—Vamos mételo ya— SeokJin jadea impaciente y toma mi miembro con ambas manos alineando lo en su entrada.

Sonrojado lo penetró con fuerza y el arquea la espalda aferrándose de mi espalda, siento sus pequeñas uñas enterrarse en mi piel e instintivamente jaló de sus cabellos para evitar que me lastimé, él se sonroja con mi actuar y me siento satisfecho cuando me muevo y de inmediato SeokJin comienza a gemir desesperadamente, elevo sus piernas y arremeto con más fuerza en su interior, algo apenado ante los sonidos que acasionamos dejó caer mi boca sobre la suya, su tibia lengua rápidamente busca la mía y morbosa mente comenzamos un éxtasis enloquecedor en el cual los besos húmedos continúan hasta que ambos eyaculamos en el otro.

Agitado y aún sin salir de su interior dejó caer mi rostro sobre la curvatura de su cuello y clavícula —No busques más peleas, yo puedo darte eso que buscas.

—¿¡Enserio!?— cuando toma mi rostro entre sus manos y me mira con ese intenso brillo en sus ojos me doy cuenta de la tontería que acabo de decir —¿Vas a golpearme?, ¡Hazlo ahora!.

Retirando suavemente mi miembro niego —No podría...

—Tsk, sabía que no podías— SeokJin realiza una mueca y se levanta de la cama para bajarse.

Pero antes de que lo logré lo tomo de la muñeca —No hasta que te cures de estos golpes y si, si buscas pelea por fuera no lo haré ni tampoco tendré más sexo contigo— digo seriamente.

El me mira atentamente y después se unos segundos sonríe —Solo por qué es díficil buscar un compañero sexual que complazca mis fetiches aceptaré. Por ahora podemos seguir haciéndolo sin que me prepares, ¿de acuerdo?

—De acuerdo— respondo y presionó mis labios sobre los suyos. Es tan extraño que rápidamente busque probar el sabor de sus labios con ansias.

De pronto SeokJin baja la mano apretando mi polla y gime
—Mira con un beso te has puesto duro de nuevo, pervertido.

Apenado me doy cuenta de la erección que tengo de nuevo y en cuestión de segundos SeokJin deja caer su cabeza entre la almohada y eleva su trasero hacia mí —Rápido, hazlo de nuevo. Estoy ansioso por recibirte otra vez.

Probablemente puedo acostumbrarme al sexo con SeokJin más rápido de lo que pensé. Me gusta como nuestros cuerpos se acoplan mutuamente.

Al abrir los ojos mi estómago gruñe de inmediato, eso de tener sexo cuatro veces en un mismo día si deja exhausto. Me bajo desnudo hacia la cocina y rebusco en el refrigerador pero no tengo absolutamente nada para desayunar tampoco para preparar.

—Deberías estar aquí estúpido Jimin— maldigo en voz alta y de pronto al darme la vuelta.

Taehyung se encuentra mirándome con la boca abierta y su cabello húmedo, al verme desvía la mirada —Lo siento, use la ducha sin permiso pero estabas dormido y no quise despertarte.

—Ah, está bien. ¿Tienes hambre?, Por qué yo sí— me quejo y me tiró en el sillón quejándome. Puede que sepa cocinar pero cuando recién me levanto nada ni nadie me hará preparar algo.

—Yo puedo preparar algo, tú puedes ir a darte una ducha también— dice y aclara su garganta.

Me levanto de golpe y sonrio —¡Si, perfecto!— y al pasar a su lado le doy un golpe en su glúteo derecho a lo cual él solo jadea sorprendido.

Probablemente tener sexo con Taehyung sea más bueno de lo que imaginé y podría acostumbrarme rápido a ello.