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XVII

VI salió rápidamente del edificio, con la esperanza de encontrar a la Sheriff en el auto. Un pequeño rayo de luz le daba la idea de que podría hablar con la oficial cómo era debido, pero la realidad es cruel, no había rastro de la castaña y tampoco de su auto; en lo profundo de su mente de VI lo sabía, la había cagado, pero debía que resolverlo de algún modo costara lo que costara.

- Iremos caminando... Deberían ser unos 25 minutos andando... Un largo camino... - La pelirosa se puso en marcha, era un largo trayecto y mucho en que pensar; buscar una forma en el cuál decir todo sin dejar nada en las sombras - VI eres una idiota... Una gran y sexy idiota... - Las calles de la ciudad se encontraban extrañadamente tranquilas, era muy poco común que ocurriera, pero para VI era el mejor escenario, no tendría que preocuparse por malas caras ni malos tratos, mucho menos de insultos sin sentidos - Está demasiado tranquilo... Exageradamente tranquilo - Los sentidos de VI se colocaron alertas, no era una soledad pacífica, todo lo contrario parecía estar en el centro del peligro, mucho mejor dicho en medio de la boca del lobo.

Un par de disparos pasaron cerca de la Ex-convicta, el escudo de su chaqueta desvío uno de estos, pero el segundo lo perforó rozando e hiriendo su brazo izquierdo.

- Era muy lindo para ser cierto - VI corrió al callejón a su izquierda para cubrirse, si una de las balas pudo perforar el escudo lo mejor era esconderse y visualizar de donde provenían - No deben estar muy lejos, pero el brillo de los carteles y la oscuridad de penumbra no dejaban visualizar el panorama - Espera... - VI observo el cielo, ni la luna ni las estrellas se hacían presentes sobre su cabeza, no debía ser realmente tarde y no debería estar muy oscuro, pero la penumbra a su alrededor reflejaban otra cosa  - Ésto no es bueno... Debo salir de aquí, siento que algo falla y no estoy segura de qué.

- Todo... Todo ha fallado desde que abandonaste la ciudad - Una voz masculina se hizo presente a espalda de VI - Eres una pequeña basura y es momento de desecharte para siempre.

Un par de brazos salieron de la oscuridad a espaldas de VI, tomando su cuello y apretándolo e intentando ahogarla, pero VI se mantuvo serena, no era la primera vez que ocurría y tampoco sería la última, VI golpeo el dorso de su atacante con su codo, logrando debilitar el agarre dándole la oportunidad de realizar una pequeña llave lanzando a su agresor al medio del camino.

- No es la primera vez que me intentar asesinar de esa manera, quizás hace tiempo hubiera funcionado, pero ahora no es tan emocionante... Dicho eso... Quién eres y que quieres de mí - VI se colocó es posición, no sabía que esperar, no tenía realmente una visión clara de todo, pero en ese momento se preocuparía de lo que tiene en frente - Habla... Quien eres y que quieres o mejor aún no digas nada, te lo sacaré a golpes - Los guantes junto con la chaqueta de VI emitieron una pequeña ola de vapor impulsando la a gran velocidad hasta la figura en medio de la calle.

- Haz cambiado pequeña rata, eres mucho más fuerte, ya no muestras esas interesantes cambios en tu rostro, pero eso no durará mucho...  - La figura rio mientras se elevaba en el aire desapareciendo junto con toda la oscuridad que había a su alrededor - Nos volveremos a encontrar pequeña ratoncita, esté no será nuestro último encuentro.

VI se mantuvo quiera unos momentos, esperando cualquier señal de peligro o de movimiento, pero nada... un par de segundos transcurrieron y todo seguía en calma.

- Que diablos fué eso... - VI salió del callejón con lentitud aún alerta por cualquier situación de peligro - No sólo me dispararon, si no que también un demente se me abalanzó y no conforme con eso la cague hace poco con Cupcake... Hoy no es el mejor día de suerte ¿Eh? - VI estiró los brazos, por algún motivo encontró su cuerpo un poco adolorido, pero no a gran escala - Tengo que apurarme, necesito llegar a casa y disculparme con Cupcake - VI sólo pudo dar un par de pasos antes de caer sobre el asfalto de la carretera - Cupcake... Lo siento...

La Sheriff se encontraba entrando en el hospital apurada, la noticia de que VI había sido internada en éste, le había caído cómo un balde de agua fría y, debido a la pelea anterior no hablaron luego de eso, la Sheriff se encontraba esperando a VI sentada su sillón para hablar, pero las horas pasaban y VI no llegaba, a eso de las 12:30 una llamada a su hogar la dejo petrificada y muy angustiada.

- Sheriff - El oficial resguardando la puerta dió un pequeño saludo, el cuál fué correspondido inmediatamente - Se encuentra estable, aunque aún no sabemos que ocurrió realmente, según ella fué atacada, pero no se vió rastro de los o él atacante en las cámaras de seguridad - El oficial se movió a un lado dejando descubierto la puerta de la habitación.

- Gracias - La Sheriff abrió la puerta y entró a la habitación sin dudarlo.

VI se encontraba sentada en la cama tranquila, con la mirada perdida en algunos de las paredes de la habitación.

- VI... ¿Te encuentras bien? - Era extraño para la oficial ver a una VI tan perdida y sin su animo correspondiente - VI... Estás... - La pelirosa se abalanzo sobre la Sheriff abrazándose a su cintura y escondiendo su rostro en el vientre de la Sheriff - Que ocurre VI... No pareces ser tú...

- Era él Cupcake... Él volvió... Volvió por mí... - El tono de VI era bajo y cada palabra que pronunciaba parecía romperse un poco más - El lo dijo... Dijo que no me dejaría tranquila hasta que muriera o volviera con ellos... Que mi vida no tiene valor por mi misma...

- Quién... Quién te dijo eso VI - La Sheriff se encontraba preocupada, el tono de VI era cómo si de una niña pequeña se tratase, indefensa, a merced de cualquier mal y ella no lo iba a permitir, no se permitiría perder a VI - Dime quién te ha amenazado VI.

VI se encontraba dormida entre los brazos de la oficial. Caitlyn examinó el cuerpo de VI superficialmente en busca de alguna herida o golpe grave, pero sólo unas pequeñas lágrimas se hacían presente en el rostro de la mayor, unos pequeños morados en la zona del cuello, pero nada más visible a la hora de examinarla.

La Sheriff acostó a VI nuevamente en su cama y se sentó a su lado y tomó su mano, esperando que se recuperará y pudieran hablar cómo era debido, VI había estado actuando extraño no sólo una sino dos veces en muy poco tiempo, las incógnitas en la mente de la oficial se acumulaban más y más, y ninguna tenía respuesta hasta ahora...

- ¿Cupcake? - La voz de VI la hizo volver en si - Cupcake... ¿Estás bien? - la Sheriff observo a VI está se encontraba nuevame re sentada en su cama, pero había algo extraño con la pelirosa, sus ojos... Unos ojos azules, pero sin VI, sin emoción... Un cuerpo vacío sin vida - Así es Caitlyn... Está soy yo...

- Cupcake... Cupcake, despierta.... ¡Oye Cupcake! Levántate...

Caitlyn despertó bruscamente, el rostro de VI se encontraba frente a ella con un semblante preocupado. La Sheriff examinó la habitación, en busca de aquella extraña chica la cuál era parecida a VI.

- Donde... ¿Donde está?... - La Sheriff observo a VI en su rostro se reflejaba la confusión de dicha pregunta.

- ¿Dónde está quién, Cupcake? Aquí sólo estamos las dos... Mi pregunta es... ¿Qué hacemos aquí?

Ambas chicas se encontraban confundidas ante la situación, la Sheriff se cuestionaba que aquello había sido sólo un sueño y por otra parte, VI se preguntaba cómo encarar a la oficial y contrarle todo...

- Lo siento, no es nada... Simplemente tuve un mal sueño - La Sheriff inconscientemente acarició la mejilla de VI, confirmando que ella era real - un muy mal sueño...

VI correspondió el pequeño gesto cerrando los ojos y cediendo ante el tacto de la oficial, aclarando cada uno de los puntos en su mente.

- Tenemos que hablar Cupcake... Tengo que hablar contigo...

- Antes de eso... ¿Cómo te encuentras? ¿Te duele algo? ¿Necesitas algo? - La Sheriff se encontraba preocupada ante la situación, pero su prioridad era VI, todo lo demás podía esperar - Si necesitas algo sólo dime y lo ire a buscar de inmediato.

- Contigo a mi lado tengo todo lo que necesito Cupcake, no necesito nada más - VI dejó salir un pesado suspiro, cómo si se hubiera quitado un gran peso de encima o estuviera a punto de ello - Pero necesitamos hablar... Sobre lo ocurrido ese día...

- Si sólo te quieres disculpar de nuevo no hay...

- No... No es sólo eso... Por... Por favor escúchame - VI abrió los ojos mostrándole a la Sheriff una mirada determinada y asustada, cómo si un gran secreto que pudiera cambiar al mundo estuviera a punto de ser contado - Sólo te pido... Que no me odies y no me tengas lástima por lo que te contaré Cupcake...

La Sheriff se encontraba impresionada, se preguntaba una y otra vez que tan grande iba a ser aquello que contaría VI para pedir aquello, pero una cosa era segura... No importaba que tan grade o turbio fuera, ella no se separaría de VI, nunca la dejaría sóla.

- Nunca lo haré - Caitlyn tomó las manos de la pelirosa entre las suyas, uniendolas cómo una - Nunca podría odiarte VI, mucho menos tenerte lástima... Eres la única persona que en tan poco tiempo se ha llevado parte de mi corazón y eso simplemente te lo haz ganado - La Sheriff dejó un pequeño beso en la mano libre de VI.

- De acuerdo Cupcake... Una cosa más - VI halo a la oficial y en un rápido movimiento la dejo sobre sus piernas sentada - quiero... Quiero estar así... Me siento más tranquila de éste modo ¿Puedo?

- No hay problema - la oficial no hizo movimiento alguno de escapé, se mantuvo serena y calmada acariciando el dorso de la manos de su compañera - Adelante.

- Hace tiempo yo vivía en Zaun, mis padres eran investigadores en una de las plantas químicas de la ciudad, una noche de verano, en plena madrugada ambos fueron llamados de urgencia, el reactor se había salido de control, necesitaban a todos los ingenieros posibles para arreglar la falla... Luego de esa noche ellos nunca volvieron, esperé un par de días su regreso, era una chiquilla de unos 8 años en ese entonces, pero al cabo de unos días un par de hombres llegaron, diciendo que mis padres me esperaban, que me querían con ellos y que tenía que seguirlos, así que... Lo hice sin pensar, quería ver a mis padres y ellos me llevarían; no veía el problema, pero...

VI se detuvo y trago en seco, pequeños espasmos se hicieron presentes en sus manos, pero Caitlyn gentilmente las cubrió con las suyas mostrándole que en definitiva no estaba sóla, y que ya nunca lo estaría.

- Pero cómo imaginarás era mentira, nos llevaron a un orfanato a mi y vários otros niños juntos, nos dijeron que nuestros padres nos vendrían a buscar en unos días, que tendríamos que esperar a que ellos llegaran en ese lugar. Pasaron un par de semanas normales, todos los niños de la casa nos hicimos amigos rápidamente, jugábamos entre todos y los mayores cuidaban a los menores. Todo cambió al mes aproximadamente, uno de los niños más jóven desapareció, cuándo pregúntanos por él, nos dijeron que sus padres habían venido en medio de la noche para llevárselo devuelta a su hogar, pero todo era mentira, en medio de la noche unos sujetos entraron a su habitación le inyectaron un extraño líquido, luego se lo llevaron en medio del pasillo oscuro...

VI tomó nuevamente un respiró, sería una larga charla y no quería omitir ningún detalle posible, querías que la oficial escuchará toda su historia de principio a fin.

- ¿Cómo lo sé? Yo misma lo VI con mis propios ojos, sufría de insomnio por mis padres, preguntándome cada noche donde estaban y que era tan importante que no habían venido a buscarme. Esa noche me encontraba en la habitación frente a la mía, mi amiga Kleira, era casi cómo de mi edad, pero morena y con pelo largo y ondulado, muy guapa a mi parecer. Es día nos las arreglamos para hacer una pequeña pijamada entre nosotras, hasta que el ruido de varios pasos provenientes del pasillo principal llamo nuestra atención, abrimos la puerta suavemente para observar y lo vimos todo, luego de esa ocasión, noche tras noche nuestros amigos iban desapareciendo lentamente y cada vez que preguntábamos por ellos a la directora, era la misma respuesta para todos... "Sus padres vinieron a recogerlos en medio de la noche".

Está vez, VI apretó sus puños en señal de molestia, el enojo de ello se apoderaba lentamente de su ser, pero Caitlyn nuevamente tomó sus manos acariciándola, pegando su espalda al pecho de la mayor, rozando su mejilla con la de ella.

- Kleira y yo sabíamos que debíamos escapar, mientras más nos tardaramos, mayores eran las probabilidades de que nosotras fueramos las siguientes, pero Kleira no quería dejar a Nathaly, una pequeña niña rubia de la cuál se había encariñado mucho los últimos días, ya teníamos casi todo planeado sólo faltaba recolectar algo de comida para algunos días, pero no contamos con que Nathaly sería la siguiente en su lista... La misma noche de nuestra fuga los mismos sujetos encapuchados entraron a su habitación  Kleira y yo estábamos en nuestras respectivas habitaciones esperando el momento, pero los gritos de Nathaly hicieron eco en los pasillos y rápidamente salimos, aunque los planes no habían sido exactamente cómo queríamos resultaron mejor de lo que esperábamos, pudimos escapar de ese sitio, no fué fácil, pero de algún modo lo conseguimos...

VI soltó un pesado suspiro, la Sheriff se había acomodado mejor entre sus piernas y pegó su espalda al pecho de la mayor teniéndose ambas más cerca la una a la otra.

- Pero todo fué risas hasta que nos detuvimos a descansar... Llevábamos una hora y media corriendo, mis pies no podían más... Kleira necesitaba recuperar el aliento y Nathaly necesitaba ir al baño, Kleira y yo nos íbamos turnando para cargarla y que no tuviera que caminar, aunque aun se podía ver la mansión a la lejanía, decidimos descansar un minuto, beber agua y cerciorarnos con que contábamos, grave error de nuestra parte, no tuvimos la precaución adecuada, nos seguían; nos venían cazando... Habían liberados a una jauría de perros alterados biológicamente, eran seres atroces destinados a un único propósito... Matarnos y no dejar rastro de evidencia alguna.

VI apretó nuevamente la mano de la oficial está vez más fuerte que antes, pero la Sheriff respondió cómo anteriormente, acariciando el dorso de su mano con su pulgar y pegando su espalda aún más al pecho de su acompañante haciendo que sus mejillas prácticamente se rozaran.

- Cuándo estábamos a punto de retomar nuestra huida sonaron las alarmas de la mansión, recobramos nuestro sentido del peligro y hable con Kleira, era hora de marcharse y nunca mirar atrás, pero unos sonidos extraños llamaron nuestra atención le grite a Kleira que cargara a Nathaly y que tuviera cuidado, pero era demasiado tarde... Aquellas atrocidades se encontraban masticando el pequeño cuerpo de Nathaly. Ambas quedamos en Shock, era imposible que se nos hubieran acercado sin que los notaramos, pero había algo aún más perturbante, Kleira sostenía unos de los pequeños brazos de Nathaly... Por lo visto estaba la tenía tomada de la mana cuando una de esas cosas se la arrebato sin darse cuenta, atravesando su pequeño corazón con su lengua y cortando su brazo con la misma... El miedo se apoderó de nosotras, el asco, el repudio y la impotencia de no haber protegido a la pequeña niña, Kleira se intento acercar con un palo para golpear a aquella abominación, pero de entre las sombras otro apéndice apareció atravesando el palo y llenandolo de un líquido que lo desintegró, Kleira se lleno de rabia mientras un par de bestias se acercaban a masticar los restos de nuestra pequeña amiga, sabía que debíamos salir de ahí que necesitábamos escapar, así tome el brazo de Kleida e intente salir de ahí, pero ella misma me detuvo a tan sólo unos metros, en su rostro se mostraba la irá, el enojo... El vacío que la perdida de Nathaly dejó en ella, me dijo que me fuera, pero ella se quedaría, tenía que recuperar a Nathaly.

VI suspiro nuevamente está vez más calmadamente, su cuerpo sentía la calidez de la Sheriff y cómo el aroma de su cuerpo se impregnaba en su nariz.

- Kleira se volteó tan bruscamente que se golpeo contra un letrero que no habíamos visto ninguna de las dos, el golpe fué lo suficientemente fuerte para que sumado al cansancio de haber corrido fué suficiente para desmayarla, quizás en otra situación pudo haber sido muy cómico, ella era torpe, pero muy enfocada en sus deberes; su torpeza y Nathaly fué lo que nos salvo de morir aquel día, la cargue y corrí lo más que pudo sin mirar atrás, tropezando me de vez en cuando y llorando por la perdida de Nathaly, hasta que mi cuerpo no pudo más y tropecé con mis mismas piernas cayendo con Kleira. Sentía mi cuerpo cansado y agotado, me faltaba el aire tenía que descansar, pero no había nada para refugiarse, hasta que a mi derecha por un callejón divise una pequeña casa abandonada, con mis últimas fuerzas cargué a Kleira hasta allí dejándola caer sobre la cama y tirándome en el suelo con una pequeña sonrisa, habíamos sobrevivido lo habíamos hecho, pero luego esa alegría se transformó en tristeza al recordar a la pequeña Nathaly siendo devorada por aquella horrendas cosas, hasta que sin darme cuenta el cansancio me venció y caí dormida...

- Se que no es toda la historia Cupcake, apenas es el comienzo, pero me incomoda seguir hablando aquí, ya sabes un hospital... No hay nada realmente privado y bueno... Ya me siendo mejor, así que deberíamos irnos a casa...

La oficial hizo caso omiso al pedido de su compañera, está se encontraba absorta en sus pensamientos y en la historia del pasado de la Ex-convicta, todo lo que tuvo que pasar en tan poco tiempo era horrible que una niña haya tenido que vivir eso...

- Cupcake... ¿Me escuchas? Deberíamos irnos... Me incomodan un poco permanecer mucho en estos sitios - VI era nuevamente ignorada por la menor, la Sheriff se encontraba sumida en sus pensamientos - Cupcake... Si me sigues ignorando tendré que besarte... - Un nuevo silenció hizo eco en la habitación - Tu te lo buscaste Cupcake.

VI acerco su rostro lentamente acercándose a las mejillas de la menor, inhalando el olor de su pelo y cediendo a la tentación de ir un poco más allá. VI buscaba dejar un beso en la comisura de los labios de la oficial, pero la suerte le sonreía o la desgracia abundaba, en un acto de inocencia la oficial giró levemente su cabeza haciendo que los labios de ambas chicas chocaran, dejando un inocente y tierno beso en ambas partes.

- Lo... Lo siento Cupcake... No era mi intención - VI rompió el beso - Se... Se que... - Las palabras de VI fueron calladas esta vez por los labios de la castaña, en un movimiento rápido giro su cuerpo, quedanso frente a la pelirosa, retomando nuevamente la acción que está había roto.

La Sheriff pasó sus brazos por el cuello de la pelirosa y sus piernas se aferraron a sus caderas, haciéndole saber a VI que no volvería a romper el beso a menos que ella quisiera.

- Cup... Cu... Cupcake no... No deberíamos, tenemos que irnos... Estamos... Estamos en un hospital - VI se encontraba jadeante, había encontrado un nuevo sentimiento y era la primera vez enfrentándose a esté, el beso con la oficial se sentía distinto a todos los anteriores, cargado de pasión, amor, deseo, trsiteza, alegría y quien sabe que tanto más.

- Lo siento VI, lo siento por no haber estado allí, lo siento por no haberte podido proteger antes - Unas pequeñas lágrimas se hacían presente en el rostro de la oficial - Te prometo que nunca me apartaré de ti.

La Sheriff abrazo con fuerza el cuerpo de la mayor cubriéndola con sus brazos cómo si el mal estuviera cerca y está la intentaba proteger.

- Va... Vamos Cupcake, no llores - Los ojos de VI comenzaron a ponerse llorosos, el sentimentalismo de la oficial se había apoderado de la habitación - No me hagas esto Cupcake, me prometí a mi misma no llorar más, no derramar más lágrimas, si lo hago ahora no lo podré hacer luego - VI se aferró al cuerpo de la oficial abrazándola y posando su cabeza en su hombro.

- Vayamos a casa VI nos tomaremos el día libre y hablaremos hasta que vaciemos nuestro interior ¿Te parece? Yo también tengo un par de cosas que contar...

Nota del autor:

Pos... Wenas, wenitas, wenardos...
Nuevo Cap Yei!!! Ocno

La verdad quería poner todo el pasado de VI (el que me he inventado) aquí, pero se haría excesivamente largo y no se si quieran leer caps tan largos, aunque la verdad he cortado mucho caps por lo mismo y bueno... Ahí van xD.

Ahora si, agradezco a todos los que dejaron comentarios y votaron el capítulo pasado eso me dió un impulso de publicar esté un poco más rápido y me lleno de ánimo :3

Bueno les deseo un feliz día, una felíz tarde o una feliz noche depende de cuándo lean esté capitulo.
Si les gusto comenten y voten, eso me anima :3.

Y si no te gustó el cap y aún así estás leyendo ésto, pues igual te agradezco por haberte tomado el tiempo de leerlo.

Nos vemos pronto Bye, se les quiere a todos y a todas :3

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