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Capitulo 12


Los padres de Helga llegaron a la casa al siguiente día. Incluso llegaron más temprano de lo esperado, pero Helga estaba lista esperándolos.

"Como te fue estos días que estuviste sin nosotros.? Pasó algo interesante?" Preguntó Miriam.

La vida de Helga había cambiado por completo en los días que ella estuvo sola. Helga se había entregado a Arnold y eran una parejita nueva de enamorados. Sin embargo, Helga no se sintió segura en revelar a sus padres que ella tenía novio y mucho menos, en decir que era Arnold.

El primer día de colegio se aproximaba. Helga hablaba con Arnold por el celular por las noches y se mandaban mensajes durante el día, pero los dos siempre se la pasaban muy ocupados para verse y cuando Arnold tenía tiempo de estar con ella, Bob la mantenía ocupada en el negocio de la familia.

"Cuando le vas a decir a tus papás que somos novios Helga?" Le preguntaba Arnold desesperado en quererla ver.

"Ya pronto, dame tiempo cabeza de balón."

Helga intentaba en decirle a su papá que tenía novio pero cada vez que iniciaba esa platica su papá le grita.

"Espero que no me digas que tienes un bueno para nada que te este rodeando ahora que entrarás a la universidad!...No te atrevas en decirme que dejarás los estudios para irte por ahí de chiflada con cualquier tipo como lo hizo tu hermana! Nosotros los Patakis no perdemos nuestro tiempo en el amor!...Actúa con inteligencia y no andes de calenturienta  por ahí cuando debes de estar estudiando!"

Era Sábado, el último fin de semana antes del primer año escolar y Helga estaba en su habitación viendo que se iba a llevar para la universidad. Antes que Helga estuviera con Arnold, ella anhelaba el día que finalmente se fuera de la casa de sus padres a un mundo nuevo lejos del recuerdo de Arnold. Eso era antes, ahora que ella y Arnold estaba juntos el sueño del viaje tan esperado se había convertido en una pesadilla.

"Criminal! No quiero irme lejos de mi amado príncipe de amor. Que pasará de nosotros cuando duremos meses alejados? No quiero pensar que Laila o alguien más intente en meterse entre nosotros. Mi relación con Arnold parece un sueño vuelto en realidad y sin embargo se siente in real, como si fuera demasiado hermoso para ser verdadero."

"Olgaaaa!!" Gritaba la mamá de Helga desde la lavandería.

"Criminal ahora que quiere!" Repelaba Helga saliendo del cuarto,  dirigiéndose al primer piso.

"No lavarás tu ropa antes de irte a la universidad?" Sugirió Miriam.

Helga entró al pequeño cuarto de lavandería en donde su mamá apartaba la ropa blanca de la de color para lavar.

Miriam seguía tomando por el día, pero en estar con su mamá cuidándola unos días le había quitado la costumbre de tomar, por el momento.

"Estado bien ocupada con las preparaciones de mi registro, las compras de libros, mis materias... más aparte Bob me puso a llenar unos contratos que él quiere firmar con otras compañías."

"Ya se irán mañana temprano?"

"No me recuerdes Miriam, y si nos iremos temprano. Seis horas en el carro con Bob no sera nada placentero. Intentaré en llevar mis audífonos para ir escuchando música todo el camino."

"Y tú ropa?" Preguntó Miriam.

"La lavare en la noche." Respondió Helga.

"Es lo que no quería Helga, tú sabes lo ruidosa que la lavadora y secadora son."

"Por favor Miriam tú duermes como una  roca, Bob también. De que te preocupas."

Unas horas después, ya en la noche, Helga platicaba con Phoebe por el celular. "Estas nerviosa por mañana Helga?"

"Claro que no Phoebe. Y tú?"

"Yo si, siempre me pongo nerviosa en el primer día de escuela, especialmente ahora que iremos a la universidad. En tan solo pensar que las clases son de casi cien estudiantes me....intimida."

"Yo consideró que clases más grandes es mejor Phoebe, así él profesor no te pondrá tanta atención con otros cien alumnos a tu alrededor. Aparte tu y Gerald irán a la misma universidad así que siempre estarán juntos."

"Pero tenemos diferentes clases Helga. En realidad creo que tan solo tendremos una clase juntos."

"Una clase es mejor que nada y podrán juntarse a comer lonche. A como yo lo veo Phoebe, tú estás de maravilla."

"Cierto Helga, no debería de estar nerviosa, muchos de nuestros compañeros de prepa también irán a la misma universidad que nosotros. No creo que mirare tantas caras nuevas....pero tú."

"Si ya se Phoebe. Yo si estaré en un lugar completamente nuevo con caras nuevas en todas las direcciones. Hace unos meses yo deseaba que este día llegara pronto, ahora....no quiero que llegue."

"Como se siente Arnold al respecto?"Preguntó Phoebe.

"El es...optimista y dice que todo saldrá bien y que el semestre pasará rápido."

"Arnold es muy comprensivo e inteligente. El tiene razón, el semestre pasará rápido."

"Espero Phoebe. El hecho que Laila y Arnold estarán en la misma universidad me...incomoda aunque tengo confianza en mi Arnold, no quiero descartar la posibilidad que Laila intenté algo sucio contra él."

"Pero que no esta Laila con Arnie?"

"Si pero eso no importa, Laila siempre a querido estar con Arnie y Arnold al mismo tiempo. La desgraciada!"

"Arnold sabra cómo lidiar con Laila y sus engaños."

"Tienes razón Phoebe, necesito confiar que Arnold no se dejará de ella. Pero me siento extraña, como si, mi relación con Arnold estuviera en peligro."

"Porque lo dices Helga?"

Helga respiraba con frustración "El noviazgo con el amor de mi vida se siente demasiado bello para ser real. Me siento como si, no lo mereciera......que tal si tanta perfección entre nosotros no fuera destinada a ser!"

Phoebe respondió. "Todas las relaciones pasan por momentos difíciles en una cierta etapa, eso no quiere decir que no estén destinados a estar juntos. La relación de ustedes es muy especial Helga. Yo nunca había mirado a Arnold tan feliz como lo veo ahora. No pienses menos de ti misma y lo que tú y Arnold merecen."

"Pero Phoebe. No quiero perder a Arnold y siento que corro un riesgo si me voy."

"Si el amor es real, persevera cualquier condición."

"Y si lo nuestro no es real Phoebe?"

"Si no lo fuera, la relación de ustedes se terminaría tarde o temprano, no importando las condiciones."

Helga estaba en silencio con el celular en mano pensando en lo que su mejor amiga le decía.

Phoebe Añadió. "Nada es seguro en nuestras vidas y no por eso, vivirás con miedo por lo que se aproximará en tu camino. Ser fuerte y enfréntalo todo sin temor."

"Este amor que siento por Arnold y nuestra nueva relación me hace sentir, vulnerable. Pero tengo que estar segura de mi misma y ser fuerte."

"Así se dice Helga, veras que el amor entre tú y Arnold persevera y muy pronto estarán estudiando juntos. A que hora salen mañana?"

"A las cuatro de la madrugada. Tenemos que llegar a la universidad antes del medio día para confirmar mi habitación."

"Separaste un cuarto adentro del campus de la universidad?"

"Si, mis becas están pagando por todo, las clases, los libros y mi renta de la habitación que compartiré con otra alumna."

"Genial Helga, que bueno que tus papás no pagaron nada."

"Pues si. Por otro lado, como las becas están pagando por mi educación estoy sujeta a tener que mantener grados de noventa para arriba o perderé mis becas."

"Que presión Helga."

"Tú siempre has sacado cienes Phoebe, pero yo soy ochentera. Ahora si tendré que presionarme y estudiar muy duro para salir con un noventa en todas mis materias."

"Lo harás Helga eres muy inteligente."

"Por un lado quizás en estar sin mantecado en la uni me ayude para concentrarme mejor en mis materias."

"Es mejor que veas el lado positivo de todo esto Helga y tienes razón, aprovecha estos meses para enfocarte en tus estudios y iniciar bien el año."

"Tienes razón Phoebe. Por eso eres mi mejor amiga, siempre puedo decirte exactamente como me siento y......siempre puedo aclarar mis pensamientos cuando platicamos."

"Para eso son las mejores amigas Helga. Nos podemos decir todo, ay consejos que, ni siquiera nuestros novios nos pueden decir. Es algo entre mujeres. Nunca ay que perder esa honestidad entre nosotras Helga."

"Somos mejores amigas Phoeebs, y siempre lo seremos."

De repente entró un mensaje de Arnold.

-llámame Helga ❤️ -

"Phoebe, Arnold me mando un mensaje. Te llamaré mañana por la noche desde mi cuarto nuevo."

"Que tengas un buen viaje Helga."

"Adiós Phoebe."

Después de colgar la llamada con Phoebe le marcó a Arnold.

"Hey cabeza de balón, querías que te llamara."

"Y tú no querías hablar conmigo Helga."

"Te iba a llamar más tarde, tú sabes que estado súper ocupada en estos días y estaba platicando con Phoebe cuando entro tú texto."

"Te quería invitar a desayunar mañana antes que te fueras."

"No podré, me iré a las cuatro de la mañana."

"Que!? Cuando decidiste esto Helga!?"

"Hoy por la tarde."

"Hoy!! Y cuando me ibas a decir!?"

"Mmmm....hoy por, la noche."

"Helga. Tú me dijiste que te irías después del medio día para llegar en la noche."

"También yo pensé eso pero, encontré un correo electrónico diciendo que tenía que confirmar mi cuarto para antes del medio día o lo perdería."

"Helga, yo quería verte antes que te fueras."

"Yo se cabeza de balón, también yo quería verte pero, me acorde que tú estarías ocupado con tus abuelos hoy."

"Si Helga pero terminamos las vueltas temprano, mi abuelo encontró rápido lo que estaba buscando y llegamos a la casa de huéspedes por la tarde."

"No sabía cabeza de balón y......no te quería molestar cuando yo sabía que estarías ocupado con tus abuelos."

"Helga tu nunca me molestas, cuando aprenderás eso."

"No se, todavía me siento extraña de que te pueda llamar todo el tiempo cuando yo quiera."

"Helga...necesito verte hoy. No nos hemos mirado desde que llegaron tus papás a tu casa y eso fue hace cinco días."

"Ya se Romeo....es que, mis papás no saben sobre nosotros."

"No crees que ya era hora para que les hubieras dicho?"

"Mmm...si, mañana estaré en el carro seis horas con mi papá, quizás le diga entonces."

"Quizás?"comentó Arnold.

"Esta bien, definitivamente sabrá que tengo novio."

"Helga quiero verte antes que te vallas."

"También yo pero....son casi las once de la noche."

"Eso no me detiene si te quiero ver, tú lo sabes....y si voy a tu casa."

"Ahorita?"

"Porque no."

"No es como si puedes entrar por la puerta de enfrente Arnoldo."

"Por la puerta no, pero por tu ventana si."

"Arnoldo! Te quieres meter a mi recámara a escondidas cuando mis padres están en la casa!?"

"Se escucha mal verdad?"

"Definitivamente cabeza de balón."

"Entonces....no nos veremos." Comentó Arnold con tristeza en su voz.

"Yo nunca dije eso" respondió Helga.

"Llegó en dies minutos."

"Tan desesperado estas Arnold."

"Y tú no?" Añadió Arnold con su voz coqueta.

Helga se rio "Que puedo decir."

"Ahorita llego Helga. Todavía están las escaleras de emergencia a lado de tu ventana verdad?"

"Si Romeo"

"Ahí te veo mi Julieta."

Helga bajo a la lavandería para poner más ropa a lavar pensando que muy pronto miraría a Arnold. Criminal tengo mi corazón brincando de emoción por verlo, solamente pasaron cinco días y se siente como una eternidad. Como diablos le hacía antes cuando no éramos novios para aguantar tanto tiempo sin verlo, ahora con cinco días que no lo veo y ya estoy que me muero por sus besos....Maldicion como le haré cuando me valla al colegio y deje de verlo por días y días. Pensaba Helga dirigiéndose a su cuarto con una canasta grande de ropa limpia para doblar.

"Ya sabes que tienes que hacer Helga!" Le recordó su papá parado en el pasillo con su mirada firme hacia ella.

"Ha-cer....de que estás hablando Bob?" Le pregunto Helga un poco tensa.

"Me tienes que levantar mañana temprano para irnos, no pienses que yo me estaré levantando temprano con mi propia alarma porque no!"

Helga soltó un respiro en alivio, por un momento ella pensó que Bob sabía algo de Arnold. "Lo entiendo Bob. Ya te vas a dormir?"

"Si tengo mucho sueño y me espera una manejada larga."

"Buenas noches Bob" le respondió Helga mirando como su papá se dirigía a la recámara y cerró la puerta con fuerza.

Si justo lo que quería. Pensó Helga con una sonrisa. Ella se metió a su recámara y atranco la puerta por dentro. "Cielos estoy que me muero de ansiedad por ver a Arnold."

Helga sacó dos maletas grandes de su armario y empezó a acomodar la ropa que se llevaría.

Ting....Ting....

Entró un texto al celular de ella.

-Estoy subiendo las escaleras, abre tu ventana.--

Helga se apresuró para abrir la ventana antes que alguien lo mirara. Arnold se agacho para apretarse por la angosta ventana. "Será mi imaginación o te veo más alto." Dijo Helga mirando a Arnold batallando para entrar.

"Helga." Respondió Arnold abrazándola con un osito rosa de peluche en sus manos. "Que bueno es en verte. Te traje un regalo para que me recuerdes por las noches."

"Es bello...será más difícil para mí en que pase el tiempo recordándote por las noches, no lo crees. Pero gracias  por el oso...rosa es mi color favorito." Dijo Helga poniendo el osito en su maleta.

"Ven paraca Helga." Comento Arnold con una sonrisa suave.

"Que..." Respondió Helga acercándose a Arnold. De inmediato él la jalo de la cintura y la apretó fuerte en su cuerpo besándola.

Helga le agarró su cabellera rubia jalando su pelo con cada beso suave que Arnold le daba. "Cielos...Romeo tus besos se ponen más sabrosos con cada vez que....." Arnold la volvió a besar sin dejar que ella terminara de hablar. Las manos de Arnold pasaban por la espalda de ella presionando su cuerpo completo a él.

"Como te extrañe en estos días. Solo en probar tu boca, me dejas....hechizado por ti." Murmuro Arnold rosando su nariz con la de ella..

"Imagínate yo que me sentí así desde la primera vez que te besé durante la presentación de Romeo y Julieta."

"Te pregunté porque el beso fue tan largo y me contestaste que actuabas." Le recordó Arnold con un rostro seductor.

"Te...mentí." Respondió Helga tímidamente.

"Lo sabía. Por eso te dije......lo que tú digas Helga."

"Siempre me has contestado así cabeza de balón."

"Era mi manera en decir. Lo que tú desees princesa. Siempre a sido de esa manera contigo Helga. Yo solamente quería darte el gusto de verte contenta y aceptaba lo que me pidieras, aunque no siempre me gustaba."

"Por eso me enamorabas cada vez más de ti cabeza de balón, porque nunca me dabas la contraria." Helga se acercó a su peinador y sacó algo de un cajón. "También yo tengo algo para ti."

"Que es?" Preguntó Arnold.

"Es mi.......relicario." Contestó Helga poniendo el collar sobre el cuello de Arnold. "Quiero que tú lo mantengas en estos meses que estemos separados." Helga abrió el relicario para que Arnold leyera la inscripción.

-Arnold alma mía.
Mi corazón siempre estará contigo
Te amo, Helga G Pataki.-

"Helga yo nunca supe que tú utilizabas este...." Helga le puso su dedo en sus labios.

"Shhhhh....no hables fuerte. Este relicario era mi más grande tesoro por años desde la primaria. Me lo ponía todos los días hasta......." Helga suspiro con su mirada hacia abajo.

"Hasta que Helga?" Preguntó Arnold poniendo su mano sobre la mejilla de ella.

"Hasta......el día que te encontré besando a Laila después de escuela, al día siguiente supe que ella era tu novia y....ese fue el ultimo día que utilice mi relicario." Recordó Helga con sus ojos húmedos pensando en el dolor que sintió aquel frío día.

Arnold la abrazo. "Helga....eres mi corazón dorado mi vida. Yo no conocía el verdadero amor en aquel tiempo, ahora....tú me lo has demostrado de todas las maneras posibles.....Te amo Helga y cuidaré muy bien de tú relicario, te lo prometo."

Los brazos cálidos de Arnold consolaban a su amada, con sus labios unidos en acaricia de sabor de amor. Helga tenía sus pechos apretados en Arnold, sintiendo sus manos grandes rosar su piel. "Helga....te deseaba tanto." Murmuraba Arnold probando el cuello delicado de ella.

Helga se dejo caer lentamente sobre la cama sin dejar de besar los labios de él. "Arnold....tócame, quiero llevarme tus huellas en mi cuerpo."

Arnold le quitó la blusa blanca revelando sus calientes pechos. De inmediato,  él probó los pezones suaves de ella con su lengua,
urgido por su sabor. Helga le jalo la camiseta roja, quitándosela por completo. Los rubios enamorados se besaban con desesperación, tocando sus cuerpos, gozando ese momento de pasión entre los dos.

Helga le desabrocho el pantalón y resbaló su mano por adentro de sus bóxers. Arnold sintió la mano suave de Helga tocando su ardiente miembro, excitado por ella. "Helga....." dijo Arnold agitado en calor. La mano de Helga frotaba el miembro de Arnold excitándolo aún más.

"Estas....más que listo para dármelo." Murmuro Helga con sus ojos azules brillando en la mirada de él.

"Pero amor...nos escucharán tus......"

"Shhhhh.....mis papás están dormidos. Te quiero para mi, te amo Arnold."

En escuchar la voz de Helga pedir por él, lo volvía loco de ella. Arnold se quito sus pantalones y le bajo los calzoncillos a Helga tapándola con la cobija de la cama.

Helga lo agarró de sus mejillas mientras lo miraba fijamente a sus ojos. Sin decir nada, lágrimas empezaron rodar por los ojos tristes de ella. "Porque lloras mi vida?" Le pregunto Arnold angustiado.

El corazón de Helga expresaba un temor y dolor que ella no pida describir. Helga apretaba sus labios sintiendo sus dientes temblar en su boca. No quería interrumpir ese momento de amor puro entre los dos. Su corazón latía con intensidad sintiendo el cuerpo pesado de su amado Arnold.

"Arnold..... Tú tienes mi corazón en tus manos, cuídalo por favor."

"Siempre te llevaré con migo en mis pensamientos y en mi alma Helga. Te amo, eres lo más bello de mi vida y guardare tu amor, aquí en mi corazón por siempre."

Helga lo beso enrollando sus piernas arriba de las piernas de él. Entre besos pasionales de amor. Sus cuerpos se unieron en fuego de pasión, dándose un placer único entre ellos.

Helga se mordía el labio sintiendo el cuerpo firme de Arnold sobre el de ella. "Eres mía Helga....solo mía." Le decía Arnold, penetrando el cuerpo de Helga con intensidad.

Helga extendía sus brazos sobre el cuello de su amado, mirándolo a sus ojos, como ella sabía que a él le encantaba. "Si Arnold, hazme tuya.....deja tu calor en mi."

Arnold sintió su cuerpo al tope de placer con cada rose húmedo que el cuerpo de ella le daba. "Helga....te quiero seguir haciendo mía."

Helga enrollo sus piernas sobre las caderas de Arnold empujando sus caderas hacia arriba, dejando que Arnold la llenará más profundo. Con una sensación al máximo, los dos se abrazaron presionando sus cuerpos en un orgasmo denso de amor.

El oxígeno entre ellos los dejo agitados.  Arnold recargo su rostro sobre los pechos de Helga escuchando los latidos de su corazón.

"Arnold se te olvido en quitarte mi relicario todo este tiempo." Murmuro Helga faltándole el aliento.

Arnold miró hacia abajo dándose cuenta que el relicario de Helga colgaba sobre su pecho. "Parece que si, no me acordaba que lo traía puesto amor."

Helga sonrió en satisfacción. "Me cumpliste una de mis fantasías, que me hicieras el amor con mi relicario puesto."

"Una de tus fantasías Helga? Cuantas tienes?"

"Mmmm....irás averiguando poco a poco....o como las vallas cumpliendo cabeza de balón."

"Eres un encanto Helga Geraldine Pataki."

"Que hermoso se escucha mi nombre completo con tu suave voz mi Romeo."

Arnold la empezó a besar suavemente, pasando su lengua cálida seductora por los labios de ella, probando con delicadeza su boca. "Helga....que me haces que me tienes ido por ti." Dijo Arnold con calor en su voz.

"Te doy todo de mi." Le contestó Helga pasando sus dedos por el pelo húmedo sudado de Arnold.

"Creo que estaría mejor si nos cambiamos para no presionar nuestra suerte encanto." Sugirió Arnold.

"Cierto. Más aparte necesito terminar de acomodar mis maletas. Me ayudas."

"Por supuesto Helga."

Arnold y Helga se cambiaron rápido y acomodaron la cama.

"Me dejaste mi cuerpo cálido de tu calentura mi vida."

"Cómo crees que me dejaste a mi." Respondió Helga con una sonrisa tierna.  

"Vamos a ver que te vas a llevar de ropa." comentó Arnold sentándose sobre el suelo y doblando la ropa.

"Me voy a llevar pocas cosas, pensé que compraría ropa nueva en estos días pero solamente encontré unas playeras y dos jeans."

"Y ya compraste todos tus libros y útiles para las clases?" Preguntó Arnold.

"Si, batalle para encontrar un libro pero al final lo encontré."

"Eso es bueno. Así que tienes que registrar tu cuarto para antes del medio día?"

"Si, lo bueno es que miré la notificación por correo electrónico.. Arnold.?"

"Dime Helga."

"Que pasaría....si, Laila te vuelve a buscar. Ya que ustedes estarán en la misma universidad."

Arnold miró a Helga preocupada acomodando la ropa en su maleta. "No pasará nada amor, solamente la ignoraré."

"Y si ella te sigue hablando?"

Arnold se acercó a Helga agarrándole la mano. "No quiero saber que te irás preocupada por eso. Confías en mi?"

"Si...pero en ella no."

"No importa ella Helga. Recuerda que yo te amo y, me cambiaste por completo. Siento que tu amor fluye por mi cuerpo. Como si estuviéramos siempre destinados a estar juntos.....No importa que pase por nuestras vidas  o que personas quieran apartarnos....al final, siempre estaremos juntos."

Los ojos de Helga se llenaron de lágrimas. "Eres tan detalloso con tus palabras cabeza de balón. Odio en llorar y tú siempre logras en tocar lo más delicado de mi."

Arnold le limpio la lagrima mirándola fijamente a sus ojos azules llenos de melancolía. "Como me enamora tu mirada Helga, tus labios, tu voz, hasta tu rebelde pelo rubio me atrae a ti. Tú eres la única que me a podido atraer de esta manera."

"Cuando nos volveremos a ver?" Preguntó Helga.

"Intentaré en ir de esta semana a la otra. Mi carro me está  fallando y....no lo quiero correr largas distancias. Estoy intentando en juntar un dinero para repararlo y así me lo podré llevar a verte mas seguido."

"Como quiera Arnold, estará demasiado lejos para que me visites seguido. Si acaso yo puedo tomaré un autobús de venida y vuelta."

"Ya veremos cómo nos organizamos Helga. Mientras menos lo pienses, el tiempo pasará más rápido."

"No creo que eso sea posible cabeza de balón."

Arnold miró a Helga doblar la falda negra y acomodándola en la maleta. "No te llevarás esa falda amor mío." Comento Arnold agarrando la falda doblada.

"Claro que me la voy a llevar." Insistió ella.

"No te la llevarás Helga."

"Me la pondré con un short abajo."

"Olvídalo Helga."

"Que piensas, que no se como sentarme con una falda rabona."

Arnold la miraba con una sonrisa coqueta. "No sabes cómo sentarte Helga."

"Como!? Porque lo dices Arnoldo!?"

"Solamente te digo mi vida y la respuesta es no te la llevarás. Tampoco quiero que te lleves vestidos o shorts rabones. Llévate puros pantalones."

"Estas loco Arnoldo. Pero esta bien....como quiera mañana temprano terminaré de acomodar mi maleta."

"Me llevaré la falda a mi casa Helga."

"ggrrrrr....me caes de la patada cabeza de balón no puedes ordenar que me puedo poner!"

Arnold se rio de ver el gesto molesto de Helga. "Ya extrañaba ese lado tuyo amor."

"Que lado mío!?" Preguntó Helga molesta.

"Esa carita de enojada que me dabas...siempre te miraba encantadora con tus mejillas chapeadas de coraje."

Helga lo miraba con su ceja levantada. "Necesito tú camiseta roja Romeo."

"Hablas de la camiseta que traigo puesta?"

"Si...tienes una playera blanca abajo. Quítate la camiseta roja, que me la voy a llevar."

Arnold sonrió mirando la mano de Helga extendida para tomar la camiseta. "Por supuesto que te la puedes llevar." Arnold se desabrochó la camiseta roja y se la entregó a Helga.

Después de acomodar la ropa que se llevaría. Arnold le dio un fuerte ultimo abrazo a Helga y la volvió a besar. "Tú amor lo llevo aquí en mi pecho Helga. Quiero que confíes en mi y pon atención en tus estudios. Cuando tenga la oportunidad iré a visitarte."

Helga lo abrazó no queriendo dejarlo ir.  "Criminal porque es tan difícil en soltarte." Decía Helga con sus brazos enrollados en el torso de Arnold.

"Llámame cuando quieras Helga. No te limites por favor."

"Si Arnold."

"Vete segura amor, y ponte tu cinturón."

"Si corazón mío." Le respondió Helga. "Criminal ya vete Arnold mientras más tiempo estés aquí más me duele!"

Arnold le dio otro fuerte abrazo a Helga y se quitó su cachucha azul para ponérsela a ella.

Los ojos azules lloros de Helga se abrieron del asombro. "No me digas que me estás prestando tu gorra!"

Arnold le sonrió con cariño. "Mi gorra me queda chica pero a ti....te quedó perfectamente."

"Pero es tu cachucha favorita, yo no puedo quedarme con...."

"La única persona que pudiera confiar con mi gorra eres tú Helga. Yo hubiera perdido mi cachucha hace muchos años si no hubiera sido porque tú la encontraste cuando éramos niños."

"Pero..."

"No digas más amor, llévatela." Arnold le dio un beso suave en sus labios. "Te amo, nunca lo olvides."

Helga se mordía el labio mirando a Arnold salirse por la venta. Su cuerpo temblaba con las ganas de correr hacia él y abrazarlo de nuevo, pero ella se detenía con todas sus fuerzas.

"Ser fuerte Helga, solamente es por cuatro meses. Tú puedes." Después que  Arnold se fuera Helga se dejó caer sobre la cama con la camiseta roja en sus brazos y la cachucha azul de Arnold en su cabeza. "Cielos, Arnold me dejó su rico aroma en mi cuerpo, y su camiseta roja y....su cachucha!" Dijo Helga con emoción. De pronto ella se acordó de algo. "Mi falda negra! Se la habrá llevado Arnold?"

Helga busco en su maleta la falda negra y no la encontró. "Criminal! Arnoldo se la llevó! Ese cabeza de balón siempre se tiene que salir con la suya! Grrrr.....Aaaaarnold."

Al siguiente día Helga se embarcó en el largo recorrido en auto por seis horas con Bob.

"Entonces ya tienes todo planeado cuando llegues al colegio?" Preguntó Bob.

"Planeado de que forma Bob?"

Bob pensaba. "No se, pero no te quiero desperdiciando tus días en fiestas y amistades cuando debes de estar estudiando."

"En primer lugar Bob, no conozco a nadie. Segundo, no iré a fiestas ya que todos mis amigos están aquí y tercero no perderé el tiempo."

"Espero que no...no quieres que termines desperdiciando tu educación como le pasó a Olga al final."

"Créeme Bob, no me perderé con ningún chico en el colegio. Bueno. No mientras esté a ya."

"Como fue!?"

"Nada Bob! Solo digo que no me pasará lo que le pasó a Olga."

"Que bueno."

"Pero ahora que estamos hablando quería comentarte que yo tengo edad para tener novio y...."

"Y nada no te quiero con novio ahorita."

"Cuál es el problema que yo tenga novio Bob."

"Tienes novio!?"exclamó Bob molesto.

"Uhg....y si te digiera que si."respondió Helga.

"QUE!! QUIEN ES EL MALDITO!!" Gritó Bob en furia.

"Nadie Bob! Solamente bromeaba para ver que ibas a decir!"

"YO NO JUEGO HELGA! ESPERO EN NO ENTERARME QUE ANDAS CON UN  JODIDO MUERTO DE HAMBRE!"

"Olvídalo Bob no tengo a nadie! Criminal! Tranquilízate por Dios!"

"ESPERO QUE NO LE ESTÉS ABRIENDO LAS PIERNAS A NINGÚN JODIDO! PORQUE SI LO ESTÁS HACIENDO POBRE DE TI, SOY CAPAS DE MANDARTE LEJOS A ESTUDIAR A UN COLEGIO DE PURAS MUJERES!"

Helga se fue el resto del camino escuchando los gritos de Bob recordándole una y otra vez porque no podía perder el tiempo con un novio durante los años de colegio.

Tres horas de reclamo después Helga finalmente llegó al campus de la universidad. Bob paró el auto y Helga se bajo desesperada bajando sus cosas apurada antes que Bob le dijera algo más.

"Cuál será tu habitación?" Preguntó Bob.

"No se todavía Bob tengo que pasar a la oficina de registro primero y ahí me darán la llave de mi cuarto nuevo. Ya te puedes ir Bob gracias por......un camino amargo." Helga murmuro esa última parte.

"Recuerda de lo que hablamos Helga!" Insistió Bob.

"Como olvidarlo!" Exclamó Helga con sus maletas en manos y alejándose del auto.

Bob levantó la ventana del auto y arrancó.

"Finalmente soy libre de mis padres. Que martirio soporte todo el camino, no se como pude hacerlo." Helga miró alrededor explorando el grande campus de la universidad. "Cielos es más grande de lo que pensé."

El campus universitario era inmenso con varios edición en diferentes direcciones. Tenía un parque grande para correr y leer libros al aire libre y varias cafetería

Helga recorrió el largo terreno universitario con sus dos maletas pesadas en sus manos. Miraba en su celular el mapa del campus y no encontraba la oficina.

Al final encontró la oficina de registro, que tenía una fila larga para levantar las llaves para los cuartos. Helga estaba cansada de caminar, con sudor goteando por su frente sin embargo encontró la paciencia para esperar en fila.

La fila ya había avanzado hasta la mitad del camino, le faltaba un poco más para llegar a la oficina cuando de pronto un joven se metió en la fila enfrente de Helga.

"Que se cree este inútil! Oye tú!" Helga le tocaba el hombro al joven alto enfrente de ella. "Te estoy hablando!" El joven seguía ignorándola. "Te estoy hablando a ti cara de mula jodida!"

El joven se volteó mirando finalmente el rostro furioso de Helga.

"Mula jodida? De donde sacas eso si ni siquiera me has mirado el rostro?"

"Los mendigos se dan de ver hasta de espalda." Respondió Helga enojada.

El joven se carcajeó por el comentario de Helga.

"La fila empieza atrás, no quieras pasarte de listo!"

"No me pase, ya lo hice güerita." Le respondió el joven muy risueño.

"A quien le dices Güerita! Salte de la fila!" Helga lo empujaba intentando en sacarlo.

La fila avanzó rápido y el joven alcanzó a ser atendido primero.  Toda casada, aturdida y con hambre Helga llegó a su habitación. Metió la llave en la chapa y abrió la puerta ampliamente.

En el momento que Helga entró al cuarto dejó caer las maletas, agotada por haberlas cargado todo ese tiempo.

Soltó un fuerte respiro de cansancio y levantando su mirada al interior del cuarto con la sorpresa de ver a alguien que no esperaba.

"Tu!...Qué haces aquí?"

Notas de autor:
Este capituló estuvo muy largo, y intrigante. Tuve tiempo de terminarlo esta semana y lo aproveché.

Como les pareció?

Mi parte favorita fue cuando Arnold y Helga estuvieron juntos y cuando Arnold le quitó la falda negra y le dio su cachucha a Helga. 🥰 oh y también cuando Helga le dio su relicario a Arnold. ❤️

Los dejo con estos dibujos que me recordaron de mi historia, son de una de mis artistas favoritas, ella me permitió poner su bella arte en este capituló. 😁

Here's some amazing art by annoyinglycute1

These three drawings remind me of some scenes from this Fic. You can follow the artist on Instagram to view more of her amazing work.

Hermoso verdad, crédito para annoyinglycute1. Pueden ver su arte en Instagram.

Hasta la próxima. 🙋🏻‍♀️

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