Capitulo VII
El recorrido a la comisaría fué más largo de lo esperado la incomodidad entré ambas chicas era palpable y, aunque la oficial solo seguía ordenes, el sentimiento de culpa la abrumaba.
- ¿Están apretadas las esposas? - Caitlyn apago el motor, se encontraban en frente de la estación, se giro en su asiento para quedar frente a Vi - ¿sientes alguna molestia o incomodidad?
- Ninguna por la que te debas preocupar - Vi no giro para ver a la castaña, se encontraba con la vista perdida sobre la ventana del auto, las dudas no abandonaban su cabeza y no sabía si creer o no sus palabras.
- Solo, terminemos con esto de una vez, estoy cansada y quisiera saber dónde dormiré, en un frío y húmedo suelo o en un colchón sucio y mugriento, de cualquier forma ambas opciones son pésimas - Vi se encontraba cabizbaja, todavía dudaba de las palabras de la oficial, se sentía herida y defraudada de nuevo - me abrirás o ¿tambien lo tengo que hacerlo por mí misma?
- Yo abriré, pero antes necesito que me escuches... Juro que no pasaras la noche allí, te prometo que haré todo lo posible por sacarte en las próxima dos horas - Caitlyn soltó el volante de auto y sostuvo entre sus manos las de Vi.
La peli rosa rápidamente rompió aquel contacto con disgusto aún se encontraba muy confundida y dolida por la situación, de un momento a otro su situación había cambiado y ahora se encontraba tras las rejas.
- No te preocupes, estoy acostumbrada a esto, no creas que eres la primera y tampoco que serás la última persona en traicionar a las personas que te dan su confianza - Vi no podía mirar el rostro de la castaña. Abrió su corazón con una persona que apenas conoció y nuevamente la apuñalaban por la espalda; aunque estaba acostumbrada, este era nuevo tipo de dolor para ella, sentía un desgarro en su interior, un dolor inmenso como si esa persona fuera realmente importante para ella.
La sheriff bajo del vehículo y abrió la puerta del copiloto. Vi bajo del auto, la molestia en la pierna de Vi era evidente, no apoyaba bien su pierna y cojeaba al caminar, pero no se podía hacer nada el hospital se opuso en todo sentido en gastar materiales en la recuperación de una convicta como ella - Vi apoyate en mi, se nota la molestia de tu pierna, estas cojeando y aún no estas recuperada de todo.
Caitlyn intento acercarce a Vi para colocarse debajo de su brazo y ayudarla a que su pierna no sintiera tanto el peso, pero la pelirosa se aparto abruptamente - No lo necesito, estoy perfectamente bien y no me toques ¿de acuerdo?
- Es... Esta bien - la Sheriff se adelanto unos pasos para abrir la puerta de la comisaria, se sentía mal con ella misma, sentía que había traicionado la confianza de Vi, pero no le quedaba de otra, muchas cosas estaban en juego en ese momento, pero por ahora no podría revelar la verdad.
Vi caminaba con la frente en alto, pero con un gran dolor en su ser, aún se sentía muy confundida en la situación y, aunque sus experiencias le indicaban que la Sheriff seria igual de traicionera que las otras personas, pero algo en su interior se negaba aceptarlo y con eso Vi mantenía la esperanza de poder confiar el la oficial.
- Vi... Date la vuelta - la peli rosa obedeció, lentamente se volteo hasta quedar en enfrente a la menor, esta le saco las esposas y dirigió los brazos de la otra a su espalda y la esposó nuevamente, acerco su rostro al oido de Vi - por favor, mantente en silenció, lo hago por ti créeme, una vez que salgas de aquí, te contare todo, pero hasta entonces solo mantente tranquila - Caitlyn termino de acercar su rostro y besó la mejilla de la mayor tiernamente.
Esto sorprendió y estremeció a la mayor, no esperaba un acto tan atrevido de la castaña y mucho menos en frente de la comisaria de la ciudad.
Vi suspiro pesadamente, había perdido ante la oficial, decidió creer en ella una última vez, aquella castaña le había sorprendido en más de una ocasión - te esperaré, confiaré en ti, pero tienes que sacarme de aquí, mientras intentaré comportarme lo mejor posible ¿De acuerdo?.
Esto hizo sonreir a la oficial, Vi le había otorgado otra oportunidad y esta no la desperdiciaría haría lo que fuera necesario para cumplir con su palabra.
- Gracias, saldrás de aquí muy pronto te lo aseguro - Caitlyn abrió las puertas de la comisaria dando espacio para que Vi entrara primero y luego ella detrás.
El lugar era bastante amplio para ser solo una comisaria, pero desde que Caitlyn ascendió tan rápido en la jerarquía policial; ayudando a encerrar bandas criminales extremadamente peligrosas, el alcalde dirigió unos fondos para la remodelación y reconstruccíon del lugar, cambiando paredes y pisos, contratando a los mejores arquitectos para lograr la mayor comodidad para la castaña, acto que Caitlyn considero innecesario, pero tanta fue la insistencia del alcalde que termino aceptando.
Oficial Vanders: Sheriff, recibimos una llamada del banco de Wernin, unos asaltantes tomaron el control del... - el oficial se detuvo en seco al notar a la persona que acompañaba a la Sheriff - Es... ¿Es ella verdad Sheriff?
- ¿A qué se refiere con eso oficial Vanders? - Caitlyn sabía perfectamente a que se refería, pero de cierta forma era preferible que lo soltara mientras ella estuviera presente para defenderla, aunque no es como si ella lo necesitara, pero las palabras no eran el fuerte de Vi.
Vanders: Es esa maldita rata escurridiza, aquella que hizo que Weter terminara en el hospital, al romper el muro de apoyo del edificio - el tono de voz del oficial mostraba enojo e ira hacia la peli rosa.
Vi no entendía lo que estaba ocurriendo, no recordaba haberle derribado una pared encima de alguien y, mucho menos recordaba a alguien llamado Weter, lo que más le molesto fueron aquellos insultos sin fundamentos, no se dejaria insultar así nada más, pero le prometió a Caitlyn que mantendría silencio mientras estuvieran allí.
- Oficial Vanders, pido que guarde respeto ante esta persona que, aunque sea una criminal tambien es un ser humano como usted - la Sheriff soltó a Vi por unos momentos mientras encaraba a aquel oficial enojado.
Vanders: Como esta escoria puede ser llamado un ser humano, es una Zaunita,.no es más que un trozo de mierda como cualquier otro - el oficial comenzaba a subir su tono de voz y esto comenzaba a molestar a Vi, ella era una Zaunita forzada a abandonar su hogar y aunque lo extrañaba, ya le había agarrado cierto cariño a la ciudad del progreso, lo suficiente como para llamarlo su hogar a pesar de todas las dificultades que ha tenido que pasar desde que llego a ella - Está asquerosa rata debería estar pudriéndose en las las entrañas de Zaun con sus químicos y demás mierdas; debería dejar la ciudad tranquila y volver al basurero de donde nació.
- Oficial...
Vi se encuentran ntraba realmente enojada, rompió las esposas que retenían sus brazos, estaba harta de recibir insultos y no poder defenderse así misma.
- ¡Entonces regrésame, si tienes los huevos bien puestos toma acción tu mismo y lanzame de regreso a aquello que llamas basurero! - Vi no aguanto más, se acerco a Vanders y lo levanto de su cuello - ¡Hazlo! No, no puedes, ni siquiera eres capaz de capturar a aquella que tú llamas rata y piensas que puedes hablarme así, como si fueras superior ¿a mí?, ¡Despierta imbécil! Somos iguales, somos dos seres humanos.
- Soy... Soy mejor que tú, yo... Yo por lo menos no soy un criminal, un fugitivo de la ley en... Entre otras cosas - Vi con cada palabra que soltaba el oficial, esta apretaba aún más su agarre, haciendo que poco a poco el oficial Vanders se ahogara por la falta de aire - tú solo eres una perra psicópata que no sigues ni las más simples normal de moral.
- ¡Maldito! - Vi levanto su puño a la altura del rostro del oficial, pero al justo antes de golpearlo, esté se detuvo - no vale la pena... Solo eres un patetico miedoso que actúa por irá, mojaste tus pantalones y no eres capaz de aceptar que soy más fuerte que tú y recibir el golpe con honradez, solo te diré que... Puedo ser una Zaunita y puedes llamarme de las formas que quieras pero... Jamás golpeare a alguien que no lo merezca y aunque te lo mereces, en este momento para mi no lo vales - Vi soltó al oficial muerto de miedo y como ella había dicho, con los pantalones mojados.
La comisaría se paralizó ante tan abrupto espectáculo, todos dejaron de haces sus trabajos para prestar toda su atención a aquella escena.
- Vi... - Caitlyn no quiso interrumpir, no sabía que podría ocurrir, pero confiaba en Vi y en sus principios - vamos, necesitamos ingresarte en el sistema lo más pronto posible.
La peli rosa simplemente se dió media vuelta y caminó tras de la Sheriff colocando sus manos detrás de su nuca.
- Cait... ¿Quién ese ese tal Weter? Nunca le he tirado una pared encima a un oficial... Bueno quizás he lanzado algunas cosas, pero jamás nada que atientente contra sus vidas - Vi estaba preocupada ante aquella declaración, quizás si había herido a alguien hace algún tiempo intentado escapar, pero nunca de tal gravedad como lo indicaba el oficial.
- Tranquila, eso fue hace 3 meses en una de las fabricas de suministros químicos de lado oeste de la ciudad, una pandilla quiso hacerse con algunas de sus sustancias...
Vi recordaba aquel día uno de los maleantes le disparo a un contenedor altamente inflamable y esto, genero una reacción en cadena hacia los químicos cercanos, la policía había acudido al lugar para capturar a aquellos asaltantes, Vi ya se encontraba dentro machacnado a algunos de ellos, pero una de las explosiones los soprendio y tuvieron que evacuar el lugar, un oficial vió la oportunidad para acabar con Vi, pero no se dió cuenta cuando la pared a su espalda se le derrumbo encima, Vi escucho los gritos en medio del ruido de las explociones y observo al oficial en apuros, rápidamente retiro los escombros más pesados de su cuerpo.
Cuando estaba por levantarlo para sacarlo de ahí, sus compañeros comenzaron a disparar contra ella.
Vi levantaba el último trozo de piedra sobre su cabeza, posiblemente haciendo ver que estaba por aplastarlo con ella, así que inmediatamente abrieron fuego contra la peli rosa y esta tuvo que abandonar el lugar.
- ¿Me están culpando por las heridas de su propio descuido? Solo intentaba ayudarlo a salir con vida del lugar, el mismo fué el causante de sus heridas.
- Lo sé, cuando despertó en el hospital relato los acontecimientos, pero muchos no creyeron y pensaron que lo habías amenazado con hacerle daño a su familia o algo así y por esa razón te cubria - la Sheriff caminaba tranquilamente por los pasillos de la jefatura teniendo como objetivo las celdas individuales en la parte trasera del edificio - por mi parte yo le creí, se que no eres capaz de herir a una persona que no lo merece ya lo has demostrado.
- Pues eso dicelo a ellos, me culpan por todo lo malo que ocurre en la ciudad solo por su incompetencia, pero se creen mejor que uno por el simple echo de pertenecer a las fuerzas de la ley, eso es egocéntrico y muy estúpido de su parte.
- Estoy de acuerdo contigo, por eso no he escogido a alguien como compañero y he rechazado a todos los posibles, pero desde la última operación no paran de insistir que necesito a alguien y que no puedo actuar siempre sola - Caitlyn sabía que esas palabras de preocupación eran mentira, simplemente utilizarían a su compañero para saber sus movimientos con anticipación y evitar así varias detenciones innecesarias.
- Entonces... ¿A donde me llevas? - Vi no conocía el edificio por dentro, pero estaba segura que desde hace poco dejaron atrás las celdas comunes.
- No puedo dejarte en una celda común, por eso te dejaré en una de los cuartos aisladas.
- ¿Me llevaras a una celda aislada?, ¿Tendré mi propio baño? ¿Mi propio saco de boxeo? ¿Puedo tener jacuzzi? - Vi parecía una niña pequeña dejando volar su imaginación con sus juguetes.
- Sabes que estas en una prisión y no en un hotel resort ¿Cierto?
- Arruinas mis sueños Cupcake... pero por qué no dejarme en una celda cualquiera, no es como si no me supiera defender - Vi paseaba su mirada por aquel sitio tan bien arreglado y armonioso, raro para una jefatura, las celdas era un caso distinto y a pesar de tener el mismo color y pintura que todo el lugar este se encontraba lleno de vándalos y rateros de calle.
- No te puedo dejar en una celda, muchos de los que ves te conocen y irán por tú cabeza; se que te puedes defender sola, pero muchos de aquí son parte o sirvientes de las altas familias, dejarte allí es prácticamente firmar tu ejecución - la castaña se detuvo frente a una puerta que daba a una habitación esta totalmente cerrada y sin alguna entrada de luz natural.
- En verdad, empiezo a reconsiderar si debo creerte o no, cada vez me sorprendes con algo nuevo y si este es el concepto de compañerismo que tienes no creo que nuestra relación dure mucho y un vez terminada quiero el 50% de los bienes y me quedo con el perro - Vi comenzó a jugar un poco con el humor de la oficial, no sabía como reaccionaria pero ella lo necesitaba, se encontraba nerviosas aquella habitación la alteraba en gran medida.
Al percatarse de la risa que soltaba la menor, entendió que aquella broma le había causado gracia y se agradecía así misma por haberlo conseguido, aquella sonrisa era preciosa y muy brillante ante sus ojos.
La Sheriff se le acerco lenta y coquetamente a su acompañante y en un suave susurro hizo sonrojar a la mayor - claro, cariño si logras quitarte mis esposas te quedaras con el 50% de todo, pero el gato, lo conservo yo.
Aquel susurro era más de lo que podría soportar y aunque Vi no era precisamente virgen en ese aspecto, aquella castaña era capaz de develar nuevas sensaciones en ella.
- Pero por ahora entra - la Sheriff abrió la puerta del cuarto, mostrando un interior neutro de un color pastel en las paredes y un piso perfectamente pulido, Vi siguió asombrada ante tan pulcro lugar a pesar de ser un sitio de retención de criminales.
- ¿Es enserio? Sabes no me importaría compartir celda, además no me importaría golpear a algunos de esos imbéciles, si sabes a lo que me refiero - a Vi no le gustaba el cuarto, aquella soledad y silencio traerían consigo recuerdos enterrados o la pondrían a pensar en una posible traición por parte de la castaña.
- ¿Sucede algo Vi? - desde que observo la habitación el rostro de la peli rosa había adquirido cierto disgusto y repudio hacia aquel lugar - ¿Tienes miedo de quedarte sola?
No era del todo acertado, pero tampoco era falso, Vi disfrutaba la soledad, pero a la vez le aterraba, aquellos recuerdos, aquellas memorias que la atormentaban, nunca cesaban cuando el silencio era abrumador.
- No, nada de eso, simplemente pienso que te estas preocupando de más, entonces ¿Cuanto tiempo estaré aquí? - Vi entró a la habitación un poco nerviosa pero ocultandolo lo mejor posible para la menor.
- Está misma tarde te recogeré ire a vaciar tu expediente y haré que retiren algunos cargos en tú contra para que te dejen ir, por otra parte pediré que tú libertad condicional me sea entregada y que yo estaré al pendiente de ti, nos vemos en un par de horas.
- Hasta luego Cup... Caitlyn- Vi se sentó en la cama no sin antes despedir a la Sheriff con una sonrisa, pero aún sentía pánico ante aquella habitación totalmente cerrada, sin ventana o alguna salida que no sea aquella puerta.
La Sheriff cerró la puerta luego de despedirse y prometerle que volvería lo más pronto posible, Vi optó por recostarse y cerrar los ojos mientras el día terminaba de transcurrir para ella y rogaba para que la oficial terminara todo lo más rápido posible y la sacará de allí.
Notita del autor:
Bueno... Buenos días, tarde o noche; dependiendo de cuando lean esto.
Nuevo capítulo, lo voy terminando de editar y son las 3 de la mañana... Como que la mejor hora para editar o escribir es después de media noche xD.
En fin, gracias por leer la historia, veo que a la gente le ha gustado y me alegra entrar a Wattpad y ver que tengo notificaciones de la historia, sin mentir me alegra el día.
Gracias por leer, si les gusto comenten y voten, me emociona :3
Por otra parte si no te gusto pero estas leyendo esto, te lo agradezco de igual forma, por darme algo de tu tiempo :3
Feliz inicio de Julio... ¿Con que nueva castastrofe piensa que iniciara este mes?? XD
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