Después del susto que llevaron en casa de Seok Jin comenzaron a tomar muchas más precauciones con la salud de Yeonjun, limitando algunas cosas. ㅡNo podemos llevarlo, hace demasiado frío afuera, será mejor que se quede contigo. ¿Puedes cuidar de ByulByul, Yeonye?ㅡ Se dirigió a su hijo. Hoseok tenía planeado cambiarse el color de su cabello antes de Navidad, y aprovecharía que Yoongi y Namjoon saldrían para hacerlo. En sus brazos sostenía al azabache menor que asentía.

Sus ojitos similares a dos avellanas veían por la ventana, había mucha nieve que caía del cielo, más temprano había salido y la había tocado, gritando por la extraña sensación, también ganó risas por parte de los adolescentes, pero le dijeron que eso era malo si no tenía guantes para cuidarse. Ahora, estaba con un pijama que lo hacía ver muy gracioso, similar a una pelota, además debía cuidar cómo un buen doctor a su enferma abuela.

ㅡEs tú misión botoncito, ¡Como un súper doctor!ㅡ Exclamó Yoongi, dándole pequeñas cosquillas por el cuello que el menor trataba de evitar junto a sus risas chillonasㅡTraeremos dulces para ti, muchos chocolates si te portas bienㅡ

ㅡYa~ váyanse, no quiero que una tormenta los alcance. Cuando vengan tendré preparado una deliciosa cocoa. Estoy segura de que a Yeonie le encantará ayudarme, ¿Verdad cielo?ㅡ

ㅡ¡Sí!ㅡ Afirmó con entusiasmo, pidiendo ser cargado con sus pequeñas manos cuando Hoseok lo dejó en el suelo.ㅡAdioos~ㅡ Movió su manito, haciendo reír a sus mayores que se retiraron, no sin antes dejar un sonoro beso en la mejilla del pequeño.

ㅡVamos a hacer cocoa bebéㅡ

ㅡJuetes, adiba adiba.ㅡ La castaña llevó sus ojos a las escaleras, no muy segura de dejar que el pequeño las subiera solo.

ㅡTe llevaré arriba y cuándo ya tengas tus juguetes me vas a llamar para bajarte.ㅡ YeonJun aceptó, siendo llevado a la habitación dónde estaban todas sus cosas.ㅡYa regreso. No te acerques a las escaleras Yeonye, por favor.ㅡ

Con una mirada más a la puerta, volteó, encontrándose con los crayones que le había regalado Namjoon y a un lado, estaba un cuaderno, pero él veía más grande y bonita la pared. ¡Les haría un arcoíris para que sean felices! No le gustaba el feo blanco todos los días, aunque la nieve fuera divertida, era mala.

Eligió la pared que veía más cerca, la que estaba al lado del balcón, y con los colores sin orden alguno, empezó a hacer líneas y muchos círculos con más líneas raras (era su familia, según su pequeña imaginación). Estornudó cuando el frío entró por su naricita, y notó como las cortinas de ositos se movían, además de que la luz era más clara. ¡La puerta del balcón estaba abierta!, ahora podía hacer más dibujitos en la pared de afuera. Tomó los que sus manitos le permitían, junto a Tata, saliendo con un gran escalofrío, concentrándose en las ardillas que comían de una bellota en la rama del árbol al frente suyo.

ㅡDilla, dilla~ ¡Hola dilla!ㅡ Gritó, asustando al animal. ㅡOhhu, adilla fueㅡ Formó un mohín con sus labios, llevando toda su atención a las barandillas dónde cabía su cabeza.

"ㅡTu pequeña cabeza de pelota puede atorarse Yeonie, no la puedes meter, es peligrosoㅡ"

Pero sus padres no estaban, y ByulByul no podría verlo, después saldría y la llamaría, como un niño bueno y obediente.

En una pequeña taza con una cómica cara de un conejillo, depósito pequeños mashmallows de colores, sabía que a su nieto le gustaba atraparlos cuándo la cocoa estaba a una temperatura que él podía tomar sin quemarse. Lo dejó frente a la silla que antes era de Yoongi, bastante extrañada de porque Yeonjun aún no la llamaba para bajar.

ㅡSeguro se entretuvo jugando.ㅡ Dedujo, e iba a tomar otra taza cuando el grito del pequeño la sobresaltó, importándole poco la taza la deja que dejó caer mientras corría en dirección a la habitación, donde esperaba que Yeonjun se encontara jugando.