Jeongin abrió los ojos al sonido insistente de la alarma. Respiró profundamente, extendiendo la mano para apagar el despertador. -Otra vez soñando con él - murmuró, removiéndose un poco más en la cama, buscando unos minutos más de paz.

-¡Despierta, dormilón! -La voz de Heeseung resonó en la habitación, arrancándolo de su ensoñación. Jeongin se quejó, deseando poder dormir un poco más -No puedes dormir más, tu viaje sale a las 9:30 am y faltan dos horas -dijo Heeseung, negando con la cabeza.

Entre refunfuños, Jeongin se levantó y se dirigió al baño. Mientras se lavaba la cara, los recuerdos de Hyunjin volvieron a inundar su mente. Habían pasado cuatro años desde aquella noche en la que Hyunjin lo había dejado, llorando y con el corazón roto. A pesar del tiempo, las heridas aún no habían sanado por completo.

Algunas noches, Jeongin lloraba bajo el peso de esos recuerdos dolorosos. Otras, simplemente se permitía disfrutar de los momentos bonitos que habían compartido. Hyunjin se había convertido en un recuerdo, uno que oscilaba entre la tristeza y la nostalgia.

Jeongin se miró en el espejo, tratando de encontrar la fuerza para seguir adelante. Sabía que el viaje que estaba por emprender era una oportunidad para dejar atrás el pasado y construir un nuevo futuro. Con un último suspiro, se preparó para enfrentar el día.

Jeongin, ahora un reconocido director de teatro, estaba de gira con su última obra. El destino lo había llevado de regreso a la ciudad donde había vivido su juventud. Al llegar al hotel, no perdió tiempo y llamó a Felix. La llamada fue contestada al instante, demostrando que, a pesar de la distancia, su amistad seguía intacta.

-¡Felix! Ya estoy en la ciudad -dijo Jeongin con una sonrisa.

-¡Genial! ¿Recuerdas dónde está la casa de Changbin? -preguntó Felix, con una sonrisa que Jeongin podía sentir a través del teléfono.

-Claro que sí, -respondió Jeongin, asintiendo aunque Felix no podía verlo.

-Perfecto. Te veo allí esta noche. No faltes, quiero verte -dijo Felix con entusiasmo.

Jeongin sonrió y miró a Heeseung, quien estaba a su lado. -¿Quieres acompañarme? -preguntó.

Heeseung negó con la cabeza -No lo se, no los conozco y yo...

-Solo son Felix y su novio changbin, hace rato que no los veo y la obra es en unos días, estoy estresado demás y tu también -Suplicó al mayor y este gruñó.

-No sabes recibir un no por respuesta...

-No o... Ahora ponte bonito. Hace tiempo que no veo a mi mejor amigo -dijo, con una mezcla de nostalgia y anticipación.

Mientras se preparaban para salir, Jeongin no pudo evitar preguntarse cómo estaría Hyunjin. Aunque habían pasado años, los recuerdos seguían vivos en su mente. Pero esta noche no era para el pasado, sino para reconectar con viejos amigos y quizás, encontrar un poco de paz en el proceso.

(....)

La noche cayó y Jeongin tocó el timbre de la casa de Changbin. La fachada estaba casi igual, aunque con diferentes gamas de colores y el césped perfectamente podado. Sin duda, tenían estilo. Félix abrió la puerta y, sin poder evitarlo, se abalanzó sobre Jeongin, dándole un fuerte abrazo. Jeongin sonrió.

-¿Me extrañaste?

-No sabes cuánto -se quejó Félix, limpiando sus lágrimas antes de dirigir la vista al castaño que estaba a su lado

-. Oh, él es Lee Heeseung...

-Ouh, un placer. Lee Felix, alias supuesto mejor amigo... ¿Ya se vieron en calzones? -preguntó con una sonrisa traviesa.

-¡Lee Felix! Eso es... -Jeongin estaba por quejarse cuando Changbin apareció.

-Hola, Bin...

-Hey... Jeongin, ¿cómo fue tu viaje? -preguntó Changbin con algo de nerviosismo, luego miró a Félix-. Pasen y pónganse cómodos, yo debo hablar con Félix.

Changbin arrastró a Félix lejos de ellos, y Jeongin y Heeseung se sentaron en un sofá. Jeongin miró a Heeseung.

-Tu amigo es lindo... No querrá...

-No, Hee, ama a Changbin con todo su ser... lo cual es raro porque él era novio de otro amigo, lo cual... No importa, lo importante aquí es que...

-Vale, igual yo solo te quiero a ti, ven acá -dijo Heeseung, abrazándolo. Jeongin forcejeó para soltarse del agarre.

-Suéltame, suéltame...

-¡Oye, Changbin! ¿Dónde dijiste que estaba el... -Aquella voz hizo que ambos se detuvieran y el corazón de Jeongin se acelerara a punto de salirse. Rápidamente, Changbin y Félix aparecieron corriendo y luego sonrieron.

-Ok... Jajaja, Jeongin, ¿te acuerdas de Hyunjin? -preguntó Félix, y Changbin le dio un golpecito con el codo mientras Jeongin alzaba una ceja-. Que digo... Emmm, qué lindo reencuentro, ¿no?

-Claro -soltó Jeongin, forzando una sonrisa-. Qué bueno verte de nuevo... Si hubiera sabido que tenían visita, cambio para verlos otro día...

-Son adultos, pueden convivir... por un día...

-Seguramente sí... En fin -soltó Changbin.

-También me alegra verte, Jeonginnie.

Luego de ese extraño reencuentro, todos decidieron pedir una pizza. Mientras hablaban, de vez en cuando Jeongin le lanzaba miradas a Hyunjin y viceversa. A pesar de la incomodidad que sentían Heeseung y Félix, Heeseung mencionó que tenían una linda casa.

-¿Se conocen? -preguntó Hyunjin.

-No -negó Heeseung.

-Es el novio de Jeongin -soltó Félix, haciendo que Jeongin escupiera su bebida ruidosamente.

-¡No, no, no! Heeseung y yo solo somos amigos -dijo Jeongin rápidamente.

-Amigo, el ratón del queso -bromeó Changbin.

-Yaa, solo somos amigos... Además hee no es mi tipo -Bromeo

-¿Cual es tu tipo? -Investigó changbin.

-Bueno no tengo un tipo pero... Me gustan los que no me dejan a mitad de la noche llorando, sin duda eso sería una buena característica principal -Soltó y Hyunjin sonrió.

-Una hora tardaste... -Menciono Hyunjin

-Nunca dije nada de nadie, pero si el saco te queda...

-ok... Chicos creo que se está saliendo de control -Habló Félix pero aquellas palabras fueron ignoradas.

-Vale de ser así puedes decírmelo en la cara no inventar una excusa...

-¿Ahora te haces el ofendido?¿Es enserio?...

-No me hago el ofendido solo que si querías decir algo no tenías que decírmelo a mi directamente...

-no, no tenía por que tu te fuiste y se supone que más nunca en mi puta vida volvería a verte y créeme que si lo hubiera sabido prefiero mil veces estar aburrido en el hotel que verle la cara a un cobarde como tú -Soltó dejando la sala en silencio -Esto no va a funcionar, vámonos hee...

-No, están bebidos no pueden conducir así, hay una habitación de huéspedes

(...)

Luego de que Felix les rogara por quedarse, Jeongin y heeseung terminaron aceptando a regañadientes. La noche avanzaba y el cansancio se apoderaba de Heeseung, quien pronto cayó rendido en un profundo sueño. Sin embargo, Jeongin no podía dormir. Los pensamientos y emociones se arremolinaban en su mente, impidiéndole encontrar la paz.

Suspiró profundamente, sintiendo el peso de la noche sobre sus hombros. Lentamente, se levantó de la cama, cuidando de no hacer ruido para no despertar a los demás. Con pasos silenciosos, se dirigió hacia la piscina, buscando un momento de soledad y claridad.

El agua reflejaba las estrellas. Jeongin se sentó al borde de la piscina, sumergiendo sus pies en el agua fría. Cerró los ojos y dejó que la brisa nocturna acariciara su rostro, tratando de calmar su mente inquieta.

De repente, escuchó unos pasos detrás de él. Al voltear, vio a Hyunjin, quien lo observaba con una mezcla de curiosidad y preocupación. Sin decir una palabra, Hyunjin se sentó a su lado, dejando que el silencio hablara por ellos.

-La última vez que estuve en esta casa tu terminaste conmigo -Susurro jeongin y el silencio se volvió incómodo -¿Todo se volvió más incómodo?

-Si...

-Si -ambos carcajearon y se observaron en silencio.

-El rubio te queda bien -Habló Hyunjin y jeongin sonrió.

-Quisiera decir lo mismo pero uyyy, no te queda tan bien el negro... Igual nunca fuiste tan bonito -Dijo encogiéndose los hombros pero la verdad era que jeongin estaba gritando por dentro ¿Como podía ser tan ardiente? Su cabello que ahora era algo largo, sus ojos, sus labios... SUS PUTOS LABIOS. Algo gruesos y que eran decorados por un piercing.

-Nunca te escuché decirme que era guapo así que... Supongo que nunca fui lo suficientemente atractivo para ti...

-Es que si estabas bien feo -Bromeo y ambos volvieron a carcajear -Ya debería irme a dormir... Yo...

Jeongin se levantó y se encaminó nuevamente a la puerta sin embargo Hyunjin lo tomó del brazó para darle la vuelta dejando al rubio algo sorprendido y sin pensarlo mucho.

Lo beso.