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A todo momento, en la cena, no podía despejar mi vista de James. No porque estuviera perdidamente enamorada de el, o porque quisiera besarlo o algo por el estilo. Sino todo lo contrario... no podía creer como es que había accedido y creído que podría conquistarlo. No me ha volteado a ver en toda la noche mas que una vez y fue porque sintió mi mirada de lo mas fuerte. James Potter no se fijaría en mi aunque le pague un millón de galeones. Por ello recordé lo de su cita del día de hoy, claramente esta enamorado de alguien mas pero... ¿de quién? llevo dos meses en esa casa y en ningún momento lo he visto verse con nadie mas que no sean estas personas. 

- ¿te gustó la comida? - Sirius me regresa a la realidad, una vez que me hace esa pregunta y como estaba sentado a un lado mio, voltee a verlo de inmediato. - Lily cocina de maravilla ¿no crees?

- bastante, si. - le sonreí y es que, tenerlo cerca y mas amigable con el tiempo, me hacía muy feliz. - tan solo esperando el postre.

- creo que será un pay... - este dice mientras voltea a ver a la cocina. - déjame checo, que ya esta tardando. - me despeina el cabello, de la manera mas dulce y se retira.

Independientemente de todo... vale la pena cada domingo. Sirius es fabuloso. Entiendo que fue lo que mi madre vio en el. Es un alma pura, demasiado divertida y claramente simpática. Todo el mundo lo ama y en especial en esta casa... toda su familia. Me alegro que mientras mas pasa el tiempo, el mas me une a todos ellos pero también, quisiera mas. Quiero que me vea como una hija... no como la chica que le cae muy bien y que sabe que es parte de su familia pero solo ve de repente en la semana. Ah, cierto, en casa de su mejor amigo porque aun no dirige bien la noticia. 

En fin, solo por eso, sentí de nuevo ganas de seguir con el plan y voltee a ver Brent, quien estaba platique y platique con Jess, cuando me pongo de pie y me siento a un lado de James, donde anteriormente estaba Harry pero este se fue a jugar recién acabó de comer. Solo veo como Hailee se ríe mientras toma de su copa y trata de distraerse hablando con Lily. 

- ¿a qué hora nos iremos? - le pregunté a este, y puedo ver la sorpresa en su rostro, al darse cuenta de que le estaba dirigiendo la palabra. La verdad es que he sido tan grosera con James estos días que seguramente todo lo que esta por suceder, le va a sacar una gran sorpresa.

- hola. - sonríe al ver que por fin, pude hablar con el y no insultarlo. - um... ¿en media hora?

- okay. - levanté ambos hombros y me enfoqué a ver al frente para hacer como si no me importara pero, claramente podía sentir su mirada en mi. Por lo cual, voltee una ultima vez a verlo y este entrecierra los ojos.

- ¿hay acaso algo que quieras hacer? ¿por qué me lo preguntas?

- solamente para estar lista, es todo. - dije poniéndome de pie al ver que Sirius regresaba y me fui a mi asiento original donde de nuevo, este me sigue con la mirada. 

- oye, ahora que Harry estará lejos... mis días serán mas aburridos. - le dije a Sirius y pude ver como su primer instinto fue voltear a ver a Remus. Increíble, aun sigue con la idea de tenerme lejos.- podríamos vernos mas seguidos o por fin vivir en la misma casa.

- um... si, vernos mas seguido sería genial. - este me sonríe y me acaricia la mejilla. - ¿qué te parece si el viernes vamos a un concierto?

- claro, me encantaría. - pero por mas emocionante que eso sonara, no era la respuesta que esperaba. 

Hice tan solo una mueca y me recargué en mi silla para poder seguir con el postre, pero no lo niego, estaba genuinamente decepcionada de la respuesta. Pero veo que James lo notó, en cuanto veo hacia el frente y vi que el fue testigo de toda esa secuencia. Me mira con lastima y odio que me vean con lastima. Por lo cual le puse los ojos en blanco y seguí comiendo. No se como voy a fingir que estoy feliz cada que lo tengo cerca si me molesta cada que se siente mal por mi. 

- Morgan. - voltee de inmediato detrás mio cuando vi a Jess acercarse a donde estoy y me toma de la mano para llevarme a la cocina. - estuve pensándolo mucho y creo que no es necesario que hagas lo que te dijo Brent.

- ¿eh? - la miré con confusión. - oh, eso. ¿Tienes una mejor idea?

- um... no pero... no tienes que hacerlo si no quieres. Lo que importa es que seas feliz. - amo a Jess con todo mi corazón, creo que es una chica de lo mas dulce y es básicamente mi mejor amiga, por lo cual, me sentiré muy mal mintiéndole, pero prefiero tenerla mas tranquila y sin juzgarme ahora cada domingo. Así que... le diría que no llevaría a cabo el plan. Cuando eso es una total mentira.

- okay, tienes razón. No lo haré.

- ¿en serio? - pregunta emocionada y luego me da un abrazo. - me alegro tanto de aquello, Morgan. Sabía que tomarías la decisión correcta.

- gracias... tan solo bueno, es cuestión de esperar a que algo bueno pase. - levanté ambos hombros y en ese momento, mágicamente y muy oportuno, James se muestra en la cocina. 

- lo siento, no quise interrumpir nada, solo... - se recarga en la puerta. - quería ver si estabas bien.

Eso era nuevo. Si, desde el día uno siente lastima por mi e intenta que pase un buen rato en su casa para olvidar un poco el que mi padre no quiere que viva con el pero ahora era diferente. Como si genuinamente estuviera tratando de hacerme sentir mejor porque le importo. No supe como reaccionar ante ello así que solamente asentí con la cabeza.

- ya regresábamos de hecho. - Jess contesta y sale de la cocina dejándonos solos.

- ¿ya nos vamos verdad? - pregunté y el asiente con la cabeza. - de acuerdo, tomaré mis cosas. - pasé a un lado suyo por la puerta y me detiene, tomando de mi brazo. Alcé la mirada para verlo a los ojos.

- ¿qué pasa? ¿no groserías? ¿no ojos hacia atrás? ¿no ser la niña mas grosera de todas? ¿qué esta pasando?

- no pasa nada... - reí cínicamente. - ¿pero que no estamos ansiosos por esa gran cita? - dije para molestarlo y por un momento olvidé que mi plan, ya no es mas eso. No dije nada mas y mejor fui por mis cosas.

...

Estando ya en el carro. Estuve pensando todo el camino como es que le haríamos para poder llevar a cabo este plan y la única manera es siendo mas amable y bueno, para nada dejando que este con su posible cita. Así que me animé y me acerqué mas a donde el estaba, obviamente los dos sentados y el manejando pero no estando pegada a la ventana del otro extremo como de costumbre.

- oye... ¿qué tan importante es esta cita para ti? - voltea a verme extrañado ante ello, y se acomoda los anteojos.

- ¿desde cuando te importa que es lo que hago con mi vida?

- no es que me importe pero... han pasado años desde tu relación con Lily y me pregunto porque hasta ahora te animas a seguir adelante. Ella debe ser muy importante para ti.

- pues... es una amiga que conocí hace poco y nos llevamos muy bien.

- ¿cuándo es que la ves? - me voltea a ver de nuevo. - quiero decir, en que momento te enamoraste de ella.

- sigo sin entender todas las preguntas que tienes sobre ella. Mejor cambiemos de tema.

- ¿y si le dices que no puedes verla hoy? - le dije una vez que este se estaciona enfrente de su casa y puesto a que ya no estaba manejando, voltea su torso para poder verme mejor y se cruza de brazos. - podríamos ver una película o... lo que gustes.

- ¿qué? - pregunté con el ceño fruncido. - ¿desde cuando quieres pasar tiempo conmigo? todo el tiempo ignoras cuando te hablo. 

- te propongo algo... veamos el partido de basquetbol. - alza las cejas sorprendida. - se que siempre lo veo sola en mi habitación pero... te podría gustar mucho ver un juego muggle.

- ¿me estas invitando a ver lo contigo? - asentí con la cabeza. - ¿Segura?

- ¿dirás que si? - sonreí emocionada y este se queda pensando en la respuesta que estaba por darme pero al final, asiente con la cabeza. - mil gracias. - le di un abrazo y un beso en la mejilla apropósito. Al cual el reacciona tan confundido pero ni le doy tiempo de que diga nada mas y me bajo del carro para entrar a la casa.

No podía creerlo, le iba a cancelar a la chica con la cual tenía una cita el día de hoy, tan solo para que pudiéramos ver el partido. Vamos empezando bien. Se que lo hizo por la lastima que me siente, y porque esta feliz de que por fin quiera verlo como una persona parte de mi familia, pero no importa. Esto es un gran avance. Me fui a sentar al sofá y prendí de la televisión. Voltee a verlo, una vez que entró a la casa y se me quedaba mirando, supongo que aun analizando de la situación. Pero le sonreí y toqué del sofá con dos golpecitos para que viniera a sentarse a un lado mío y toma el celular de la casa para irse a la cocina y cancelarla a la chica.

Sonreí victoriosamente y me puse de pie para pegarme a la pared fuera de la cocina para poder escuchar de la conversación. Se que esto estaba mal, pero no se quien era la chica, y tenía que ver que tan amenaza era. 

- hola Olivia. - lindo nombre, pensé. - si, ya estoy en mi casa pero um... - este suspira hondo. - ¿crees podamos vernos otro día? - se que estaba muy mal de mi parte pero no podía evitar sentirme satisfecha al saber que estaba lográndolo con tan poco esfuerzo. No el enamorarlo claro, pero si el que me diera prioridad esta noche. - seguiré despidiendo a Harry. - y miente, wow. Quizás ella no sabe que yo vivo en esta casa y por eso no le dijo la verdad. - de acuerdo, si. Te quiero y um... una disculpa. 

No quise escuchar mas y mejor me regresé a tomar asiento. A donde James termina llegando y lo duda en un principio pero se sienta a mi lado y me mira tan solo.

- ¿quieres que te explique sobre el juego? es muy parecido al quidditch, solamente que mejor.

- ¿por qué quieres ver el juego conmigo? - se cruza de brazos. - me odias.

- Harry ya no estará en la casa, así que... o es intentarlo o es quedarme sola de aquí a navidad. - James ríe cuando dije eso. - podemos ser amigos si nos lo proponemos.

- por mi nunca hubo un problema, Morgan. Quería llevarme bien contigo desde el primer día que te conocí. - levanta ambos hombros. - eres la hija de mi mejor amigo, claro que quiero agradarte.

- perfecto, entonces... veamos el juego. - este suspira hondo y me retira el control de las manos. Creí que estaba por cambiarle pero tan solo le sube al volumen. 

- de acuerdo, Morgan. Explícame todo lo que tengo que saber de este deporte que te emociona tanto.

- ¿no vas a tirarle nada de odio? - niega con la cabeza. - tampoco se van decir toda la noche "el quidditch es mejor". Tendrás que aceptarlo.

- ya estoy aquí. - este sonríe y le regreso la sonrisa. - empieza, adelante. 

NOTA: ahora si, re subí el Edit de Morgan y James para que vayan a darle amor plis jeje (Valeria.prongs)