Capítulo VIII
Vi lentamente comenzó a despertarse, sus sentidos se activaron, había demasiado silenció para ser una jefatura, un extraño y familiar sonido provino del otro lado de la puerta, aquello parecía ser agua burbujeando, cómo aquellas burbujas que suelta un tanque de oxígeno bajo el agua.
Vi se abstuvo de gritar, no sabía si conocían su paradero y mucho menos que se encontraba del otro lado, pero aquel familiar e insistente ruido no cesaba con el paso de los minutos, por el contrario, esté aumentaba su duración y el ruido se acercaba cada vez más a la puerta, esto alerto aún más su sentidos se levanto violentamente y se coloco en posición básica de boxeo, cualquier persona que entrara por aquel marco la noquearia en un instante. Aquel sonido hacía reaccionar a su cuerpo, como sí este lo recordara, el cuerpo de Vi comenzó a temblar, esté reaccionaba a su acercamiento, lo reconocía, recordaba aquel sentimiento desde hace algún tiempo que lo había olvidado, pero los recuerdos volvían y golpeaban como uno de sus puños.
- ¡Alejense, se que son ustedes infelices! - la puerta de la habitación se comenzó abrir lentamente dando paso a un par de hombres con pasamontañas y vestidos de traje
????: Hola Vi, hace algún tiempo que no hablamos, ¿Cómo estas? ¿Cómo te encuentras?
- ¡Vayanse! ¡Larguense, Malditos infelices! - Vi sentía miedo, su cuerpo temblaba, sus piernas parecían que iban a ceder. Recordaba aquellas personas, esas que la encerraron durante algunos años que abusaron de ella y dejaron que otros hicieran lo mismo - Alejense de mí.
Vi lanzó un gancho al sujeto mas cercano, pero en un movimiento ágil; sutil esquivo el golpe y empujo a la peli rosa, está se levanto rápidamente colocándose en posición nuevamente.
???: Vi, Vi, Vi, no es nada personal ¿sabes? Simplemente tú nos perteneces desde hace años, solo vinimos a buscar nuestra mercancía es todo... Mmmm, viendolo de ese modo si es algo personal ¿No?
Sus piernas no soportaron más y se desplomo sobre el frío suelo, el asco que le provocaba aquella voz y su propio cuerpo en ese momento era inolvidable para la chica. Sentía nuevamente aquellas sensaciones asquerosas, aquellas manos tocando cada parte de su ser, sin restricciones, ni inhibiciones.
????: Veo que tú y tu cuerpo nos recuerdan bastante bien, pero para evitarnos problemas usaremos un pequeño sedante, no sentirás nada solo será un pequeño piquete.
Uno de los hombres saco una pequeña jeringa y se acerco a Vi lentamente, esta intento defenderse lanzando golpes al aire intentando acestarle alguno, pero errando drásticamente, el hombre capturó uno de sus brazos y la sometió contra el suelo le inyectó aquel líquido verdoso y espeso en su cuello.
????: Buenas noches Vi...
La vista de Vi se empezo a nublar lentamente.
Vi... Vi... Vi...
La peli rosa despertó exaltada, estaba sudando y muy nerviosa, sus ojos abiertos como platos mostraban miedo, terror y angustia. Vi fijo su vista en la puerta de la habitación y al observarla abierta su angustia aumento, se levantó rápidamente y la cerró de manera brusca.
- ¡No entraran, alejense de mí!
- Vi le gritaba a la puerta, como si alguien estuviera del otro lado intentando entrar - ¡No volveré, jamás regresaré a ése basurero!
La Sheriff se encontraba conmocionada, la reacción de Vi era algo que nunca esperaría, desde que entró a la habitación; la encontró dormida y sudando, era evidente que estaba sufriendo de una pesadilla y pensó que quizás despertando rompería aquel mal sueño.
- Vi, necesito que te calmes - la peli rosa no escuchaba palabra alguna y ahora se disponía a golpear la puerta mientras le gritaba - Vi... ¡Vi!
La oficial se abrazo a la espalda de la mayor, no aguantaba verla así, sus nudillos se comenzaron a tornar de un color rojizo a causa de los golpes contra aquella puerta de acero.
- Basta Vi, por... Por favor basta - la Sheriff no soportaba verla así, esa no era la Vi que admiraba desde hace un tiempo, esta era una persona totalmente distinta una persona rota y destrozada desde el interior.
- Cup... ¿Cupcake? - Vi dejo de golpear la puerta, de nuevo sentía una calidez indescriptible, algo que la llenaba de una tranquilidad inimaginable en ese momento - Que... Qué ocurre Cupcake ¿Qué haces aquí?
Vi recupero sus sentidos, pero no recordaba como había llegado hasta ahí, tampoco la razón de que sus puños dolieran y estuvieran manchados de sangre.
- Qu... ¿Qué ocurrió? ¿Cupcake, estas bien?
La situación desconcertaba a Vi, no lograba procesar lo que estaba ocurriendo y muchas preguntas rondaban su cabeza, pero por el momento debía calmar a la oficial.
- Puedes soltarme Cupcake, todo está bien.
El agarre de la castaña lentamente se fue aflojando, hasta que se despego totalmente de la mayor, Vi volteó su cuerpo para quedar de frente a su acompañante. Caitlyn no levantaba su mirada hacia su compañera, estaba asustada, la actitud de la peli rosa cambió de un momento a otro, sin sentido alguno y esto la molestaba de cierta manera.
- Oye Cupcake, mírame... - la oficial se negaba a levantar su vista del suelo, se encontraba aturdida por la situación - Cupcake, por favor mírame no entiendo que esta ocurriendo, no sé como llegue aquí, tampoco la razón de mi mano este sangrando, lo único que recuerdo es recostarme en la cama, cerrar mis ojos y caer dormida.
La Sheriff suspiro pesadamente, la situación la altero de una forma que ella nunca imaginó que le podría ocurrir desde aquel día, necesitaba calmarse, debía calmarse y recuperar su compostura y eso intento: los siguientes segundos relajo su mente y sus pensamientos fluyeron con más tranquilidad.
- Ya terminé con los tramites, estas bajo fianza y bajo juramento de comportamiento, seré responsable de cada acción que hagas se te prestará ayuda médica si la necesitas, hay una condición fundamental para que te dejen en libertad... Debes entregar tus guantes y tu armadura, se te proporcionara un atuendo policial y estarás en prueba durante tiempo indeterminado.
Vi observó a la oficial extrañada, entendía lo de sus guantes pero su traje era algo que escapaba de su entendimiento.
- Mi... ¿Mi ropa? ¿Qué tiene que ver mi ropa con ésto?.
- tienes que entregar todo lo referente a tu pasado, desde tus guantes hasta tú ropa, se presentará como evidencia de tú cambio de conducta, el juez piensa que eres peligrosas con todo tú equipo, les ofrecí una solución razonable...
- ¡¿Te parece razonable dejarme desnuda?! ¿Sabes que esta ropa es lo único que tengo para vestir cierto?
- Lo sé, antes que nada necesito que respondas si aceptas el trato o no... No tenemos todo el día.
- Oye Cupcake, no tengo idea que ocurrió mientras estuve inconsciente pero... ¿Estás molesta? ¿Hice algo que te molestó?
La oficial no respondió, la habitación se lleno de un silencio incómodo para Vi, aquél silenció parecía estrangularla, mientras más tiempo transcurría más apretaba.
- Para nada... Necesito tú confirmación, si aceptas tenemos que irnos y, si no estás lista o tienes que pensarlo volveré mañana... ¿Qué decides?
- Sabes que acepto pero... En verdad, nececito estar segura... ¿Estás enojada? Y ¿Por qué?
El silenció volvio a tomar control de la situación ambas chicas se observaban a los ojos, pero ninguna ofrecía palabra alguna.
- Te lo dije, no estoy enojada, no tengo motivo para estarlo, por el momento sigueme necesitamos quitarte la armadura, te compré algo de ropa para que te cambies.
La sheriff abrió la puerta de la habitación y una bolsa reposaba en el suelo de la entrada, la tomo y se la acercó a la mayor para que pudiera indagar en ella.
- No sé si te guste esté estilo, pero creo que quedaría bien en ti por los momentos.
Vi abrió la bolsa de papel que ahora tenía en sus manos, la marca Pilt era presente en esta, la tienda del centro de Piltover es unas de las sucursales de la marca más grande en lo que respecta a moda y esto sorprendió enormente a la peli rosa.
- Cupcake... Dime que es chiste, está tienda es costosa y se nota que la ropa es nueva.
- No te preocupes estaba de rebaja, es más todas las tiendas de ropa están de rebaja hoy si no te gustan estás podemos comprarte otras por la noche, así que no te preocupes.
Vi no quería aceptar aquellas costosas prendas, pero se quedaría desnuda de no hacerlo y andar así por la ciudad no era una opción para ella.
- Te la pagaré, tan pronto consiga algo de dinero te pagaré, lo prometo.
- Como quieras... Sigueme iremos a los vestidores para que te cambies y entregues la armadura.
Ambas chicas salieron de la habitación rumbo a los vestuario, regresando por el pasillo que hace horas tomaron. Ahora Vi era realmente libre la oficial había cumplido su palabras y aunque no sabía que hora era exactamente, era más que obvio que habían pasado más de dos horas.
- Cup... Gracias Caitlyn, cumpliste tu palabra; me sacaste de aquí.
- Te prometí que no tardaría más de un par de horas, pero esta casi anocheciendo así creo que tardé más de lo esperado.
- De todas formas... Gracias
- Ummmm.... - La Sheriff caminaba por el pasillo y detrás de ella se encontraba Vi, estaba pensando en la razón de su molestia pero no daba con nada.
Un nuevo silencio se formo entre ambas, Vi era conciente de que la Sheriff se encontraba molesta, pero no sabía el motivo y, por otra parte la oficial no comprendía la razón de su molestia, Vi no había echo nada intencionado para molestarla, pero aquella reacción la desequilibró.
- Ahora estoy bastante segura... - Vi detuvo su andar seguida de Caitlyn - ¿Por qué estás molesta?
Caitlyn soltó un largo suspiro, sabía que no podría continuar así, tendría que hablarlo tarde o temprano pero, antes de que eso ocurriera quería estar preparada.
- No estoy exactamente enojada ¿Si?... Ni siquiera comprendo la razón de mi disgusto.
- Que... ¿Qué hize? ¿Te golpeé? ¿Te hice daño?,
- No, Nada de eso... Fué tu reacción tan violenta la que me incomodó, cuándo despertaste tan repentinamente y prácticamente te lanzas sobre la puerta gritando, golpeándola; desconozco muchas cosas de tú pasado y he de creer que esa es la causa de mi de todo esto, pero no estoy segura... Lo siento, seguramente piensas que esto no tiene nada que ver conmigo, y tienes razón.
Vi quedo estática, su pasado no es algo de lo cual le gustara hablar y mucho menos con una persona que apenas conocía, pero ahora eran compañeras y tarde o temprano la oficial lo sabría.
- Se qué somos prácticamente desconocidas, pero me gustaría conocerte un poco más, si es que me lo permites, solo tengo algunas conjeturas sobre tú pasado, pero no mucho más que éso... No te pido que me lo cuentes todo, simplemente hazme caer en cuenta al motivo de tu reacción y que debo esperar en ciertas circunstancias, nada más ¿De acuerdo?
Vi no hablo ni pronuncio sonido alguno mientras la oficial hablaba, se mantenía al margen, estaba indecisa sobre si contarle o no, mucho de lo ocurrido en su pasado no lo recordaba realmente, pero las sensaciones que producía su cuerpo antes ciertos objetos o circunstancias, dejaban en evidencia clara que algo ocurrió en aquella situación.
- Todo dicho, debemos apurarnos tenemos que entregarr tu traje y al salir, tenemos algunas cosas que hacer - la Sheriff se giro dandole la espalda a Vi para continuar su trayectoria
- Es... Espera, Cait - Vi alcanzo rápidamente a la castaña a pesar de ser un poco más pequeña que ella, era bastante veloz, sus brazos rodearon su cintura y colocó su menton en el hombro de está - espera, dejame explicar todo o por lo menos algo de lo ocurrido.
La castaña se quedo un poco sorprendida ante la rápida reacción de Vi, no esperaba que la tomara por la espalda y mucho menos que la abrazaría como minutos antes ella había echo.
- No... No tienes que explicar nada, es lógico que aún no me tengas la suficiente confianza para hablarme de algo tan delicado, por eso esta bien, no hay nada que explicar... Nada que explicar - recalco casi en un susurro para ella misma, pero que Vi alcanzó a entender.
- Tienes razón, no tengo que explicarte nada... - Vi corto el abrazo y retiro el mentón del hombro de la castaña.
Esto desánimo un poco a la Sheriff, pero sabía que era así, Vi aún no confía en ella lo suficiente como para hablarle de su pasado.
Caitlyn necesitaba retomar su caminar aún tenían cosas pendientes, entré ellas firmar los informes de las condiciones para quedar en libertad bajo fianza y otras cosas de menor importancia.
Los brazos de Vi por fin la dejaron en libertad, pero antes de poder dar el primer pasó, un tirón de su mano derecha la volteó bruscamente chocando contra algo... Era el pecho de una persona, en ese preciso momento la Sheriff entendió contra que había chocado. El bien tonificado cuerpo de Vi, los brazos de la peli rosa envolvieron nuevamente a la oficial y está colocó su rostro cerca de su oreja.
- No tengo que explicarte nada... Quiero explicarte todo, aunque en realidad no lo puedo hacer, ya que no recuerdo mucho de aquella época, pero haré lo posible por recordarlo para ti, lo prometo.
La Sheriff se sorprendió, las acciones de Vi habían estado cambiado de diferentes formas desde que se conocieron, por otra parte algunas de las palabras mencionadas por Vi no encajaban del todo.
- Por ahora terminemos todo el papeleo, quiero ducharme hace bastante que no lo hago, Cupcake creo que deberían mejorar el servicio de estadía en este lugar, ni un paño húmedo te regalan... No me imagino como serán las duchas - Vi fue soltando lentamente a la castaña de manera natural de forma en que ninguna se sintiera incomoda - además deberían mejorar la calidad de la comida, he escuchado que es un fiasco.
La Sheriff no pudo aguantar más, aquella era la Vi que admiraba; juguetona, pésima bromista, pero sobre todo muy, muy tierna.
- Que afortunada, aún no la haz probado, según los rumores de las celdas, la primera vez que comes la comida de Brenda te intoxicas, la segunda tienes alucinaciones y si aguantas hasta la tercera... No querrás saberlo.
Vi colocó un cara de horror, pensando en lo que hubiera ocurrido si la Sheriff no la sacaba de ese sitio el mismo día habría pasado por un infierno.
- Es... ¿Es broma cierto? La comida no puede ser tan mala ¿Cierto Cupcake?.
La cara de horror de Vi no tenía precio en ese momento, ésto alegró bastante a la oficial y de cierta manera le daba gracia, actuaba como una niña pequeña con miedo de ir a la clínica o a un hospital.
- Claro que es broma tonta, Brenda es una exelente cocinera, simplemente no le agrada la idea de estar cocinando para la basura y las ratas de está sociedad corrupta, no le agrada mucho, pero ella fué finalista en un concurso de cocina.
- Woow, ¿Es enserio, finalista? ¿Ganó? ¿Perdió? ¿Quedaron en tablas?
Ahora actuaba como una niña la cual su curiosidad superaba cualquier limite existente.
- Desafortunadamente... Perdió, mejor dicho, fué descalificada por robar el premio y fue condenada a servicio comunitario aquí, he ahí la historia de nuestra cocinera.
Vi nuevamente cambió su expresión, parecía sorprendida ante la acusación sobre la cocinera.
- ¡Guau!, Aparte de cocinera es ladrona... ¿Sabes? ¡Seguro se robo el estómago de todos los jueces en las primeras rondas! - la peli rosa comenzó a reir frenéticamente ante tan mal chiste.
Ahí está, esa actitud infantil y tierna, graciosa para ella misma, eso... Eso es lo que siempre me ha gustado de ella.
- Bien, teminemos por hoy nuestros pendientes y vayamos a casa a descansar estoy muerta de cansancio.
- Yo igual pero... - Vi se comenzó a poner nerviosa, algo aún la incomodaba - pero... Antes que nada te quiero contar lo poco que recuerdo de aquella época.
- Vi no tienes que...
- Lo sé, pero te lo dije, no debo se que nada me obliga a contarte pero, quiero contarte lo poco que recuerdo - Vi ahora se encontraba seria, está chica tiene más cambios de humor que una mujer embarazada - por favor hablemos.
- De acuerdo, primero terminemos nuestros asuntos aquí y luego veremos lo siguiente.
- Promete... Promete que hablaremos al salir de aquí, que no evitaras el tema.
- ¿Por qué lo dices? No es como si no quisiera saber ¿Sabes?, Pero... Pero tampoco veo correcto presionarte, solo espero que un día podamos tener total confianza la una a la otra.
- Lo... Lo sé, es solo que siento, siento que... No es nada olvídalo, sólo promete que me escucharas - Vi tomo mis manos y suavemente las acerco a sus mejillas rozándola lentamente - sólo escúchame.
Caitlyn no podría salir de está, había pisado una mina, ahora tendría que esperar la explosión y sus daños. La oficial tomo una de las mejillas de la peli rosa y la beso tiernamente.
- Te prometo que te escucharé cuando estes lista pero, ahora no creo que sea ni el lugar, ni el momento adecuado para hacerlo.
La oficial podria atrasar aquella conversación, pero se que no disipar la idea de Vi, Vi desde hace mucho tiempo necesitaba liberar todo lo que había aguantado, necesitaba a alguien y en estos momentos Caitlyn estaba para éso.
- De acuerdo, cuando terminemos aquí iremos a tomar algo y... - Vi tomo las manos de la oficial, las retiro de su rostro y las beso - me escucharas, te contaré mi historia.
Notita del autor:
Buenas!!! Días, tardes o noches dependiendo de cuando leas esto :'3
Pues... Nada que decir, creo que olvide un poco esta historia y aunque estoy un poco apretado en tiempo, la seguiré.
Sin más que decir, voten y comenten que les pareció y compartan si piensan que hay alguien a quien le pueda interesar.
Nos vemos :3.
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