"

"Creo que....no." Comento Helga.

"No se permite las gorras en las clases."

Helga se quitó la cachucha de Arnold y la guardo en su mochila. "Criminal solo esto me faltaba!"

"Como dijo Señorita Pataki?" Dijo el profesor.

"Nada profesor. No volverá a pasar." Contesto Helga abrevada por el incómodo momento enfrente de toda la clase.

"Espero que no o para la próxima la sacaré de mi salón."

El profesor continuó con la clase dejando a Helga con su rostro rojo del coraje. Su compañera de clase notó algo.

"Adivina quien te está viendo?" Murmuro Yalali.

"No quiero saber." Susurró Helga.

"Elizer no para de verte. A mi se me hace que le agradas."

"No lo creo y no me interesa." Respondió Helga con su pluma en mano apuntando las notas del maestro.

Más tarde en Hillwood afuera de la Universidad Metro, Arnold se apuntaba para un registro de grupo de arqueología. Una joven se acercó a la mesa de registro buscando una pluma para llenar la solicitud.

"Perdón tienes una pluma extra?" Le Preguntó a Arnold.

"Si." Arnold busco en su mochila y sacó una pluma."

"No sabía que tuvieran este grupo aquí." Comentó la joven.

"Tampoco yo...pero me atrae el tema de la arqueología." Dijo Arnold.

La joven llenó la forma y la entregó a la encargada.

"Para cuando serán las juntas?" Preguntó la joven rubia.

"Les mandaremos un mensaje al celular para cuando tengamos las fechas exactas.  Gracias por inscribirse."  Dijo la encargada del grupo.

Arnold entregó su solicitud de inscripción a la encargada y se alejó de la mesa.

"Espera!" Gritó la joven rubia. "Tengo tu pluma."

Arnold se volteó "Oh si, ya se me había olvidado."

"Soy Karol, como te llamas?"

"Arnold." Respondió agarrando la pluma y guardándola en su mochila.

"Parece que estaremos en el mismo grupo juntos." Comento Karol pasando su mano por su pelo largo.

"Así parece." Dijo Arnold con una sonrisa. "Bueno...fue un placer en conocerte."

"Arnold Espera!" Exclamó Karol "Vas a comer lonche?"

"Si."

"Puedo ir contigo. Es que...no conozco esta área y no se que ay bueno por aquí."

"Lo siento Karol pero...iré a comer a mi casa."

"Oh bueno...quizás después entonces." Dijo Karol sacando un papel chico para dárselo a Arnold.

"Y esto?" Preguntó Arnold viendo el papel doblado.

"Es mi celular. Ya que estaremos en el mismo grupo estaremos conviviendo en eventos y juntas."

"Gracias Karol, pero....no puedo aceptar tu número." Arnold le regreso el papel y se alejó caminando sin saber, que alguien lo observaba de lejos.

En la Universidad de Helga después de clases. Elizer platicaba con unos compañeros.

"Entonces en donde nos vamos a juntar." Comento uno de ellos.

"Que tal con Elizer?" Sugirió otro.

"Nah..no puedo hacer nada en mi cuarto." Dijo Elizer.

"Porque no?" Preguntó su amigo.

"Solamente no y ya." Respondió Elizer serio.

"Quien es tu compañero de cuarto?" Le preguntaron.

"Alguien bien delicado. Prefiero no hablar sobre eso." Comentó Elizer.

A los minutos de la platica Helga y Yalali pasaron caminando cercas de ahí, los jóvenes notaron como Elizer se distrajo de la plática con la mirada puesta en ella. Los amigos se burlaron de la cara de distraído que puso él.

"Ja Ja Ja Ja ....oye Elizer tan rápido ya andas cazando."

"Para nada Leo." Respondió Esequiel regresando a la plática.

Todos los chavos voltearon a ver a la rubia de cachucha azul.

"La chava está guapa la conoces?" Preguntó Leo.

"Si y.....no." Contestó Elizer metiendo sus manos en sus bolsillos.

"Preséntala guey....oh la quieres toda para ti?" Dijo su amigo.

"Miren en realidad....no la conozco."

Un chavo le hizo una señal al otro de lo ido que se miraba Elizer.

"Hey....apuesto $100 baros que para antes que el semestre se acabe me echaré aquella rubia de gorro." Anuncio Leo.

"Yo apuesto $100 contra eso guey." Dijo el otro.

"Esta bien, entonces apuesto $300 que me la chingo." Insistió Leo.

Los chavos se rieron de Leo. "Estas jodido bato." Dijo otro.

"Hablo en serio....las chicas siempre terminan en mi verga y aquella güera no tiene nada de especial. "

"Yo apuesto $500 que ella estará conmigo primero." Añadió Elizer.

"Hablas en serio cabron." Dijo Leo.

"Si." Respondió Elizer.

"Pero tú dices que la conoces.?"

"Y eso que Leo, le sacas porque crees llevo la delantera...o sabes que puedo pescar a una chava mas rápido que tú guey."

"Esta bien, aceptó el reto. $500 baros que la rubia terminara en mi cama primero." Dijo Leo.

"En ese caso yo estoy con Leo, entró en la apuesta." Dijo uno de ellos.

"Yo digo que Elizer se la jodera mas rápido." Agregó el otro joven.

"Hecho." Respondió Elizer. "Haber si no te arrepientes de tu apuesta."

"Yo diría lo mismo carnal." Respondió Leo.

Notas de autor:
Helga está en nuevo territorio, con muchas personas nuevas a su alrededor.
Ya miramos a los dos personajes que les comente en mi video y a unos cuantos más.

Que opinan de Elizer?
Qué tal Yalali?

También miramos un poco de Laila y su mejor amiga.
Este capítulo tuvo mucho por explorar y se puede ver que Helga está batallando para estabilizarse con su nuevo roomie como dijo Yalali y para decirle a Arnold sobre lo que esta sucediendo. Más aparte los compañeros de Elizer no tienen buenas intenciones para Helga.

Esta historia no perderá lo candente ni lo aventurero se los aseguro. 😏☺️☺️

Este capítulo fue un reto para mi....es la primera vez que pongo varios nuevos personajes en un mundo completamente nuevo. Pero salió. 😅

Hasta la próxima y a ver como les pareció este nuevo interesante capítulo.