Dahyun se encontraba en su habitación junto a su perrita Panda, acababa de llegar su nueva adquisición "Him" un libro de misterio que había esperado desde hace mucho.

—¡Al fin llegó! —besó con euforia la caja mientras sonreía y sacaba el contenido — ¡Toda mi razón de vivir! —brincó por el cuarto emocionada por su nueva adquisición.

Dahyun jamás fue una chica muy femenina, detestaba jugar a las muñecas, prefería los juegos rudos, los videojuegos y al llegar a la etapa de la adolescencia se volvió una adicta a los libros y el chocolate.

Nunca se sintió con la necesidad de pertenecer a algún tipo de chicas, ni deseaba coquetear con los chicos. Amaba ser ella, directa, sin preocupaciones, pero sobretodo no le importaba lo que los demás pensarán acerca de su persona o sus obsesiones.

Dentro de todos sus gustos, su amor lo tenía su perrita Panda, una linda maltés que le alegraba los días y quién era la única dueña de su corazón.

Para Dahyun el romance nunca tuvo importancia, mucho menos en los libros que leía cuando leía algo romántico era en ocasiones especiales, especialmente para su tarea, pero un día todo cambió...

Estaba a nada de iniciar su nuevo libro, inició a leerlo y la historia no era lo que se supone que leería. La historia hablaba sobre una chica tímida que le gustaba su compañero de aula y quería decirle lo mucho que le gustaba.

—¡¿Qué es esto?! —se preguntó luego de levantarse de la cama y lanzó el libro molesta, de la nada un pequeño conejito rosa apareció con una varita de la nada.

—Es un nuevo libro de romance, has sido seleccionada como el sujeto número uno de nuestro proyecto para encontrar pareja —sonrió la bolita rosa y comenzó a presentarse mientras la chica permanecía en silencio y boquiabierta. —Soy Cooky y seré el encargado de ayudarte para que logres encontrar el amor como en los libros de romance.

—¡No entiendo! ¡¿Qué es todo esto?!

—Verás vengo de un mundo mágico donde trabajamos para ayudar a gente como tú.

—¿Gente como yo?

—Sí, gente dramática sin vida social y sin ningún tipo de experiencia amorosa que necesita un poco de romance. ¿Cuándo fue la última vez que alguien te robo el corazón?

—Oh... —la pelinegra esbozó una sonrisa y soltó un gran y profundo suspiro —fue cuando conocí a Taehyung en It's really love?...

—¡Alto ahí loca! — la chica miró mal a la bolita de pelos quien soltó la carcajada más estruendosa y chillona que había escuchado en su vida — ¿es enserio que me vas a decir que tu corazón lo robo un personaje literario?

—¡¿Y qué?! ¡¿Qué tiene?! Mis personajes son mucho más atractivos que cualquier otro.

—Agradece que llegué, voy a ayudarte a conseguir una pareja. Te tengo lástima.

—¡De ningún manera!

—Imagina vivir la vida real rodeada de muchachos guapos. Genial ¿no crees?

—¿Chicos guapos? ¿En la vida real?

—¡Sí! En la vida real. A partir de ahora los chicos guapos van a rodearte.

—Yo solo amo a mi más grande amor, Panda.  ¿Panda? ¿Dónde está?

—Tuve que confiscar las 3 cosas que más amas, tus libros, los chocolates y tu perrita Panda.

—¡No! ¡Panda!

—¡Regresalos!

—No, ellos interfieren en tu vida romántica. Hasta que consigas una vida llena de romance.

El ser mágico desapareció dejando a Dahyun desesperada por las tres cosas que más ama.

Y cómo si todo estuviera en su contra sus padres la habían "abandonado", se habían mudado repentinamente a Estados Unidos por el trabajo de su padre. ¿Cómo era posible que su papá trabajando en el servicio postal recibiera un traslado?

No había manera.

Salió corriendo en busca de chocolate a cualquier tienda de souvenirs, pero estaba agotado en todos lados.

—¡No! ¡Mi chocolate! No puedo vivir sin mi vitamina, moriré sin mi dosis de cacao — comenzó a dramatizar en aquella tienda, mientras los presentes la observaban confundidos.

Fue entonces que se le ocurrió.

—No dejaré que esa bola de pelos me gané. Ningún chico guapo superará la experiencia de mis libros... ¡Me volveré una asesina del romance!

Salió rápidamente de la tienda, pero en el proceso terminó tirando el celular de un chico que se disponía a entrar.

El pánico la sucumbió, se acababa de endeudar con un desconocido.

—¡Discúlpame! — realizó varias reverencias implorando al universo no tener que pagar su error.

—Uh, la pantalla se rompió — mencionó sin más ignorando la presencia de la chica.

— Es un chico guapo —pensó la pelinegra para luego analizarlo de pies a cabeza, alto, de ojos rasgados como los de un felino, piel sumamente pálida un sueño para cualquier chica de su edad. —¡Lo siento, pagaré la reparación! — soltó con desespero mientras trataba de no seguir entrando en pánico.

—No te preocupes, no es necesario. Fue mi culpa, no me fije por donde iba.

En su análisis la chica lo comparo a aquel chico desconocido con su amado Taehyung y Jeonghan de sus historias favoritas, nadie podía compararse con ellos.

—Claro. Gracias, adiós.

Sin que ella lo supiera, Cooky ya tenía listo su primer objetivo romántico.

Por la mañana siguiente mientras se encaminaba a la escuela, Cooky volvió a aparecerse frente a ella.

—¿Cómo estás? Buenos días, es hora de ir a la escuela — sonrió.

—Deja de hablarme los demás creerán que estoy loca.

—Claro que no, los demás creen que estás caminando normalmente, ellos tienen otra ilusión sobre ti. 

Mientras caminaban por el metro Cooky la golpeó en la rodilla haciéndola caer frente al chico guapo del día anterior, Dahyun lo observó y tenía el mismo uniforme que ella.

—No puede ser posible —pensó y miró a otro lado aún en el suelo.

A esa escena vergonzosa digna de serie romántica se les unió un tercero, Hansol el mejor amigo del chico misterioso.

—¡Yoongi! No te quedes ahí y ayúdala.

—Descuida estoy bien— Dahyun se levantó rápido para irse, siendo ignorada por Yoongi.

Mientras se dirigían a tomar el tren una chica se acercó a darle una carta a Yoongi y así confesarle sus sentimientos, pero este ni siquiera la recibió para no darle falsas esperanzas.

—No gracias.

Todos alrededor miraban con lástima a la pobre chica, sin duda era una pena haber sido rechazada de aquella manera. 

—Es guapo, pero que fea personalidad — pensó la de cabello oscuro y miró como Vernon se disculpaba en lugar de su amigo. 

—Disculpalo. 

A los chicos se les acercó una joven de cabellos rubios, no tenía idea de quién era, pero tampoco le interesaba. 

—¡Yoongi! ¡Buenos días! — sonrió con dulzura, pero el mencionado ni siquiera se inmuto. —Vi lo que sucedió, entiendo tu posición una carta es muy directa hoy en día ¿no lo crees Hansol?

—A mi me parece muy halagador, por lo menos debiste recibirla por cortesía.

—No quería darle una idea equivocada. 

—Por muy guapo que sea, un tipo como él jamás me gustaría debería estar loca para ello. 

—Entiendo, no era tu tipo ¿verdad? — sonrió la rubia tratando de darle por su lado. — Por cierto, ayer te envié un mensaje, pero no respondiste — un puchero se instalo en el rostro de la que supuso era amiga de los chicos. 

—Lo siento, ayer se rompió mi celular.

—¿Era enserio? Creí que bromeabas porque no querías pasarme la tarea de biología — rascó su nuca avergonzado Hansol luego de admitir aquel pensamiento. 

Dahyun escuchó aquella mención del celular y se petrificó, no podía con la vergüenza, menos cuando escuchó que el celular de Yoongi no tenía garantía para el móvil. 

—¿Y piensas comprar uno nuevo?

—Por ahora no, no tengo dinero.

Aquella confesión puso en jaque la cordura de Dahyun que añoraba la tragara la tierra.

En la cafetería de la escuela Dahyun se encontraba junto a Jihyo, su linda mejor amiga, la de piel pálida le contaba a la morena el repentino traslado de su padre.

—¿Enserio lo transfirieron?

—Sí, por eso no tuve tiempo de prepararme algo para el almuerzo, lamento haberte arrastrado a la cafetería conmigo.

—No te preocupes, es mi primera vez aquí, pero se ve agradable. 

—El almuerzo A — pidieron Dahyun y Yoongi al unísono, ambos se miraron, pero la chica se giró tratando de ignorarlo para no recordar los últimos incidentes.

Cuando tomo asiento junto a Jihyo, la morena comenzó a hablar del chico desconocido.

—Debe ser el chico guapo del que todas hablan, el de la clase 7, Min Yoongi. 

—¿Min Yoongi?

—Sí. Es bastante popular con las chicas, pero por estar leyendo no lo habías notado. 

—¿Popular? pero si es un tonto — pensó para luego ver a Cooky quien sonrió  con picardía. 

Aquella bola de pelos no se rendía, realmente quería lograr obtener ese bonus por ayudar a Dahyun a enamorarse de Yoongi. 

—Del odio al amor, es un clásico. Me agrada. 

—Ya vete, no digas tonterías. 

Por la tarde ya en su casa, Dahyun estaba entrando en un trance, no había comido absolutamente nada desde el almuerzo de la escuela, quería un chocolate, leer sus historias y sobretodo quería abrazar a Panda. Estaba bastante aburrida, pero al disponerse a hacer un poco de comida una cucaracha se apareció volviendo a la chica loca. 

—¡Mamá! —intentó exterminarla con el insecticida, pero este se había acabado y al verla volar salió huyendo de casa, tomando chanclas distintas y escondiéndose en el parque hambrienta. Extrañaba a su madre, sobretodo su comida, ella a duras penas podía hacer rollitos de huevo y ni siquiera lo parecían.

Rendida en el parque porque aquel insecto había acabado con su corduea y como si Dahyun no tuviera peor suerte comenzó a caer un aguacero sobre ella obligándola a esconderse bajo un juego del lugar, sin imaginarse que el chico que se posaba frente a ella sería nada más y nada menos que el apuesto Min Yoongi. 

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Hola

Aquí el primer capítulo, yo amo mucho el anime en el que esta basado y adaptado este au, sí tienen la oportunidad de verlo háganlo. Lo amaran demasiado, la protagonista y los intereses románticos de ella son una cosa tremenda.

Ojalá puedan contarme que les parece, como leyeron con anterioridad este au es un regalo para mi soulmate bluishhoney, ya que este es su mes.

Les mando un abrazo y gracias por la paciencia y el cariño. Les quiero.♥️✨️