Karol POV

En un viernes por la mañana caminaba por los pasillos de la universidad imaginándome que todo el mundo sabía lo más oscuro de mí. Sentía los ojos de las personas siguiéndome con cada paso que daba, tal vez era mi imaginación por la sucia conciencia que tenía en mi interior. Todavía podía escuchar la voz de Laila diciéndole a Jessica.

"Esa tonta de Karol no sabe el lio en que se a metido. A mí nunca me intereso en ser su amiga. Karol fue la persona correcta para cumplir mi venganza contra Arnold y Helga. Ese fue el propósito de ella."

Sus palabras fueron claras y venenosas, podía escuchar el eco de su voz en mi mente repitiéndose constantemente.

"Karol fue la persona correcta para cumplir mi venganza."

No sé de qué venganza habla. No tengo idea que mal habrá hecho Arnold para que alguien se refiera a él de esa manera. Laila me utilizo, yo pensé que ella quería ser mi amiga, y me imagine que Arnold me quería. Que torpe fui, me deje engañar de la peor manera pero esta vez no fue un hombre, sino por una mujer.

Quizás ese es mi destino, en ser burlada y utilizada por siempre. Corrí hacia el baño de la universidad para huir de tantos ojos que no paraban de culparme. Me miraba en el espejo como la vergüenza más grande de todo el mundo. Yo Karol Taitha, había sido una decepción, una desgracia en mi vida que no tenía futuro, no que yo me lo pudiera imaginar.

Salí del baño para dirigirme a mi clase de biología, cuando capte la imagen de Arnold a unos pies de distancia, el estaba solo por lo que me extrañó. Habían muchos estudiantes caminando enfrente de mí, pude notar que él se asombro en verme y camino directamente hacia mi dirección. Pero yo no podía hablar con él, no en ese momento. Ahora que su novia estaba en la misma universidad que él, y después de todo lo que sucedió entre él y yo, y de lo que me entere de Laila, ya todo era diferente. No sabía qué hacer, si debería de hablar con él y decirle toda la verdad, o simplemente ignorarlo y con el tiempo convencerme a mi misma que nada de esto paso. Pero ya era demasiado tarde, ya le había declarado a Arnold que yo quería hablar con él, y es claro por su mirada que él estaba confundido. Yo únicamente quería que Arnold viera lo bueno en mi y ahora, seré su peor recuerdo.

Me aleje lo más rápido que pude para esconderme en un salón. La profesora estaba sentada en su escritorio, y volteo a ver una chica tímida escondiéndose atrás de su puerta, y me pregunto desconcertada.

"Te puedo ayudar en algo?"

"No gracias estoy bien." Le contesté.

Con mi respiración agitada observé por la ventanilla de la puerta pasar a Arnold sin haber percatado en donde me encontraba escondida.

"Parece que tienes un gran problema." Me comentó la profesora.

El salón estaba solo, únicamente estaba ella en su escritorio ojeando unos papeles.

"Que importa si yo tuviera un problema, no hay nadie que me pueda ayudar." Le contesté tristemente.

"Quizás tienes razón." Me contestó la profesora. "Oh quizás, si hay alguien que te pueda ayudar, pero no lo sabrás amenos de que busques esa ayuda."

"Yo no quiero buscar ayuda. No la merezco." Le conteste volteándome para salirme del salón.

"Estás segura de eso jovencita? Todos buscamos ayuda en los momentos más difíciles de nuestras vidas, aunque nunca lo aceptemos o lo queramos ver." Me sonrió amablemente la profesora. "Tengo unos minutos si gustas sentarte."

Camine lentamente hacia ella y me senté en la silla de madera enfrente de su escritorio. Su cálida mirada me inspiraba confianza. "Me da vergüenza en hablar con usted."

"Que no te de jovencita. Todo de lo que hablemos será confidencial. Aparte, yo también fui una joven con muchos problemas, y se cómo se siente estar sola."

Respire con profundidad, intentando en soltar las palabras pesadas que apretaban mi pecho.

"Yo soy una falsa. Le mentí a un joven para que....se acostara conmigo en su cama, lo hice pensar que yo era su novia. El se encontraba intoxicado, y herido de sentimientos porque extrañaba a su novia, lo mire como él mejor momento para hacerlo." Pase saliva al final de las palabras, como si mis sucios verbos quemaran mi paladar. Mis lágrimas de culpabilidad mojaron mis mejillas, rodando por mi cuello hasta mi pecho.

"Tú lo planeaste sola?" Me pregunto la profesora.

"No." Le contesté. "Unas amigas me dijeron que me metiera en su cuarto y....que lo confundiera para que él estuviera conmigo."

"Porque lo hiciste?"

Cerré mis ojos apretándolos con fuerza para intentar en detener el llanto.

"Lo hice porque pensé que él me quería, y que quería estar conmigo, que merecía en estar conmigo no con una novia que lo engañara todo el tiempo. Bueno, eso es lo que yo pensaba."

"Porque piensas que su novia es mala?" Preguntó la profesora.

"Una chica que yo pensé que era mi amiga me dijo que la novia de él lo engañaba con otros hombres, pero que él, nunca quería aceptarlo como para cortar su relación con ella. Yo, únicamente quería liberarlo de ella para que estuviera conmigo. Pero ahora sé que la joven que yo pensé que era mi amiga me mintió sobre muchas cosas, incluyendo su amistad. Lo más seguro es que ella también mintió sobre la novia de él."

"Y estás arrepentida por tus acciones?"

"Si profesora lo estoy! Ya me entere que mis dos supuestas amigas me engañaron para que yo hiciera eso y...sé que ese joven no merecía lo que le hice."

"Habla con él y dile lo que hiciste mal. Te sentirás más tranquila cuando le expliques porque lo hiciste. El tiene que saber que estás arrepentida."

"Profesora, hay más por decirle."

"Dime. Que más sucedió?"

"Mis dos disque amigas agarraron mi celular sin mi permiso y guardaron los videos que yo le tomé al joven cuando él estaba.....arriba de mi. Y parece que esas dos chicas utilizarán el video para burlarse de él y...para romper la relación entre él y su novia.....por eso le digo que yo no merezco ayuda de nadie! No merezco compasión. Me deje guiar por otras personas y....por estar pensando en lo que yo quería... acepté en cometer el acto."

Lloraba desconsoladamente con mis manos sobre mi rostro sintiendo vergüenza por mi confesión, por mis acciones, y por mi persona.

"Veo que estas realmente arrepentida."

"No tiene idea." Le declare con mis manos sobre mi rostro en completa humillación.

"Aceptaste culpabilidad y estas arrepentida. Ese es el primer duro paso que ya tomaste y aceptaste. Segundo, tienes que hablar con el joven y decirle toda la verdad. Pero no hables con él por el teléfono o por mensajes, sino en persona. El tiene que ver tu ojos para sentir tu arrepentimiento y tu perdón."

"No creo que pueda hacerlo profesora, siento mucha pena, ni siquiera puedo mirarlo de enfrente, en tan solo verlo en el pasillo tuve que esconderme."

"Tienes que enfrentarlo y decirle la verdad para que tú te puedas sanar por dentro. Esta culpabilidad siempre la cargaras hasta que no puedas mirarlo de enfrente y confesarle todo lo que hiciste mal y cuáles son tus verdaderos sentimientos."

Yo me limpie las lágrimas con un pañuelo que me entrego la profesora y pensé un poco en sus palabras. "Y que pasaría si, después que yo le confieso la verdad él me grita diciéndome que ya no quiere saber nada de mí."

"Todo es posible, pero recuerda, tu le estas confesando la verdad para sanar tu corazón de toda culpabilidad, independientemente si él decida en perdonarte al final, o no."

"El no me perdonara." Le aclare.

"Si el joven es de un buen corazón lo hará, y tal vez vuelva a ser tu amigo algún día. Pero debes de saber que hay muchas personas haya afuera que se aprovechan de los buenos corazones de los demás, intentan en afectar la vida de otros porque ellos mismos se sienten infectados por dentro. No permitas que esas personas toquen tu corazón y que te cambien."

"Pero profesora ya lo hicieron! Me siento tan sucia."

"Entonces limpia tu cuerpo confesándole al joven la verdad y alejándote de esas víboras malas que solo buscan en hacer daño. Demuéstrales a ellas y a todos a tu alrededor que tu puedes sanarte y solamente tú puedes hacerlo. Hiciste un error como tantos jóvenes y adultos haya afuera cometen, ahora....levántate, y levanta tu rostro hacia la vida porque tú tienes un buen corazón, y con esta lección ya nadie jamás volverá a utilizarte de esa manera."

La profesora me enseño una luz hacia mi día de tinieblas y sin poder mas, me levante de la silla y le di un abrazo.

"Gracias profesora, yo no la tengo en ninguna de mis clases quizás en un fututo la tenga como profesora pero desde este día en adelante usted tiene mi respeto y cariño. Gracias por su tiempo."

"De nada jovencita, ahora respira profundamente y sal haya afuera que te espera toda tu vida por delante."

Agarre mis libros y me apresure hacia la puerta del salón, puse mi mano sobre la manilla y me acorde de algo.

"Profesora, disculpe. Cuál es su nombre?"

La profesora sonrió dulcemente "Soy la profesora Samantha P. y enseño ingles."

Le sonreí a la profesora una vez más y diciéndole adiós con mi mano, me salí de su salón.

La conversación que tuve con la profesora me dejo renovada, sintiéndome positiva sobre lo que iba a hacer. Ya nada podía detenerme, ese mismo día hablare con Arnold sobre lo que paso aquella noche y le diré toda la verdad.

Arnold POV
La primera semana de regreso en Hillwood pasó con rapidez. El único encuentro que Helga y yo tuvimos con Laila fue el lunes, y después de ese día yo procure en estar con Helga cada momento que tenía disponible, no le quería dar a Laila la oportunidad en que encontrara a Helga sola. Después de clases Helga tenia junta en el grupo de literatura. Para mí era perfecto porque de esa manera cuando yo salga de mi práctica de basketball podía encontrarme con ella y de ahí podíamos estar juntos para comer un helado o para llevarla a la casa de Phoebe.

Todos estos días fueron muy difíciles para mi, intentaba en comunicarme con Karol pero ella se daba la vuelta y huía de mi cada vez que me miraba. Pense que ella quería hablar con migo pero ahora parece que solamente me evita. Ahora que tengo mi celular conmigo le llame varias veces por la noche y no me contestó, le mande mensajes preguntándole porque no quería hablar conmigo y me ignoro.

Me sentía como que Karol ya no quería saber nada de mí. Me hubiera gustado que eso hubiera pasado antes que ella se metiera en mi recamara. Antes que ella grabara un video de mi que ahora estaba en las manos de Laila listo para utilizarlo de la peor manera. Todavía no podía comprender todo lo que me había sucedido con Karol. Sera que ella y yo realmente tuvimos relaciones? y si fue de esa manera, tal vez ella este...esperando un bebé?. Intentaba en no pensar en eso cada vez que estaba con Helga. Ella se me quedaba viendo buscando una respuesta en mi, buscando algo que yo no quería que ella viera.

Al mismo tiempo también yo miraba a Helga aislada de mi, quizás la miraba de esa manera por cómo me sentía. Un día después de escuela Helga y yo estábamos en mi recamara estudiando. Ella se miraba preciosa con su falda rosa pastel, su blusa blanca abajo de su suéter negro y sus botines marones que elevaba en el aire, mientras ella estaba boca abajo leyendo un libro sobre mi cama.

Los dos estábamos estudiando en mi recamara, y no podía concentrarme en mis estudios, quería acercarme a ella, abrazarla y resbalar mis manos por sus piernas. Solamente había paso unos días desde que hicimos el amor, pero en mi cuerpo lo sentía como una eternidad. Ya quería sentir de nuevo su dulce sabor de piel sobre mi boca, deseaba en llenarme de la suavidad de ella por toda mi piel. Sentía una tensión sensual inmensa en tan solo tenerla acostada sobre mi cama y yo...sin poder tocarla. En tan solo estar cercas de ella y besarla era un sacrificio para mí. Mi conciencia me mostraba una y otra vez esa imagen de Karol y yo acostados sobre esa misma cama. Podía ver a Karol en mi mente quitándome el relicario de Helga, mas no tenía memoria de nada más.

Por eso necesitaba hablar con Karol lo antes posible, necesitaba que ella me confirmara que nada paso entre nosotros, que tan solo fue una leve calentura por el momento y nada más. Tenía que liberarme de esta culpa que quemaba mi corazón y saber de una vez por todas, que sucedió esa noche que tome.

Helga POV
Los días en la universidad Metro pasaron lentamente para mí. Me sentía confusa sobre mis sentimientos, pero, de qué manera? Miraba a Arnold conmigo, no habiendo duda en mi corazón que lo amaba, y deseaba cada minuto con él, pero justo en ese momento de amor eterno que siempre e sentido por mi cabeza de balón llegan recuerdos de Alcala. Recuerdos de cómo yo y Elizer nos sentábamos sobre el sofá para ver videos chistosos de youtube. Me burlaba de su tonta carcajada, diciéndole que hasta para reír era un baboso. El me contestaba...

"Pues este baboso es tu novio y te apuesto que te puedo hacer reír por las narices."

"Por las narices? Estas demente!" Le respondí retándolo.

"Oh sí. Ven paraca mi güerita." Elizer me agarraba a cosquillas mientras los dos forcejeábamos sobre el sillón.

"Suéltame, que no puedes conmigo!" Le decía empujándolo para huir de él.

"Como que no, puedo contigo y mas..."Elizer terminaba cargándome en sus brazos y me tiraba sobre la cama con su cuerpo cayendo sobre el mío, haciéndome cosquillas con sus boca sobre mi cuello.

Al final termina riéndome con ronquidos o por las narices como él había dicho. En aquel tiempo no tenía mi memoria completa pero era yo. Yo quería a Elizer en aquellos cortos días, para mí él era mi novio. Me hubiera gustado que los recuerdos de él se me hubieran olvidado de la misma manera que perdí mi memoria, hubiera sido más fácil para mí en seguir con mi vida. Criminal! Mendiga mente traicionera que tengo.

La otra noche que platique con Phoebe sobre todo lo que pasó con Elizer, y como los dos éramos juntos, ella me pregunto.

"Si tu no hubieras perdido tu memoria, tú crees, que hubieras hecho todas esas cosas que tú dices que hiciste con él?" con rapidez sin pensarlo le conteste. "No Phoebe, claro que no lo hubiera hecho."

"Interesante Helga....ahora dime esto. Si Arnold no hubiera estado en tu vida, si él nunca hubiera dejado a Laila y tú te hubieras ido a Alcala sin novio, sin amor, tú crees que hubieras hecho todas esas cosas con Elizer?"

"Pero yo había perdido mi memoria Phoebe."

"Solo contesta la pregunta Helga. Si Arnold no se hubiera ido contigo aquella noche que te llevo a tu casa después de la fiesta de Rhonda. Tú crees que hubieras hecho todo lo que hiciste con Elizer, me refiero a lo bueno y lo malo, teniendo tu memoria bien y siendo tu misma?"

"Si lo hubiera hecho Phoebe, yo creo que....tal vez si me hubiera enamorado de él, eventualmente."

"Entonces Helga, lo que te detiene en querer libremente a Elizer es Arnold, y no tu."

"Qué importa que me detenga Phoebe. Yo no amo a Elizer y mi vida no es en estar con él."

El otro dia estaba en la recama de Arnold los dos estudiábamos muy callados. Yo estaba acostada en su cama mientras él estaba sentado a lado de su cama sobre el suelo. Yo le dije que se subiera a la cama conmigo y me contesto.

"Mejor te dejare la cama para ti sola para que estudies más cómodamente." Maldición Arnoldo, esa no era la respuesta que yo quería escuchar. No le dije pero lo pensé. Quería sentir sus besos sobre mi y tal vez de esa manera bloquear mi mente de cualquier duda que tuviera.

Arnold se miraba tan dulce sentado a lado de la cama estudiando. Se había quitado sus zapatos y hasta sus pies se miraba encantadores. Me imaginaba como me sentaba arriba de él para levantar mi blusa y decirle, bésame mi cuerpo. Quería gritarle en su oído diciéndole que lo deseaba, que lo adoraba y....que no podía seguir estando en su cama, mirándolo estudiar mientras yo me derrito con su simple respirar.

"Helga....en que pagina vas?" me pregunto sacándome de mi caliente imaginación.

"Pagina trescientos nueve, porque?" le pregunte intentando en que él volteara su rostro para por lo menos verme un poco.

"Lees rápido, yo voy dos páginas atrás de ti." Me respondió serio mirando la escritura del libro aburrido que leíamos. No entendía por qué, pero esa misma pared de ladrillos que trajimos desde Alcala sigue entre los dos, y no sabía por cuánto tiempo estaríamos así. *

Era viernes después de clases, Helga seguía en su junta de escritura con otros alumnos, mientras Arnold salía temprano de su práctica de basquetbol.

El bajaba por los escalones para llegar al primer piso en donde estaba el salón de Helga y esperarla afuera en el pasillo, cuando de pronto se encontró a Karol. Arnold se acerco a ella con su mirada fija en sus ojos azules para que no escapara nuevamente de él.

"Karol! Te estado llamando y mandando mensajes. En donde has estado?!"

Karol se miraba nerviosa en verlo, lentamente levanto su mirada hacia él y le contesto con timidez. "Discúlpame por haber estado evitándote todos estos días. No me sentía bien y no fue hasta hoy entre clases que pudo finalmente decidir algo."

"A que te refieres Karol. Yo quiero saber que paso aquella noche que tu y yo estuvimos en mi recama!"

"A eso me refiero Arnold...tienes que saber que paso aquella noche y ya no retrocederé sobre lo que diga hoy."

Arnold miro alrededor para asegurarse que nadie estuviera escuchando su conversación y camino con Karol a lado de los escalones en donde había un leve espacio de privacidad.

"Karol necesito saber...que paso entre tú y yo?"

Notas de Autor:
El POV de Karol fue muy importante en este capituló. En realidad nadie sabía cómo era ella hasta ahora.

El pov de Arnold y Helga fueron también muy importantes, se puede ver qué hay tensión entre ellos y....atracción.

Como les pareció? Sobre otro tema. Tenía que salir yo en esta historia, al igual cuando salí en el -El tesoro de Arnold.☺️

Ahora que Karol y Arnold están juntos viene lo bueno. Agárrense de algo que para el próximo capituló saldrá todo.