Antes que nada, les recuerdo..... QUE ESTA HISTORIA NO ES MÍA SINO DE ELZEROCRACK, ENTIENDAN BIEN HIJOS DE PUTA >:V

Ahora aquí, un lindo mensaje del creador de Ronin, Elzerocrack :3

Zero:

Si una semana tarde, pero oigan estoy aquí.

Ufff estoy muerto pero al menos llegue feliz a este fin de semana, ya pude reparar mi teléfono, solo para que ahora falle la pantalla, mala suerte, en fin me falta poco para juntar el dinero para arreglar mi moto y me tomaré el tiempo para decir.

Gracias por su preocupación gente y bueno varios por comentarios y mensajes PM me han cuestionado por qué no me creaba una cuenta para recibir donaciones de parte de ustedes.

Chicos les soy sincero, la razón de que no quiero pedir ayuda es bastante simple, apenas se usar una computadora y no tengo ni puta idea de cómo hacer una cuenta en , además eso de que me den dinero por esto, no sé, me da cosa, ya que esto solo es un pasatiempo y el ganar dinero por esto... me hace sentir mal.

Suena algo extremista, pero mi padre me crio con la idea de que el dinero se gana a base del trabajo duro y pedir de los demás es... bajo. tal vez por eso tengo cierto rechazó con los youtuber cuando piden donaciones o cosas así, si uno pide dinero es que en verdad lo necesita, para comer y vivir el día a día, no para comprar un sillón gamer o un micrófono, eso es frustrante para mí.

Lo siento, sé que parezco un viejo amargado, pero por ahora estoy bien, empecé a trabajar desde el lunes en limpiar calles, oh sí elzerocrack deja calles limpias desde ahora, y por suerte me va bastante bien, pronto tendré el dinero suficiente para arreglar todo lo que estos días me está fallando.

Y si hay más cosas que decir, pero puedo decir que esta historia solo es eso, una historia que me entretiene y alegra, y no solo a mí, a muchas más personas como yo que solo quieren estar a la sombra de un árbol con una bebida fría y solo leer algo que nos haga sentir eso... alegría, felicidad, frustración, enojo, humor y risa.

Esas son las emociones que busco a la hora de hacer una historia y al leer los comentarios que dejan, sé que estoy haciendo bien, yo tengo todo lo que quiero, un trabajo estable, estudio una carrera para algún día ser docente y una familia que aunque tenemos roces los amo con todo el corazón.

y no olvidemos de una gran historia seguida por cientos de personas por todo el mundo. el dinero va y viene pero la alegría que siento al escribir es suficiente para mí...

joder tío, si solo me conocieras personalmente sabrías que hay algo mal, yo no soy alguien sentimental, normalmente soy un cara dura antipático según mucha gente y mi familia, soy alguien extraño, insensible en la vida real, suave como nube en las redes, algo anda mal XD...

En fin gente la verdad me gustará tener el tiempo y no se ¿Saber dibujar? Si supiera dibujar como Murata (el dibujante del manga de One punch man) y tuviera el tiempo haría un manga de esto, con solo ver las ilustraciones de "El ninja rubio" (que por cierto tiene varios bocetos geniales en sus páginas de Facebook) se lo grande que pudo ser está historia.

En fin no todo es como uno quiere, ahora solo empecemos de una puta vez.

Disculpen los errores ortográficos.

"hablar" personaje hablando.

"Hablar" personaje pensando.

"Hablar" nombres de las técnicas.

(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.

############ Cambio de escenario o lugar.

Capítulo 50: Reglas y promesa…

Se sentía cansada, pero a la vez emocionada, desde que subió a la espalda del Shinobi vio como él salto entre los edificios y daba saltos tan largos que pareciera que estaban volando, aún si se sentía algo mareada Eri estaba entusiasmada por el viaje, tras varios minutos finalmente aterrizaron en un callejón.

La mirada de la pequeña se ilumino cuando salieron a la calle, esta vez la calle era brillante, aún en la oscura noche parecía pleno día por las luces de la cuidad, estando en el centro de la cuidad los dos se adentraron en las calles, Eri nunca estuvo entre tantas personas y su pequeña mano se aferraba con fuerza del abrigo del Shinobi que seguía caminando entre la multitud.

Caminar entre tantas personas que empezaban su día temprano o estaban solo divirtiéndose le hizo tener un extraño sentimiento a la niña, entre todas las personas se sentía como una más, una gota de lluvia en un gran diluvio… se sentía normal.

Era algo que siempre quiso sentir de nuevo.

"El camino que está dejando Uzumaki Naruto o mejor conocido como Ronin se está volviendo cada vez más oscuro y desagradable, la honorable nieta de un anciano en coma está desaparecida y se pide por favor que todos estén alerta por si los ven…"

La pequeña ladeo la cabeza confusa cuando se detuvieron en una esquina ante la luz roja de tránsito, curiosa vio un gran ventanal con varios televisores dónde podía ver su cara junto con la imagen de su salvador, pudo leer con dificultad la palabra de 'peligroso' y 'se busca' debajo de la imagen del ninja, levantando la mirada vio las expresiones de las personas que estaban cerca de ella.

"¿Secuestro? Debe ser una broma"

"No tuvo suficiente con destruir una ciudad y matar a cientos, ¿Ahora secuestro?"

"Es un maldito enfermo…"

A ella no le gustó la forma en la que se referían a él, pero se mantuvo en silencio y sin soltar la chaqueta de su guardián lo siguió por las calles hasta llegar a un gran edificio. Donde entraron por la entrada principal del gran hotel donde fueron recibidos por una recepcionista.

"Buenas noches…" Eri se extrañó cuando vio sonreír con amabilidad y suavidad al shinobi que causó que la mujer que estaba en la recepción del hotel se sonrojara levemente, no sabía porque pero esa sonrisa parecía falsa, "Hoy fue un largo día visitando lugares de esta gran ciudad y bueno se nos hizo tarde para ir a la estación, mi hermanita y yo necesitamos una habitación para descansar, por favor" fue tan extraño verlo hablar con tanta amabilidad y esa sonrisa vacía en su rostro.

"Claro" sonriendo ante la sonrisa encantadora de su cliente la mujer le tendió una llave y le cobro la estancia, "El desayuno es a las 7:00 AM y le aseguro que aquí servimos el mejor café de la cuidad, espero disfrute su estancia"

"Gracias señorita…?"

"Ruri, Ruri Tomaré"

"Nathan, Nathan Wiston" se presentó con un identificación falsa el shinobi que pago todo con efectivo y no dejo que su identificación sea revisada de forma meticulosa, solo era un pedazo de cartón cubierto por un genjutsu.

"…" Eri se tensó cuando vio la televisión detrás de la recepcionista que pasaba la imagen de ellos dos, y su temor creció cuando la mujer vio la televisión, pero… Ni siquiera reaccionó.

"Es una placer, que pasen una buena noche" despidiéndose la joven dejo que sus dos nuevos huéspedes siguieran por el pasillo hasta llegar a un elevador.

Tan pronto como la puerta del elevador se cerró Naruto perdió su sonrisa y dio un suspiro mientras bajaba su banda para cubrir su Sharingan, tuvo que usar genjutsu sobre todos aquellos que lo miraron a él o la niña cambiando sus apariencias, cabello, ojos y todo para que no sean reconocidos en la calle, nunca fue fanático de los henge, le causaban dolor de cabeza usarlo durante mucho tiempo o en otros.

Pero esto solo funcionada con personas que estaban cerca de él, no funcionaba si era a través de cámaras, los genjutsu solo funcionaba con personas, no podían ser reflejadas en aparatos electrónicos, y el henge físico solo podía aplicarse a sí mismo u otros objetivos inanimados, no otras personas. Fue tedioso para el shinobi el solo pensar en lo frustrante que era pasar desapercibido ante esta era moderna.

Cámaras y vigilancia en todas partes, una mierda.

Llegando hasta su habitación los dos entraron y lo primero que hizo Naruto fue cerrar las ventanas y cortinas, sacando un trozo de papel lo lanzo en el centro de la habitación, un campo de fuerza invisible se extendió, y el Uzumaki hizo nota de que había 34 personas en el edificio y muchas más afuera, si alguien se acercaba más de lo debido a la habitación y el número de personas aumentaba de golpe, lo sabría.

"Bien…" un poco más calmado se quitó la capucha y miro a su alrededor, dos estallido de humo cerca de él hicieron que Eri casi saltará del susto cuando vio a dos copias del ninja aparecer de la nada, "Uno de ellos preparara el baño, date un baño y has todas las necesidades que tengas que hacer, no sé si tendrás acceso a otro baño en poco tiempo…"

"…" en silencio la niña siguió a uno de los clones que la acompaño al baño para calentar el agua o darle lo que necesitara, una vez lo hiciera desaparecería para dejarla tener privacidad, tenía casi 9, tendría que saber bañarse correctamente o al menos así pensaba el Uzumaki.

"…" Naruto camino hasta el mini bar junto a la cama y saco algunas botellas, en silencio se sentó en la cama para empezar a beber.

El mundo a su alrededor se empezó a quebrar en pedazos dejando ver un gran prado verde con una brillante luna llena iluminando el cielo nocturno estrellado, el Shinobi se mantuvo sentado en el prado viendo una silueta estar cerca del lago.

"¿Qué estás haciendo?" la silueta pertenecía a la Biju de nueve colas que solo se mantuvo de pie mirando la calma del agua dándole la espalda a su jinchuriki que solo se encogió de hombros.

"No lo sé…" murmuró con cansancio.

"Has matado niños antes… ¿Por qué no hacerlo con ella?" el aire se tornó frío entre ambos seres que no se dignaron a mirarse, con un brillo en sus ojos rojos la mujer de cabello pelirrojo recordó todo lo que su carcelero hizo antes de llegar a este mundo, matar a una niña para que dejara de ser un peso muerto… no sería lo peor que ha hecho.

"…"

"¿Pensé que ya teníamos un plan?" el tono de su voz se volvió más peligroso cuando se dignó a mirar al Uzumaki que solo miro el suelo.

"Lo tenemos… pero…"

"¿La niña?" la curiosidad era evidente en la pelirroja que cerró los ojos para pensar unos segundos, "¿Qué te hizo tomar esta estúpida decisión?"

"…" con pereza el Shinobi solo miro el lago, que como si fuera un espejo mostró una imagen, pero está no le pertenecía a él.

"No sé por qué cosas dolorosas pasaste o que hiciste que te haga sufrir tanto, y sé que estaría mal decir que lo entiendo... Pero aun así... Hay algo que se, sé que eres alguien que no se rinde con nada… sé que eres alguien que puede sonreír aun si las cosas no están bien... sé que eres alguien que no está dispuesto a estar de brazos cruzados y dejar que cosas malas sucedan, sé que tú siempre actuaras en los momentos más difíciles, para hacer lo correcto…"

Kyubi levantó una ceja, ella podía ver y escuchar los pensamientos personales de su carcelero sin importar si él no lo quiera y ahora podía ver la imagen clara de la 'niña monja' en el lago, su sonrisa inocente y cálida, y sus palabras que hacían eco en su prisión.

"Tú eres una buena persona, tú me salvaste, aun con tu vida en riesgo tú estabas dispuesto a darla sin pensarlo…

… Tu eres mi héroe"

"…" confundida la zorra vio la proyección mental de la niña monja sobre el agua, ¿Acaso su jinchuriki estaba alucinando? Y no solo él, ella también lo estaba viendo, fue extraño, normalmente solo se podían ver recuerdos en su planicie mental, pero la imagen de la niña monja, parecía tan real y vivida, parecía más que solo un recuerdo.

¡Pelearemos contra los malos y ayudaremos a quienes lo necesiten! ¡Si alguien necesita ayuda el equipo Uzumaki estará ahí! ¡Haremos que Oto-san, Oka-san y todos estén orgullosos de nosotros! ¡Seremos héroes!

"¿Qué mierda está pasando?" Pocas veces la Biju se sintió tan insegura de su alrededor, acaba de ver a la mocosa de Kushina correr a su lado, fue solo un segundo pero escucho su voz y la vio correr para luego desaparecer como si jamás hubiera estado en primer lugar.

"Necesito tiempo" la zorra fue sacada de sus pensamientos cuando vio a su carcelero de pie y mirarla directamente a los ojos, "Solo unos días y luego cumpliré mi palabra"

"…" frunciendo el ceño se cruzó de brazos, "Salve a la niña monja por la promesa que me hiciste… espero la cumplas"

"Lo haré…"

"Bien" con un gruñido grave la pelirroja acepto los términos, en silencio vio cómo su carcelero desapareció dejando su espacio mental, con un suspiro miro a su alrededor, todo volvió como antes y no escuchaba nada, tenía que revisar el sello, a veces podía jurar…

Que había alguien más encerrada con ella.

Mundo real

Abriendo los ojos Naruto tiro la última botella junto a las otras seis que había bebido.

"¿Señor-r?" la pequeña voz de la niña hizo que el Shinobi mirara sobre su hombro, la pequeña parecía más aliviada luego del baño y comer lo que sea que el clon le haya dado.

"¿Cómo te llamas niña?" sinceramente él ya había olvidado el nombre de la niña.

"¡Eri-i señor!" respondió con rapidez por la mirada sería que su protector le estaba dirigiendo.

"Escucha lo que te voy a decir, no sé porque te ayude y tampoco importa, pero si quieres seguir conmigo tengo una sola regla que debes seguir…" tomando una silla de madera se sentó para mirarla fijamente a ella que fue colocada en la cama por el tercer clon que desapareció en una nube de humo.

"¿Regla?" aunque Eri tenía muchas preguntas de como el 'señor' podía hacer tantas cosas, se concentró en las reglas que iba a dictar.

"Si… esa regla es que hagas todo lo que te diga, si digo corre, corres, si digo escóndete, te escondes, ¿Ok?"

"Si señor…"

"No me llames señor…" Naruto estaba en conflicto en como continuar, ya que dar nombres podía ser innecesario, "Llámame Naruto… ahora vallamos al siguiente punto, ¿Tienes familia o conocidos?".

"¡Mi Oka-san-n!" respondió de inmediato la pequeña.

"¿Sabes dónde está?".

"No…"

"¿Cuándo fue la última vez que la viste?" Naruto estaba confundido, pensó que tal vez Overhaul había matado a la madre o el padre de la niña, tal vez ambos, todo para tener a la niña bajo su control.

"Hace años… un día algo paso con mi Oto-san, no-o recuerdo mucho pero el solo desapareció y…y… Oka-san estaba enojada y lloraba mucho, ella se fue…" la pequeña parecía en conflicto con sus recuerdos, y que sus ojos se cristalizaran en pequeñas lágrimas hizo pensar al Shinobi que ella misma estaba suprimiendo sus recuerdos, "Pero sé que volverá… ella volverá… yo quiero estar con ella"

"…" impasible Naruto solo cerró los ojos, ¿La madre fue apartada de la niña? o ¿La madre abandono a la niña? No tenía las respuestas para esas preguntas, pero hasta ahora era lo mejor que tenía, "Te llevaré con tu madre…"

"…"

"Así me quitaré un peso de encima, luego de que estés con ella, serás su problema" su tono fue frío y cerrado, no queriendo que la niña se haga una idea equivocada de que él la cuidaría toda su vida, no lo haría. "Tal vez me lleve unos días, saber quién es tu madre y localizarla… pero no será…"

*Goteo*

"Shhfff…" Naruto se detuvo cuando abrió los ojos para ver a la niña, ella estaba temblando y sus ojos se llenaron de lágrimas que goteaban de sus ojos para caer en sus manos.

El Uzumaki no dijo nada cuando la niña corrió a él y abrazo su torso con sus pequeños brazos.

Eri estaba feliz, por fin volvería a ver a su madre y no le importaba si tardaba semanas o meses, hace años que no la veía y ahora por fin tenía la oportunidad de hacerlo, estaba feliz como nunca lo estuvo en años.

"…" pero su llanto fue interrumpido cuando fue empujada suavemente y apartada del Shinobi que tenía una mirada dura, "Sé que estás feliz, pero no abrazos…"

"¡Hai-i" la pequeña se apartó rápidamente no queriendo molestar a su salvador.

"Ahora duerme, mañana saldremos a seguir moviéndonos" alejándose de ella se dejó caer en una de las camas dispuesto a dormir un poco, hace días no dormía un poco.

Eri no dejo de sonreír y asintió con la cabeza, subiéndose a la cama solo se recostó para mirar el techo, sería difícil dormir con lo emocionada y feliz que estaba, dando vueltas en la cama encontró el control remoto del televisor.

####### horas después #######

"Permítame Señora"

"Gracias pequeño" Los alumnos de la clase A tenían una mirada en blanco cuando vieron a su senpai, el adolecente de Tercer año Mirio Togata ayudar a una abuela a pasar por la calle deteniendo los autos y empujando un carrito de compras, el sonriente rubio no dudo en ayudar a la anciana cuando no pudo pasar por sí misma la vía de transeúntes "Ten para ti y tus amigos" dejando varios caramelos la anciana se despido del joven héroe.

"¡No hay problema! ¡Adiós!"

"¿Él siempre es así?" pregunto curiosa Ibara a una alegré Nejire que se encogió de hombros.

"¡Claro! ¡Mirio es genial ¿No?" la adolecente religiosa sonrió incómoda cuando su espacio personal fue violado por la chica de largo cabello azul.

"Mirio es una persona excepcional que puede estar peleando contra el villano más peligroso del mundo y momentos después bajando un gato de un árbol, él es así" aún si Tamaki hablara tan bajo los demás alcanzaron a escucharlo.

"Te creo… pero de todas formas ¡Él es fuerte!" Kirishima tenía mucho respeto por Lemillion luego de su pelea, bueno no fue una gran pelea ya que toda la clase fue derrotada en segundos, excepto por Midoriya que dio más pelea, "¿Por qué te escondes?" el pelirrojo se confundió al ver a su senpai de cabello oscuro mirar una pared y ocultarse.

"Eres muy ruidoso…"

"Por qué los tres grandes son tan raros" se quejó Kirishima que trato de que su senpai dejara de solo mirar la pared y siguieran con el patrullaje.

Normalmente un pro hero tenía que acompañarlos, pero ellos estaban ocupados revisando la escena dónde se vio por última vez a Ronin, ellos fueron apartados contra los deseos de Sir Nighteye y solo mandados a patrullar por la ciudad más cercana, fue frustrante para ellos ser dejados de lado.

Cada uno tenía sus propios pensamientos respecto a este trabajo, entre ellos estaba Deku que miraba el cielo pensativo, varias preguntas pasaban por su cabeza y ajusto el cinturón de su traje, el mismo lo creo con ayuda de Mei Hatsume, era en caso de… tener que enfrentarlo.

"¿Deku-kun estás bien?" el peli verde fue sacado de sus pensamientos cuando Ochako tocó su hombro, está última no podía evitar estar preocupada, su amigo en los últimos meses tuvo un cambio de personalidad gradual, era más maduro, centrado y seguro de sí mismo… pero lo sentía mucho más frío a comparación de antes.

"Yo esto…" Izuku se estremeció cuando su amiga sin darse cuenta se tropezó al caminar y cayó sobre su espalda, el peli verde evito que callera con facilidad pero tuvo que sonrojarse cuando sintió la suavidad de los pechos de su amiga contra su pecho, "¡Lo siento-o!"

"¿Ah?" confundida Ochako vio a Midoriya sonrojarse y disculparse varias veces, ella solo se tropezó y se apoyó en él más de la cuánta, pero era bueno ver qué al menos la antigua personalidad de su amigo seguía ahí, "¡No te disculpes-s! ¡Estás llamando mucho la atención de la gente!"

"…" Momo solo levanto una ceja ante la escena singular, si se lo podía llamar así entre sus dos compañeros, en silencio solo camino junto a Shiori y Tsuyu qué al igual que ella solo se mantenían en silencio viendo si pasaba algo que necesitara su presencia.

"Señor héroe ¿Podría bajar mi globo?"

"¡No temas pequeño!" todos vieron con pena ajena como Mirio escaló por un árbol para bajar el globo de un niño de cinco años que iba acompañado de su madre, "¡Aquí tienes!" sonriente el rubio bajo de un salto para entregar el globo al niño.

Tanto madre como hijo agradecieron el gesto del adolescente para luego despedirse.

"Lemillion-sempai" llamando la atención de su superior Momo tomo la palabra, "¿No deberíamos buscar… problemas más importantes?" cuestiono insegura, ella al igual que sus compañeros de clase no querían pasar todo el día solo bajando gatos de árboles o ayudando a abuelas pasar a la otra calle.

"Todo los problemas son importantes" sin dejar de sonreír Mirio encabezó el grupo avanzando por la acera, "Desde un niño que necesita que bajen su gatito de un árbol a detener un villano que causa problemas, somos pro hero ahora y nuestro deber no es solo 'pelear' contra villanos, es más que eso… Nosotros estamos aquí para darles seguridad y esperanza de que hoy todo estará bien…" Su sonrisa fue brillante y amable, con sus ojos que solo reflejaban la determinación y felicidad que tenía al estar en las calles haciendo lo que más amaba, ayudar a la gente, "Todos los días en las calles debemos estar listos para ayudar a quien lo necesite, desde el más pequeño de los problemas hasta el más peligroso, estando dispuesto a arriesgar nuestras vidas sin pensarlo de ser necesario, ese es el camino del héroe, ¡También es mi camino como Lemillion, el héroe que salvara a un millón de personas!"

"Ohhh~" tanto Nejire como Tamaki aplaudieron ante las palabras inspiradoras de su compañero.

"¡Cielos que macizo!" Kirishima estaba tan o incluso más conmovido que sus senpais al escuchar a Mirio, llorando lágrimas 'masculinas' miro bajo una nueva luz al héroe que curiosamente ante sus ojos era cubierto de una luz dorada, "¡¿No es genial?!" Grito eufórico mirando a sus compañeros.

"Si…" Izuku, Ibara y los demás no pudieran evitar estar de acuerdo con el pelirrojo, el discurso de Lemillion fue inspirador.

"Vamos~ Vamos~ no tienen que seguir así, sigamos aún hay mucho terreno que cubrir" liderando el grupo el sonriente joven siguió su camino de… bueno hacer lo que tenía que hacer.

En otra cuidad…

"Esto es un asco" Mirko tuvo que cubrir su nariz por la desagradable peste en el subterráneo, ella junto con los demás pro hero y algunos policías del forense estaban revisamos el último lugar donde fue visto Ronin.

Cuatro cadáveres y algunos pedazos que podían ser de otro soldado más fueron sacados del vagón principal y las vías, fue un alivio que no hubiera más víctimas en este tren inteligente que funcionaba sin un conductor.

"…" Sir Nighteye miro con curiosidad los cuerpos, "Necesito las cámaras disponibles de la estación y cualquier cosa que pueda ser útil" el oficial a su lado acato la orden.

"No mames que asco" Tlahuicolearrugó el rostro con desagrado cuando uno de los agentes del forense quito el casco de uno de los soldados y bueno sus sesos se dispersaron por el suelo como si fuera agua del desagüe.

"¿Pode cerrar la jeta?" cerca del pro hero mexicano el héroe argentino miraba alrededor de la cabina con curiosidad, el hombre de poncho miraba a su alrededor con pereza y curiosidad bajo la mirada extrañada de sus colegas.

"¿Qué haces?" curiosa Arturia vio cómo su socio temporal revisaba una esquina del vagón.

"Mi especialidad princesa" contesto sonriente mientras pasaba sus dedos por un rastro de polvo que estaba en el suelo del vagón

"No me llames princesa" la rubia ganó un ceño fruncido mientras apoyaba la mano en su espada, le disgustaba la forma de actuar infantil y perezosa del Argentino, que tuvo el atrevimiento de rascarse la entrepierna frente a ella, ¡Fue indignante que alguien como él sea un héroe! ¿Acaso ese es el comportamiento de todos los residentes de ese país?

"Uy que delicada" el peli negro de poncho ignoro la mala mirada de la mujer, hizo un chasqueo de dedos y varios se sorprendieron cuando una suave luz blanca lo envolvió y se separó de el para formar el espectro de un perro, la silueta olfateo en el aire y dando un ladrido desapareció, "Se fue hace 14 horas, el rastro aún está fresco, se fue al noreste con la niña…"

"Interesante…" Ryukyu había escuchado del poder del héroe extranjero, pero otra cosa era verlo, fue sorprendente.

"Si, puedo formar figuras astrales de animales que a si mismo me benefician a mí solo que amplificado, puedo tener el olfato de un perro y los ojos de un halcón al mismo tiempo y multiplicado por 10 esas capacidades" explico con orgullo, su Kosei era especial de muchas formas y único ya que era el primero en su clase que podría proyectar una figura espectral.

"Oh~ ¡Cómo V de Devil May Kry 5! Ya lo entendí…" el mexicano no pudo evitar comparar el poder de su hermano latinoamericano, y tuvo que dar un paso atrás por la mirada oscura que recibió del Argentino.

"Me comparas con ese emo de porquería y te parto el orto"

"Vamos wey, tienes que admitir que son parecidos"

"¿Cómo tú y Coco?"

"Te burlas de Coco, te burlas de México, ya te chingaste Wey"

"Solo palabras gato, vení si tené huevo"

"No de nuevo" Mirko suspiro frustrada cuando los héroes empezaron de nuevo, "¡Solo llevamos trabajando diez horas y ya van discutiendo 20 veces!" se quejó en sus adentros, fue vergonzoso verlos pelear 'por temas tan irrelevantes.

"…" dando un suspiro Sir Nighteye se acomodó sus lentes, los dos representantes de América latina eran… curiosos por decir poco, al parecer compartían una rivalidad que los llevaba a discutir por asuntos sin importancia, eso era molesto, "¿Gaucho-san puede decir por dónde se fue?"

"¿Ah? Si… hummm" tomándose unos segundos el hombre de poncho frunció el ceño al aspirar profundamente, "Es extraño… el mocoso psicópata, su aroma está disperso y es difícil de seguir, al parecer tenemos entre manos a alguien que tiene experiencia en ser rastreado y sabe cómo no dejar un rastro, es difícil decir dónde fue… pero" sonriendo sus ojos brillaron cuando vio los restos de un aroma rosa, "Tengo el rastro de la niña…"

"Bien, ella es clave en este operativo así que no debemos perder el tiempo…" cuando el héroe vidente iba a ordenar que todos se retiraran su teléfono sonó, "Habla Sir Nighteye"

"Señor tenemos las cámaras de los edificios más cercanos y lo tenemos, está en una ciudad cercana a ustedes, pero hay un problema…"

"…" confusión fue su primera reacción, pero varios segundos después Sir Nighteye trago en seco, esto era malo, "Mirko-o ¿Podrías acercarte?"

"Humm… si" extrañada la mujer conejo se acercó a su colega y se tensó cuando vio su mano tocar su cabeza, cuando iba a gritarle vio el brillo morado en sus ojos, "¿Así que este es su tan afamado poder?" lo que sea que estaba viendo el flacucho no era bueno.

"Tenemos que irnos… ahora" perdiendo el contacto con la mujer morena Sir Nighteye perdió la compostura, sudando frío corrió a la salida donde un helicóptero los esperaba, su visión era clara, un combate se acercaba y temía que el resultado sea lo que vio.

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"La perfección no existe… eres hermoso como eres coraje, con todas tus imperfecciones lograrás lo que quieras…"

Naruto levantó una ceja cuando escucho el programa que actualmente estaba viendo Eri, la niña se levantó hace horas y le pregunto a él si podía encenderla, sinceramente no le importó al shinobi que con solo dormir unas horas ya estaba al 100%, hubo personas que se acercaron a la zona, pero había dejado clones que se deshicieron de ellos sin problemas.

Eri por su lado estaba anonadada, nunca tuvo la oportunidad de ver televisión y no sabía lo entretenido que era, ver tantas cosas, tantos lugares, tantos personajes de diferentes animes/caricaturas/live-action, era difícil despegarse de ella.

Aunque comer tantas cosas que había en el refrigerador aún con la aprobación de su salvador se sentía mal, tal vez fue el mezclar chocolate con gaseosa, "Hummm… me siento mal" se quejó cuando su estómago chilló y se sentía adolorida.

"Ten niña" la pequeña levantó la mirada cuando el rubio le ofreció un jugo verde, dudosa la tomo y tuvo que arrugar el rostro con desagrado ante el sabor, pero el dolor de estómago desapareció casi al instante, "Te prepare una mochila, tenemos que salir"

Solo asintiendo con la cabeza la niña tomo la mochila que le extendió el shinobi y lo siguió por la puerta, "¿A dónde vamos ahora?"

"Buscar a alguien que me debe un favor"

"Oh…"

*Rin~ rin~*

Antes que cualquiera de los dos pudiera irse se escuchó el timbre del teléfono, el teléfono del hotel estuvo varios segundos sonando sin cesar bajo la mirada dudosa de Naruto, que al final se acercó y contesto la llamada.

"¿Hola?"

"Sr. Uzumaki, es un gusto por fin poder hablar con usted, lástima que no sean en los mejores términos" la voz era masculina y por su modo/tono podría pertenecer a un hombre adulto de edad algo avanzada.

"¿Quién eres?" más serio Naruto solo siguió escuchando.

"Solo queremos hablar Sr. Uzumaki, no hay necesidad de ser agresivo" está vez la voz era claramente de una mujer, al parecer eran dos personas, "No hemos tenido la oportunidad de presentarnos, soy Rue Neosama directora de seguridad nacional de Japón"

"Y yo soy Hirohito Shōwa presidente de Japón"

"… ¿Qué quieren?" El rubio se movió por la habitación para mirar por la ventana, no sentía nada, aún.

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Al otro lado del mundo, en Akasaka rikyū una de las casa de gobierno de Japón, una gran estructura levantada hace siglos por los antiguos emperadores y ahora ocupada por el gobernante del mismo país.

En la oficina principal estaban dos personas, una de ellas Rue Neosama y el otro el presidente Hirohito Shōwa, un hombre mayor de más de 50, vestía un traje formal y una banda en sus hombros con los colores distintivos de su país.

Los dos estaban sentados en la mesa principal de la oficina, junto a un teléfono, era claro con quién se estaban comunicando

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"Seguro usted debe de estar enojado por los últimos acontecimientos, el ataque al campamento, el fallecimiento de esa familia de constructores, la estimada señora Yuroichi, su batalla contra All for one, su separación de la U.A y demás eventos en los últimos meses… debe de estar cansado ¿Verdad?"

"…"

"¿Qué me diría si le ofrezco su redención?" fue la tentadora pregunta del presidente que estaba manejando un tema delicado que no solo lo involucraba a él, sino a más mandatarios alrededor del mundo.

"Sr. Uzumaki usted tiene en sus manos algo que puede desestabilizar no solo nuestro país, todo el mundo está en riesgo por su sola existencia" tomando la palabra la directora de seguridad nacional siguió, "Nos llevó siglos de peleas, violencia, sangre y muerte tener la frágil paz desde que los Kosei aparecieron"

"La niña que usted tiene puede hacer que esa oscura era llegué a este pacífico mundo…" con un suspiro el presidente apoyo sus codos en la mesa y miro con frialdad al teléfono, "Ella tiene el poder de borrar peculiaridades, solo imaginé que tan peligroso es eso en un mundo donde casi todos tienen uno y más del 70% de nuestra economía, tecnología y desarrollo dependen de esos Kosei…"

"Sr. Uzumaki esa niña puede hacernos volver a la era de las cavernas, desconocemos el alcance de su poder y de las decisiones que puede tomar en el futuro, ¿Y si ella fue influenciada por el villano Overhaul? ¿Y si quiere borrar de forma permanente todos los Kosei del mundo solo por capricho?..." el miedo en la voz de la anciana era evidente, desconocían el alcance del poder de la niña y temían lo peor, "Ella puede borrar los Kosei de nuestros mayores pro hero que son nuestra única defensa contra los villanos que esperan el momento para actuar"

"¿Qué quieren de ella?" Pregunto de forma suave Naruto que miro la pared en silencio, nunca pensó que el poder de la niña, fuera tan temido y si el mismo lo pensaba, ellos no se equivocaban en temer.

"Que sea eliminada…"

"…"

"Yo mismo junto a otros que comparten nuestra preocupación estamos más que dispuesto a perdonar todos sus pecados Sr. Uzumaki, incluso estamos más que dispuestos a aceptar sus métodos extremistas…"

"Solo imagínelo, ya no tendría que huir, podría volver con sus compañeros de academia, ser un pro hero que con nuestras influencia podría llegar a ser el nuevo símbolo de la paz, dinero, seguridad y paz, todo lo que puedas desear se te será dado…"

"…" en silencio Naruto miro a Eri que solo estaba junto a la puerta esperando impaciente la partida para el viaje en busca de reunirse con su madre.

"Solo hágalo señor Uzumaki y todo irá a su favor…"

"…"

"¿Señor?" Eri miro curiosa como el rubio hablo varios minutos por teléfono hasta que finalmente cortó la llamada, extrañada vio como él solo coloco su mano en el mango de su espada que colgaba en su espalda, sentía su mirada fijamente en ella, "¿Señor…?" con la intención de acercarse a él intento jalar su chaqueta, pero se paraliza cuando su muñeca fue tomada con fuerza, "¿Señor-r?"

"…" con un brillo oscuro en sus ojos Naruto desenvaino su espada.

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"¿Qué sucede?" el grupo de pro hero guiado por Mirio se detuvieron cuando escucharon gritos y explosiones, todos ellos vieron el humo elevarse al cielo y cuando llegaron a la fuente vieron a una gran banda de lo que parecían ser 'villanos' arrojar granadas incendiarias a un edificio.

"¡Quemen todo! Lo obligaremos a salir" el líder de la pandilla era un hombre vestido como motociclista al igual que sus seguidores, su símbolo distintivo eran unos pañuelos rojos con una cruz negra, "¡Esa recompensa será mía!" sus ojos brillaron en rojo y juntando sus manos fue envuelto por fuego, con un gruñido de esfuerzo disparo una gran llamarada contra el edificio.

"¡Arde! ¡Arde! ¡Arde!" los seguidores del villano vitorearon cuando el incendio del edificio creció y las pocas personas en el tuvieron que escapar para no estar atrapado entre las llamas.

"¡Vamos sal a divertirte!" el líder motociclista siguió disparando fuego hasta que algo inesperado sucedió, un puño salió a sus pies y se estrelló contra su mandíbula, todos vieron atónitos a un adolescente de cabello rubio y capa roja que había noqueado al villano de un solo golpe.

"¡Jefe!" todos los villanos corrieron a auxiliar a su líder, en poco tiempo Mirio estuvo rodeado por 20 villanos, todos armados con cadenas, tubos de metal o navajas, "¡Por el niño!" todos se abalanzaron sobre el que solo se quedó de pie con una sonrisa.

Golpes y gritos se escucharon cuando llegaron a él.

Un puño fue dado contra la cara de uno de los villanos que vio con incredulidad como su bate de metal atravesó la cabeza del mocoso, perdiendo varios dientes el villano termino en el suelo, varios disparos se oyeron y Mirio solo se mantuvo de pie con balas que atravesaban su cabeza.

"¿Que-e?" miedo fue lo que sintió el sujeto cuando las balas se le acabaron, antes que pudiera recargar el arma vio del suelo surgir un pie que le dio un demoledor golpe en la cara.

"¡Deténganlo!"

Todos lo intentaron, pero todos fallaron, sin importar de qué modo lo atacaran el pro hero se volvía intocable, y para empeorarlo se hundía en el suelo y desaparecía para luego aparecer y dar golpes tan fuerte que ninguno de ellos tuvo oportunidad de siquiera responder.

Fue una derrota aplastante.

Corriendo entre los villanos Mirio dio golpes y patadas, todas dirigidas a zonas vitales que noquearían a sus oponentes en un instante, con una cadena pasando a través de su pecho extendieron su mano derecha y le dio un puñetazo en el rostro de su último agresor.

"¡Power~!" con un grito de victoria Mirio dejo detrás de el a todos los villanos derrotados.

"¡Sempai estamos… aquí" Midoriya había llegado acompañado del resto del grupo, solo para ver a un gran grupo en el suelo y un sonriente Mirio hablando con un policía que acababa de llegar. Al parecer Lemillion estaba a la altura de su título como el estudiante más fuerte de la U.A, venció solo a una pandilla de 20 villanos armados con armas blancas y de fuego en solo 1 minuto.

Eso era aterrador.

Pero no tenían tiempo para pensar en eso, todos escucharon el estallar de las ventanas de cristal del edificio en llamas, ante el calor el cristal de varias ventanas explotaron y los gritos de ayuda de las personas que estaban adentro no se hicieron esperar.

"¡Todoroki cubre el techo con hielo eso nos dará tiempo!" Tomando el mando Mirio miro al equipo que se le encargó vigilar por pedido de Sir Nighteye.

"Hai-i" Saliendo de su sorpresa Shiori acato la orden y golpeando uno de sus pies contra el suelo se elevó en un pilar de hielo, se elevó lo suficiente para poder disparar hielo que al menos impediría que el fuego se propagara a otros edificios.

"¡Creati crea todo lo necesario para ayudar! Primeros auxilios y lo que puedas por favor… Fropy, Nejire y Grabity ayúdenla a atender a los heridos hasta que las unidades de emergencia lleguen"

"¡Hai!" las chicas acataron la orden y Momo empezó a usar su Kosei para crear todo lo necesario.

"Los demás tenemos que entrar… ¡Tenemos que ver qué nadie haya quedado ahí adentro! ¡Ibara, Deku, Red Riot y Tamaki síganme!" Los cuatro nombrados no dudaron en seguir al rubio que corrió al edificio en llamas y solo atravesó las paredes adentrándose en el lugar para localizar a las personas atrapadas y sacarlas.

Kirishima no pensó dos veces en correr y saltar por una ventana entrando al edificio, con su Kosei de endurecimiento soportaría las llamas, pero el calor y el humo era otra cosa que tendría de que cuidarse.

Izuku rompió la puerta de la entrada principal de una patada y entro seguido del tímido héroe y la adolecente religiosa, tomando caminos separados ellos se movilizaron para buscar sobrevivientes.

"¡Iré arriba!" Ibara subió por las escaleras del edificio mientras dejaba rastros de cabello que se adherían a las paredes y vigas para que la estructura se mantenga, su cabello aún si se asemejaba a ser solo plantas era muy resistente, lo suficiente para soportar algunos minutos de las intensas llamas y el calor.

La chica fue puerta por puerta abriéndolas y revisando que nadie quedé atrapado, llegando al quinto piso se le estaba dificultando el respirar, tosiendo por el humo empezó a perder la visibilidad de su entorno.

Respirando con pesadez sintió alivio cuando no encontró a nadie, por suerte al parecer el hotel estaba casi vacío y las únicas personas que estaban en la zona baja ya fueron evacuadas. Cuando noto que llego al último piso supo que era hora de irse.

Pero se detuvo, escucho algo.

Era débil.

Pero podía escuchar unos débiles gritos.

Corriendo por un pasillo en llamas llegó hasta dónde escuchaba el ruido, pero hubo un problema.

"Auch…" Ibara tuvo que morderse el labio inferior cuando golpeó la puerta con su hombro en un intento de derribarla, eso fue doloroso, no era como en las películas, "…" retrocediendo miro la puerta, era obvio que no lo lograría con solo fuerza bruta, su mayor virtud no era la fuerza bruta y uso gran parte de su cabello para fortalecer la estructura del edificio.

Tomando aire y concentrándose corrió contra la puerta, usando todas sus fuerzas dio una patada que logro romper el cerrojo, aunque cayera en el suelo y casi se quemara por el fuego logro su objetivo.

"Jesucristo…" El ruido que había escuchado no era nada más ni nada menos que el de un bebé llorando en su cuna, corriendo la adolecente tomo al bebe y dio gracias a dios que el bebé no tenía quemaduras, solo molestia por el calor y el humo, al parecer solo era el bebé, tal vez la madre estaba afuera del edificio, "Te sacaré de aquí…" tomando una gruesa manta la mojo en un lavamanos y luego la uso para con cuidado tomar al bebé y cubrirlo, era algo básico que los bomberos hacían en caso de encontrar infantes en incendios, mantenerlos cubiertos y húmedos para que el calor no los sofocara.

Saliendo de la habitación en llamas corrió por los pasillos, el humo era cada vez más denso y podía escuchar el rechinar de las vigas quemadas cediendo, tenía que salir y ahora antes que todo el edificio callera.

Llegando hasta la escalera que bajaba al noveno piso, tuvo que retroceder al ver el fuego, las escaleras casi eran consumidas por las llamas, la chica trato de hacer crecer su cabello y hacer un puente, pero no podía, había llegado a su límite.

¿Qué podía hacer?

¿Pedir ayuda?

¿Sus compañeros llegarían hasta ella? ¿Y si quedaban atrapados al igual que ella?

¿Qué podía hacer?

"Al diablo…" maldiciendo Ibara junto valor y tomo con fuerza al bebé abrazándolo contra su pecho, corriendo por el pasillo salto sobre la escalera que finalmente había cedido, para su suerte llego al otro lado y bajo al noveno piso, "Puedo hacerlo…" corriendo sentía sus pulmones quemarse y sus ojos arder haciendo que derramará lagrimas para aliviar el malestar, sus piernas le dolían.

Pero….

"¡Puedo hacerlo!" saltando de nuevo por las escaleras bajo al octavo piso, tuvo que quitar el grito de dolor cuando su pierna derecha fue cortada por un escombro en llamas que no pudo esquivar, ignorando el dolor corrió por el pasillo, "¡Puedo hacerlo!" con una mirada determinada en sus ojos corrió para seguir bajando.

Desgraciadamente el piso de madera a sus pies cedió.

"¡Ahggg!" Ibara tuvo que gritar cuando se aferró con su mano derecha en el suelo de madera para no caer en una habitación del piso inferior que estaba siendo consumida por el fuego, lo primero que hizo fue arrojar con mayor cuidado que pudo al bebé en el pasillo para que no callera con ella, clavando sus uñas en la madera tuvo una batalla dónde intentaba subir, pero el fuego estaba quemando sus piernas y empezó a toser por el humo.

La chica tuvo que llorar con frustración cuando escucho el llanto de esa pequeña criatura inocente, que era un regalo de los cielos para vivir en un mundo que su padre de los cielos había creado, "Vamos Ibara… deja el dolor para luego de tu muerte" pataleando uso toda la fuerza que le quedaba para subir, rasguño la madera rompiendo casi sus uñas.

"¡Oka-san quiero ser una heroína! ¡Quiero ayudar a las personas!"

Ibara respiro con pesadez mientras tenía recuerdos de porque estaba haciendo esto, recordándose a sí misma de niña cuando por fin entendió para que vino a este mundo, para ayudar.

"¡Ahhhhh!" con un último grito de esfuerzo logro por fin subir y alcanzar al bebé, abrazándolo siguió corriendo, tenía que salvarlo, tenía que sacarlo de este lugar, él tenía que vivir, ella tenía que vivir, tenía que seguir, aún no quería morir.

Aunque su fuerza de voluntad le gritaba que siguiera, su cuerpo fallo.

Cayendo de rodillas Ibara tosió varias veces, el humo ya era insoportable y no podía respirar, no tenía las fuerzas para levantarse, mirando a su alrededor solo vio fuego y escombros, ya no sabía ni siquiera por dónde ir.

"Shhh~" lo único que podía hacer ahora era confortar al pequeño, cuidado lo tomo en sus brazos y lo abrazo contra su pecho, murmurando palabras suaves calmo el llanto de la pequeña criatura, "Todo estará bien… todo estará bien…"

El cabello de la chica creció lentamente, poco a poco fue envolviendo al bebé, esto era lo último que ella podría hacer, protegerlo.

Su cabello podría protegerlo del fuego y los escombros, al menos varios minutos, alguien más lo ayudaría, levantándose como pudo, Ibara vio una luz, tropezando camino a ella, no podía flaquear ahora…

No tenía que rendirse…

Tenía que al menos salvarlo.

Tomando una última bocanada de aire corrió con todas sus fuerzas y salto.

Todos desde afuera del edificio vieron con horror como Ibara había atravesado una ventana saltado desde el séptimo piso.

El tiempo se volvió lento cuando la chica fue a caída libre, "Todo estará bien" abrazando al bebé Ibara sabía que su cabello lo protegería, él iba a estar bien… era todo lo que importaba.

Pero se sentía extraña, algo lo envolvió, era cálido y confortante, se sentía segura.

Fue confuso para ella que escucho un estruendo y fue sacudida, no lo entendía pero noto que alguien la había atrapado en su caída y ahora estaba en sus brazos.

Agotada, confundida, aturdida, cansada y herida Ibara levantó para mirada para ver quién la había atrapado y pudo distinguir una silueta, era alto y tenía cabello dorado, sus ojos extrañamente diferentes, uno de sus ojos era rojo y otro azul, no sabía porque, pero sus ojos… podría verlos por horas y no se aburriría de ellos.

Pero era extraño… su salvador parecía tener marcas de bigotes… como los de un gatito.

Channn

Channnnnn

Channnnnnnn

Channnnnnnnnnnnnn!

¿Qué les pareció? Déjenme sus comentarios y díganme que les parece, recuerden mientras más comentarios más rápido sacaren el siguiente capítulo.

Sin más CHAUUUUUUUUUUUU y les deseo lo mejor del mundo, a ustedes y sus familias.