XXVIII
Poco después entraron otros cinco tipos más tomaron a Ben del suelo donde yacía un gran charco de sangre.
-¡Demonios jefe está perdiendo mucha sangre! -exclama uno de ellos.
Mientras otro me ata de manos y tobillos en una silla.
Mi madre al igual que rosa están atadas ambas de espaldas y en el suelo.
-¿Qué demonios hacemos chris?-pregunta uno de los tipos al que parece estar al mando de la situación.
-No podemos llevarlo al hospital la policía nos está pisando los talones-dice preocupado mirando a Ben el cual reposa ahora en uno de sus finos y costosos sofá.
-Maldición hagan al..go esta... mierda quema como el in..fierno-habla Ben acortando un poco sus palabras.
-Pronto irás allá maldito -esboce una sonrisa sarcástica.
-¡Eres una perra malagradecida! -uno de los tipos me grita y me da una bofetada partiendo un poco mi labio inferior.
Sonreí arrogante.
-¡Chris joder el jefe desmayo!- Habla uno de los tipos -¡Demonios no respira!.
Un nudo se sentó en mi estomago por un momento cuando escuche esas palabras, sabía que no saldría viva de esta y eso era lo que más temía que por mi culpa mi madre muera junto a mi.
-¡Por favor no le hagas daño, por favor! -dice mi madre tratando de soltarse.
-Ella es su hija, ella es hija de Ben no le hagan daño-pide mi madre con lágrimas en sus ojos.
-¡Si y yo soy hijo de donald trump maldita loca!- dice Chris.-Llévate el cuerpo del jefe ahora-ordena.
Cargó el arma y mi madre suelta un grito ahogado aterrada por lo que el tipo vaya hacerme, era una verdadera tortura ver a mi madre llorar mirando a aquel hombre acercarse a mí cautelosamente, sin poder evitar verlo a los ojos le sonrío con algo de maldad cínicamente, no morire llorando como maldita patética no sufrire mas toda mi vida he llorado, pues si moriré hoy tendría que morir con dignidad, no mas ya al fin descansare de toda esta mierda y ver la cara de mi madre llena de dolor ciertamente no ayuda.
Su arma posa en mi frente haciendo que mi madre le implore pero sus súplicas no son escuchadas, todo el lugar era un caos gritos, disparos, y ahora sirenas son también parte del lugar. Rosa al igual que mi madre me hablaban y yo solo podía pensar en que la policía llegara pronto o si no estaría muerta en cualquier momento.
Todos se alejan de prisa hacia la puerta de la oficina gritandole a Chris (Vamos tenemos que salir de aquí) el en respuesta sonríe con un poco de inseguridad en aquella sonrisa, quizá sabía que la policia en cualquier momento entraría a este nido de mierda en el que me encontraba.
-No me iré sin antes cumplirle a mi jefe, y estoy seguro que él hubiera querido esto- dijo al mismo tiempo bajando el arma suavemente de mi frente hasta llegar a mi hombro derecho.
El sonido de un disparo hizo que mi cuerpo se estremeciera y un gemido de dolor escapara de mi boca sin poder evitarlo, los sollozos de mi madre se agudizaba cada vez más. Mi hombro ardía, dolía cada vez con más fuerza.
El hombre sonrió al verme sollozar de dolor, supe que me quería torturar cuando no dio ni un solo paso atrás si no que solo posó nuevamente el arma en aquel orificio ya abierto por el disparo haciendo una tortura para mi.
-¿Sabes que?, aveces es dificil contenerse a una zorra como tu-hablo poniendo mi cuerpo en alerta.
El arma rozaba entre mis pechos hasta llegar a mi cintura y así subiendo nuevamente hasta apuntar a quemaropa a mi mentón.
-¡Vamos zorra!, es evidente que no has follado en mucho tiempo-dice y de nuevo mi cuerpo entra en alerta.
-¡No te atrevas a tocarme no aquí con mi madre!-grite.
-Al demonio las doñas, tu y yo la pasaremos muy bien zorra-dice y me toma por mi cabello con su mano libre aun con el arma en mi mentón.
Sus labios fríos y carnoso chocaron de inmediato con mi piel empezando así en mi cuello y descender hasta llegar a mi escote en mis pecho, era asqueroso sentir su lengua húmeda en mi cuerpo en mis pechos, quería que esta maldita pesadilla acabara y rapido por que sabia que en cualquier momento el psicopata me follara hasta que satisfaga sus deseos y me mataría cuando acabe conmigo.
Trate de protestar de soltarme pero era imposible estaba totalmente acorralada y los nudos en mis muñecas apretaban tanto que dolía, me daba pánico al pesar de saber manejar estos momentos, por que no es primera vez pero sabía que esta si iba a morir.
-¡Te dare todo el dinero que quieras pero deja en paz a mi hija!-gritó mi madre tomando a ambos por sorpresa.
Y asi paso todo, todo paso en cámara lenta la puerta de la habitación se abre y entra varios tipos con sus armas en manos a diferencia que estos si traían uniformes y estaba al mando de una chica que de inmediato reconocí, esa chica era Tamara.
-Baja el arma lentamente, tirala al suelo y sube las manos-dice Tamara pero el tipo no obedeció a aquellas palabras.
El hombre con agilidad trata de disparar en un rápido movimiento pero no fue posible por que uno de los oficiales ya le había disparado al pecho y el otro en el costado izquierdo fueron dos los disparos los que se escucharon en aquella habitación. Ese momento pasó todo tan rápido que cuando logre caer en la realidad, mi madre tenía un ataque de pánico o eso lo supe cuando su mirada estaba en los más profundo del mas alla, ella me llamaba por mi nombre repetitivas veces.
-¿Estás bien?-pregunta Tamara.
-Te tardaste muchísimo tiempo en venir aquí- dije mirándola a los ojos.-casi me mata ese tipo-segui.
-Llegue lo suficientemente rápido para evitar que abusara de ti, o eso es lo que iba a ser no?-dijo y baje mi mentón.
-Lo siento Tamara, se que hiciste tu mayor esfuerzo-dije sincera.-Gracias.
-Sacaremos a tu madre y a ti al hospital ahora mismo-dice desatando los nudos de mi muñeca.-As perdido mucha sangre y aunque la herida no es de gravedad tenemos que apresurarnos.
Asiento con mi cabeza sintiéndome un poco mareada, de seguro es por lo que dijo Tamara e perdido mucha sangre y definitivamente todo lo que a tenido que lidiar mi corazon no es nada fácil mi vida era una tortura todos estos días y creo que por fin todo a acabado. Mi vista empezó a nublarse lentamente y mi cuerpo a sentirse un poco pesado no podía mantenerse por sí mismo, mis párpados amenazaban con cerrarse muy pronto.
-¿¡Sam, Demonios estás bien!?-pregunta Tamara tomándome con un poco más de fuerza en sus manos al sujetarme.
-Tam.. creo que me siento un.. poco...-no pude sacar mas palabras de mi boca por de de pronto todo mi ser se apaga.
Tamara en Multimedia ♥
.................................................
Hola chic@s de nuevo ¡Gracias! "YA SOMOS 800 LECTURAS". Se que algunos me apoyan con sus votos pero recuerden que sus opiniones cuentan para terminar esta historia como ustedes quisieran, A ver que tal si me cuentan sus ideas de como quisiera que terminara esta historia.
¿Con Sam y Blake juntos?
¿O que simplemente Sam sea feliz junto a la familia que nunca tuvo en años?
Dejen sus opiniones
Los quiero ♥
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro