Un líquido frío en su mano hicieron que abra sus ojos.

Miró a todos lados, encontrándose con la televisión encendida, el sol brillando por la ventana y a MinHo abrazando su cintura, completamente dormido.

Alcanzó su teléfono, y al ver que marcaba las 7:30 a.m no le importó una mierda despertar al joven sobre él.

Desesperado comenzó a buscar sus pantalones, su camisa, la corbata y agradeció que el saco estuviese colgado.

JiSung ignoró que MinHo tenía una graciosa cara de impresión, agregándole que recién se levantaba.

—¿Qué haces?

—Tengo clases, imbécil.

—Wow, wow, cálmate —tomó asiento.

Como pudo ató sus cordones, tomó su bolso y podía dejar que Jake le haga el nudo de la corbata.

—Si vas apurado, todo te saldrá mal.

—¿No piensas ir a clases?

—Tengo a las 9:00 —sonrió encogiendo sus hombros.

Los alumnos de abogacía eran tan afortunados.

Siguió dando vueltas, arreglando medianamente su cabello, buscando su calculadora y saco.

—No estés enojado, sólo nos dormimos viendo películas y tomando helado. Boom, rimas otra vez.

—Adiós —dió un portazo y comenzó a correr.

Bajó rápidamente las escaleras, esquivando a todas las personas a su paso.

Cuando empujó las dos puertas, miró su reloj y no escuchado la campana lo mantuvo “tranquilo”.

El peliazul comenzó a correr, pues tenía que pasarse casi todo el campus.

Tenía claro que posiblemente no llegue y sólo pase un momento de “vergüenza” (todos alguna vez lo pasaron) frente a su clase.

Faltaba poco, muy poco para poder safar su hazaña como llegar tarde. Hasta que alguien tironeó de su bolso, provocando que caiga al instante.

—¡Lo siento, lo siento! —escuchó una voz muy familiar entre todo el aturdimiento.

Ya le valió su clase. Se había golpeado la cabeza, y todo su cuerpo le dolía.

Sí, adelante, díganlo. Era un bebé hecho de porcelana.

Tomó asiento con ayuda de esa persona y tocando la zona golpeada, suspiró.

—¿Había una necesidad muy especial de hacer eso, noona?

—Te he dicho miles de veces que odio cuando eres respetuoso. Levántate —lo ayudó. —O bueno, que me digas “noona” me hace sentir vieja.

—Lo olvidé —acomodó su bolso y exageró en el nombre. —“Tzuyu”.

—Mejor —sonrió a chica. —¿Ahora sí vas a decirme por qué corrías como loco?

—¿Y tú por qué me tumbaste?

—Duh. EunHyuk está hablando con el grupito de estúpidas y el director.

Cerró sus ojos. —¿O sea que me vestí rápido, segurame de tengo medias distintas y por poco pierdo mis pulmones por nada?

—En otras palabras —sonrió. —Vamos a sentarnos, imagino que tienes para rato.

Ambos jóvenes caminaron hasta algunas bancada vacías y tomaron asiento.

—Déjame acomodarte el cabello —palmeó sus piernas para que JiSung se acomode en ellas.

En una posición un tanto “comprometedora” pero muy acostumbrada entre ambos, Tzuyu quitaba los rastros de polvo en la cabellera de Sung, y a la vez lo volvía a peinar.

Mientras tanto, JiSung sacó su teléfono para su que sea preguntarle a Jake donde estaba.

Ya que era un tanto raro que no le haya avisado de aquella reunión del profesor, o que no le llegaron millones de groserías por no levantarse a horario.

Sin encontrarse nada interesante, volvió a guardarlo, profundizando su cabeza en el cuerpo de su amiga.

Sí, esa caída lo dejó mal.

—Oye... Me llegó el chisme de que te hiciste amigo de MinHo, ¿es cierto?

—No —bufó. —Bueno, en verdad no sé. Desde la fiesta comenzamos a hallarnos más.

—Interesante —sonrió. —No te das una idea de cuantas de mis amigas quieren con él.

—Pensé que todas se daban.

—¡Sunggie! —lo abrazó. —Eres muy chico para esas cosas.

—No es algo ilegal, ni mucho menos nuevo saber de tus aventuras con Sana —decidió incorporarse, y quedar sentado frente a ella.

—Debería decirle a NaYeon que deje sus chusmerías con Chan —rodó sus ojos. —En fin, sí, tienes razón, pero me refería que por ejemplo... ¡ChaeYoung! Y a veces Momo, pero muy poco, dicen que es lindo y esas cosas.

—Es hermoso —soltó. —Pero es... raro, no lo sé.

—Uh —sonrió. —Ese hermoso quedará en mí mente toda la semana.

—No, noona —tapó su boca. —Tzuyu, Tzuyu. Me refería a que obviamente, sin mentir, es lindo; pero su actitud es rara.

—Un maldito sociable que tiene sexo por donde le vean, no busques tantas explicaciones.

—Bueno, lo que digas. Pero conmigo no es... así.

—¿Cómo? Ya abriste la boca, ahora dime todo.

—Bien —suspiró. —Esa noche quiso, ya sabes, tener relaciones. Al otro día no recordaba nada, y cuando regresé por la suspención de clases, él vino a mí par, con helado, diciendo que era en agradecimiento.

La joven permaneció callada por unos segundos. —Em, wow.

—Esto no lo sabe nadie —la apuntó fijamente. —Hablamos toda la noche y nos quedamos dormidos viendo películas.

Tzuyu lo miró de tal forma que termine la oración y rendido, JiSung debió hacer caso.

—Abrazados, sí.

La castaña comenzó a aplaudir como niña. —¡Lo sabía!

—No hagas falsas suposiciones —la calmó.

—Llevan seis meses viviendo juntos.

—Y dos días conociéndonos.

—Qué va. Aunque me guste la idea, no te recomiendo liarte con él.

—Tampoco lo iba a hacer —se levantó. —Ya están entrando.

Los dos chicos avanzaron hasta el salón de clases.

JiSung seguía sin ver a Jake, y SeungMin lo alcanzó en la puerta.

—Mama... —cantaba Chan.

—Se metió otro pejelagarto —dijo JeongIn del otro lado de la habitación, haciendo que HyunJin y JiSung comiencen a reír.

Era muy usual reunirse en la habitación de Chan y Felix, pues los de años mayores, tenían lugares más grandes debido a sus clases, ya que era más exigentes.

—Oigan, ¿saben dónde se metió Jake? —preguntó el peliazul, recordando que no lo vió en todo el día.

—Seguramente se fue de putas con uno de los de ciencias —respondió HyunJin.

—Ustedes dos dejen las suposiciones y tú —Chan volvió con jugos para todos, y apuntó a JeongIn. —Déjame cantar Queen en paz.

—Pero Bohemian Rhapsody es muy triste. Entonces, le agregué algo de gracia —avanzó hacia ellos y tomó asiento.

—Lo sé, pero es un temazo.

—Dejen de hablar de eso —interrumpió JiSung. —En serio, Jake es peligroso.

—Ya te dije —insistió HyunJin. —Está con SungHoon.

—Bien, bien —el mayor de todos tomó algo para comer. —Lo más importante aquí es que Felix fue por comida con ChangBin, o sea, Felix... Y ChangBin... Solos.

—Un alcohólico fiestero y un casi doctor sexy, ¿qué puede pasar? —cuestionó SeungMin.

—¿Semi doctor sexy? ¿A donde vas con eso?

—A que Felix será el típico médico al que todos sus pacientes querrán... Bueno, final feliz —respondió JeongIn.

—Pero Jake —volvió a insistir JiSung.

—¡Ey! ¿Están saliendo o algo parecido? —bufó el joven al lado suyo, cansado de escuchar eso.

—No, sólo me preocupo.

La puerta se abrió, se escucharon bolsas y risas.

—Buenas —Felix saludó.

—Los ayudo —SeungMin se levantó y le dió una mano a ChangBin con las compras.

El australiano tomó asiento junto a Chan, y rodeó sus hombros.

Obviamente se saludaron con un beso, a lo que HyunJin y JeongIn aprovecharon.

JiSung ahí entre ellos.

—¡SeungMin, ChangBin hyung! —gritó y todos se separaron riendo.

—Ok, quiero aprovechar que llegaron todos —Chan captó atención. —¿Cómo vas con MinHo, Sunggie?

—... ¿Tengo que ir bien o mal?

—Bueno, porque Tzuyu...

—Hija de... ¿Qué tiene de malo quedarse dormido con alguien?

Todos sonrieron satisfechos, mientras que JeongIn y el joven de cabello verde chocaron puños.

—Tzuyu no dijo nada, sólo te vimos hablando con ella y...

—¡Me lleva!

—Sunggie no tiene nada de malo que...

—¡Basta! No me gusta, no, para nada, nunca.

—Ok, suficiente —cortó Felix. —Vamos a comer, tengo hambre.

JiSung abrió delicadamente la puerta de su habitación, pues, aunque no era muy tarde, no sabía si MinHo ya estaba dormido o qué.

Una vez dentro, vió al joven tendido en la cama, viendo televisión.

—Ah, llegaste —rápidamente apagó el aparato. —Tengo que admitir que pensé que no llegarías.

—Deberías comenzar a ver la realidad, hyung —tomó asiento en su cama, y comenzó a quitarse lo zapatos. —No soy como tú.

—Ah, no eres como yo. ¿Y cómo soy?

Levantó su mirada. —¿Quieres que sea sincero o seguimos siendo amigos?

Rió. —¿Me consideras tu amigo?

Se levantó en busca de su pijama. —Pues, no lo sé. Es posible.

—Yo... He besado un par de veces a tu amiga, así que, ¿no te molesta?

—¿Qué amiga? Uhg, no respondas —lo detuvo, provocándole una sonrisa. —Nunca fuí fan de los momentos heterosexuales de Tzuyu.

—Yo sí.

—Cierra el pico, no quiero saber más.

—Eso sí, nunca tuve relaciones-

—No me mientas.

—¡No con Tzuyu! Hombre, que es díficil.

—Claro, porque es una chica decente. Sin embargo, las que tú eliges son regaladas.

—No lo niego, pero, ellas la pasan de maravilla, ¿no?

—Eres... increíble.

—Lo sé —sonrió.

Ambos se encontraban en sus camas, dispuestos a dormir.

—JiSung. Lo siento, Tzuyu es tu amiga y...

—Ya, hyung, tengo sueño. Discúlpate mañana.

—Pero Sung-

—Mañana.

—Pero-

—¡Mañana!

—¡Bien! —apagó las luces.

Habrán pasado treinta segundos, y el teléfono de JiSung vibró.

Mensaje de MinHo hyung🙄:

Mañana tienes clases tarde, ¿no? Si aceptas mis disculpas, nos vemos en la cafetería a las 8:00 :(

Tu hyung favorito <3

Se dió vuelta medianamente, para verlo, y una sonrisa se esbozó en su rostro.

a pesar de que es la una de la mañana (casi), quise actualizar <3

y disculpen si hay algún error o algo, estoy medio dormida, jssjs

espero les esté gustando, y muchas gracias por el apoyo (╥﹏╥)

ahora sí, a mimir