A D V E R T E N C IA S

Esta historia contiene:
—Capítulos cortos
—Acoso
—Problemas mentales
—Obsesión
—Muerte de personajes
—Violencia
—Abuso físico y mental
—Y cosas que iré agregando dependiendo de mi ánimo, eso puede llevar a torturas con descripciones gráficas o puede que al final lo borre y no lleve a nada, así que deben esperarse cualquier cosa desde el cap de la primera muerte ya que ahí será el punto de inflexión.

Todo el inicio se va a desarrolar lento y sano, pero después todo se empezará a volver turbio y los personajes no serán lo que crees que son.

Por cierto, esta historia tiene parte de la Novela de Law, significa que es parte de la infancia verdadera de Law después de Doflamingo, solo que no la animaron ni la dibujaron y solo se quedó en una novela, las partes incolucradas de la novela tienen modificaciones hechas para esta historia y que la prota encaje y no sea un obsesión vacía lo que tiene law por su ángel y que el temor de perderla no sea solo por capricho.

Este es un Song-fic y preliminarmente solo hay tres canciones que basan toda esta historia:

♪Blood and Bones♪ [The Blake Robinson Syntetic Orchesta]

♪An Unhealthy Obession♪ [The Blake Robinson Syntetic Orchesta]

♪Can't Help Falling In Love With You♪  [Elvis Presley. Versión Tommee Profeit] (para que se den una idea, le agregué un "Dark version" y como era lenta, en ajustes la puse 1.75 de aceleración para que suene más tétrico, la version que subió Ha-NeulKim Byeol).

Aun no sé como debería de organizar esta historia, pero al menos tengo como 8 capítulos

¿Debería escribir un cap historia y otro niñez? ¿O debería hacerlo toda la primera parte de niñez y luego historia?

Siento que quedaría mejor niñez-historia alternando caps ya que se vería un lado un poco más psicótico debido a que no se sabría si Law está recordando las razones que le llevaron a ser un yandere, si son los recuerdos de la prota, o si es porque se me dio la regalada gana de hacerlo desardenado a jaja

Sin más, les dejo el primer cap de esta Próxima Novela

Capítulo 1
Acecho

Ojos oscurecidos miraban desde las sombras oscuras de la calle, observando a la mujer que caminaba despreocupadamente por las solitarias aceras en una noche clara, tarareando levemente mientras sus rítmicos pasos movían los volantes de su corta falda blanca a la vez que su cabello níveo como la nieve se balanceaba levemente por la ocasional brisa nocturna.

Una sonrisa se posó en los ojos oscurecidos y lentamente se aclararon, mirando con adoración a la mujer que caminaba despreocupadamente por las peligrosas calles, ¿Cómo no podría adorar a esa hermosa mujer? Era todo lo que un hombre podría querer, un rostro dulce con labios algo regordetes, grandes ojos azules y cabellos níveos que caían como cascadas onduladas hasta la mitad de su espalda, su rostro era delicado con mejillas que fácilmente se coloreaban de rosa claro, una nariz pequeña y perfilada, cejas delgadas como finas espadas, una mandíbula fina con una barbilla pequeña y redonda mientras que su frente estaba parcialmente cubierta por su flequillo.

Si solo bajaba sus ojos podía mirar aquel largo y elegante cuello perfecto que le daban ganas de morder y marcar, mostrar a todos que ella era de él y de nadie más, que no debían acercarse a los mataría lenta y tortuosamente para demostrar el ejemplo que nadie podía meterse con ella.

Bajando y bajando se veían dos finas clavículas que con elegancia de asomaban tímidamente de la blusa lila pastel de la mujer la cual tenía un escote en forma de V el cual permitía observar el inicio del valle de los dotados pechos, los cuales eran seguidos por una fina cintura y unas amplias caderas que descendían por dos redondos glúteos, desembocando en sus muslos rellenos y largas piernas perfiladas que terminaban en unos pies cubiertos por zapatos de tacón bajo de un suave rosa bebé.

Los ojos plateados que brillaron en la oscuridad se volvieron turbulentos y caóticos, llenos de tantas emociones ilegibles que eran difíciles de ver, la expresión ensombrecida del hombre causaría terror en cualquier ser que le viese y una mueca de desgrado e ira de posó en el rostro joven de aquel hombre.

Cuando la chica pestañeó, una cúpula azul la rodeó y cuando abrió sus ojos nuevamente esta desapareció sin rastro alguno.

Y frente al hombre de expresión ilegible y atemorizante aparecieron dos hombres, uno con una pistola, otro con un cuchillo y ambos con expresiones lascivas en su rostro mirando a donde debería estar la mujer de cabellos albinos.

Escoria, escoria, escoria.

Basura patética, deshechos asquerosos, adefesios inmundos, basuras inmundas, bastados desagradables.

¿Cómo se atrevían? ¿Cómo se atrevían? ¿Cómo se atrevían? ¿Cómo se atrevían? ¡Cómo se atrevían? ¿Cómo se atrevían?

¡¿Cómo mierda se atrevían a intentar tocar a su bello ángel con sus sucias e inmundas manos?! ¡¿Cómo se atrevían a intentar mancillar la pureza de un ángel para hacerlo caer en desgracia?! ¡Bastardos! ¡Los mataría! ¡Los mataría, los mataría, los mataría!

Oh sí, tendrían una muerte horrible sin duda, esas basuras atreviéndose a intentar hacerle algo a su bello ángel, ¿Cómo tener piedad? ¿Compasión? ¿Cómo tratarlos como humanos si es que estaba seguro que ellos no la tratarían como humana a ella? ¿Cuándo la iban a lastimar?