5 | un beso para el sapo.
¿Sabías que las personas pueden
enamorarse a través de un beso?
—¡¿Por qué carajos dije esoo?! —Se quejó nuevamente Hyunjin mientras pataleaba dando vueltas en su cama —Maldita sea, ahora pensará que lo voy acosar y no lo dejaré tranquilo...
—Pero que dices, has estado haciendo eso...
—Changbin~ —Se quejó —¿Como hiciste para que Félix se fijara en ti?
—Ser guapo es una virtud, obvio tu no naciste con ella, además dale tiempo, además hasta hace no mucho tu tampoco estabas muy seguro de lo que sentías, ¿Qué te hizo cambiar de opinión?
—Fue un impulso, ¿Ok? —Chilloneo —¿Por qué lo hice?
—Tampoco es para tanto, digo ¿qué es lo peor que podría pasar? ¿Que se ría de ti? —Carcajeo y Hyunjin le dió un golpe —Aunch
—Hyung —hablo una tercera voz —Quiero un consejo. Me gusta alguien, pero es mayor que yo. No sé qué hacer.
Hyunjin alzo la ceja y Changbin sorbio ruidosamente su bebida-¡Jisung! ¿Mayor? ¿Como, tiene veinte años?
Jisung asintio —No, solo tiene diecinueve
—¡¿diecinueve?! —Se quejó Changbin y Hyunjin lo fusiló con la mirada
—mmm Jisung , es normal sentir atracción por alguien mayor. Pero también es importante entender que hay diferencias de etapa en la vida. A veces, lo que queremos no es lo que necesitamos.
—Pero yo-
—Eso eso, lo que el dijo... Por lo menos no tiene treinta... —Habló el pelinegro
—Changbin no ayudas.
—Supongo que tienen razón,
—A veces, el tiempo nos enseña a esperar. Y recuerda, el amor no tiene edad. Excepto cuando tienes trece años y te gusta alguien de diecinueve.
Hyunjin le dedicó una sonrisa a su hermano menor sin embargo aún no paraba de pensar en Jeongin, no quería incomodar al peli rosa, sin embargo tampoco quería rendirse. Quizás lo mejor sería fingir que nada había sucedido.
...
—¿Vas a seguir ignorando me? ¿O hablaremos sobre el beso?—indagó.
—Hyung, no hay nada de que hablar, fue un reto y quedó más que claro cuando usted decidió largarse —Sonsacó el menor.
—Asi que si es por que te deje, ¿Qué esperabas que hiciera?
—¡No lo sé!, solo me parece una mierda el hecho de que incluso el imbécil de Hyunjin se digno ayudarme pero tu- —Jeongin quería completar aquella frases, sin embargo no pudo. Sabía que si decía algo más sus sentimientos hacia el mayor quedarían expuesto —¿Desde cuándo te importa si hablamos? Cada vez que hablamos es por compromiso.
—Sabes que me agradas mucho, y Hyunjin seguro lo hizo para molestarme —Soltó.
—¿Molestarte? —indagó alzando la ceja
—asi es, no es para nadie un secreto que Hyunjin me tiene envidia —Soltó y jeongin suspiró.
—Eso no es mi problema, ya me voy. Tengo práctica de la obra.
Al llegar a uno de los salones donde se reunirían para hablar de algunos asuntos de la obra suspiró pensando en lo que había dicho Hyunjin hace unos días. ¿Enserio lo hacía a propósito? ¿Enserio tanto le gustaba? Tenía la idea de que Hyunjin era un chico hetero. Desde que tenía uso de razón apenas y cruzaban palabras, quizás solo era ilusión. Pensaba.
—¿Como debería actuar? —Susurro. El resto de la reunión fue bastante entretenida mientras daban propuestas sobre dicha obra. Todos sabían que era un reto bastante sin embargo estaban dispuestos a correr. Entre algunas palabras Hyunjin y el pelirosa cruzaban mirada y el corazón del rubio se aceleraba. Al terminar todo se retiraron sin embargo Hyunjin espero a jeongin. —Oh, aún no te has ido, ¿Necesitas algo?
—Creo que quiero dejar la obra...
—¿Qué?, no no puedes no tengo a más nadie y si tú te vas yo yo —Jeongin comenzó a acelerarse y Hyunjin poso su mano en la mejilla del pelirosa.
—Calma, dije creo... aún no estoy seguro —Explicó sin embargo eso no calmó al contrario.
—Es que no lo entiendes esto... es importante para mí y si no hago esto yo yo...
—¡Jeongin! Cálmate, está bien no voy a dejarlo solo cálmate —Habló. —Quiero que sepas una cosa...
—¿Ahora que? —Se quejó.
—Cuando te ayude en la fiesta, no fue por Minho... Fue por mí y por tí.
Jeongin comprendió que Quizás Hyunjin había escuchado su conversación con Minho. ¿Un impulso?¿Un deseo? Jeongin no supo exactamente que había Sido pero simplemente lo beso.
Hyunjin, con su cabello rubio y ojos brillantes, yacía anonadado sin embargo no pasó mucho cuando correspondió. Su corazón latía con fuerza, pero no podía resistirse más. Jeongin no sabía el por qué lo hizo, simplemente por una milésima de segundo no había visto a Hyunjin como alguien más y no el pesado tenido que lo molestaba.
Fue un beso suave y dulce, lleno de deseo y anhelos. El tiempo se detuvo mientras sus labios se movían en perfecta sincronía. Las manos de jeongin se enredaron en el cabello de Hyunjin, mientras que Hyunjin sostenía su mejilla y con la otra su cintura.
El mundo exterior seguía girando, pero en ese momento, solo existía el sabor de los labios de Jeongin y el latido apresurado del corazón de Hyunjin. El salón de clases se convirtió en su propio universo, donde el amor florecía sin restricciones.
Cuando finalmente se separaron, sus ojos se encontraron, llenos de asombro y deseo. Jeongin mordió su labio inferior y rápido se alejó de Hyunjin cogiendo sus cosas saliendo rápidamente del salón y cerrando la puerta para recostar su espalda. Mientras un Hyunjin atontado y algo sorprendido yacía dentro del salón. Jeongin se encontraba afuera con sus mejillas sonrojada mientras mordía su labio inferior.
—¿Por qué se sintió tan bien? —Susurro.
....
—¡Jisung es un marica! —Carcajeo el mayor. El castaño bastante enojado simplemente se dispuso a darle un buen golpe al sujeto. Su rostros está enrojecido, y sus palabras se convierten en gritos. El mayor empuja al pequeño Jisung y este no se queda atrás. Golpes, forcejeos y empujones se suceden. Los transeúntes miran con curiosidad o intentan separarlos. Una figura mayor decide entrar a separar a los chicos —Oye no te metas...
—¡Basta! —Se quejó el mayor y Jisung lo observó sintiendo sus mejillas sonrojarse. —Se acabo la pelea o llamaré a sus padres.
—Como sea...
Jisung comenzó a caminar lejos del sujeto aún con sus mejillas algo sonrojadas sin embargo fue detenido por el chico pelirrojo.
—Ven, te llevo a la farmacia tienes la mejilla rota —Soltó.
—Estoy bien —Dijo —Mi hermano no le gusta que hable con desconocidos, ya me voy.
—Si te digo mi nombre ya no seré un desconocido —Explicó y Jisung suspiró.
Y si.
Aquel chico de cabello rojo era la persona que a Jisung le gustaba, lo veía pasar todos los días por su instituto mientras fumaba un cigarrillo, sin embargo era un chico bastante introvertido como para entablar una conversación con aquel sujeto, pero...
—Esta bien —acepto —¿Cuál es tu nombre?
—Dejame llevarte para curar tu herida...
—Ese no era el trato —se quejó el menor —O me dices quien eres o no me muevo de aquí.
—Soy Minho
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NOTA DE AUTOR:
buenitaas aquí le dejo la actualización, mañana subiré el siguiente capítulo, estoy editando varios para intentar subir un especial.
Los quiero besos.
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