Declaración
Eres tan bonita, tan hermosa
Solo quiero, siempre quiero mirarte
Dejas que el mundo se desvanezca a mí alrededor
No puedo quitar mis ojos de ti
y este brillo de tus ojos
Quiere sacarme el alma [...]
Como una joya, tan clara y limpia
Tu fina luz es todo mi ser
Rammstein Diamant
Rosalía llego luciendo un glamoroso vestido corto plateado con estampado de pedrería con un escote en V no muy atrevido(en comparación con el de Mina) acompañado de unos tacones del mismo color que el vestido y complementada con un único adorno, un collar de hilo de plata del cual colgaba una rosa hecha del mismo metal, tan hábilmente tallada que podías distinguir los pétalos de esta a simple vista, a ultima hora la joven se decidió por este vestido el cual había dejado la noche anterior como un "tal vez", el cambio fue bastante acertado pues varios transeúntes la voltearon a ver (justo es decir que varias chicas la vieron también, mas por envidia o ganas de copiar su atuendo), lo cual siempre fortalecía su autoestima y le influía mucho valor cuando sentía morirse del miedo (cosa que sentía justo en ese momento).
Entro al restaurante con la gracia de una princesa, siguió las instrucciones de Mina, preguntándole al recepcionista por la señorita Blom, el hombre confirmo que Vilhelmina esperaba a una invitada, indicada solo como "Rosalía F." en su itinerario, con un gesto de su mano, uno de los meseros la llevo hasta la mesa de Mina, al verse la una a la otra quedaron impresionadas por el aspecto de la otra, tan absortas estaban admirándose la una a la otra que nunca notaron al mesero retirándose, pasaron unos minutos de silencio hasta que Mina salio de su asombro y se acerco a su joven asistente para susurrarle al oído:
-Estas mas hermosa que de costumbre- Comentario que no solo devolvió a la joven a la realidad, le provoco tal sonroja miento que nadie se explicaba como seguía de pie*, tras unos minutos en los que Mina se esforzó por disimular su risa, ambas mujeres tomaron asiento, empezaron a platicar de trivialidades, al cabo de unos diez minutos apareció un mesero que les ofreció un menú a cada una, con la típica sugerencia de probar los platos del día, ambas rechazaron cortes-mente la sugerencia, alegando que primero querían ver el resto del menú y, si nada del menú les convencía, pedirían alguno de los platos del día, con un movimiento de su cabeza como asentimiento, el mesero se dirigió a atender a los demás comensales, de regreso con nuestra pareja, charlaban y bromeaban como si fueran conocidas que hacia mucho tiempo no se veían, quizás fuera consecuencia del beso de hace unos días, pero ambas mujeres decidieron independientemente de saber la elección de la otra, pedir un plato de pasta fetuccine "al burro"**, acompañado de una guarnición de ensalada Cesar, acompañado de una buena botella de Chardonnay, llamaron al mesero, quien rápidamente llego hasta su mesa, con eficiencia tomo cuidadosa nota de las ordenes de la pareja, y con la misma rapidez que llego, se dirigió a la cocina a entregar sus ordenes, mientras tanto Mina y Rosalía platicaban sobre el porque Mina desapareció después de aquel beso, Ro confeso que para ella el momento fue mágico, pese a que ocurrió en uno de los sitios menos románticos que podrían ocurrirse-le, el momento vaya que lo fue, aun sentía la suavidad de los labios de Mina, la tersura de adolescente de su piel, los nervios que sintió cuando eso paso.
-Escucha Ros, se que tu mente en este momento piensa en mil y un cosas a la vez, pero te aseguro que para mi ese beso también fue mágico, mentiría si te digo que no fue el primero que doy- Mina hablaba casi al borde de las lagrimas
-No puedo creer lo que me dices, eres una gran besadora, confieso que sentí celos sobre quien te habrá enseñado a besar táán bien- contesto Rosalía sin poder creer que ella fuese el primer beso de su adorada Mina - pero veo en tus ojos sinceridad, y debo admitir que también ese fue mi primer beso- Cuando Rosalía acabo de hablar oculto su rostro con sus manos, Mina suavemente aparto las manos de Rosalía de su rostro, y suavemente con el dedo indice de su mano derecha, coloco un mechón rebelde detrás de la oreja izquierda de Rosalía.
-Cuando te vi por primera vez aquel día que buscabas trabajo, me fascino ese cabello tuyo tan rojo- Le dijo Mina a Ros en un susurro en su oído derecho, aprovechando lo cerca que estaban debido a que Rosalía acerco su silla a la de Mina después de confesarse ambas ser su primer beso, de forma que no se veían cara a cara de frente, sino de perfil.
-Pues hablando de cabello, a mi también me fascinaron tus rizos y lo cuidado que lo tienes, ademas, ¿Ese rubio es natural?- tomo la palabra la pelirroja, con su comentario logro sonrojar a su pareja, quien tras unos minutos se le acerco para que pudiera ver sus cejas, pestañas y raices, la joven pelirroja solo pudo gesticular muecas de sorpresa, ante la mirada divertida de la rubia, que aprovecho su estupor para robar un pequeño beso de los suaves y sonrosados labios de la joven.
-Y dime Mina, hermosa ¿Por que tenemos esta cita después de tanto tiempo si al parecer ambas nos gustamos?- Inquirió la chica pelirroja a su rubia acompañante.
-Pues porque quise conocerte mejor, y asegurarme de que no solo me atrajeras físicamente, que no fueras solo un capricho- contesto Mina viéndola a los ojos, en cada palabra; Ro se perdía en los hermosos lagos aguamarina de la rubia, y a su vez Mina casi olvida cada palabra que quiere decir a cada segundo que mira las iris ámbar de su pelirroja amada -Dime ¿Es un crimen lo que hice?- volvió a interrogar Mina, Ro quedo muda, no porque no supiera que responder, sino porque creía que la respuesta era lo mas obvio del mundo -No, claro que no es un crimen, es mas me alegro que lo hiciste, pues yo también dudaba que fuera amor lo que sentía por ti, pero con cada comida que compartíamos, y el tiempo en la oficina conociéndote me fue super obvio que tu Wilhelmina Blum, te robaste mi corazón y en este momento eres su única dueña- Rosalía al pronunciar cada palabra creía que estallaría en lagrimas en el siguiente segundo, por suerte para ella, solo salio una lagrima de cada uno de sus ojos ámbar, pero se esperaron hasta que ella dejo de hablar, para brotar, brillando cual diminutos diamantes recién cortados.
Mina al ver las pequeñas lagrimas las limpio del rostro de su amada con una mano cada lagrima, cuando hizo esto, sus manos en un momento parecían sostener el rostro de Rosalía, Mina decidió seguir una pequeña voz que le susurro "hazlo" y sin pensarlo beso apasionadamente a Rosalía, la cual también envolvió el rostro de la rubia con sus manos, aquel beso no era como el del comedor ni como los de hace unos minutos, era un beso de amor, en su mas bella, pura y correspondida expresión, quienes estaban en las otras mesas lejos de escandalizar, mostrar asco o repulsión ante la escena, aplaudieron como suele hacerse cuando una pareja se compromete en matrimonio.
Justamente estaban separando sus labios cuando apareció a lo lejos su mesero con sus ordenes, detrás de el, el gerente del restaurante ofreció bajar las luces e iluminar cada mesa con la luz de una vela, tan romántico ambiente pareció idóneo para la mayoría de las mujeres presentes, quienes con la mirada suplicaron a sus parejas aceptar el ofrecimiento, Mina y Rosalía fueron las primeras en aceptar, al minuto todas las mesas aceptaron y el ambiente en ese pequeño restaurante se volvió encantadora mente romántico, nunca se enteraron, pero la mayoría de las parejas que las acompañaron esa noche terminaron casándose con el correr de los años, y salvo una, todas esas parejas tuvieron hijos, y envejecieron juntos (la pareja excepción si tuvo hijos pero terminaron separándose).
Olvidando por unos minutos lo ocurrido, la pareja de hermosas mujeres degusto los platillos y la bebida, quizás fuese el amor en el aire, pero ambas notaron que la comida tenia otro sabor, como si la hubieran sazonado con algún "no se que", que hacia su sabor super especial, con la bebida ocurrió lo mismo, bebían aquel Chardonnay como si fuera agua potable, pero no se sentían ebrias, sino mas bien algo indiferentes a lo que ocurría al resto del mundo, solo lo que ocurría en su pequeña burbuja donde comían, bebían y charlaban parecía tener color, sonido, aroma, pero cada sensación era tan increíblemente real, tan... completa, que no había palabras para describirla, les tomo cerca de cuarenta minutos comer, pues entre bocados, se contaban anécdotas de su infancia, lo que les hacia reír justamente, como niñas, un ruido llamo la atención de todos quienes comían, una voz de hombre se escuchaba a través de un micrófono, la voz invitaba a las parejas presentes a ocupar la pista de baile, la cual solo era el espacio vació en medio del salón (dicho espacio era bastante amplio sin dudas); Mina se puso de pie, ofreció a Rosalía su mano invitándola a bailar, la joven no se lo pensó dos veces y tomo la mano de su pareja y también ocuparon la pista, unos minutos después, parecieron al fondo del salón algunos meseros con instrumentos de viento (trompeta, saxofón), algunos de cuerda (guitarra, bajo), y un sencillo pedestal con un micrófono, el cual fue tomado por otro de los meseros, el cual con una señal hizo que la improvisada banda comenzara a tocar, la primer tonada de la noche fue "Can't take my eyes off you" todas las parejas bailaron abrazadas, nuestra pareja de féminas hizo lo mismo, pero en cuanto el ritmo de la canción cambio a algo mas enérgico, las parejas en la pista no se hicieron rogar y "pulieron la pista" con sus pasos. Al finalizar la canción todas las parejas tomaron asiento, los meseros aun en servicio recorrieron las mesas preguntando si se apetecía mas comida o bebida, también aceptaban peticiones para la banda, Mina hizo lo ultimo, pidió discretamente al mesero una canción, cuando Rosalía le pregunto, la rubia solo sonrió -Ya lo veras, mi niña hermosa- Fue lo único que dijo.
Aproximadamente diez minutos después, los meseros dejaron la pista, el micrófono volvió a sonar
-La siguiente canción es una melodía muy especial para una dama muy especial, ¡Demos le un aplauso a Rosalía!- Anuncio el cantante a través del micrófono. El publico aplaudió con alegría a las dos chicas que se pusieron de pie, una de ellas, nuestra joven, que estaba totalmente intrigada, al igual que la otra joven de pie, en un segundo uno de los guitarristas hizo una seña, y la música empezó, con lagrimas en los ojos ambas mujeres reconocieron la canción "Te amare" del español Miguel Bosé, durante toda la canción ambas mujeres besaron con pasión y ternura a a sus parejas, tras esa siguieron otras peticiones, varias canciones interpretadas por cantantes de habla española, algunos clásicos en ingles, nada muy difícil, tras una veintena de canciones e igual numero de bailes nuestra enamorada pareja se retiro, Mina pago la cuenta y salieron tomadas de la mano, al ver la hora en su teléfono Rosa se sorprendió al ver que pasaba de las ocho de la noche, dado que la cita empezó a eso de las cuatro de la tarde, "el tiempo vuela cuando estas con la persona que amas" recordó Ro que solía decirle su madre cuando era pequeña, camino tomada de la mano de Mina hasta el auto de la rubia, quien no acepto negativas para llevar a su joven asistente hasta su casa, el trayecto les pareció muy corto puesto que volvieron a conocerse aun mas, a Mina al parecer, por su país de origen , le gusta mucho "el señor de los anillos" tanto los libros como las películas, a la pelirroja también le gusta esa saga de películas, pero al parecer jamas entendió toda la trama, en lo mejor de su conversación llegaron a su destino, el departamento de Rosalía, Mina la ayudo a bajarse del automóvil y le llevo hasta su puerta, la pelirroja estaba sacando sus llaves cuando se volteo a verla a los ojos
- Por cierto, ¿que paso en ese asunto tan urgente por el que te llamaron?- Le pregunto viéndola fijamente a los ojos
-¿Te parece si te lo cuento adentro de tu departamento?- pregunto y al mismo tiempo sugirió la rubia.
En ese momento la pelirroja abrió la cerradura de la puerta y entraron...
Notas
*el enrojecimiento de cara o cuello se debe al incremento del flujo sanguíneo en el área (cara, cuello, etc) un sonroja-miento intenso demasiado repentino puede provocar desmayos en quien lo padece, pues un gran porcentaje de sangre se concentra en un solo lugar, dejando al resto del cuerpo sin sustento
** En Estados Unidos suele llamarse fetuccine "Alfredo" gracias a una curiosa anécdota de una pareja de estrellas de Holliwood, que probaron el platillo en su luna de miel por Europa, quedando enamorados por el sabor único del platillo
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