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Lucius x Severus 2/3

"Carrie"

Severus se sentía cansado. La clase de literatura era aburrida, como siempre. Él podía ser bueno en dicha materia. Pero era un asco como la daba el profesor.

- Muy bien Tonks, ahora quien más podría leer su poema... ah...- Severus controló su mirada y consiguió erguir la bandera del patio- Severus...- el aludido se sobresaltó y lo miró- ¿Puedes pasar a leer tu poema?- dijo sonriente el coqueto profesor rubio.

- si...- susurró antes de tomar su hoja y pasar al frente del salón- Ammm...

"Yo veo, solo, a veces,
ataúdes a vela...

Zarpar con difuntos pálidos, con mujeres de trenzas muertas...

Con panaderos blancos como ángeles...

Con niñas pensativas casadas con notarios...

Ataúdes subiendo el río vertical de los muertos,
el río morado...

Hacia arriba, con las velas hinchadas por el sonido de la muerte...

Hinchadas por el sonido silencioso de la muerte...."- finalizó. Miró al profesor, quien lo miraba con horror.

- De acuerdo eso fue... escalofriante...-los alumnos se rieron- ¿Eso es todo o ya acabaste de asustarnos?- se burló el hombre rubio, mirando a Severus gruñir y regresar a su asiento.

- Que estúpido...- se escucho un susurro.

- ¿Disculpe Sr.Malfoy?- Severus volteó hacia un atractivo chico de cabello largo y platino.

- Que fue estupendo... lo que leyó Severus, ¿No lo cree profesor Lockhart?- todos miraron al silensiado profesor.

-ah... ¿Siguiente?-indagó avergonzado el hombre. Lucius negó y siguió dibujando en su cuaderno, sin notar como Severus lo veía. Claro, Remus si lo notó.

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- ¿Que quieres que haga qué?-dijo Lucius en el almuerzo. Remus dijo algo... y él no estaba seguro de haberlo oído bien.

- Quiero que lleves a Severus Prince al baile...-dijo con naturalidad el castaño.

- Si, te oí... pero... ¿Él?- dijo el rubio inseguro.

- ¿Qué tiene?- dijo Remus confundido.

- Amor, está loco...- dijo Lucius inquieto. Remus lo vio con mala cara- Además, yo iría contigo... ¿No era lo que querías? Digo, lloraste mucho por mi indiferencia desde cuarto grado y ahora que te amo tanto como tú me amas ¿No quieres ir al baile conmigo? Sabiendo que es uno de los eventos más importantes hasta ahora para ti... ¿Lo vas a dejar todo porque el arrojarle vendas en un baño escolar te carcome la conciencia?-Lucius parecía más dolido por lo que Remus perdería que él mismo.

- Luc, hice algo horrible... yo sé por lo que él está pasando, oye... yo lo sufrí por ti...- Lucius lo silenció, no quería recordar el daño que le causaba al hermoso castaño que lo veía con adoración ahora- No sé porque lo hice, pero sé que puedo pararlo y arreglarlo...- aseguró.

- Amor, aún si lo invito... ¿Qué nos garantiza que aceptará? ¿Porque piensas que querría salir conmigo al baile?- se encogió de hombros.

- Porque vi como te miró cuando lo defendiste en Literatura... por favor...-rogó. Lucius lo miró con pesar. Y luego vio la mesa apartada donde comía solo el pequeño Prince.

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"Telekkinesis"
"El poder mental. Este poder psiquico inteligente es capaz de mover cosas sin necesidad de una acción física, solo con el poder de la mente puede lograrse que un objeto se mueva de un lado al otr..."

- "Telekinesis"...- la voz ronca lo sobresaltó. Severus cerró el libro de inmediato y alzó la vista a quien lo interrumpió- Disculpa, es solo que tienes muchos libros y quería saber que leías...- se disculpó el rubio con una sonrisa, tomando asiento frente al azabache.

- Lucius Malfoy...- murmuró Severus- ¿Porque me hablas?- gruñó desconfiado.

- Eres una persona con lengua ¿No? Y dicen que los callados son los que tienen las conversaciones más interesantes...- rió. Pero Severus no cambió su expresión fría- ejem... disculpa- dijo al ver que no le causó gracia. Desvió su mirada hacia la mesa de Remus, quien le hizo señas para que insistiera- Entonces... ¿Qué es lo que te gus...?-

- Al grano Malfoy -dijo tajante- ¿Qué quieres?- Lucius miró de reojo a Remus con una cara que demostraba lo aterrado que se sentía con ese loco.

- Ah... escucha... lo eh pensado desde....-Lucius se quedó sin ideas... ¡METIR! Eso funciona siempre- Principio de año.... y... sabes... quiero invitarte al baile... ya sabes... el del lunes...-Severus lo calculó con la mirada. Y sin esperarlo, Lucius vio como se levantó de la mesa con el libro en la mano.

- No juegues conmigo, sé quien es tu novio, no me interesa ser victima de su estupidez... aléjate de mi...- ordenó ante de dar media vuelta y tratar de irse, pero Lucius lo tomó de la muñeca.

- No, no te vayas... -pidió. Severus lo miró feo- Por favor...-dijo intimidado.

- ¿Tu novio es Remus Lupin?- indagó serio.

- Pues... si pero...-

- Es suficiente para mi...- dijo antes de soltarse del agarre y caminar a la salida de la cafeteria.

- ¡Nonononono! -El rubio corrió tras él. Severus lo miró con desdén. Odiaba la manipulación sentimental.

- Dejame... solo....- pausó molesto.

- Por favor, él no quiere venir conmigo, y yo no quiero ir solo.... Además... El baile es un evento que cualquier persona normal querría presenciar...-sonrió tímido.

- Yo no soy normal. Ya me lo dejaron en claro...- siseó Severus, saliendo de la cafetería al vacío pasillo con casilleros. Lucius lo siguió y tomó con cuidado su mano.

- Eres distinto, y eso está bien...- sonrió Lucius. Severus suavizó su mirada- Sabes... ven al baile ¿Si? Si no va bien o te arrepientes... estemos donde estemos te traeré a tu casa sin dudar... ¿Trato?- Sonrió Lucius, dando un apretón en el hombro del moreno.

Severus lo miró unos segundos, que para Lucius fue una eternidad. Prince parecía más dolido ahora, y Malfoy lo entendía, pero no quería hacerlo más largo.

- ¿Has pensado de que el que llegues al baile con Quejicus y no con tu super candente y ardiente novio Lupin va a hacerte quedar un poco, muy, en el ridículo? -Murmuró frío. Lucius jadeó. No. No lo había pensado. Pero vamos. Era por su novio. Por Moony.

- No importa... por favor. Acepta. Juro no hacerte daño....-sonrió. Severus lo miró.

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Severus miró las tiendas de trajes que estaban de camino a su hogar. Claro. Se detuvo y consideró la propuesta de Malfoy, y verificó los trajes que habían y su precio. Muy caros. Por otro lado... las telas estaban más baratas.

- ¿Porque rayos tardaste tanto?- espetó Eileen al verlo llegar a oscuras por la calle. Severus bufó y entró a su casa, seguido de su madre.

- Solo estaba comprando algo de tela mamá. No fue mi intención llegar tan tarde...- bufó Prince Jr. Eileen lo siguió con la mirada.

- Sabes que no es así. Tu camino es la escuela y de regreso a casa. Sin nada de por medio...- dijo comenzando a calentar la comida para su niño.

- Mamá...-Severus se detuvo. No le convenía discutir con su madre. No por ahora. Ni nunca- Me invitaron al baile...-su madre negó. Severus supo que no lo escuchó- Mamá... Me invitaron al baile...- Eileen se congeló- Tranquila, me prometieron regresarme a las 10:45pm...-dijo. Eileen negó con la cabeza.

- Recházala... aún es tiempo...-susurró esperanzada. Severus optó por no decirle que la persona que lo invitó fue un hombre.

- Esque ya acepté...-excusó. Su madre negó.

- Te lastimaran...-aseguró. Prince se alejó de las caricias de su madre.

- No juegues mamá. Iré....- dijo dando media vuelta.

- ¡NO IRÁS!-gritó Eileen. Severus la ignoró y ella continuó gritando.

- ¡BASTA!- Con un ademán alzó a su madre del suelo sin tocarla. Su madre chilló horrotizada.

- ¡BRUJO, BRUJO!- Severus se vio dolido.

- No es brujería mamá. Es telekinesis. Mucha gente puede hacerlo...- aseguró. Pero su madre siguió gritando. El muchacho se cansó y apretó su mano. Asfixiando a su madre- Basta. Ire al baile. No soy un producto de Satanás. Y no vas a impedirme ir a ese maldito baile...- siseó. Entonces dejó caer a su madre y se retiró a dormir. Sin comer. Y sellando la puerta para que su madre no entrara.

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Al día siguiente no habló con su madre. Y ella se apartó de él lo más que pudo. A Severus no le importó. Tiró el desayuno que su madre preparó con alguna toxina y se preparó uno él mismo. Desayunó y se marchó a la escuela. En la secundaria ya corría el rumor de que James Potter no iría al baile.

Severus no sabía por que, pero James Potter no le hizo nada fuera de la escuela. Pues Potter no podía entrar a Hogwarts. No le dio importancia. Sabía que había peleado con Remus... Lo supo cuando entró al baño y luego de que se metiera a un cubículo entraron Lupin y Potter.

"-Es oficial Moony, no iré al baile...- escuchó la voz de James, con un deje de burla a si mismo.

- Te dije James...-balbuceó Remus.

- Oye Remus ¡¿PORQUE NO ME DEFENDISTE?!- gritó furioso.

- Nos lo mereciamos... Al menos pienso que yo lo merecía...- suspiró Remus. Severus frunció el entrecejo confundido.

- No, no es así...- gruñó James- Ese imbécil de Quejicus anda diciendo que todos menos él y su madre se irán al infierno, ¿Y tú lo defiendes?- siseó molesto.

- Dime James...-espetó Remus- ¿Qué mierda te hizo Severus Prince para que lo ataques así? -Severus miró por la rejilla de la puerta la escena con impresión.

- Lo estuvo pidiendo desde 7mo grado Rems...- sonrió James. Remus le gruñó.

- A veces eres un cerdo, James...-siseó furioso. Luego hizo amague de marcharse del baño.

- Fantaseas. Es por eso ¿No?.-Remus se detuvo- A ti te importa una mierda Quejicus, es por eso toda esta estupidez. Porque desque que eres niño soñabas con el baile perfecto, el novio perfecto y la noche perfecta. El lindo Remus...-se burló- Ya hasta... practicaste los sonidos que haras con él ¿No? ¿Alquilaste el Motel y-?-Remus golpeó su puño contra el rostro del mayor. Severus se sorprendió.

- Vete a la mierda Potter...-siseó Remus. Posteriormente salió del baño.

- Ok... nos vemos luego Rems...-se burló Potter, y luego salió."

James miraba a Sirius, quien rodeado de sus amigos criminales llenaban un balde de lata con la sangre de un cerdo. Esa granja a oscuras daba miedo. Nada que James no pueda manejar. Potter recurrió a Sirius para vengarse. Y si que la venganza sería hermosa. Muy.... hermosa.

Sirius rompió una ventana de Hogwarts y se metió dentro. James le pasó el balde y luego pasó él. Ambos corrieron en plena noche hacia el salón de ceremonias. Y justo sobre el punto exacto donde los reyes del baile posarían en el baile colgaron el balde. Con el mecanismo sencillo de que al soltar la cuerda la sangre caería. Justo sobre la Reina.

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Severus caminó hacia la salida, ya vestido con su traje echo a mano por él mismo, más atractivo y poco anormal de lo usal. Satisfecho consigo mismo decidió simplemente concederle a su madre un deseo maternal que cualquier mujer querría tener con su amado hijo.

- Mamá, ¿Quieres anudar mi corbata?- indagò a su madre. Quien lo veía fríamente. La mujer solo gruñó, y Severus supo que no quería. Con un leve suspiro de cansancio lo anudó él.

- Te ves como el Diablo...-siseó la mujer. Prince Jr. Entendió que se refería a su padre. Ni modo.

- Es un traje mamá. Todos los hombres lo usan...- iba a agregar que algunas mujeres también, pero con el primitivo estereotipo que su madre tenía con los géneros decidió callar.

- Arrepientete... aún no es tarde...- Dijo la mujer al oir el motor de la moto de Malfoy afuera de la casa.

- No mamá. Déjame...- dijo apenado. Lucius bajó de la moto y se encaminó a la puerta.

- Basta. Te lastimaran... sé lo que te digo...- siseó. Severus jadeó- ¿Acaso tendré que contarle...?- Severus la miró, furioso- ¿Sobre como tú eres un error, un producto de la problemática humana? La violación...- siseó. Lucius llegó a la puerta y tocó.

- No mamá...- la mujer quiso hablar, pero Severus la elevó del suelo- No arruinaras esto para mi...- antes de que su madre gritara la forzó a cerrar la boca, y de un ademán la mando a encerrar en el armario de las plegarias.

- ¡MMMMM MMMM!- la mujer forcejeaba contra la puerta, pero Severus derritió y selló el candado de la puerta.

- Te amo. Pero no dirás nada hasta que yo me vaya...- dijo- Volveré a tiempo. Lo prometo...- sin más prendió la radio y subió el volumen para que los golpes de su madre no se oyeran.

- Hola Sevy, te ves perfecto...- sonrió Lucius. Prince sonrió un poco incómodo y siguió al rubio a la moto, donde el contrario avanzó a toda velocidad.

- Ya no estoy seguro de esto...- dijo al entrar al salón y verse observado por muchos.

- Ey, relax... nada malo va a pasar conmigo a tu lado...- sonrió. Un chico le saltó encima con emoción y ambos se saludaron. Parecían grandes amigos.

- ¡Ey, Bartux!- el chico castaño chocó los puños con el rubio.

- ¡Luc!- respondió Bartemius Jr. De repente una mujer se acercó a Severus y le sonrió.

- Tranquilo, si se matan yo bailaré contigo- sonrió amable la linda chica. Parecía ser la pareja de Barty.

Severus le sonrió y los cuatro tomaron asiento en una de las miles de mesas del salón frente al escenario con los tronos para los reyes del baile. Luego de unos minutos viendo a los alumnos bailar Lucius decidió preguntar a Sev si deseaba hacerlo, pero este aludió que solo bailaba bals o lentos y Lucius aceptó a esperar a que llegara un tema así.

- Voy por ponche, ¿Quieres que te traiga?- Severus nego. Lucius le sonrió y luego se alejó.

"-Amor, Severus es increíble😆. Te extraño😓😚.-" mensajeó Lucius a Remus.

- ¡BIEN CHICOS, HORA DE UN CAMBIO!- dijo la DJ, para cambiar a una cancion hermosa y antigua. Muchas pistas eran lindas, pero nada como Withney Houston y I Have Nothing.

- Ey...- Severus se sobresaltó ante el susurro en su oído- Adivina... - le sonrió. Severus vio a Lucius tenderle la mano- Es una canción lenta...- canturreó. Severus palideció. Y entre negaciones y juegos acabaron por bailar. Muy bien. Cabe decir.

- ¡BUENO CRIATURAS... ES HORA, VOTEN POR SU REY Y REINA, O REY Y REY, O REINA Y REINA, O REINES Y AL DEMONIO CON TODO, PARA SU BAILE DE GRADUADOS!- gritó la DJ despeinada y de cabello onix.

Severus no sabía que votar. Lucius. En cambio, se veía muy seguro. Prince se asustó cuando lo vio tachar su nombre y el suyo. Tras un pequeño debate optaron por votar por ellos mismos. Claro queno sabían que quienes cuidaban la caja con los votos harían fraude electoral a su favor. Por ello se sorprendieron al escuchar a los ganadores.

- ¡LUCIUS MALFOY Y SEVERUS PRINCE! - dijo Bellatrix. La DJ. Los mencionados subieron con sorpresa y tomaron los puestos de reyes.

James miraba toda la ceremonia desde la atadura del balde, donde nadie lo veía ni a él ni a Sirius. James decidió disfrutarlo más, y sacó su teléfono.

"- Ey moony. Tu amiguito se ve bien. Pero no por mucho 👎-"

Remus palideció ante el mensaje. Y furioso dijo a sus padres que cambió de opinión y si iría al baile. Sus padres no entendieron porque iría en jean y sudadera. Pero no objetaron nada. Remus subió a la camioneta de sus padres y condujo lo más rápido que podía legalmente a la escuela.

Severus y Lucius posaban bajo los reflectores. Y Severus... justo bajo el balde sangriento. Remus bajó del transporte y corrió al interior de la secundaria. Buscando con desesperación el salón de ceremonias. Severus solo veía el flash de las camaras fotografiando, lo que debía ser, el momento más feliz que Primce tuvo desde que nació.

- Escucha amor, la cosa es así. Sueltas la soga vemos lo que le pasa y nos vamos ¿Si?- dijo Sirius a su pareja pero este ni lo miró, emocionado por la venganza- Oye, en serio, cumples la venganza y nos vamos, no nos quedaremos a las risas...- James lo silenció- EY... -Tomó con fuerza a Potter de los brazos.

- ¡Ay, para!- rezongó.

- James, esto es enserio. No es como lo que le hicieron en el baño a ese chico, si hacemos esto iremos a prisión...- James gruñó.

- Ya te oí...- gruñó.

- ¿Ese es Remus? - indagó Sirius confundido al ver al aludido en el salón. Buscandolos.

- uy esto va a estar bueno...-rió James.

- James...-susurró Remus la verlo en la parte superior- ¡SEVERUS, QUITATE DE AHÍ!- Prince lo vio. Y burlón tomó la mano del desinteresado Lucius Malfoy, quien no pareció notar a Remus.

- Ahora...-Sonrió James, dejando caer el contenido del balde.

- ¿Remus?- balbuceó Lucius al ver a su novio ser sacado a la fuerza por los profesores.

- ¿Qué es...? -Severus sintió como un peso realmente grande caía sobre él. Siendo manchado de sangre cuagulada, salpicando a Lucius. Lucius y Severus se impactaron. Fue una broma- ¿Luc...?-sollozó Severus. Lucius lo miró con lastima, y furioso gritó a la multitud.

- ¡¿QUÉ HICIERON?!- nadie se movió. Cuando de repente. Bellatrix activó el proyector, dando a ver abiertamente el vídeo de Severus.

Severus trataba de quitarse el líquido de encima cuando escuchó la burla. "-¡PONTELO, PONTELO, PONTELO...!-". Remus miraba desde el vidrio de la puerta con la que le bloquearon el paso con terror. Severus bajó del escenario con lentitud, como si temiera a mirar a su alrededor o causar algo que lo delatara. Lucius lo miró apenado. Los gritos de horror de Severus hacian eco en el vídeo.

- Severus...- lo llamó Lucius. Pero Severus siseó al verse reflejado en el vídeo. Sirius gruñó y ató la soga del balde al caño.

- Anormal... anormal...-rió James, siendo jalado y arrastrado por Sirius. Quería sacarlo de ahí.

- ¡Severus! -Severus miró al profesor Grindewald aproximarse y tenderle una mano a modo de apoyo. Pero la furia que recorría sus venas era más poderosa, y con un movimiento brusco lo empujó con ayuda de la telekkinesis.

Los alumnos se asustaron. James aún parecía querer mirar, Sirius la tenía un poco difícil. Las risas habían cesado. Remus quería abrir la puerta pero estaba realmente cerrada. Varios alumnos ayudaron al profesor a levantarse, cuando de repente, la soga que mantenía el balde sobre la cabeza de los reyes se soltó. Dejando caer el balde.

- ¡LUCIUS!- ladró Remus horrorizado, al ver el balde golpear la cabeza del rubio y este caer inconsciente.

- Ay no, Lucius...- jadeó James aterrado, siendo sacado por Sirius del salón y ser arrastrado al estacionamiento.

Remus trató con desesperación entrar al salón,  pero la puerta no lo dejaba pasar. Con un golpe frustrado corrió por los pasillo en búsqueda de otra entrada. Los gritos de horror y el golpe metálico del balde contra el suelo hicieron que Severus volteara. Espantado, Prince corrió hacia el rubio, tocando su cuello en búsqueda de pulso, encontrándolo negativo. Sollozó horrorizado. Miró el balde y buscó con la mirada en el techo lo que causó que cayera, encontrando con los muy conocidos lentes de Potter.

- ¿Potter...?- Sollozó con la mirada perdida en el techo, cuando sintió como el odio acumulado surgía desde dentro y brotaba hacia afuera.

- ¿Quejicus?- Indagó Pettigrew al verlo voltear con lentitud y levantarse del suelo.

Severus alzó los brazos, extendiéndolos y demostrando la sangre que lo recorría. Varias gotas empezaron a alzarse... como si la gravedad en su cuerpo se hubiera invertido. Los alumnos, asustados comenzaron a murmurar.

- ¡AHHHHHHHHHHHHHHH!-una fuerza invisible lanzó a todos los alumnos y profesores del salón al suelo con violencia.

- ¡DIOS!- un temblor provocó que Remus cayera al suelo poco antes de que alcanzara la puerta abierta del otro lado del salón.

- ¡NO!- bramó Severus al ver a las personas correr hacia las puertas de salida, bloqueándolas ante ellas- ¡SE VAN A QUEDAR AQUÍ, Y VAN A PAGAR!- ladró furioso. Remus golpeó la puerta, tratando de abrirla, cuando vio que Prince lanzaba otra onda de fuerza y causaba que mucho se golpearan con los muros. Muchos golpearon de lleno contra las puertas.

- ¡¿Hola?! ¡¿Policía?! ¡Hubo una explosión...!- Remus corría a la salida lo más rápido que podía, tratando de que el celular no se le cayera.

- Lloren...- siseó, forzando a dos gemelos a caer al suelo.

- ¡FRED! -lloró el pelirrojo, tomando la mano de su hermano- ¡NO ME PUEDO LEVANTAR!- Severus sonrió, viendo como ambos hermanos, quienes una vez le jodieron la vida eran pisoteados hasta la muerte por la gente presa del pánico.

- Griten...- Vio como una chica abría las gradas plegables que daban a la ventana junto a varios chicos para a sí correr por ellas y huir- Los odio... a todos- Con solo cerrar el puño las gradas se cerraron y los alumnos que quisieron huir fueron aplastados hasta ser exprimidos por las gradas.

- ¡DIOS, NO!- Grindewald lloraba horrorizado, sujetando al Director Dumbledore, muerto sobre sus piernas.

- ¡CORRAN!- gritaba la gente. Severus encendió los grifos anti-incendios del techo, mojando todo y causando que resbalaran y cayeran. El agua expandió la sangre en su cuerpo. Parecía el diablo.

- ¡RÍAN! ¡RÍANSE AHORA! -gritó furioso- ¡¿YA NO ES DIVERTIDO?!- con furia rompió los cables, creando chispasos peligrosos que dieron origen a un incendio- Escapen... Juguen a "QUEJICUS AND YOUR LIFE"- rió dolido- Veamos que tan bien les va...- siseó al ver a unas alumnas sentir como sus vestidos se quemaban, cayendo ardidas al suelo. Quemadas vivas. "Veamos que tan bien les va...".

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