Capítulo 35

KATHIA (P.D.V)

Después de una buena sesión de besos, Byron se levantó.

- ¿A dónde vas? -Pregunté cuando se alejó.

- A ducharme.. ¿te recuerdo que he estado todo el día entrenando? -Preguntó con una sonrisa.

- ¿Y me dices que totalmente sudado te has puesto encima de mi? ¡asqueroso! -Grité haciéndome la indignada.

- No parecía importante mucho cuando empecé a besarte -Dijo con una risotada antes de salir de la habitación.

La verdad es que me daba igual que estuviese sudado.. vuelvo y repito "las mejores cosas ocurren cuando uno está sudando" y además, tampoco es que olíese.

- Kathia -Dijo Mel entrándo a la habitación de repente.

- ¿Pasa algo? -Pregunté tensandome.

- ¿Te acuerdas de los dos chicos que nombrastes vagamente una vez que habías conocido cuando salistes con Byron? -Preguntó con los ojos abiertos como platos.

- Si.. ¿por qué? -Pregunté frunciendo el ceño. Claro que me acordaa de Bruno y Marcello, sobre todo de Marcello.. como para olvidarse de él. Era el primero que me había reconocido en todo este tiempo.

- Pues Bruno, es el hermano del chico que te curó las heridas ¿te puedes creer eso? -Preguntó sentándose a mi lado.

Entonces recordé las palabras que me había dicho "para llegar hasta ti, caeran todos a tu alrededor, y hasta es posible que nosotros". Nunca había entendido por qué me había dicho aquello, pero ahora tenía sentido.

- ¿Por qué? no lo entiendo -Pregunté mientras me levantaba y empezaba a caminar por la habitación.

- Seguramente habrán descubierto que te ayudaron, sobre el Marcello ese no se nada, pero se que Bruno y su hermano nos ayudaron aquella noche -Dijo mirándome desde la cama.

¿Por qué se habían visto obligados a huir? por lo que podía recordar,Marcello era el hijo del jefe de la mafia Rusa. ¿Por qué huir él?¿por qué con Bruno?

- ¿Por qué con Bruno? quiero decir ¿qué tiene que ver Marcello en todo esto? -Pregunté.

- Ellos dos son primos.

Entonces me temí lo peor.. si en este país en vez de estar Bruno y su hermano estaban él y Marcello, significaba que algo grave le había pasado a su hermano.

¿Y si ahora que "mi familia" estaba aquí les pillaban?¿qué pasaría?¿les echaría el padre de Marcello una mano? pero entonces eso significaría que se enemistaba con los italianos..¿qué había pasado con Jev?¿de qué me conocía?¿por qué me había ayudado?¿cómo nos había encontrado?

- Dios mío, todo esto es un grave problema.. ¡se están poniendo en riesgo más personas de las esperadas! ¿cómo es posible? no lo entiendo, Mel.. ¡no lo entiendo! -Dije con desesperación- ¿por qué?¿por qué no podía ser solo yo la que saliera perjudicada? ahora mismo están en problemas Byron,Sean,Michael,Paul,Travis,Ettore,Bruno,Marcello y.. y tú.

- No te preocupes por mi, Kathia -Dijo ella abrazándome fuerte- no te preocupes por ninguno de nosotros, por una vez en tu vida preocupate por ti.. ¡olvídate de los demás! piensa en ti por una vez y date cuenta de que tú también estás en peligro, de que la gente te quiere y no va ha aceptar que te pase nada.. ¡por una vez abre los ojos y date cuenta de que no nos pones en peligro, nosotros somos los que elegimos ponernos así! no eres tú, no es tu elección.. ¡yo fui la que decidió venir contigo!¡Ettore fue el que decidió matarlos!¡Bruno y su hermano fueron los que decidieron ayudarte!¡Los Wayland eligieron respaldarte! tu no has hecho nada para ponernos a todas esas personas detrás,lo hemos elegido nosotros.

- ¿Qué haría yo sin ti? -Pregunté abrazándola más fuerte.

- Creo que tendrías un corazón de piedra -Dijo riéndose antes de irse.

Me quedé sola en la habitación y me dirigí a donde tenía mis cosas en una maleta. La abrí y saqué un sobre que estaba sucio y que tenía las esquinas dobladas, por fuera decia mi nombre en letra cursiva.La letra de Ettore.Cada vez que podía sacaba la carta y la leía, hasta tal punto de que ya me la sabía de memoria, pero lo hacía porque parecía que Ettore me hablaba.

 Me apoyé contra la pared y la abrí.

Prima:

Es estúpido comenzar una carta así, pero es de la forma en la que nos han enseñado. Estarás leyendo esta carta mientras estás en el coche con Mel, o alomejor la estás leyendo cuando ya has llegado a tu destino.. me estoy yendo por las ramas, asi que voy a ir directamente al grano. Kathia, no me arrepiento de nada de lo que pasó, volvería a hacerlo una y mil veces por ti, porque eres una de las personas que más me importan en este mundo. Si te preguntas por qué no voy con ustedes, la respuesta es sencilla: es más fácil que huyan dos personas, que si huyen tres. No quiero que te preocupes por mi porque voy a estar bien, sabes que escondiendose, como yo no hay nadie. ¿Por qué Mel está contigo?porque ustedes dos son mucho más que simple mejores amigas, muchas veces creo que ustedes dos estaban destindas ha encontrarse. Puede que en este momento me estés odiando por haber metido a Mel en todo este follón, pero no me arrepentiré de ello jamás. Necesitas a alguien contigo, y ese alguien es esa chica que te adora y a la que adoras. No mires atrás, simplemente corre.No pienses en nadie y vive el presente y arriesgate por el futuro. Prima, estás viviendo una película de acción y solo me queda decirte que aproveches el momento, que vivas la vida porque para nosotros el dicho de "la vida son dos días" se nos aplica bastante bien. Ríe,llora,disfruta, enamórate y por supuesto, VIVE.

                                                                  Te quiero.

                                                                                  Ettore.

PD: Nos volveremos a encontrar. Te lo prometo. Aprovecha el momento, nunca sabes lo que puede pasar.

Apreté la carta contra mi pecho y me permití sonreír. Estaba cumpliendo lo que Ettore me había dicho. Había reído, había llorado, había vivido durante un tiempo y es posible que me estuviese enamorando. Solamente me quedaba una cosa por hacer y era la de aprovechar el momento. Cosa que haría.

Salí corriendo de la habitación.

- ¿Dónde hay velas? -Pregunté a Travis.

- En el estante ese.. ¿por qué? -Preguntó señalando a un armario que había encima de la tele.

No le respondí y cogí la mayoría de las velas que habían alli, que eran bastantes. Volví corriendo a la habitación y empecé a colocarlas en los lugares que creía apropiados. Recogí la habitación y yo me vestí de manera.. provocativa por así decirlo.

**

BYRON (P.D.V)

Salí del baño con solamente unos boxers puestos. Por fin volvía a oler como una persona normal y no como un vagabundo.

- Qué te vaya bien -Dijo Travis cuando pasó por mi lado en el pasillo.

- ¿Qué?¿por qué? -Pregunté confundido.

- Tú solamente pasatelo bien hermano, hay que aprovechar el momento -Dijo dándome unas palmaditas en la espalda con una sonrisa socarrona, luego se dio la vuelta y se encerró en su habitación.

¡Madre míaaa, que mal está la gente! -Pensé mientras negaba con la cabeza a la vez que entraba en la habitación.

Me quedé quieto en la entrada. La habitación estaba con las luces apagadas y lo único que iluminaba la estancia eran unas velas que estaban colocadas de manera dispersa. En el centro de la habitación, sentada en la cama mirándome fijamente con una sonrisa tímida era Kathia.

- Entra -Dijo casi en un susurro y como hipnotizado hice lo que me pedía, cerrándo la puerta tras de mi.

- ¿Qué.. -Empecé a preguntar pero ella estaba delante de mi poniéndome una dedo en los labios mandandome a callar.

- Byron, vamos ha aprovechar el momento -Dijo acarciándome las mejillas- estamos en peligro, esto es la calma que precede a la tormenta y no quiero arrepentirme de no haber hecho algo.. estoy contigo y quiero aprovechar cada momento que pueda para estar junto a ti.

Y así sin más me derretí ante sus palabras. Agarrándole las manos empecé a besar cada uno de sus dedos. Besé la palma de sus manos, aquellas manos que habían agarrado armas y habían disparado. 

Lentamente la tumbé de espaldas y empecé a besarle el cuello, la oreja, la mejilla, la frente.. le besé cada parte del cuerpo que me fascinaba de ella.

- ¿Estás segura? -Pregunté mirándola fijamente a los ojos. 

- Completamente segura, Byron -Dijo ella enredando las manos en mi cuello. Un segundo después, di la primera estocada y ella sonrió mordiéndose el labio.

Lo más que quería en ese momento era hacerla feliz, que olvidara todo el dolor y que por una vez sus ojos dejasen de entrever el sufrimiento. Que todo aquello se borrase de su mirada y dejara paso a la alegría.

**

Le acariciaba la espalda. Pasaba el dedo por cada una de las dieciocho cicatrices que tenía en la espalda. Se podía entrever el tatuaje de una serpiente debajo de ellas. Cuando no tenía la espalda así, el tatuaje tenía que haber sido majestuoso.

- ¿No te da asco? -Preguntó girándo la cara hacia mi.

- ¿Por qué? estás cosas son heridas de guerra -Dije con una sonrisa antes de levantarme y empezar a repartir besos por toda su espalda.Ella reía y cuando volví ha adoptar la misma posición que antes, me lo agradeció todo con un beso.

Se colocó junto a mi, metio la cabeza en mi cuello y me rodeó el costado con su brazo.

- Esta noche me has hecho sentir la persona más especial del mundo -Susurró con voz adormilada- hoy sentí que tenía un ángel a mi lado.

- Kathia, estoy rompiendo todas las reglas que han sido escritas por ti.. ¿y sabes qué? que no me importa. 

Sentí su respiración más relajada y entonces, cuando sabía que no me oía fue cuando me atrevi a decirlo.

- Por muy imposible que parezca, te quiero.. Kathia -Susurré antes de dormirme yo también.