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DOS MESES DESPUÉS

Las cosas no han cambiado para nada, es más, creo que diría yo que han empeorado. El día de hoy es el último día de Harry en la casa, antes de que se fuera a Hogwarts a cruzar su primer año en el colegio y por más feliz que esté por el, tan solo me rompe el corazón saber que me alejaría de la única persona de la cual me he encariñado como nunca antes en esta ciudad. No tengo nada en contra de los demás, de hecho, han sido increíblemente amables conmigo... más de lo que quisiera. Pero Harry Potter es la luz de la familia, y creo que he podido deducirlo con el tiempo. Tan solo por ejemplo, ayuda mucho a que James y Lily puedan seguir en contacto y sin que sea incómodo. Porque es más evidente que nada que no hay nada de sentimientos entre ellos por el momento, yo se lo qué hay con tan solo una mirada... soy excelente deduciendo quien esta enamorado de quien y ellos dos, no lo están.

Quienes si lo están, son mi padre y Remus Lupin. Ninguno de los dos me lo ha dicho oficialmente y nadie más en la casa pero vamos, no soy tonta. Claramente ellos dos nacieron para estar juntos por como cada uno sonríe como si fuera el mejor día de su vida cuando se ven. Y si ni me equivoco, eso pasa cada día. Aún y cuando mi padre tiene su propia casa, se la vive en la de el porque Jessica, la hija de Remus, me lo confirma. De verdad quisiera verlo más que tan solo los domingos familiares obligatorios... digo, por algo quise venirme a vivir a Inglaterra. Para poder pasar tiempo con el como se debe pero en cambio, vivo en la casa de su mejor amigo con su hijo que solo está una semana si y la otra no.

Como dije, Harry vale la pena. Es un chico fabuloso y pasar el verano a su lado jugando basquetbol y escuchando música fue lo mejor. Admito que lo voy a extrañar. Pero ahora, íbamos en camino a la casa de Lily Evans para el domingo familiar que hoy sería en su casa ya que es la despedida de Harry y todo eso. En el carro, yo sentada enfrente a un lado de James y como de costumbre, ignorándolo mientras escuchaba de la música en la radio. Pero el le empieza a bajar a propósito y se que va a decirme algo.

- oye ¿te molestaría que invite a una amiga a la casa esta noche? - quería reírme ante tal pregunta pero no lo hice, tan solo me contuve las ganas y cuando me mira, tan solo niego con la cabeza.

- adelante Jamie. - empecé a decirle de esa manera para molestarlo, lo cual, no se si funcione hasta la fecha pero se que al menos lo hace sentir incómodo.

- por lo cual, tienes que entender que nos iríamos temprano claro, de casa de Lily. - lo miré molesta. - sabía que me mirarías de esa manera, por ello te preguntaba.

- ves que solo veo a mi padre unas horas... tan solo un día en la semana... ¿y tú quieres quitarme eso solo porque sientes que ocupas coger?

- Morgan. - me mira molesto por lo que dije pero no me importaba y me crucé de brazos. - no voy a... - aprieta los labios hacia dentro. - es solo una amiga.

- si claro, tanto que tendrán una cita en la casa. - este se estaciona por fin enfrente de la casa de Lily y se acomoda para verme de frente antes de bajar del carro. - que no me importa por cierto, eres libre de hacer lo que quieras hacer con tu cola y en tu casa. - sonríe cuando dije eso, peor por igual aguantando las ganas de reírse. - pero yo quiero ver a Sirius lo mas que se pueda. ¿Lo entiendes?

- nos vamos a las ocho y media.

- nueve.

- ocho cuarenta. - lo miré con los ojos entrecerrados pero terminé estirando mi mano para estrechársela y lo hacemos. Un trato. - Gracias, siempre es un gusto hacer negocios con una chica de diecisiete años que es mas necia que su propio padre. - dice mientras se va bajando del carro.

- digo lo mismo, amo hacer tratos con hombres de treinta años que siguen en citas tan patéticas. - me mira molesta y yo tan solo le sonrío para irme directamente a la puerta y tocar para que su ex esposa nos habrá. James me alcanza en la entrada. - ¿Ella sabe de tu novia?

- no, y apreciaría mucho el que no dijeras nada aún. Nadie sabe. - hice una mueca. - bueno, Sirius sabe.

- claramente. - son los mejores amigos en el mundo. Mientras mas tiempo paso aquí, mas me queda claro que ellos dos son mas hermanos que cualquier otros de verdad. Lily nos abre la puerta y nos recibe con un gran abrazo. James termina yéndose a sentar con los adultos y vi a lo lejos a Sirius. Estaba muy emocionada por querer ir a abrazarlo y saludarlo pero me veo interrumpida ante Brent.

- por fin llegaste. - me despeina por completo el cabello y terminamos abrazándonos. - conseguimos algo.

- ¿qué? - pregunté confundida y se muestra Hailee, su gemela con un varías cervezas en mano y riendo, nos subimos las escaleras para tomarlas a escondidas de ellos. Cerré la puerta de la habitación de huéspedes y nos esperamos ahí para tomar en lo que Jessica llegaba.

- ¿y bien? ¿Cómo estás? - Hailee me pregunta.

- de la mierda. - admití. - hoy me iré temprano... ni siquiera alcanzaré a ir a la fiesta con ustedes porque James tiene una cita y quiere que nos vayamos temprano.

- ¿en serio? Que tierno, es bueno verlo seguir adelante. - dice Hailee mientras abre de su botella. - desde el divorcio con Lily, el nunca había tenido una novia.

- lo dudo. - dije mientras me recargaba en la cama.

- no, es en serio. - Brent me lo confirma. - estábamos seguros de que nunca más se iba a enamorar pero bueno, si dices que es verdad, es bueno por el.

- ¿tan imposible es que pase? - pregunté, ya que la duda por fin ha llegado a mi y no se iba a ir eventualmente. No me puedo imaginar a jMaes Potter sin interesarse en ninguna mujer.

- James Potter solo ha amado a dos personas en toda su vida. Una de ellas, es Lily Evans. - dice Brent.

- eso lo sé pero ¿quien fue la segunda? - pregunté y los dos al mismo tiempo, alzan los hombros. - ¿no lo saben? ¿Por?

- fue en Hogwarts, nunca nos contó la historia mi padre porque yo creo que no sabe. Pero alguna vez lo escuché decir aquello en Año Nuevo después de muchas cervezas de mantequilla. - ríe Hailee. - pero ¿qué más da?

- supongo.

Aunque no me quito la duda, de quién sería esa segunda persona.

- ¡llegue! Y traje galletas. - Jessica entra a la habitación y alza en alto su bolsa con las dichosas galletas que ella prepara cada semana. Brent se acomoda, se sienta bien y sonríe como todo un bobo cuando la ve. Es evidente lo enamorado que estos dos están el uno del otro. Pero hasta donde se, no se han dicho nada nunca. - ¿quieren?

- con cerveza no se me antojan mucho. - dice Hailee. - pero gracias, Jess.

- yo si quiero. - obviamente, Brent Pettigrew aceptaría y se va a sentar a un lado de ella en el sofá. Así que Hailee se pasa a mi lado en la cama y seguimos tomando.

Es buen momento para hablar de los hijos de los merodeadores. Harry bueno, es el hijo de Lily y James. Un chico de once años de lo más dulce y con tanta emoción por empezar clases el día de mañana como un mago. Luego tenemos a Jessica Lupin. Hija de Remus Lupin y su primera novia en el colegio de nombre Carmen. No tengo el gusto de conocerla, pero Jess habla mucho de ella cuando puede. Ella estudió en Hogwarts y fue de la casa de Hufflepuff. Le gusta mucho cocinar galletas y la naturaleza. Es demasiado bonita, de tés morena, cabello oscuro y rizado y unos ojos gigantes color marrón. Nunca me ha confesado que le guste Brent pero, puedo deducir que si. Ahora que se ha graduado de Hogwarts, su plan es eventualmente trabajar en el "El Profeta". Al parecer es el periódico de aquí en Inglaterra.

Luego tenemos a los gemelos Hailee y Brent Pettigrew. Hijos del bien divorciado Peter pero puedo decir que son las personas más geniales que he conocido en toda mi vida. Hailee tiene un diferente tipo de belleza al de Jess. Hailee es evidentemente guapa, es una persona coqueta y popular y claramente puede volver loco a cualquiera. Con ojos verdes y cabello castaño, teniendo el mejor don del mundo y yo creo que es el de bailar. Esta en ballet y su plan es seguir estudiándolo, dejando la magia de lado al menos en el ámbito laboral. Ella es una Ravenclaw.

Brent es bueno... mi mejor amigo. Con el no tengo que pulir para nada mi personalidad, ya que el es igual de frío que yo. Un Slytherin bien formado.  Yo no estudié en Hogwarts por lo cual no puedo decir que pertenezco a alguna casa pero, de ser así, sería en esa junto con el. Nos llevamos tan bien que pasamos casi todos los días juntos independientemente de que sea domingo o no. Es jugador de quidditch, por lo cual se lleva muy bien con James. Y muy popular y bueno, obviamente guapo. Con ojos claros por igual y un poco más rubio su cabello.

Y luego estaba yo, hija de Sirius Black y mi hermosa madre que extraño cada día qué pasa. Pero bueno, de mi no hay mucho que contar. No hago nada relevante... mi plan es tan solo seguir jugando basquetbol y si se puede, algún día ser una jugadora profesional.

- ¿ya hablaste con Sirius? - me pregunta Jess y niego con la cabeza. - hoy estaba muy feliz, lo vi en la mañana en la casa de nuevo.

- claro que estaba feliz, estaba con tu papá. - le dice Hailee riendo y está le lanza una almohada. - ¿o me equivoco?

- sea como sea... ¿que piensas hacer con este tema? - Jess me pregunta. - ya van dos meses y no veo nada de... progreso.

- a decir verdad, yo tampoco. - dije mientras me acomodaba en la cama para poder verlos cara a cara y no estar toda acostada. - ya no se que hacer... he hecho de todo y nada. He seguido los consejos de cada uno de ustedes y lo único que logro es bueno, tener los domingos como de costumbre.

- no has seguido todos los consejos de nosotros. - dice Brent y todos volteamos a verlo. - okay... sonará como toda una locura pero tengo una idea.

- ¿qué es? - le pregunta Jess.

- oh, creo que se por donde va esto. - dice Hailee riendo y se cubre el rostro. - es una locura, hermano. Aparte, Morgan jamás en toda su vida aceptaría.

- ¿aceptar qué? - pregunté confundida y Brent tan solo me mira riendo. - vamos, dime o voy a perder la paciencia.

- bueno, has hecho de todo para llamar su atención y no funciona... ¿por qué no hacer algo tan intenso o atrevido que logre que genuinamente Sirius por fin abra los ojos y quiera sacarte de esa casa y por fin estar a tu lado?

- te escucho. - me cruzo de brazos.

- deberías acostarte con James Potter. - en cuanto Brent dice eso, solo veo como Jess escupe de su galleta ante la reacción que tuvo. Voltee a ver a Hailee y ella para evitar el contacto visual, toma de su cerveza.

- estás loco, obviamente no. - reí. - es una idea tan...

- buena. - Brent me interrumpe. - solo piénsalo, así Sirius no quisiera que vuelvas a dormir en un lado que no sea en el cual perteneces, que es tu casa. Con el.

- no creo que sea la mejor idea, Brent. Morgan es solo una niña si lo piensas... diecisiete años. Y James es un adulto...

- un adulto joven y guapo. - dice Hailee y veo como Jess la ve con desagrado. - ¿qué? Si, lo veo como un tío nada más pero no estoy ciega, se cuando un hombre es atractivo.

- sea atractivo o no, yo no lo veo de esa manera. No me gusta en lo absoluto. - admití.

- si bueno, no te estoy diciendo que te cases con el. Solo que logres llamar su atención lo suficiente como para que al menos el quiera besarte y que Sirius se entere.

- pero... eso haría que se peleen. Son los mejores amigos en el mundo. No queremos que eso acabe. - dice Jess. - odiaría verlos molestos.

- pero es un buen plan. - dije mientras me quedé pensando y me mordía las uñas. - me interesa el plan. - cuando dije eso, Brent y Hailee a0lauden emocionados. - no me voy a acostar con el porque que asco...

- aparte sería tu primera vez. - me dice Hailee.

- no, por supuesto que no. - admití y todos en la habitación ríen. Estaba en tanta confianza que no me daba piensa admitir aquello. Amaba a estos chicos. - pero no lo haré. No me apetece. Solo... coquetearle un poco y esperar llamar su atención.

- será fácil, eres muy bonita. - me dice Hailee.

- te ayudaremos en lo que quieras... ¿verdad? - Brent le pregunta a Jess y está suspirando hondo, asiente con la cabeza.

- solo... solo acepto si se que este será un plan bien estructurado. No quiero que nada salga mal. - Jess se cruza de brazos.

- de acuerdo, el plan para vivir con mi padre empieza... ahora al parecer. - dije. - manos a la obra.

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