Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Es la hora

Capítulo 31

KATHIA (P.D.V)

Cuatro días y 15 horas.

Cuatro días y 15 horas habían pasado desde que estaba en esta maldita casa metida. Dos días y 2 horas llevaba saliendo con Byron. 1 día y cuarenta minutos hacía que Mel me había quitado los puntos. 30 minutos llevaba haciendo ejercicio en aquel patio trasero.

- ¿Enserio estás lo suficientemente bien como para entrenar? -Preguntó Byron desde los escalones donde estaba sentado.

Llevaba 10 minutos haciendo flexiones y ya iba por las doscientos cuarenta.

- Te respondí antes y vuelvo a responderte ahora, estoy perfectamente -Dije antes de dejar de hacerlas. No tenía sentido superar mi récord en estos momentos, había llegado a hacer quinientas flexiones y ahora mismo no tenía ganas de intentar superarlo.

- ¿Cómo es posible que tengas tanta resistencia haciendo flexiones? -Preguntó asombrado con una pequeña sonrisa.

- Entrenamiento -Me limité a responder mientras hacía algunos pasos de gimnasia rítmica. Tenía que calentar un poco la flexibilidad.También tenía que hacer algunos movimientos de muay thai y necesitaba a Mel para prácticar Judo.

- ¿Por qué no lo dejas? -Preguntó viniendo hacia a mi- no es necesario que te esfuerzes, te quitaron los puntos ayer.

- Creo que no lo entiendes Byron -Dije mientras me alejaba de él- si no te has dado cuenta ahora mismo toda mi familia nos está buscando a los siete, necesito estar totalmente en forma para cuando vengan. Me metieron un tiro porque llevaba tiempo sin entrenar. Ahora mismo lo que necesito es hacer los rituales que hacia siempre desde que me enseñaron, necesito prácticar la puntería, necesito hacer carreras, necesito pelear.. ¡necesito muchas cosas para poder estar en forma cuando vengan a matarnos!

Incoscientemente había terminado gritándole y me había puesto a un palmo de su cara.

- ¿Te recuerdo que yo no soy ninguna de esas personas que intentan matarte? -Preguntó pegándose a mi nariz- no te confundas conmigo Kathia, puede que seas toda una maestra asesina y todo lo que tu quieras, pero no pienses que voy a convertirme en un calzonazos y ha agachar la cabeza cuando tu grites. Puede que yo no haya tenido tu jodido entrenamieto, puede que yo no sepa disparar un arma, pero puedo aprender y lo haré si eso significa que empieces a considerarme tú igual.

Acto seguido se dio la vuelta y se metió dentro de la casa.

Me dejé caer en el suelo y empecé a respirar tranquilamente. Byron tenía razón, lo estaba tratando como alguien inferior a mí, como alguien que no podía defenderse cuando la verdad era que Byron era un magnífico luchador.

- No deberías comportarte así con él -Dijo Paul sentándose a mi lado. 

- No deberías meterte en nuestros asuntos -Dije mirándole fijamente.

- No me estoy metiendo en sus asuntos -Dijo él de forma tanjante mientras se levantaba- solamente te estoy diciendo que no descargues toda tu maldita ira contra mi hermano porque él no tiene la culpa de nada. Deja de mirarte el puto ombligo y empieza a darte cuenta de que si van a venir a buscarte, también nos matarán a nosotros, que no van a tener piedad con ninguno y tampoco con Byron, así que si de verdad te importa algo, empieza a tratarle bien y ha entrenar con él.. que no se sienta un inútil cuando vengan a buscarte y él no pueda hacer nada.

- ¿Quieres decir que la culpa es mía? -Dije poniéndome en pie en un momento- ¿tengo que recordarte que fue tu maldita familia quién decidió esconderselo todo?¿por qué no le entrenas tú si tanto te importa? es tú hermano y no deberías decirme a mi que lo entrene yo.. se te debería ver el detalle.

- ¿Acabas de decir con todo esto que no te importa él? creo que como buena mafiosa,por así llamarte, y como futura "cabecilla" de la mafia, deberías ocuparte de que todas las personas aquí presentes sepan usar un arma -Dijo antes de pasar por mi lado y entrar en la casa también.

Lo que faltaba -Pensé frustrada antes de darle una patada a la mesa que había allí.

Sin esperar más entré dentro de la casa y los observé a todos sentados en la sala mirándo la tele como si no hubiesen oído los gritos que había tenido con Byron y con Paul. 

- ¿Algún problema? -Preguntó Mel levantándo la vista hacía mi.

- Ninguno -Mascullé antes de atravesar la sala y dirigirme a mi cuarto. Pero entonces pensé que Byron estaría ahí, por lo cuál me metí en el baño.

BYRON (P.D.V)

Frustración. Rabia.Ira.

Esos eran los tres sentimientos que me dominaban en estos momentos. Lo único que quería era romper cosas, romperle la cara a alguien, pero no podía porque estaba en medio de un maldito bosque sin poder ir a pelear como hacía usualmente.

Solté un grito antes de pegarle un puñetazo al espejo de la habitación.

Había oído lo que Paul y ella se habían gritado. Le había dicho que me entrenara él si tanto le importaba .. ¿y ella?¿no era ella capaz de enseñarme?¿acaso no le importaba?

Recordé el día en el que nos lo habíamos pasado tan bien, juntos en el sillón dándonos besos. Pero parecía que todo eso había pasado en años, porque desde que le habían quitado los puntos solamente se pasaba el día entrenando y cuando pensaba que había terminado y que podíamos pasar el tiempo juntos, se duchaba, comía y se acostaba.

Los nudillos me sangraban,pero me importaba una mierda. Lo único que quería era abrirle la cabeza a alguien y si con eso conseguía que me dieran un par de hostias hasta hacerme sangrar, lo haría encantado.

- Vamos -Se limitó a decir Travis cuando abrió la puerta. Nisiquiera se limitó a mirarme durante un segundo, solamete gritó "vamos" y salió de nuevo.

La ira y la rabia estaban latentes en mi y no tenía malditas ganas de aguantar el sermón que me iba a hechar mi hermano, porque seguramente terminaría partiéndole la cara sin que él tuviese la culpa. La culpa solamente la tenía una persona y era una mujer, y jamás le pondría la mano encima a una mujer.

- ¡Ven! -Gritó Travis desde algun lugar.

Sin esperar más, salí de la habitación y me encontré con Kathia en la puerta del baño, pero pasé de largo.. por lo que se podía apreciar, yo para ella no era más que una carga.

- ¿Qué quieres? -Pregunté a Travis cuando llegué al patio. 

Él estaba en medio del mismo con los brazos cruzados.

- ¿Quieres aprender a defender a los que quieres? -Preguntó mirándome fijamente.

- Sí, eso es lo único que quiero -Respondí firme.

- Pues entonces coge un arma porque te voy a convertir en el mejor tirador que hay aquí dentro aparte de Melissa y de Sean -Respondió- pero también te convertiré en el luchador más fiero que haya.

- Ya soy el luchador más fiero.

- No, no lo eres -Dijo él- el luchador más fiero aquí dentro es Kathia, y hasta que no consigas derrotarla al menos una sola vez, jamás serás el más fiero aquí dentro.

- Estaré encantado -Mascullé por lo bajo.

Si, estaría encantado de hacerle notar a Kathia que yo podía ser mejor, que yo tenía los cojones suficientes como para poder volarle la cabeza a cualquier persona que intentase llevarsela.. volarle la cabeza a toda persona que atente contra la seguridad de mi familia.

- Coge mi arma, hermano -Dijo Michael tendiendome una glock de 9mm.

- ¿Sean? -Preguntó Travis- ¿quieres ayudar?

- Si, además, también necesito aprender a pelear -Dijo él colocándose a mi lado con una sonrisa- ¿lo hacemos hermano?

- Prácticamente hemos nacido para esto -Dije antes de bajar las escaleras que me separaban de Travis.

*

KATHIA (P.D.V.)

- ¿Por qué lo haces, Kathia? -Preguntó Mel detrás de mi.

- ¿Por qué hago el qué?

- ¿Por qué le humillastes de esa manera? las dos sabemos perfectamente que Byron puede acabar con cualquiera si se lo propone. Las dos le hemos visto peleando y es un bestia.. ¿por qué lo has humillado así? -Preguntó.

- Le he humillado así porque quiero que se de cuenta de que esto no es un juego, quiero que se de cuenta de que estamos poniendo nuestra vida en peligro y no quiero que se relaje, quiero que esté atento y alerta como estamos todos los demás.. se que él puede matar a quien sea con sus propias manos, pero tiene que aprender a controlar un arma y la única forma en la que lo podía hacer era presionandolo, que se sintiese humillado y poner a prueba su orgullo.. es lo único que pude hacer -Grité cansada- no quiero que muera cuando nos encuentren.. quiero que tenga la oportunidad de pelear por su vida.

- Pero le has hecho daño -Dijo ella.

- Lo sé.. y no me siento orgullosa de ello.. se que lo humillé aun más cuando le grité eso a Paul, sabía que Byron me estaba oyendo.. ¿pero qué quieres? a mi toda mi vida me han enseñado con presión y a ti también, y era necesario usarlo en él para que se diese cuenta de que esto no es un maldito juego, que no solamente podemos morir nosotras, sino que él y sus hermanos también pueden morir. Se que fui dura porque él y Sean acaban de enterarse de todo esto.. pero no quiero que muera sin poder pelear, quiero que luche.

Mel se acercó y me abrazó.

- Te gusta mucho, ¿no es así? -Preguntó con una sonrisa.

- Si, me gusta y es por eso que no quiero que le pase nada -Dije- Mel, ¿puedo hacerte una pregunta?

- Las que quieras.

- ¿Confías en ellos? -Pregunté mirándola a los ojos.

- ¿Realmente? no te miento si te digo que confío en ellos con mi vida, puede que todos sean orgullosos y unos creídos, sobretodo Travis y Byron, pero realmente confío en ellos.. ¿tú? -Preguntó.

- Si, aunque me cuesta decirlo, confío plenamente en ellos -Respondí con una pequeña sonrisa antes de mirarme en el espejo- ¿crees que ya es hora de contarlo?

- Será hora cuando tu lo decidas Kathia, si no quieres no tienes por qué contarlo, es tu secreto, es tu pasado y ellos no tienen por qué saberlo jamás si tu así lo decides -Dijo ella colocándome una mano en la espalda.

- Pero merecen saberlo.. se están poniendo en riesgo por mi -Dije.

- Entonces solamente cuéntalo, sabes que te apoyaré y tengo la sensación de que ellos lo harán también -Dijo mirándo mi espalda.

BYRON (P.D.V)

- ¿Puedo hablar contigo? -Preguntó Kathia antes de poder entrar en el baño.

Estaba cansado y estaba sudando a chorros.

- ¿Podemos esperar a después de ducharme? -Pregunté mirándola de reojo. 

Estaba allí con el pelo suelto, unos pantalones cortos de pijama y una camiseta de manga larga que le quedaba suelta.. ¿sería capaz de mantenerme enfadado con ella?

- Me da igual que estés sudando, las mejores cosas ocurren cuando uno suda -Dijo sonriendo.

- ¿Qué quieres, Kathia? -Pregunté haciéndome el duro, pero la verdad es que esa sonrisa me había postrado de rodillas.

- Pedirte perdón -Dijo acercándose a mi- me pasé y lo siento, pero es que quería que tomaras el control, que decidieras entrenarte con un arma.. se que te hice daño porque yo también me hice daño a mi misma al decirte eso.. ¿pero recuerdas la frase que te dije una vez?

- ¿"Cuándo peor te trate,más te estaré queriendo"? -Pregunté acercándome a ella.

- Si y se que es una cosa estúpida decirte que fue por eso, pero la verdad es que siempre va a ser así conmigo, te trataré mal y te gritaré y ... ¡dios! es posible que hasta intente matarte, pero no olvides que siempre será porque quiero que reacciones -Dijo ahora muy cerca de mí.

- Tía, me pones como una moto -Solté sin pensar. Ella alzó una ceja.

- Yo aquí en un momento romántico ¿y vas tú y me sueltas eso? -Preguntó soltándo una carcajada.

- ¿Qué puedo decir? los momentos románticos me llevan a pensar sucio -Dije agarrándola de la cintura y pegándola a mi.

- ¿Eso quiere decir que cada vez que estemos en plan romántico, terminaremos con una frase épica de algo guarro? -Preguntó acariciándo mi costado.

- No, esto quiere decir que cada vez que estemos en plan romántico, te voy hacer ver las estrellas -Susurré en su oído antes de morderle tiernamente la oreja.

- Creído -Susurró contra mi hombro.

- No cariño, soy realista -Susurré antes de tirarme a por su boca.

Si, y así todo estaba completamente olvidado.

Sin saber como, al momento la tenía contra la pared y sus piernas rodeaban mi cintura. Sin poder resistirme, metí mis manos por debajo de su blusa y las dirigí a su espalda. Entonces ella se quedó quieta, al igual que yo.

- ¿Pasa algo? -Pregunté mirándola con el ceño fruncido.

- Creo que debería contaros lo que pasó -Dijo, fue entonces cuando noté la piel aspera en su espalda y recordé cuando la había visto sin camiseta.

- ¿Estás segura? -Pregunté mientras me apartaba para bajarla.

- Es la hora -Dijo sonriendo antes de agarrarme la mano y llevarme hacia la sala, donde estaban todos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro

Tags: