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Omoke 1: Una sonrisa quebrada...

Hola gente, como lo prometido, aquí les tengo una OVA, que tuve mis dudas en publicar, ya que a mi punto de vista, es algo oscuro e con una trama pesada, me costo escribirlo y bueno solo espero que les guste, por cierto a muchos les gusto la idea de que Nana sea integrada, y no se preocupen, el que ella sea 'una mas del Harem' aun esta lejos de ser realidad, ya que aun no la considero una amante para Naruto, sino algo mas que veremos en el futuro.

¡Aviso importante!

Muchos me mencionan la historia de Un Sennin entre héroes o una llegada inesperada, esas dos son grandes historias, que créanme si fuera por mi publicaría un capitulo por semana de cada historia, pero amigos no cuento con el tiempo y ahora mismo tengo problemas personales que involucra la salud de un integrante de mi familia.

Por eso solo les pido paciencia, la historia de 'Un Sennin entre héroes' esta de descanso, ya que esa historia la escribí sin pausa durante casi un año, merece un buen descanso, además estoy un poco bloqueado con esa historia, pero les aseguro que para este fin de año, ya publicare capítulos mensualmente.

En cuanto a 'Una llegada inesperada', bueno me di cuanta que es demasiado difícil escribir dos historias al mismo tiempo, que son tan diferentes, ya que Ronin, Naruto es una persona seria, frio, calculador, violento y un asesino despiadado. En cuanto al Naruto en el mundo de Avatar, el es 100% Cannon, ósea inocente, torpe, alegre, inocente y pervertido a la vez (No nos engañemos, el Jutsu Sexy es una técnica perversa, en mas de un sentido y de mis favoritas, ja extraño).

Espero sepan comprender y sin mas disfruten de este capitulo.

Disculpen los errores ortográficos.

"hablar" personaje hablando.

"Hablar" personaje pensando.

"Hablar" nombres de las técnicas.

(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.

############ Cambio de escenario o lugar.

Omoke 1: Una sonrisa quebrada…

Mi nombre es Toga, Himiko Toga, desde que soy pequeña, mis padres me dijeron que todos nacemos diferentes y únicos, que no importa que peculiaridad tenga, siempre seré única y buena ante los ojos de mis padres, siempre estuve feliz de que mis padres me dijeran eso y cuando fui creciendo me sentí mas y mas emocionada de lo que podría hacer.

Tal vez tendría la habilidad de cambio de apariencia de mi Oka-chan, que podía cambiar el color de sus ojos y cabello, era gracioso verla confundir a mi Oto-chan de vez en cuando. O tal vez la peculiaridad de mi padre que era el no hacer ruido al caminar, era una habilidad extraña, pero también divertida, no me molestada que mi Oka-chan fuera ama de casa y mi Oto-chan un oficinista.

¿Tal vez yo podría ser una heroína? ¡Eso seria genial!

Los años pasaron y cuando cumplí cinco, me di cuenta que era la única de mi clase sin una peculiaridad que me hiciera especial, eso me molestaba y que mis propias compañeros se burlaran de mi, solo me hacia enojar mas, pero mis padres me consolaban diciendo que yo podría ser como una flor tardía, me tomaría tiempo, pero algún día mostraría lo especial que era.

Cuando había cumplido seis años, note que me sentía extraña, cada vez que miraba algo de un fuerte color rojo, me sentía rara y cuando me corte un dedo por accidente con un cuchillo, sentí una rara satisfacción cuando chupe la herida, no sabia explicar porque me gusto tanto esa sensación y cuando se lo dije a mi Oka-chan.

"No es bueno que hagas eso…"

¿Por qué no podría hacer algo que me hace sentir bien? ¿Acaso eso era malo? No lo sabia y nadie se acerco para decírmelo, pasando un par de años mas, cuanto tenia solo ocho años, volvía a casa luego de estar en la escuela, volví por el camino de siempre, pero esa vez me encontré con algo particular, un pájaro herido que estaba tirado en el suelo, tenia lo que parecía ser un golpe en el pecho que fue resultado de una canica que los niños de su barrio solían usar con sus resorteras.

No sabia porque, pero ver la sangre brotar de la herida, el escuchar los quejidos de ese pequeño animal, una parte de mi quería ayudarla, pero otra parte mas grande de mi misma, quería otra cosa, sin pensarlo tome al pájaro en mis manos y lentamente me lo lleve a la boca, cuando lo tuve en mi boca y lo mordí, cuando la sangre llego a mi lengua.

Me sentí bien…

Muy bien…

Dando fuertes mordiscos solo quise que la satisfactoria sensación durara mas, ignorando el débil aleteo del pequeño animal y sus débiles chillidos, me lo comí, su carne, su sangre, sus plumas que quedaron alrededor de mis labios, ese cálido elixir rojizo que pasaba por mi garganta, me hacia sentir…. ¿Completa?.

No lo supe en ese momento, pero emocionada corrí a mi hogar, para contarle de este descubrimiento a mis padres, cuando llegue a mi casa y se los dije, me sentí confusa por la mirada de mi Oka-chan, ella no le gustaba que tubería aun la sangre del pequeño pájaro en mis labios, lo siguiente que recuerdo fue el cinturón de mi Oto-chan golpeando mi espalda, diciéndome que lo hice, estaba mal.

¿Por qué estaba mal?

¿Por qué me lastimaban?

Ellos no me lo decían, pero sabia que mis padres se volvían cada vez más y más lejanos de mí, ellos me solían solo ignorar, como si no estuviera, mi Oto-chan volvía cansado de casa luego del trabajo y cuando me quería acercar a el, para contarle de mis buenas calificaciones en la escuela o lo que hice, el solo decía que estaba cansado y se iba a dormir o estar con Oka-chan.

¿Por qué se alejaba?

Mi Oka-chan a veces se olvidaba de mi, tenia que acostumbrarme a eso, siempre pensé que ella solo estaba cansada por lavar ropa y hacer la comida para mi todos los días, sabia que ella me quería, pero aun así, ¿Por qué no me abrazaba como antes o me decía que me amaba?

¿Por qué los dos se alejaba de mí? ¿Había algo mal en mí, que los alejaba? ¿Qué había de mal en mí?

Ni siquiera supe cuanto tiempo paso, pero ya estaba en la preparatoria, teniendo ya casi 13 años me di cuenta que no era tan popular como las demás chicas, que estaban rodeados de muchas personas y eran felices, yo no tenia amigos, y que me molestaran por ser 'La rara' de la clase, solo hizo que odiara ir a la academia, pero aun así siempre sonreía, ¿Eso me ayudaría a hacer amigos? ¿A ser alguien en este mundo gris?

Pero aun así nadie se acercó a mí, nadie me noto, nadie me quiso, ¿y si era yo misma? ¿Y si mostraba como era en realidad? Recuerdo haber llevado un cuchillo para cortar carne de la cocina de mi hogar, mi yo verdadero quería ver sangre correr, y tomar el lugar de aquellos que son reconocidos. Ese mismo día me acerque a la chica mas popular de la academia, 'Hanare Iroichi', era una linda chica de origen europeo que llego a esta escuela y se gano el cariño de todos, por su actitud optimista, carismática y enérgica.

Ella era tan hermosa, su cabello dorado como el oro, sus ojos rojos como zafiros, y un cuerpo que me superaba por mucho, ella era quien yo quería ser, ella era quien mi verdadera yo quería que tomara su lugar, quería ser ella.

Luego de que las clases acabaran, la seguí por las oscuras calles de su lindo vecindario, antes que ella llegara a su casa, la tome con fuerza de su cabello y la arrastre a un callejón, ella era tan débil físicamente comparada conmigo, y su peculiaridad de hacer que su cuerpo brillara no le serviría en lo mas mínimo aquí, recuerdo su mirada, ¿yo le daba miedo? ¿Ya la aterraba? Ella pataleaba y no dejaba de gritar.

¿Por qué me sentía… mal?

Antes que lo supiera solo la solté y la vi correr, escuchaba su llanto y gritos de ayuda, yo solo pude darme la vuelta e irme, quería irme a casa, no salió como esperaba que saliera, yo no quería lastimarla… ¿o sí? mi mente estaba confusa.

"¿Himiko-chan?" en mi camino me cruce con 'Ren Washi', uno de mis compañeros de clase, que era tan popular como Hanare, el también era lindo, tenia el cabello oscuro y unos ojos con tonos grises que se ocultaban detrás de unos lentes, el era el mas alto y fuerte atléticamente de la clase, "¿Estas bien?"

No se cuando fue que tome el mango del cuchillo que estaba en mi mochila, ahora solo quería hacer lo que estaba por hacer con su compañera de clase, mi verdadero yo gritaba en mi mente, que lo hiciera, el solo recordar la mirada de shock de Ren cuando corrí contra el, cuando lo apuñale con mi cuchillo, en su estomago.

¿Qué había hecho?

¿Y porque no se detenía?

¿Era por ese cálido líquido rojo que salpicaba mis manos? ¿Por la expresión de Ren que estaba llorando? No se como termino sentado sobre su torso, con mi cuchillo hundiéndose una y otra vez en su pecho, la sangre llego a salpicar hasta mi rostro y cuando roso mis labios…

Lo sentí de nuevo… esa sensación de estar completa… satisfecha… esta era.

Lamiendo la sangre de mis labios me sentí eufórica, quería mas, mucho mas, no se cuantas veces lo apuñale, pero parecía que fueron durante horas, pero tuve que detenerme, cuando sentí unas gotas de agua caer sobre mis manos, levantando la mirada pensé que estaba lloviendo, pero no había una sola nube en el cielo.

¿Entonces esas gotas? Llevando mis manos a mi rostro note que lágrimas bajaban de mis ojos, ¿Por qué lloraba, no estaba triste o si? Cuando baje la mirada, me congele al ver la mirada sin vida de Ren, el estaba tirado en el suelo, sobre un charco de sangre, con su uniforme teñido de rojo y con su pecho deformado por los cientos de cortes que había recibido.

¿Qué había hecho?

Antes que lo supiera, escuche un grito perteneciente a una mujer que estaba cargando un cesto de ropa, en un techo de un apartamento de dos pisos, su grito alerto a todo el vecindario, muchas personas la estaban mirando con ¿miedo?, al levantarme deje caer el cuchillo junto al cuerpo de mi compañero de clase, sentía mi cabeza estallar en ese momento, miles de pensamientos pasaban por mi cabeza y solo pude decir una cosa.

Lo siento…

Lo siento…

Lo siento…

No sabia cuantas veces me había disculpado con Ren, y no deje de hacerlo mientras corría por las calles alejándome de la escena, ni siquiera note que era mas rápida y fuerte que antes, cuando llegue cerca de mi hogar, había llegado cerca de un área de construcción, donde me detuve para recuperar el aliento, cuando mire a mi alrededor, me encontré con un ventanal.

En el reflejo del cristal estaba la imagen de Ren, el pánico y la culpa invadió todo mi ser, me costaba creer lo que estaba viendo, antes que pudiera decir algo, note como la imagen de Ren se estaba derritiendo y mirando mis manos vi como un liquido blanco viscoso caía, lentamente la imagen del cristal fue cambiando mostrando mi imagen original.

Tenia miles de preguntas en mi cabeza, pero solo quería irme a casa, quería que mis padres me abrazaran y me digan que todo esta bien, corrí y corrí hasta que llegue a mi vecindario, yendo por los callejones salte la valla, para quedar en el jardín trasero de mi hogar, cuando entre corrí para ver a mis dos padres, que estaban en la cocina de la casa.

"Hija… ¿Qué has hecho?"

Fue el susurro de mi Oka-chan que aun se repetía miles de veces en mi cabeza, sus miradas de terror y miedo, hizo que mi corazón me doliera… y mucho, intente decir algo, pero cuando vi las luces azules y rojas desde la ventana que daba afuera, supe que la policía había llegado, el ver el teléfono en la mano de mi Oto-chan, era obvio que el los llamo.

¿Por qué todo salió tan mal?

¿Por qué el ser yo misma me costo todo?

¡¿Por qué me tenían miedo?!

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Días, semanas, meces, Himiko ya perdio la noción del tiempo desde que huyo de casa y tomo la decisión de ser ella misma, esto la llevo a grandes descubrimientos, como que tenia una variante de la peculiaridad de su padre, que le permitía ser indetectable y no hacer el mas mínimo sonido a la hora de hacer lo que mejor hacia, luego supo que cuando probaba la sangre de alguna persona, no solo ganaba su apariencia, sino que también su peculiaridad, todo dependiendo de la cantidad de sangre que consumía.

Hasta ahora llevaba la cuenta de haber matado 25 personas, todos diferentes y únicos con sus grandes peculiaridades, fue hermoso beber su sangre y hacerse pasar por ellos al menos periodos cortos de tiempo, ahora mismo estaba en la cuidad de Tokyo, en las interminables calles repletas de personas que iban de un lado a otro, viviendo sus propias vidas.

Vistiendo aun el uniforme de su antigua escuela, Toga camino dando pequeños saltos alegres, dirigiéndose a las zonas mas peligrosa de la gran cuidad, no se mostró afectada por las miradas que estaba recibiendo.

"Solo miren a esa linda perra" fue el comentario de sujeto encapuchado que estaba junto a un grupo, que era su banda de al menos trece personas, todos ellos miraron en la misma dirección que su líder, que miraba como una mocosa rubia pasaba cerca de ellos, "¿Cuándo abres esas piernas cariño?" pregunto con una sonrisa perversa el delincuente, que vio como la rubia volteo a ellos.

"hmmmm~" sonriendo con burla Himiko dio un guiño a la banda, con lentitud la chica se dirigió a un callejón, este gesto fue interpretado como una invitación para ir tras ella. Obviamente todos ellos fueron con entusiasmo, pensando que tendrían algo de diversión, pero cuando llegaron al callejón, ya no había nadie.

"¿Dónde esta esa perra?" gruño el líder del grupo, que miro a su alrededor con frustración, sin que lo notara, desde la oscuridad detrás de el, surgieron un par de brazos que envolvieron su cuello.

"Shhhhh~"

"¡Ahhhhgggggg!" lo ultimo que sintió el sujeto, fue una navaja clavarse en su garganta y dar un corte de lado a lado, en shock vio el geiser de sangre que brotaba de su garganta cercenada, de entre la oscuridad una sonriente Toga surgió, con su cuchillo en mano, soltó a su víctima que cayo al suelo para desangrarse en segundos.

"¡¿Qué demonios-s?!" mas de un integrante de la banda retrocedieron unos pasos al ver como su jefe fue asesinado.

Riendo con suavidad, la rubia tomo el cuchillo y lo llevo a su boca para dar una larga lamida a la sangre que manchaba el arma blanca, "¡Mmmmmm! No esta mal" sonriente disfruto del cálido liquido carmesí, mirando a sus otros perseguidores sonrió aun mas, "¿Quién sigue?"

"¡Maten a esa bruja!" toda la pandilla se abalanzo contra la adolecente, que sin dejar de sonreír solo apretó el agarre de su cuchillo, uno de los delincuentes escupió lo que parecía ser un veneno, pero la rubia solo se movió de un lado a otro, esquivando cada golpeo o ataque que era lanzado contra ella.

"¡Ahg!" otro integrante de la banda cayo, cuando fue apuñalado en el pecho, y luego ser pateado en la cara y ser derribado, uno a uno cada atacante fue cayendo, apuñalado, golpeado y acribillado, hasta que finalmente solo quedaron seis de los integrantes de la banda.

"Me siento tan… feliz" eufórica Toga dio un corte horizontal, que corto de forma grotesca a otro atacante, que perdio todo su intestino que cayo al suelo, con su permanente sonrisa la rubia maniobro el cuchillo para cortar la garganta de otro y verlo morir, "Pero… ¿Por qué siento que me falta algo mas?" deteniéndose un momento sintió que algo le faltaba, aunque esto se sintiera bien, sentía que se estaba perdiendo de algo mas.

Lastimosamente en su distracción, uno de los delincuentes, saco una pistola taser y disparo contra la chica, dándole justo en la nuca, con miles de voltios pasando a través de su cuerpo, la rubia cayó paralizada, "¡Maldita perra!" los miembros de la banda, no lo pensaron dos veces, antes de lanzarse como animales sobre la chica derribada, para molerla a golpes y patadas.

Himiko ni siquiera se molesto en gritar, su sonrisa siguió grabada en su rostro, que extrañamente se contrarrestaba por los lágrimas que estaban bajando de sus ojos, sus ojos solo reflejaban dolor, ¿Qué hacia en este lugar? ¿Cómo termino así? ¿Por qué? ¿Por qué la estaban golpeando? ¿No les gustaba su verdaderayo?

"Esto es por Greck bruja" uno de los delincuentes saco una bajaba y aparto a sus compañeros, dejando mostrar a la apaleada chica, que tenia su labio roto, un ojo rojo con sangre bajando de este, varios moretones y ropa sucia, "No tienes idea de cuanto disfrutare esto…" usando la navaja, el sujeto corto el abrigo que cubría a la adolecente dejándola solo con su sostén, bajando sus manos le arranco la falda.

"…" inmóvil Toga solo se mantuvo quieta y con la mirada perdida, llorando en silencio, con una sonrisa que lentamente fue desapareciendo, "Oka-chan… Oto-chan… estoy cansada"

"Himiko-chan, recuerda lavarte los dientes antes de irte a dormir"

"¡Hai!"

"¿Quién quiere su beso de las buenas noches?"

"¡Yo! ¡Yo! ¡Yo!"

"Muy bien… buenas noches Himiko-chan…"

Toga podría jurar que sintió su frente ser besado por sus padres, su sonrisa finalmente se desvaneció, y su mirada se fue apagando, "Buenas noches…pensando eso se dispuso a cerrar los ojos, pero un sonido hizo que los abriera nuevamente. Todos los presentes miraron por la entrada del callejón una silueta, que era al parecer un adolecente, que vestía una sudadera de capucha negra, y unos pantalones del mismo color, su estatura no era tan alta, dando a entender que tal vez solo era un adolecente entre 14 o 15 años.

"¿eh?" el delincuente que estaba sobre Himiko se levanto, para separarse de la chica y apuntar su navaja al recién llegado, lentamente los brazos del sujeto brotaron espinas, y sus demás compañeros se pusieron detrás de el en guardia, "¡Sera mejor que te vayas! ¡O serás tu al que le corte la garganta!" amenazo con su arma, pero solo gano que el recién llegado caminara hasta donde estaba ellos, "¡Dije que te largues!" mirando a uno sus compañeros, hizo que este recargara el Taser, para disparar contra el encapuchado.

El tiro dio directo en el pecho del recién llegado, pero este no se detuvo, aun con la descarga que pasaba por su cuerpo, este solo tomo los cables y se los quito, esto fue suficiente para que los restantes miembros de la banda se asustaran, "¿Qué demoni-" el portador del arma eléctrica no pudo terminar su pregunta, ya que de manera instantánea el encapuchado estaba frente a el, tomándolo del cuello y levantándolo del suelo. "¡No-o!" gruñendo intento zafarse del agarre, pero solo sufrió de la agonía de los dedos del encapuchado atravesar la piel de su cuello, de forma grotesca su cuello fue desgarrado y finalmente asesinado.

"¡Monstruo!" otro de los delincuentes, se abalanzo contra ese monstruo, tomando de un bote de basura un tubo de acero, dio un golpe, pero el tubo fue atrapado en el aire y se le fue arrebatado, para ser insertado en su boca, la sangre salpico el suelo cuando el tubo atravesó la garganta y cuello del delincuente, que cayó agonizante en el suelo. Sin detenerse ahí, el encapuchado dejo caer el cuerpo de la primera persona que mato y ataco a los cuatro restantes.

A uno de ellos de dio un golpe brutal en el pecho, que produjo el desagradable sonido de costillas ser rotas en pedazos, matándolo, esquivando un escupitajo venenoso el encapuchado, tomo al delincuente y le rompió el brazo con un movimiento, solo para después lanzarlo varios metros al cielo y luego este callera, matándolo en el impacto de la caída de al menos treinta metros.

"…" en shock Toga se levanto para ver como el recién llegado, tomo al delincuente con espinas y estrello su cabeza contra una pared, el resultado fue el salpicar de la sangre y sesos que manchaban las paredes, "…" no sabia porque, pero se sentía caliente por dentro y tubo que sonreír cuando vio como el ultimo delincuente, era tomado de cuello y ser estrellado contra el suelo repetida veces, haciendo que solo se escucharan el tronar de huesos rotos.

El encapuchado una vez dejo a todos los vándalos muertos, se dio la vuelta para mirar a la niña herida en el suelo, arrodillándose hasta quedar a su lado, extendió su mano para tocar con suavidad la cabeza de la adolecente, "Estarás bien…" fue el susurro del chico que hizo que un débil brillo azulado cubriera su mano derecha, muy lentamente las heridas de la rubia se fueron sanando, "Todo estará bien…"

Himiko no había escuchado esa frase hace mucho tiempo, y el solo escucharlo hizo que su corazón diera un brinco, ¿el estaba preocupado por ella? ¿Le importaba lo que sucediera con ella?, con esas preguntas en su cabeza, solo deseo saber mas de este encapuchado.

"Tu… ¿Quién eres?" pregunto con suavidad la rubia de ojos rasgados, que quedo inmóvil, mirando el único ojo azul que se podía ver debajo de esa capucha, también noto algunos mechones de cabello que eran de un color dorado, como ella, y aunque estaba oscuro, podía ver lo que parecían ser, "¿Bigotes?" pensó intrigada, sintiéndose cada vez mejor, noto que se podía poner de pie.

"Naruto…" fue la simple respuesta del rubio, que se había sacado su sudadera, para envolverla alrededor de la chica, que tenia sus ropas rasgadas y rotas.

"Naruto…" la rubia casi saboreo el solo decir ese nombre, ¿acaso era el lo que ella tanto estaba buscando? ¿Alguien que se asemejaba a ella… a su verdadero yo? Abrazando la cálida chaqueta levanto la mirada, solo para ver que su salvador no estaba, escuchando el sonido y sirenas, supo que la policía y héroes profesionales estarían aquí pronto.

Caminando entre los cuerpos que decoraban el callejón, se perdio entre la oscuridad para desparecer, justo a tiempo cuando llegaron las autoridades.

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Actualmente, en lo que era la guarida de la liga de villanos, no adentramos en la habitación temporal de Himiko Toga, que estaba recostada en su cama, completamente desnuda, siendo solo cubierta por una vieja sudadera oscura, la gran chaqueta cubría gran parte de su cuerpo, dejando solo ve sus torneadas piernas y piel pálida.

Con una sonrisa enorme la adolecente estaba contando los segundos para reencontrarse con esa persona que hace tanto tiempo cruzo caminos, dando una inhalación profunda a la prenda oscura, sentía aun el intoxicante y adictivo aroma de su salvador, de su objetivo, de su salvavidas, "Ahhh~" con un fuerte sonrojo en sus mejillas y un brillo peligroso en sus ojos, deseaba que el tiempo pase mas rápido, abrazando la sudadera a su alrededor cerro los ojos para dormir y soñar que pronto lo vería…

Y estaría a su lado, para… ¿matarlo? O ¿amarlo? ¿Cuál era la diferencia? En su mente retorcida, no sabia decir cual era la respuesta.

Chan

Channnn

Channnnnnnnn

Channnnnnnnnnnnnn

¿Qué les pareció?

Me despido de ustedes de donde sea que sean Costa rica Bolivia, Colombia, Brasil, Chile, Puerto rico, Uruguay, Panamá, Perú, Venezuela, USA, España, Cuba, Inglaterra, México, Argentina y demás países donde estén leyendo esta historia.

Espero al menos 35 comentarios por este capítulo, ya que costó mucho escribirlo, jaja, me tuve que comer algunos spoiler del manga para saber más o menos la historia de Himiko Toga, pero según mi perspectiva, esta es una posibilidad de lo que podría haber sido su pasado, sin mas CHHHHAAAAAAUUUUUU y que les valla bien, a ustedes y sus familias.

:"v

No mamen :v

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