X
-Tarjeta-
Para: sam
En agradecimiento por la noche maravillosa que pase junto a ti, gracias! gracias hermosa con amor...
Dylan (Tu chico de baile).
Al terminar de leer, se me escapa una pequeña sonrisa, brenda me arrebata la tarjeta de las manos.
-¡oh por dios, me encanta este tio! -inquiere pestañeando con coquetería.
-¡Oye! -exclama jazmín -es de sam, ella lo vio primero -soltó.
-como quisiera que fueran de blake -susurro y me dejo caer en la cama.
-¿Blake? - gritaron ambas al unísonido.
-Olvidenlo chica es una larga historia - hable sin ganas.
-¿Que? -exclamó brenda -¿piensas dejarnos así? mueve tu culo y ponte algo, que nos vamos a desayunar al restaurante del hotel yo invito, y así nos cuentas mejor -siguió brenda, se cruza de brazos y me mira con determinación.
Bajamos al restaurante del hotel de no ser por brenda el poco dinero que tenía se me habría esfumado en ese desayuno, solo tenía que salir hoy en busca de empleo o si no todos mis planes se irían a la mierda. Las chicas al igual que yo solo comimos un sandwich de pavo y un jugo de naranja.
-¿Ahora si puedes contarnos de tu misterioso chico? -dice jazmin.
-¿esta bueno? -esta fue brenda.
-¿De verdad chicas quieren escuchar mi terrible y triste historia? -les pregunté exagerando un poco.
Las dos asienten con la cabeza, buscando mis manos para entrelazarlas junto a las mías.
-Soy una prostituta -solté sin más, en un hilo de voz -¿Que? -ambas gritaron al unísonido llamando la atención de todos.
-¡Rayos! todavía estás bajo el efecto del alcohol -exagera jazmin -Vamos necesitas descansar -Prosiguió tirando de mi mano para que me levantara de mi asiento.
-Jazmin no exageres -Dice brenda comiendo de su sándwich.
-Si chicas pero todo absolutamente todo lo que hice y lo que soy ahora no es precisamente por que yo lo e querido -explique en voz baja -Viví quince años de mi vida encerrada trabajando para el hijo de puta que mato a mis padres o al menos eso me hizo creer -Sueno demasiada tranquila y serena para mi gusto.
-¡Dios!... Sam como lo siento -hablo jazmin.
-Demonios no debimos preguntar tanta mierda -esa fue brenda dirigiéndose a jazmín.
-Tranquilas chicas, se que lo hacen sin ninguna intención -Solté , y sus ojos me observaron con atención, mientras mi garganta se apretaba cada vez con más fuerza.
-Todo lo que nos has contado es horrible sam pero... pero ¿cómo es que estás aquí? -titubeo jazmin.
-Esa es la parte más hermosa y maravillosa de esta historia que me gustaría contarles -solté un largo suspiro -Ven esta cicatriz -les hable mostrándoles la pequeña herida que tengo en la cabeza.
Ambas asienten
-Me lo han hecho en uno de los bares donde trabajaba -continue.
Fue en ese momento donde conocí a.. ¿Blake? Mi vista se fue de inmediato detrás de las chicas, ellas de inmediato voltearon a ver cual era mi distracción.
Blake pasa al stand de comida para colocar en su bandeja panecillos y huevos revueltos, mientras le ordena una bebida al chico del bar.
-¿Pero qué demonios? de donde salio este angelito -soltó brenda.
¡Sabía que no solo yo lo vería como uno!
-El es sexy, si que lo es -Hablo jazmin mordiendo su labio inferior.
Blake voltea su mirada para encontrarse con la mía luego le doy una fulminante y el en respuesta pasa el pulgar de su mano libre por sus labios, tratando de ocultar su sonrisa. Eso fue suficiente, mis mejillas ardían, mire a las chicas pero ya me estaban mirando.
-Me tengo que ir -hable tratando de ocultar lo antes sucedido.
-¡Oye! -exclamó brenda -te perderas de la buena vista -sonríe abiertamente para así llamar la atención de blake.
-Chicas lo siento pero buscare un nuevo empleo -hable seria -les prometo que las vere en ...
-¿Puedo sentarme con ustedes nenas? -escuche una voz gruesa y rasposa detrás de las chicas. levantó la mirada y blake está sujetando su bandeja de desayuno con ambas manos y sonriendo con arrogancia.
¡Mierda!
-Bien chicas, las veré luego -ignoró las palabras de blake y me doy la vuelta.
-¿Sam no te quedarás con nosotros a desayunar? -hablo y esta vez su tono es frío.
Su voz tan potente congela mis huesos y de solo llamarme asi, hacen que mis vellos se electrifiquen las chicas de inmediato quedaron boquiabiertas, llevándose las manos al pechos, ambas dignas de un club de teatro.
-¿Ustedes dos se conocen? -preguntó brenda.
-Si -Blake
-No -Sam.
Ambas chicas fruncen el ceño
-Deja ya de comportarte como una niña tonta, siéntate y come con nosotros -ordeno y mi sangre hirvió.
-¡Pudrete jodido estupido! -escupi y solo di un paso cuando escuche decir...
-Sam, sam ,sam... -suspiro cansado, su voz era fría -no querrás que a tu chico de baile le suceda algo -continuo y su voz sonó aún más fría y perturbadora.
Me detuve en seco, poso mi mirada en las chicas que al igual que yo estaban desconcertadas, aquellas palabras ¡Dios! solo las chicas y yo sabemos lo de las flores... esa frase (tu chico de baile) .
-¿Cual es tu jodido problema, maldito idiota? -escupí, las chicas solo balanceaba su cabeza de un lado a otro cada vez que alguno decía alguna palabra.
-Shss... no querrás que nos saquen del hotel amor -hablo y no pude contener mi ira un poco mas, blake hace que mis emociones se vayan a otra dimensión, su actitud es igual a la de un maldito enfermo un dia es el chico mas dulce del jodido universo y al otro un maníaco desquiciado maldito idiota, sabia que tenia problemas y muy serios. solo tuve que tomar una larga respiración para no darle el gusto de verme igual o peor de jodida que él, ignore todas las palabras que salieron de su boca ese preciso momento y salí del bufe y luego del hotel.
Al salir hecha una mierda, caminando las calles en busca de empleo ya en una cuantas cuadras una voz muy familiar me detiene.
-¿Sam? -hablo el hombre a unos cuantos pasos de donde yo me encontraba.
-¡Oh dylan! -sonreí.
-Me alegra volver a verte linda -dice y esta vez su mirada recorre todo mi cuerpo.
-Gracias por lo de... las flores estaban hermosas -titubeo.
-No es nada hermosa -dice y una sonrisa se hace presente.
-Te invito al desayuno, aquí a la vuelta hacen unos...
-¡Oh! no... -lo interrumpí -tengo planes para hoy de hecho, busco un empleo -solté sin dejar de mirarle.
Dylan era el tío más tierno y dulce, sus ojos cafes resaltan en su piel bronceada, hoy vestía muy elegante, de imaginar que iba a su trabajo, es totalmente encantador todo lo contrario a blake.
-Pues ya estas hablando con tu nuevo jefe, ya tienes empleo - hablo y mis ojos se abrieron como platos.
Dylan en multimedia ❤
......................
¿me encanta dylan y a ustedes chicos?
comenten y voten ♥ Los quiero!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro