Tres días pasaron,  Arnold miraba su correo electrónico constantemente esperando una respuesta de Helga. Todos los días por las noche le mandaba un mensaje nuevo diciendo lo tanto que la quería. El podía ver que los correos se abrían más no había respuesta de ella.

"Por Dios.....que estará pasando con Helga. Sino me contesta esta semana soy capas de ir a donde esta ella y buscar la manera de encontrarla." Se decía Arnold con su rostro angustiado.

Esa tarde los muchachos se juntaron en la casa de Gerald para jugar baraja. Arnold estaba serio mirando sus barajas mientras Gerald y Harold platicaban y reían.

"Vas a poner plata viejo o pasas?" Preguntó Gerald.

"Pasó." Contestó Arnold.

"Oye viejo has podido hablar con Karol?" Preguntó Gerald mirando sus cartas.

"Karol se a...distanciado un poco. No sé qué pasó cuando estuvo en mi cuarto que la hizo cambiar conmigo."

"Que le abras hecho cuando estuvo contigo Arnold." Comento Gerald.

"No le hice nada Gerald. Quizás ella miro o escucho algo que no le pareció, la verdad es que Karol no es un gran interés para mi, si ella quiere estar alejada para mi mejor."

"Has sabido de tu novia Arnold?" Preguntó Harold.

Gerald se levantó de la mesa con un gesto incomodo diciendo. "Voy al baño, sigan jugando sin mí." El joven moreno se salió del cuarto dejando a Arnold y Harold solos.

"No. Le mande unos mensajes por correo electrónico y todavía no me a contestado." Respondió Arnold desanimado.

"Quizás el email de ella no funciona o no lo a mirado." Comento Harold.

"Si los miro porque envíe mis mensajes con una confirmación cuando los abriera. No sé que estará pasando con ella que no me a contestado."

"Oye Arnold se me olvidaba en comentarte. Te acuerdas cuando te dije que tengo un primo en Alcalá Universidad que toma fotos del campus."

"Si me acuerdo Harold, porque?"

"El otro día bajo unas fotos en su cuenta de Instagram y mire a Helga en una de ellas."

"Enserio! Enséñamela!"

Harold sacó su celular del pantalón y busco la foto en la cuenta de su primo.

"Mira está es la foto." Harold le pasó el celular a Arnold.

Arnold inhaló aire y lo exhalo lentamente mirando la foto con su mirada dulce. "Cielos...es mi Helga y tiene mi gorra puesta." Dijo Arnold con una sonrisa de placer en su rostro. "Pero....con quien está?"

Arnold miró la foto con Helga riéndose bajo la sombra de un árbol con una joven morena de pelo café y un joven blanco de pelo oscuro sentados a lado de ella.

"Quienes son ellos?" Preguntó Arnold con un gesto molesto. "Y quien es él?"

Gerald entró al cuarto mirando a Arnold muy atento con el celular de Harold en sus manos

"Que vez Arnold?" Gerald se acercó para ver la imagen en el celular. "Ala es Helga, y se ve contenta....y tú que andas bien preocupado."

"Pero esta foto fue tomada, cuando?" Preguntó Arnold.

"Creo que mi primo la tomo la semana pasada Arnold."

"Necesito verla para saber que está bien." Añadió Arnold con tristeza en su voz.

"Que no vez su expresión en la foto Arnold. Helga se ve bien." Agrego Gerald.

Arnold suspiro con sus ojos fijos en la foto, y en el joven sentado a lado de Helga.

Al siguiente día después de clases, Helga miraba su correo electrónico encontrando otro mensaje más de Arnold

~Helga.
No sé qué está pasando ya van cuatro correos que te mando y aún no se de ti. Por favor. Dime algo. Lo que sea. Te está pasando algo o alguien te está molestando? Tú sabes que puedes decirme lo que sea. No me ignores así.
Te amo por siempre.
Arnold. ~

"No puedo con esto. Cada vez que veo sus mensajes siento un dolor en mi pecho que no me deja. Porque me escribe como si hubiéramos sido mi pareja. Esto tiene que parar. Le enviaré un mensaje y espero que con esto se aclare todo y el deje de enviarme mensajes."

Helga respiro profundamente y poniendo sus dedos sobre el teclado de la computadora empezó a escribir.

En ese mismo momento Laila estaba en la casa de su mejor amiga mirando las fotos que había mandado el hermano de Jessica desde Alcalá Universidad.

"Qué opinas de las fotos que envío mi hermano?"

Laila estaba acostada en la cama con su rostro iluminado de niña feliz.
"Excelente, estas fotos están súper bien. Están mejor de lo que esperaba. Parece que Helga ya remplazo a Arnold. Definitivamente podemos encender los celos de él con esto."

"Entonces cuál es el plan?" Preguntó Jessica.

"Le enviaré estas dos fotos por email titulado  Fotos de Helga, para que no se niegue en abrirla y así se encenderá la llama de la traición."

"Y qué tal Karol? Ya te contestó?"

Laila retorció su boca a un lado en enojo. "Esa estupida tiene la otra prueba que yo necesito. Solamente necesito estar de su buen lado para que me pase las fotos y el video."

"Por qué crees que Karol se esté comportando diferente después de estar con Arnold."

"No sé que traiga en su mente esa pendeja pero....consiguiere la prueba que ella tiene."

"Tú crees que Karol realmente se acostó con Arnold?" pregunto Jessica.

"Intento en no pensar en eso, lo que me interesa son las fotos y el video que tomo ella."

"Laila no crees que estaría mejor en....solamente mandarle a Arnold la foto de Helga y, después dejar el resto por la paz." Sugirió Jessica.

"Mi paz llegará cuando Arnold y Helga terminen con su corazón roto como termine yo!"

"Pero tú no querías a Arnold." Dijo Jessica.

"Yo lo amo! Siempre lo amaré, por eso no lo quiero ver con nadie!"

"Entonces porque estabas con Arnie?"

Laila se levantó el pelo en una coleta diciendo. "Ya te dije hace mucho tiempo porque me acostaba con Arnie y no me quiero volver a repetir."

"Laila...y no quieres intentar otras opciones?"

"Opciones de qué?" Preguntó Laila confundida.

Una llamada entró al celular de Laila interrumpiendo la plática de las amigas.

"Bueno....." contestó Laila. "Karol hasta que me llamas......."

Ese jueves en la noche Helga estaba en su recámara escribiendo un reporte que tenía que entregar al siguiente día.  Miraba la hora ya tarde preocupada por no saber nada de Elizer en todo el dia.

Ya le había mandado varios mensajes y él no le contestaba. De pronto recibió un texto de él.

-Estoy con unos amigos.-

-En donde?-

-En la casa de fraternidad Alfa.-

-Cuando regresas?-

-Después llegó-

-Pero cuando llegas?-

Elizer ya no le contesto. Sintiendo una gran decepción y enojo por la burla de él, Helga se levantó con su mirada enfurecida, agarro sus llaves y se salió del cuarto.

Mientras tanto en la casa de huéspedes, Arnold tenía problemas para conectarse con el internet. "Que está pasando? Será que el internet no está funcionando?"

Dijo Arnold levantándose de su escritorio para bajar a la sala en donde estaba su abuelo dormido enfrente de la televisión sentado en su sofá.

"Abuelo." Arnold Lo movía levemente.

"Uhg.....no dejare que me lleven!" Exclamó el abuelo abriendo los ojos alarmado.

"Abuelo estabas soñando."

"Si... soñé que estaba de regreso en la granja del otro lado del mundo, con aquella alta bella alemana pelirroja. Ella utilizaba un vestido transparente negro y.....entre la oscuridad de la noche la alemana se me arrimó y bajando mis pantalones me rogaba a gritos que le diera más........"

"Abuelo!"

"Que Arnold! Ya estoy despierto no vez."

"No tenemos internet abuelo."

"Por esa razón me sacaste de mi sueño! Si el internet no funciona después funcionará cual es la prisa!"

"Necesito abrir mi correo electrónico."

"Eso puede esperar." Comento el abuelo intentando en dormirse otra vez en el sillón.

"Abuelo estoy esperando un mensaje de Helga....necesito el internet para abrir mi correo electornico."

"No creo que funcione hoy Shortman, espérate hasta mañana y checa tú correo desde las computadoras de la escuela." Le sugirió el abuelo.

Esa caliente noche Helga busco la dirección de la casa Alfa en el internet y camino las seis largas cuadras para llegar ahí.

Llegando a la inmensa mansión Alfa, Helga encontró varias personas tomadas y música muy fuerte sonando por toda la casa. Algunas mujeres estaban sentadas arriba de unos chavos carcajeándose mientras otras estaban bailando en medio de la sala.

Helga camino por la inmensa casa llena de cuartos sin poder encontrar a Elizer.

"En donde está! Cuando lo vea lo voy a matar!" Se quejaba Helga con ardor en su mirada.

"Hey nena quieres tomar algo?" Le Preguntó un joven.

"No gracias. Pero...tienen botellas de agua?"

"Si, ahorita le diré a mi amigo que saque una botella fría de la hielera especialmente para ti."

"Oye conoces a Elizer?" Preguntó Helga.

"Te refieres a Elizer Verdugo?" Preguntó el chavo.

"Si lo conoces?"

El joven se rio. "Tú estás con él?"

"Si soy su novia."

"Ja Ja Ja ja....ese wey no se deja domar por una novia. Pero si, aquí anda...le diré a un amigo que te dirija a donde está.....y tienes sed verdad?"

"Si." Respondió Helga cruzando sus brazos.

El joven se fue a la cocina, habló con otro muchacho apuntando a donde estaba Helga parada esperando.

Los dos se murmuraron algo riéndose y planeando. Un joven desconocido se acercó a Helga con la botella de agua fría en sus manos.

"Me dijo mi amigo que buscas a.....Elizer. Sígueme, aquí está tu agua." El muchacho alto guiaba a Helga por la mansión mientras ella tomaba de la botella con agua. Después de cruzar un largo oscuro pasillo llegaron a una puerta grande que conducía a un cuarto.

"Elizer está con unos amigos aquí." Le dijo el muchaco abriendo la puerta para que Helga entrada.

Helga dio unos pasos adentro mirando al rededor. "Este cuarto está vacío!"

Los dos muchachos de inmediato se metieron al cuarto y cerraron la puerta mostrando un gesto tenebroso en sus miradas.

"NOOO!!" Gritó Helga en pánico. Mientras los dos hombres la empujaron a la cama.

Helga forcejeo y los patio lo más que pudo. Dándole un golpe bajo a uno y una patada en la costilla al otro. A pesar que eran dos contra ella, Helga no se dejaba. Desgraciadamente al final las patillas que le habían puesto en el bote de agua tomaron efecto, y Helga  fue perdiendo su fuerza sobre su cuerpo, sintiendo una enorme borrachera en su cabeza.

Elizer platicaba con sus amigos abajo en el sótano de la mansión cuando un chavo se le acercó.

"Oye Elizer apoco tienes chava?"

"Claro que no.....porque preguntas?" Dijo Elizer riéndose por el comentario y dejando la cerveza vacía en la mesa.

"Una rubia entró a la mansión hace un ratito buscándote. Ella le dijo al Blas y Aarón que era tu novia y...la llevaron al cuarto negro disque buscándote....pero ya puedes imaginarte que le van a ser."

Poniendo un rostro de pánico ante sus amigos con los que platicaba. Elizer salió corriendo del sótano,  dirigiéndose lo más rápido que podía al cuarto negro. Ese oscuro cuarto al final del pasillo que tenía la reputación de tapar con la oscuridad los peores actos de la juventud.

Elizer llegó al cuarto negro abriendo la puerta con un fuerte empujón. Los dos hombres tenían a Helga sobre la cama tirada boca abajo quitándole el pantalón de mezclilla ajustado a su cuerpo.

"DÉJENLA!!" Gritó Elizer con furia en su mirada.

Los dos jóvenes se apartaron de Helga dejando que Elizer se acercara a ella.

"Helga estas bien di algo!?" Preguntó con el cuerpo flojo de ella en sus brazos.

"MENDIGOS PERROS QUE LE DIERON!?!?".

Los dos muchachos confundidos se miraban entre ellos.

"QUE LE DIERON!?!?"

La voz fuerte de Elizer los hizo reaccionar.

"Le...dimos junkies."

"CUANTAS PASTILLAS FUERON!?!?" Preguntó Elizer con su mano sobre el rostro de Helga intentando en despertarla.

"Solamente fueron dos." Respondieron ellos. "No sabíamos que estaba contigo."

"Ella dijo que era mi novia y ustedes quisieron violarla!!" Les reclamo Elizer ajustó los pantalones de Helga e intento en cargarla para sacarla del cuarto.

"Perdón Elizer no sabíamos que realmente era tu novia como tú nunca tienes a nadie.....a poco esta chava significa mucho para ti!?"

"Dame tus pinché llames Blas......"

"Para que quieres mi auto?" pregunto Blas espantado.

"Solamente dame tus llaves!" Le exigió Elizer con cólera en la mirada.

"Está bien ten." El joven sacó sus llaves del pantalón y se las entregó.

El joven moreno salió de la mansión con Helga desmayándose en sus brazos. Llego al auto y sentó a Helga en el asiento de enfrente. "Helga reacciona! Vamos Helga despierta!" Elizer la movía para que ella abriera sus ojos.

"Ummm.....mmmmm." Helga empezó a mover su cabeza a los lados con sus ojos cerrados.

Preocupado, Elizer se subió al auto apresurado lo prendió y dando una reversa rápida, arrancó de ahí.

Durante el corto camino de regreso a los dormitorios Elizer le seguía hablando a Helga.

"Helga no te duermas.....habla....dime, cuál es tu nombre completo!?"

"Mmmm......soy, Helga......G.......Pataki." Contestó Helga con sus ojos cerrados.

"Sígueme hablando Helga cuántos años tienes!?"

"Dieci-ocho años." Respondió ella empujando las palabras.

"Helga tengo que pasar primero a comprarte un café negro. Necesito que despiertes. Dime...porque decidiste en venir a Alcalá Universidad!?" Le pregunto Elizer mientras seguía manejando.

Helga tenía sus ojos cerrados sin contestar.

"Contéstame Helga!? Porqué decidiste en venir a Alcalá Universidad!?"

"Quise.....venir.....para alejarme de.....mi romeo."

"Quien es Romeo!?"

"El es el.......amor, de mi vida.......no hay segundo.......que mi corazón, no palpite por.....él."

Elizer pasó por la ventanilla de una cafetería y compró un expresó negro. "Si lo amas tanto porque querías alejarte de él?" Preguntó Elizer.

"Mmmmm......"Helga se estaba cayendo en un profundo sueño.

"Helga necesito que no pierdas la conciencia vamos contéstame.....porque querías alejarte de él!?" Le pregunto Elizer elevando su voz.

"Quería........pensé.....que él no me quería, porque, él tenía a alguien más......y....... estaba, equivocada.......cabeza de balón, me ama. Pero......ya era demasiado tarde.....para transferir.......por eso me quiero ir.......de esta.....pesadilla...........para regresar, a sus brazos."

Elizer se quedo pensativo con la respuesta de ella. A pesar que la manejada fue corta, para él se sintió larga. Llego al edificio de dormitorios y sacó a Helga del auto caminando, mientras ella se apoyaba de los hombros de él.

"Helga ya te acuerdas de todo?"

"De que?....no sé nada." Contestó Helga con voz borracha.

"Pero hace un ratito me dijiste que quieres a Romeo."

"A quien!? Nooooo!.....Tú estás loco! Tengo cara de Julieta.....o que!?"

"Quien soy yo Helga?"

"Tú eres mi......novio y estoy decepcionada de ti, eres un aprovechado y inconsiderado." Dijo Helga con su  voz desorientada.

Elizer abrió la puerta del dormitorio entrando al cuarto.

"Me quiero....acostar." Dijo ella acercándose a la cama.

"No Helga siéntate en el sofá.....si te duermes ahora te puedes desmayar y.......no quiero que algo peor pase, sigue hablando vamos."

"Quieres......que......hable.......está bien. Tú no me quieres." Dijo Helga con su rostro triste hacia él.

Elizer se sentó a lado de ella con el café en su mano. "Dale unos tragos al café Helga." Lentamente con cuidado ella daba tragos al vaso.

"Porque, no me quieres Elizer?........será, que nadie me podrá querer......o, comprender...como tú lo dijiste."

Elizer la miraba sus ojos llorosos azules, sabiendo que el corazón y el amor de Helga no era para él. "Estás confundida Helga.....tu quieres a alguien más."

"No quiero....a nadie más." Decía ella.

"Anda Helga toma más café."

Helga le dio unos tragos más al café y volvió a decir. "Ya le....mande un mensaje al que me escribia por correo electrónico........y le dije, todo sobre, nosotros."

"Como!?" Preguntó Elizer confundido.

"No te preocupes Elizer.....el que tú crees, que amo....no es." Helga recargo su rostro sobre el hombro de él queriendo dormir nuevamente.

"Helga! Abre tus ojos!"

Helga abrió sus ojos un poco intentando en hablar.
"Elizer porque me...rescataste de.....esos putos que se....querían pasar conmigo?"

Elizer se pasó las manos por su cabeza pensando que decir. "Porque eres mi novia Helga."

"No." Respondió ella molestándose.

"No que Helga?"

"No lo.....soy........mi novio es.....alguien más."

Helga recupera y vuelve a perder la memoria, quizás eso quiere decir que ella recuperará su memoria muy pronto. Pensó Elizer.

"Quizás tienes razón Helga."

"Entonces......porque me rescataste?"

"No podía permitir que te hicieran daño."

"Tú....has hecho eso por, otras....chicas?" Preguntó Helga con su voz borracha.

"No, nunca." Respondió Elizer con su mirada hacia el suelo pensando.

"Y....porque por mi sí....que tengo yo, de especial?"

"Helga tu eres una chica encantadora... y muy especial. Cualquier chavo se sentiría feliz de tenerte."

"Y tú?" Preguntó Helga.

"Yo......yo no te merezco." Dijo Elizer con su voz decaída.

"Porque?" Preguntó Helga con sus ojos abriendo y cerrando.

"Porque....yo no puedo darte la relación que mereces."

"Entonces.....no me quieres y....nunca podrás entenderme.......como dijiste el otro día."

"Yo estaba equivocado sobre lo que dije el otro día. Me....llene de celos cuando probé tus labios sabiendo que tu al final no me corresponderías....Tú corazón no se expresa ante mi...le habla a alguien más, pero, eso no quiere decir que no tenga sentimientos por ti."

"Que sentimientos tienes......por mi?"

Elizer la miró a sus ojos y le respondió. "Yo, te quiero Helga."

Elizer POV
Al decir esas palabras agarre a Helga en mis brazos y la bese. Me sentía diferente y expuesto ante ella. Nunca había dicho esas palabras antes, y en decirlas a una mujer que yo sabía que nunca podrá quererme era...ilógico para mi mente, pero correcto para mi corazón. Yo quería a Helga y....no sabía cuánto tiempo más está falsa relación continuaría. En ese momento me di cuenta que estaba dispuesto a hacerla sentir querida y apreciada a mi lado....hasta que el día llegara, que ella me dejara.**

Al siguiente día después de la hora de lonche Arnold se apresuró a la clase de computación en donde sabía que podía revisar su correo electrónico.

"Buenas tarde joven Shortman. Puedes creer que ya es viernes." Lo saludó el profesor. "Que bueno que llegaste temprano a mi clase."

"Quería ver si podía revisar algo en mi correo electrónico profesor." Preguntó Arnold ansioso por ver que le había mandando Helga.

"Por supuesto puedes utilizarla."

Arnold prendió la computadora deseoso por lo que podía encontrar en su email. Por un lado pensaba que tal vez Helga no le había contestado como lo hizo toda la semana, pero por otro lado quizás si le contestó. Con su mente pensando muchas posibilidades de lo que podría encontrar, la computadora se prendió con los programas listos para que Arnold aplicara su email y clave para ver su correo privado.

Finamente abrió su email revelando dos correos nuevos. Uno que venida de Helga y otro de un email que él no conocía.

Con su mano tensa por la ansiedad. Arnold movió el ratón para abrió el correo de Helga.

~Arnold,
Tú escritura es realmente conmovedora, sin embargo yo no puedo seguir recibiendo tus mensajes. Tú crees en conocerme y en quererme pero estás equivocado, yo nunca estado contigo. Tuve un leve accidente el otro día y sé que perdí algunos recuerdos temporalmente y, tal vez nosotros fuimos amigos o algo más en el pasado pero, yo no tengo ninguna memoria tuya en absoluto, no sé quién eres. Yo tengo a mi novio Elizer y no quiero tener relaciones con nadie en sus espaldas. Parece que tú eres una buena persona pero yo no soy para ti y no soy tuya. Por favor ya no envíes más. Sobre el mensaje que me enviaste de mi teléfono que no servía. Te quiero aclarar, que mi celular nunca estuvo descompuesto, yo simplemente no recibo llamadas tuyas.
Atentamente,
Helga. ~

El corazón de Arnold se congeló en su pecho. Su respiración se detuvo por un momento. Arnold miraba una y otra vez el menaje de ella sin poder encontrar una repuesta correcta en su mente para comprender y aceptar lo que había leido.

Helga perdió su memoria y no me recuerda! Esto no puede estar pasando! Tiene que haber un error! Y quien se hace pasar por su novio?! Se decía Arnold como si fuera una horrenda pesadilla en su mente.

Abrió el siguiente mensaje titulado fotos de Helga y la pantalla reveló la imagen que clavó un dolor en su corazón. La foto era de Helga y Elizer abrazándose afuera de la cafetería de la escuela y una segunda imagen de Elizer dándole un beso afectuoso a Helga en su mejilla.

"Arnold estas bien? Te ves pálido." Comento el profesor.

"Profesor tengo una emergencia....tengo que irme!" Arnold cerró su email y salió apresurado del salón.

Los pensamientos le volaban en su mente, él no podía creer lo que había leído. Todos los recuerdos de Helga y él como pareja se estaban contaminando con la imagen de ella entregándole su amor a alguien más.

Arnold bajaba por las escaleras con su mente mostrándole una tormenta de imágenes de Helga amando a otro hombre. Con sus pensamientos atormentándolo Arnold no se dio cuenta que alguien subía por las escaleras y termino cayéndose arriba de una señorita.

"Karol Perdón!" Arnold se levantó con rapidez del suelo. "No te lastime?"

"No Arnold.....estoy bien." Arnold la ayudo rápidamente a levantarse y sin decir más se alejó corriendo.

"ARNOLD!... ESPERA!" Le gritó Karol antes que el joven rubio se alejara más.

Arnold se volteó mirandola desde lejos. Karol tenía sus manos sobre su corazón mirando hacia abajo declarando. "Sobre tú pregunta del otro día......." Ella levantó la mirada tímidamente hacia él. "Créeme cuando te digo que tú fuiste, todo un caballero conmigo. Yo solamente te acompañe, mientras te, desahogabas. Eso fue todo lo qué pasó."

"Gracias Karol! Eres una buena amiga." Arnold se volteó y siguió corriendo.

Karol respiro profundamente con su celular en su mano. "Si...buena amiga." Murmuro ella mirando las imágenes en su teléfono.

A unas millas de ahí, Gerald estaba saliendo de la última clase del día acompañado por Phoebe cuando encontró Arnold recargado en su auto esperando a que él llegara.

"Oh no." Dijo Gerald mirando a Arnold.

"Que pasa Gerald?" pregunto Phoebe.

"Ya conozco esa mirada de Arnold, algo paso." Comento Gerald acercándose a su auto. "Hey viejo qué onda."

"El celular de Helga nunca estuvo descompuesto me mentiste!" Exclamo Arnold molesto.

"De que hablas viejo!?" Preguntó Gerald nervioso.

"Hablo que tú y Phoebe me afirmaron que ella no tenía celular por estos días para tapar algo!"

"Tapar que viejo....tal vez hay un mal enten-dido."

"Quien es Elizer!?!?" Exclamó Arnold furioso.

Los rostros de Phoebe y Gerald se congelaron con el nombre.

"Como te enteraste de ese nombre?" Preguntó Phoebe.

"Imagínense la sorpresa que recibí cuando Helga me responde todos los emails que le mande diciendo que no me conoce, que tuvo un accidente donde perdió su memoria...y que su novio es Elizer!"

"Helga tuvo un pequeño accidente si pero ella está recuperando su memoria poco a poco." Aseguró Phoebe.

"Y cuando tenían pensado en decirme esto!!" Reclamo Arnold mirando a sus dos amigos.

"Helga se va a recuperar pronto Arnold, estábamos pensando que ella recuperaría su memoria antes que tu tuvieras que enterarte." Contesto Phoebe.

"Como fue que ustedes se enteraron de esto?!" pregunto Arnold.

Gerald y Phoebe se miraron entre ellos.

"Digan algo!!" respondió Arnold elevando su voz.

"Elizer me llamo diciendo que Helga se cayó en la regadera y él no sabia que hacer."

"En la regadera!!! Y que hacia él con ella?!?!" Dijo Arnold alterado.

Gerald se acerco a Arnold diciendo. "Elizer es el compañero de cuarto de Helga....ella lleno su aplicación mal y le dieron un muchacho como compañero."

"Ustedes son mis amigos y tu Gerald, mi mejor amigo y no me querían decir esto!!"

Phoebe se acerco a Arnold "Helga no quería que tú supieras sobre su compañero de cuarto, ella intento todo para salirse de ahí pero no pudo. Por favor Arnold entiende que lo hicimos de la mejor manera."

"De la mejor manera! Todo este tiempo y ustedes me mintieron. Ella no me conoce Gerald! Y no quiere saber nada de mí!!" Exclamó Arnold con sus cejas arqueadas del coraje.

"Pero esto es, algo temporal hermano cuando menos lo esperes ella recuperará su memoria y...."

"Ella está con otro hombre Gerald!! Y piensa que ese desgraciando Elizer es su novio!!"

"El es un buen chico Arnold, y la está respetando." Comentó Phoebe. Gerald le hizo una señal a Phoebe que no dijera más.

"Que!?!? Tú hablas con él Phoebe!!" Exclamó Arnold en cólera.

"Bueno....sí, el me dice cómo está Helga, ella ni siquiera se acuerda de mi. Solamente recuerda su familia y que conoció a Elizer en la universidad....."

"Márcale Phoebe!!" Exigió Arnold en cólera.

Gerald se paró enfrente de Phoebe mirando a Arnold furioso acercándose a ella. "Oye hermano espera primero ponte a pensar bien las cosas."

"A pensar que Gerald!! Elizer está con mi Helga besándola y abrazándola y quizás haciendo con ella.........Oh cielos!!.......Márcale Phoebe!!" Ordenó Arnold elevando más su voz.

Phoebe pasaba saliva de los nervios mientras le marcaba al celular de Elizer.

"Arnold....Elizer no contesta quizás sigue en clase."

"Dame su número de celular Phoebe!!"
Phoebe le escribió el número de celular  de Elizer en un papel y se lo entrego a Arnold.

"A donde vas hermano?!" Le exclamó Gerald mirando como Arnold se alejaba.

"Que que te importa Gerald y no me digas hermano!" Respondió Arnold mientras se dirigió a su auto.

"Espera Arnold estas equivocado si me importa que vas a hacer! Me interesa tu vida aunque no lo creas!"

Arnold paró de caminar y se volteó mirándolo a los ojos diciendo.
"No me digas más Gerald! Yo pensé que realmente eras mi hermano, creí en ti, en cada palabra y concejo que me dabas! Yo nunca pensé que estarías escondiendo la condición de mi Helga en mi cara!...Exponiendo al amor de mi vida a que se acostara y estuviera con otro hombre!!!" Arnold extendió su brazo dándole un puñetazo a Gerald en la cara. Con el fuerte impacto Gerald cayó al suelo sentado atónito por el sorpresivo golpe. "YA NO SOMOS HERMANOS!! Y NO SOY TU AMIGO!!"

Estando Gerald en el suelo, se agarró la quijada sintiendo un gran dolor en su rostro y una culpabilidad inmensa de sus malas decisiones.

"ARNOLD!! TIENES RAZÓN!!" Gritó Gerald deteniendo a su amigo enfrente de su auto. "Hice mal Arnold! Yo debí haberte dicho......y si no me quieres volver a hablar lo merezco."

Arnold no se volteó a mirarlo, abrió la puerta de su auto y se metió. Gerald se levantó del suelo y camino hacia el auto de su amigo antes que el arrancara.

"Té conozco Arnold y se que vas a ir a donde está ella. Tú auto no está en condiciones de llevarte hasta haya..........pero el mío sí. Ten llévate mi carro y busca a tu Helga!" Gerald sacó sus llaves y se las enseñó a Arnold a través del vidrio de la puerta del conductor.

Arnold tenía sus manos en el volante pensando.

Apagó su auto y se salió del carro.

"Ten Arnold, mi tanque esta lleno de gasolina te llevará las seiscientas millas y llévate mi celular por si necesitas algo."

Arnold miró los ojos sinceros de su amigo e intercambiaron llaves y Gerald le entregó su celular. Sin decir ni una sola palabra, Arnold se encaminó al auto de Gerald, se subió, prendió el motor y partió de ahí.

Esa misma mañana Helga abrió sus ojos mirando que estaba en los brazos de Elizer. Ella podía sentir la respiración tranquila de él sobre su espalda y el calor de su cuerpo sobre el de ella. Los dos estaban abajo de las cobijas.

Por Dios qué me pasó? Pensó Helga levantando la cobija, dándose cuenta que estaba completamente vestida, con sus jeans y camisetas rosada puesta.

Se volteó mirando a Elizer profundamente dormido de enfrente. Se acordó de como él la había ignorado el día anterior y como ella se fue a la casa de fraternidad buscándolo.
Tenía memoria de como lo buscaba en la casa y lo que los jóvenes intentaron en hacerle. Se acordaba un poco de como Elizer les gritó a los muchachos mas no tenía memoria de lo demás.

Helga se sentía indignada por lo sucedido y lo jalo de las orejas con fuerza despertándolo.

"Haaaaaaay!" Se quejó Elizer abriendo sus ojos por el jalón duro de su oído.

"Eso es lo que mereces y más todavía por haberme ignorado ayer y haber permitido que esos pendejos se quisieran pasar conmigo!"

Elizer se agarró su oreja roja intentando en tapársela. "Te dije anoche que lo sentía." Exclamó el joven medio dormido.

"Yo no me acuerdo de eso! Y aunque me acordara que tiene! Te la pasarás pidiendo perdón a cada rato en nuestra  relación!" Le reclamo Helga.

"En serio...en nuestra relación!" Dijo Elizer con un brillo de gusto en su mirada.

Helga le jalo el otro oído. "Claro que nuestra relación! No quiero tener un novio que se la pase haciendo faltas y pidiendo perdón a cada rato!"

"Haaaaay.......no volverá a pasar, lo prometo!" Declaró Elizer con dolor por el jalón duro.

"No me convences!" Respondió Helga con su mirada fuerte.

"Te quiero Helga y no te volveré a lastimar de esa manera!" Exclamó Elizer sintiendo su oreja roja y caliente.

"Me....quieres?" Preguntó Helga abriendo más sus ojos.

"Creo que......después de este jalón que me diste, ya me dejaste dudando." Comentó Elizer con sus manos sobre sus oídos.

"Que!?"

"Bromeó guerita....tu lo sabes."

Helga lo miraba levantando su ceja.
"Esta bien.  Quedas disculpado.....pero qué pasó anoche que no me acuerdo bien. Solamente se que tú me sacaste del cuarto y...."

"Blas y Aarón pensaron que tú eras......en realidad ya no importa. Yo me las arreglaré con ellos."

"Que pasó exactamente!? Porque creen esos invencibles que se podían aprovechar de cada mujer que entra a esa casa?! Deberían de estar en la carcel por sus actos!"

"Esos dos piensan que todo es un juego. Para la próxima nunca tomes de ninguna botella de agua o bebida que te quieran dar en fiestas. Siempre es mejor que tú prepares tus propias bebidas."

"Yo nunca me imagine que me dragarían esos patanes! Eso es lo que pasó verdad!" Dijo Helga con coraje entre sus dientes.

"Si así pasó.....pero como te dije, me las arreglaré con ellos."

"Como te arreglarás?" Preguntó Helga tranquilizándose un poco.

"Yo sabré cómo dirigirme con ellos. Por ahora, ven paraca guerita."

Helga se levantó de la cama.
"No...lo que hiciste ayer de ignorarme todo el día te costara."

Elizer sonrió. "En serio. Cuál es el precio  Helga?"

"Después te dire. Por ahora tengo que arreglarme para ir al café con Yalali." Comento Helga encerrándose en el baño.

Después de clases Elizer se encontró con unos amigos afuera de universidad.

"Que te paso ayer Elizer te saliste hecho padre del sótano?" Le pregunto un amigo que estuvo con él durante la fiesta de fraternidad.

"Tuve que hacer algo urgente." Respondió Elizer serio.

"Cagar o que?" Contestó el amigo riéndose de él junto con los otros chavos.

En eso Leo llegó al grupo.
"Me dijeron lo que hiciste ayer Elizer en la casa de fraternidad con Blas y Aarón....no me puedes decir que no quieres a la vieja rubia."

Los muchachos se quedaron callados escuchando.

"El trato está roto Leo. Tú ganas ya no quiero nada....te puedo pagar el dinero y quedó fuera."

Leo se acercó a Elizer mirando su ojos marrones firmes en él. "Te enamoraste de la rubia verdad?"

"Que eres mi madre o que? Yo no tengo que contestarte nada." Le respondió Elizer acercando su rostro a Leo.

Leo sonrió dando unos pasos atrás. "Esta bien....quedas fuera de esta vieja. Le daré el lugar a alguien más."

"Nadie la tocará!" Anunció Elizer enfrente de todos. "Y ya no quiero ser parte del reto...jamás."

Leo miró a los demás diciendo.
"Como se lo abra aflojado que lo cambio tanto."

Elizer le dio un golpe en la cara a Leo. "Te prohíbo que te refieras a ella de esa manera!"

Leo sacó su lengua un poco probando sangre por dentro de su labio. "Esta bien.....quieres jugar a ser honesto y caballeroso no te queda Elizer! Porque tarde o temprano terminarás regresando a lo mismo."

Leo se fue caminando del grupo dejando a los demás serios al rededor de Elizer.

"Entonces en donde nos juntamos para ver la pelea de mañana?" Preguntó uno.

Desde lejos Elizer alcanzó a mirar a Aarón y Blas saliendo de un coche cercas de ahí. "Los veos después cuates." Se despidió Elizer del grupo.

"Hey Blas tengo tus llaves?!"  Grito Elizer amistosamente acercándose a ellos.

Un muchacho del grupo comentó. "Si que cambió ese bato y por una chava."

"Cambio porque es débil... y yo que le tenía tanto respeto." Comento otro. De pronto el grupo miro a Elizer entregando las llaves con un golpe en el estómago a Blas y otro en el rostro a Aarón.

"Dile eso en su cara wey." Comentó un joven del grupo.

Helga volvió a mirar su correo electrónico después de clase dándose cuenta que Arnold  abrió el menaje sin contestarle.

"Párese que ya no enviará nada. Es lo correcto....pero, porque se siente  como si estuviera mal."

Helga miraba los emails de Arnold y decidió en volverlos a leer.

~Helga, no me as contestado me imagino que sigues molesta conmigo por nuestra última comunicación. Yo se que no es suficiente en comunicarnos únicamente por mensajes y teléfono. Yo también necesito sentir tus besos, tus acaricias y tus dulce bello cuerpo en el mío. Por favor comunícate conmigo por teléfono a mi casa o por email, como sea....yo siempre estaré aquí para ti. Arnold.~

~Helga ya van dos mensajes que te escribo y no se que está pasando por tu mente. Todas las noches pienso en ti sintiendo que me falta algo, tengo una ansiedad por dentro que no me deja y es por ti amor. Tú eres mi otra mitad, siempre lo serás. Yo se que tú también sientes ese vacío en ti. Esa falta de querer estar cercas a mi. No me hagas esperar más y escribe.
Arnold.~

~Todos los días miró mi correo electrónico esperando en ver tu mensaje y nada. Me tienes muy preocupado amor. No se cómo estás o que está pasando a tu al rededor. Yo nunca dejare de amarte Helga y como te dije tantas veces tu eres mi vida, mi tesoro, yo nunca te perderé, tu eres mía y yo tuyo. ~

"Porque tiene que escribirme tan hermoso! La manera en que me hace sentir amada y comprendida. Será que Arnold.......no el no pudo haber significado tanto para mi. Mejor borraré sus mensajes para nunca volverlos a ver."

Helga puso el ratón sobre el botón de borrar y se quedó pensando.

Duarte el camino largo de la carretera hacia Alcalá Universidad Arnold recordaba la última conversación que tuvo con Helga, las mentiras que Gerald y Phoebe le dijeron y lo que Helga le escribió a él, en el último mensaje.

Arnold intentaba en concentrarse en la manejada y no podía, cada imagen que aparecía en su mente era de como Helga lo besaba, entregando su cuerpo lentamente a él. Arnold no quería imaginarse a su apreciada Helga entregándose de esa manera a alguien más. Pero su mente lo traicionaba mostrándole imágenes de ella en la cama con otro hombre.

"Nooo! Helga nunca podría hacer el amor con alguien más.....aunque su mente no recuerde su corazón si me debe de recordar!"

Arnold pensó en el sueño que tuvo unos días antes. Todavía podía ver a Helga entre las flores con su mirada perdida diciéndole.

"Tú sabes quién soy, solo tú guardas mi corazón......no lo olvides."

Arnold apretaba el volante con sus manos intentando en borrar las imágenes de Helga entregándose a alguien más, con las palabras que ella le confesó en sus sueños.

"Por eso soñé eso...mi corazón me estaba dando una advertencia. Por Dios! Helga volvió a perder su memoria  y esta vez yo no estuve ahí para ayudarla. Quizás todo esto es mi culpa, yo debí haberle llamado esa mañana aunque yo supiera que ella me contestaría molesta. Quizás por eso tuve ese accidente porque estaba pensando en mi."

En ese momento Arnold se acordó de su celular que había perdido señal desde muy temprano ese día.

"Quizás Helga me estuvo llamando y enviando mensajes y yo...nunca le contesté. Tal vez por eso ella tuvo el accidente porque estaba distraída pensando en mi? Y... si Elizer le hizo daño?......Pero si Helga tuvo el accidente en la bañera como fue que él.............maldicion! No puedo con esto!!"

Las horas lentamente pasaban sin darle a Arnold un minuto de alivio a su aflicción.

Finalmente después de un largo duro camino Arnold llegó al territorio universitario. El campus era más grande de lo que él se imaginó. Habían estudiantes por todos lados, caminando a los restaurantes, la biblioteca y el parque grande del área. Arnold miraba varios edificios grandes al rededor del campus con miles de dormitorios.

"Cielos! Por donde empezaré a buscarla!?"

En ese instante Arnold se acordó del celular de Gerald y le marcó a Helga.

"Por favor contesta Helga." Decía Arnold con el celular en su mano.

El celular de ella sonaba sin conectarse al buzón de voz.

Miró el teléfono de Elizer escrito en el papel que le dio Phoebe y le marcó.

Ring....Ring......Ring......

Con cada timbre que el celular daba el corazón de Arnold se agitaba más y más, sabiendo que le estaba marcando al muchacho que te tenía, al amor de su vida.

Ring.....Ring.....Ring....

"Vamos contesta desgraciado!" Dijo Arnold con su voz enfurecida.

Ring.....Ring......Ring.....

"Bueno." La voz gruesa de un joven contestó el teléfono.

"Tú eres Elizer?" Preguntó Arnold con su voz firme.

"Si, quien habla?"

Las manos de Arnold le sudaron por la ansiedad.

"Esta Helga contigo?" Preguntó Arnold con su voz dura.

"Quien es?" Volvió a preguntar Elizer.

"Dime si Helga esta contigo!?" La voz firme de Arnold incómodo a Elizer.

"Si no me dices quien eres no tengo porque contestar tus preguntas!" Le respondió Elizer.

Arnold respiro profundamente intentando en no perder la paciencia ante el hombre que el sabía, que había tenido a Helga en sus brazos.

"Mi nombre es Arnold, soy el novio de Helga. Estoy aquí en el campus y no me iré sin ella!!"

Notas de autor:
El día finalmente llegó, Arnold esta en Alcalá campus con un solo propósito en su mente. Que hará Elizer ante eso?

Este capituló tuvo mucha drama y revelaciones. Arnold miró el mensaje de Helga revelando la terrible verdad. Ella no sabe quien es el.

También reveló las mentiras de Gerald y Phoebe. Pero más que todo, la traición de su mejor amigo Gerald. Phoebe hacia lo mejor a como ella se imaginó que era correcto. Pero era deber de Gerald en decirle a su mejor amigo la verdad de su novia.

Por el lado de Elizer y Helga. Hubieron problemas. Elizer no sabe como comunicarse con una pareja. Más la mala reputación de como él se burla de las mujeres a su alrededor lo persiguen. Las personas que lo conocen saben que cualquier mujer de Elizer no es para darle respeto y por poco, Helga paga él precio máximo de esto.

Con un gran susto de lo que pudo haber sucedido, Elizer reveló un secreto que ni siquiera el había comprendido. El nunca fue sincero con ninguna mujer, no conocía el respeto, mucho menos el amor hacia alguien. Pero parece que algo cambio en el corazón de él. Y por Helga, Elizer está dispuesto a hacer lo que nunca hizo por nadie.

Este capituló estuvo intenso y no hemos terminado aun hay más por venir.

Les agradesco su atención en mi historia y el respeto hacia la presentación de cada uno de mis capítulos.

Los dejó por ahora y hasta el próximo capituló.

P.S
La tormenta llegó a Alcalá Universidad y en el próximo capituló veremos los truenos.