Hibiki Kanzaki solo estaba a 100 yardas de la estación de televisión cuando su holo-disfraz comenzó a hacer sonidos, indicando que el tiempo ya se había acabado. Con ambas conspiraciones persiguiéndolo, fue la peor cosa que pudo experimentar Hibiki en toda su corta vida. 

- ¡Maldición, ¿Y ahora qué hago?! -

 Hibiki no esperó más y  salió de su escondite para dar la cara frente a sus problemas. Comenzó a sacar su videocámara el cual ayudará a exponer a la UNR y limpiar su nombre, pero...

- ¡Genial, no hay nadie aquí! ¡Espero que nadie me encuentre! - dice confiado Hibiki - Pero... ¿¡Cómo voy a llegar cuando ellos están fuera y quieren atraparme!? y Zara, ¿¡Acaso ella pudo escapar!? -

Mientras tanto, en la estación de televisión...

Los oficiales de Policía lograron capturar a Zara y la pusieron bajo arresto, y ahora los guardias tenían pensado llevarla a una estación de policía para confinarla en una celda provisional.

- Señor, hemos capturado a Zara, pero no hay rastros del paradero de Hibiki Kanzaki. Pero afortunadamente tenemos a un hombre buscando en el área asignada. -

- ¡Entendido! Estamos enviando ayuda para la búsqueda. -

- Hazlo, Hibiki... o nosotros moriremos. - piensa Zara mientras es llevada presa.

- Bueno, no hay camino que no pueda recorrer con todas estas personas guardando la vista. Me dan ganas de salir a la calle y buscar a alguien por aquí. - habla uno de los oficiales con otro oficial.

- Bien, me tengo qué ir. ¡Hasta Mañana Akemi! - se despide éste.

En ese momento, llega Hibiki Kanzaki, quien se tuvo que esconder y hacerse pasar por alguien invisible para evitar ser detectado.

- Tal vez la oficina de este edificio esté en la siguiente puerta. - piensa Hibiki, mientras seguía escondiéndose y se mete a una puerta en un cuarto donde no hay nadie. Inmediatamente checa su dispositivo del holo-disfraz - Todo lo que necesito es una nueva batería. -

Hibiki activa el holo-disfraz y se vuelve a convertir en mujer. Una vez que tomó esa forma, Hibiki fue hacia la entrada principal de la estación de la S.N.N. para saludar a los empleados de la misma.

- Oye linda... ¿estás sola o acompañada? - sorprende un señor con bigote a Hibiki sin darse cuenta de su verdadera identidad - Escucha, probablemente pienses que esto es una línea... pero me recuerdas a alguien. Y con esto te digo que podemos escribir un capítulo muy hermoso en nuestras vidas. - 

- Uhm, tal vez... tendrías que conocer a alguien. - responde Hibiki con una simulada voz femenina.

- ¿Así que me das tu número telefónico? -

- ¡Bien, Ehm, es 988-0921! -

- Espera un minuto, lo escribiré en una hoja. -

- ¡Aquí Estás! - señala otro señor, con lentes - ¿Qué negocios tienes en la estación de T.V.? - 

- ¡¿Qué pasa contigo? Estoy hablando con ella, Experto! - le replica el señor que hablaba con Hibiki.

- Cállate y déjala hablar. -

- Vengo a ver... a mi novio, él quería verme para conocerlo después del trabajo. - responde Hibiki a la pregunta del señor de lentes.

- Bien, puedes pasar. -

Hibiki se había quedado sorprendido, ya que los dos señores no pudieron reconocer a quien estaba detrás del disfraz, pues el mismo sintió un verdadero alivio. 

- ¡RAYOS! ¡Creí que nunca escaparía de esta! - pensó Hibiki - Pero al menos, la tensión se acabó por ahora... -

Hibiki, aún con su holo-disfraz, entra a las oficinas de la S.N.N.

- ¿Puedo ayudarla, señorita? - pregunta la chica que atendía a los clientes.

-¡Maldición! La policía en todo el lugar y no puedo decirle con ellos alrededor - decía Hibiki en su mente, después continúa - Uh... estoy aquí para ver al señor Anzano. Tengo un paquete para él. -

- ¿Y de quién es la llamada? -

- Akemi Kanzaki. -

- Señor Anzano, una chica llamada Akemi Kanzaki está aquí. Ella dice que tiene un paquete para usted. -

- Oigo a los militares así que no soy tonto con un decodificador. - interrumpe uno de los agentes que estaba en el lugar, intentando reconocer a Hibiki.

- No parece estar usando un disfraz. - replica otro agente, quien tuvo a Hibiki - ¿Por qué estás aquí señorita?, ¿Estás relacionada con Hibiki Kanzaki? -

- No, no tengo un hermano... - responde Hibiki - pero uhm... mi negocio con el Señor Anzano es un poco personal. -

- Akemi, es por aquí. - responde el gerente, quien llamó a Hibiki a venir con él. Hibiki inmediatamente acude al llamado de Anzano (es decir, el gerente) y éste último se convierte en guía.

- ¿Estás trayéndome algo relacionado con Hibiki, querida chica? - pregunta Anzano.

- Yo soy Hibiki, jefe. Esto es un disfraz. -

- Lo sabía; de hecho, tengo una misión para ti, chico. -

- ¡Si, mostrarle al Mundo quiénes están detrás de las FLT! -

- Bien, hablemos en mi oficina. -

Hibiki y el gerente Anzano comienzan a sacar el vídeo para reproducirlo y ver el contenido que el mismo exhibe. En el video que se estaba reproduciendo, se encontraban las personas que fueron a la reunión secreta de las FLT. Ahí mismo, también se estaba mostrando cómo el líder de la reunión hablaba del plan de cómo eliminar a Hibiki Kanzaki y de las malévolas intenciones de las FLT de fomentar la inestabilidad en el Mundo y dejarlo indefenso en caso de una nueva invasión extraterrestre. 

- Todo esto es muy interesante Hibiki, pero no estoy seguro de que podamos usarlo. - contesta el gerente Anzano al reaccionar frente al contenido.

- ¿QUÉ? -

- Debes saber que la ley fue promulgada tras el indecente de Ishtar. Algún medio retiene la salida de información vital de seguridad. La Tierra pende de un hilo. -

- ¿Por qué retienen esa información? - cuestiona Hibiki - Si transmitimos esta cinta, todos sabrán quiénes son; y mi nombre y el de Silvie se limpiarán. -

- Entiendo, pero el hecho de que mandaste la evidencia hasta aquí en vez de avisar a la policía implica retener la información. - responde el gerente - Avisaré a la policía al respecto. -

- ¡Bien, pero déjame hacer algo para arreglarlo! -

- Todo bien. Vamos abajo a editar y a realizar algunas copias que estén bien hechas. -

- Gracias, Jefe. - responde Hibiki, quien activa nuevamente el holo-disfraz, esta vez para parecerse un hombre metalero con barba y cola de caballo en la cabeza - Pero esta vez tendrá que ser un hombre disfrazado. Nadie se dará cuenta de lo que voy a hacer. -

Hibiki sale de la oficina de su jefe (nuevamente disfrazado aunque con otro disfraz) para ocultarse de potenciales perseguidores. Mientras tanto, un joven empleado de la S.N.N., un muchacho llamado Sam, va hacia donde Anzano para hablar con él.

- Señor Anzano - saluda Sam - ¿Quién fue el que acaba de estar ahora, el chico que salió de tu oficina? -

- No te preocupes Sam, no es de tu incumbencia. - responde Anzano.

- Ahm, bien... lo siento señor. Eso acaba de pasar... con toda la policía aquí, fui preguntando si ellos sabían de Hibiki. -

- No me preocuparía por Hibiki, estoy seguro que él está aquí. -

- Muy bien, gracias. -

Sam se dirige hacia la puerta 12, donde esperaba reunirse con Hibiki, que aún estaba disfrazado... Lo que Hibiki no sabía, es que Sam en realidad era un doble agente que colaboraba con los mismos guardias perseguidores que querían deshacerse de él.

- ¿Hola, hay alguien allí? - pregunta Sam.

- ¡Si, eso es porque las puertas se bloquearon! - responde Hibiki.

-El señor Anzano me preguntó si podría darle un café, Hibiki. - 

- ¿Él le contó a Sam que estábamos aquí? - Hibiki piensa - No puedo creerlo. - comienza a hablar en voz alta, tratando de responder a Sam - No gracias Sam. -

- Lo que sea. -

Sam corre inmediatamente hacia donde estaban sus otros jefes, quienes ya tenían a Hibiki en la mira para atraparlo.

- Él está aquí, esperando. Usa un holo-disfraz. - comunica Sam a sus compañeros guardias.

- ¿Dónde? -

- En la sala 12. -

Los guardias comenzaron a correr hacia donde estaba Hibiki, mientras éste quedó sorprendido al saber que pronto lo delatarían.

- ¿Por qué el señor Anzano le dijo a Sam qué estoy aquí? Eso no es bueno. - pensó Hibiki mientras trataba de buscar otro modelo de holo-disfraz - Algo anda mal, y ya es hora de hacer un cambio. -

- ¡Por Aquí! - los guardias están por llegar a la sala 12, para tratar de detener a Hibiki; sin embargo, se encontrarían con un hombre anciano que resultaría ser otro disfraz del mismo. Mientras seguía en su traje de anciano, Hibiki se escondía para tratar de despistar a sus perseguidores.

- ¡Carajo! - exclama un guardia 

- Ese hombre viejo... - replica otro guardia - ¿Pasamos dónde está él? -

- ¡Se fue! - exclama otro guardia - ¡Se trata de Kanzaki, pero en un disfraz! -

Los guardias seguían corriendo, pero en lugar de encontrar a Kanzaki, se encontraban con otra mujer, la cual burló por completo a los guardias.

- ¡Tontos! - la mujer no resulta ser otra más que otro disfraz del mismísimo Hibiki, quien ahora va al centro de cómputo, donde introduce el achivo con el video.

- Comandante, habla Hibiki Kanzaki. Sé que soy buscado por la policía, pero no estoy listo para entregarme. Por favor, en el vídeo puede apreciarse la sede de las FLT mostrando quiénes son los conspiradores. Estoy esperando que usted no sea uno de ellos y que pueda confiar en usted. Las vida de Silvie y la mía dependen de esto. -

Hibiki vuelve a usar un disfraz de mujer y camina hacia donde está el gerente para informarle el cumplimiento de su misión.

- ¿Puedo ayudarle señorita? - pregunta el gerente Anzano.

- ¡Aw rayos, Sam está aquí! -piensa Hibiki al ver al traidor con él, después vuelve su cabeza y, nuevamente usando una simulada voz femenina, le comunica al jefe - Soy yo, jefe, aquí le traigo una copia de reserva. Necesitamos ponerla al aire. -

El Señor Anzano toma la evidencia de Hibiki y se la muestra a Sam.

- Sam, toma este disco para editar, necesitaremos una copia lista para esta mañana. - ordena Anzano.

- Bien, Señor Anzano. - responde Sam, quien deja la oficina del gerente.

- Jefe, no estoy seguro de Sam. - comunica Hibiki al gerente. 

- No seas paranoica. - le responde.

- No soy paranoica. Ahí estuvieron hombres en el mando, viniendo hacia mí, con pistolas. -

- ¿¡Qué tipo de hombres!? -

Fuera de las oficinas de la estación de la S.N.N., Sam se reúne con su verdadero jefe.

- Me dieron el vídeo. - contacta Sam a su jefe - Lo voy a borrar, mientras tanto vayan a atrapar a Hibiki Kanzaki. Él usa un disfraz femenino y está en la oficina de Anzano. -

- Ya lo tenemos. - responde el jefe de los guardias.

Mientras tanto, en la oficina de Anzano...

- ¡Enserio! - exclama Hibiki a su jefe - ¡Hay muchos asesinos allá afuera queriendo atraparme y tengo que seguir escondiéndome de ellos! Por favor haz que yo esté en un lugar seguro, en donde Sam no tenga que estropear mi seguridad. -

- ¡Vamos Hibiki! - responde el gerente Anzano - Sam ha estado trabajando con nosotros por 2 años, mucho antes de que se diera este incidente de las FLT. -

- ¿Quién sabe cuántos han sido los que han planeando esto? -

Hibiki ve en una de las ventanas a un sicario que comienza a sacar un arma, e inmediatamente Hibiki comienza a correr por los pasillos, se esconde en el baño y se quita el disfraz. Acto seguido, Hibiki manda un mensaje al comandante Exxegran.

Cuartel General de las Fuerzas Armadas Unidas de la Tierra

- Comandante, acaba de recibir un correo urgente. -

- Ponlo ahora. -

Exxegran reconoce a Hibiki, quien se muestra en la pantalla.

- Comandante, habla Hibiki Kanzaki. Sé que la policía me quiere atrapar, pero no estoy listo para entregarme. - continúa - Mire este vídeo que tomé en la sede de las FLT. Te muestra quiénes son los conspiradores. -

Exxegran se dirige inmediatamente a una empleada y se comunica con ella: - ¡Llama a la policía militar! Tenemos algunos arrestos qué hacer. -

Mientras tanto, en uno de los cines más concurridos de la ciudad, se encontraba Silvie Gena, que había sido liberada de su reclusión por orden de Exxegran, y ahora se encuentra disfrutando su libertad viendo uno de los estrenos más esperados del momento. Mientras Silvie mira la película, dos misteriosas mujeres que estaban en ese mismo lugar, se encontraban espiándola.

- Ryuchi, ¡sabes que este es tu hijo! - piensa Silvie mientras ve la película - ¿Cómo puedes negarlo? -

- Por fin la tenemos. - susurra una mujer a otra - Su nombre es Silvie Gena. -

- Debemos mantenerla bajo observación mientras sacamos las empulgueras. -

- Hagámoslo juntas. - una de ellas saca una pequeña navaja y la oculta para que nadie la vea.

- Oh, Sandra... tienes que creerme. - se escucha un diálogo de la película.

Mientras tanto, en la oficina de Anzano...

- ¿Dónde está Hibiki? - pregunta un sicario apuntando con su arma al gerente.

- ¿Pero, quién eres tú? - cuestiona el gerente - Acaso no saben que no pueden pasar a esta oficina sin mi... -

- ¡Buena broma! - replica el sicario - ¡Venimos por Kanzaki! ¿Dónde está? -

- El... ¡Él bajó por el pasillo hace unos minutos! -

- ¡Miren alrededor! ¡Miren los otros pasillos! - habla otro miembro de los sicarios, quien hace que los otros salen a los pasillos y checan por cada lugar, hasta que alguien vio de lejos a Hibiki - ¡Lo vi, síganlo! - inmediatamente todos comienzan a correr para alcanzarlo, mientras Hibiki se pierde entre un pasillo secreto que lo llevaría al centro de grabaciones, donde estaban sus otros compañeros de trabajo.

- ¡Hibiki! ¿Que demonios estas haciendo aquí? Pensé que tenías policías detrás de ti. - comenta uno de los compañeros de trabajo.

- No hay tiempo para preguntas. - responde Hibiki - Quiero que reproduzcas esto. -

- ¿Estas loco? ¡Tenemos programación regular en este momento! -

- Es de vida o muerte. -

- Está bien. -

El compañero toma la evidencia de Hibiki y la comienza a reproducir, pero justo en el momento en el que lo hace, se escucharon disparos que espantaron a varios empleados que comenzaron a refugiarse de las balas.

- ¡Están disparando! - exclama sorprendido uno de los ejecutivos del lugar.

- Suena como si estuvieran atacando el lugar. - replica otro ejecutivo - Huyamos cuanto antes. -

Centro de Ciudad Nueva Macross

Silvie Gena había salido del cine y se fue a la plaza principal para ver el boletín de emergencia. Las dos mujeres que la habían seguido para atacarla, tenían la sus armas listas para darle el golpe, pero justo cuando estaban por atacarla, la pantalla comenzó a exhibir al líder de la reunión de las FLT hablando de sus planes, lo cual dejaría sorprendidas a las dos mujeres, quienes quedaron impactadas por las declaraciones dadas.

Mientras tanto, de regreso a la S.N.N., los sicarios fueron a donde estaba Hibiki, con tal de querer eliminarlo de una vez. Pero ninguno de estos sicarios que simulaban ser guardias  se habían dado cuenta de que una sorpresa les esperaba.

- ¡Estás muerto, Kanzaki! -

- ¡Somos la Policía! ¡Quietos! -

Los sicarios respondieron con un par de disparos, pero los oficiales de policía que estaban defendiendo a los empleados, respondieron dando el tiro de gracia a un par de ellos que cayeron al suelo. Hibiki no se había dado cuenta de que algunos oficiales de policía ya estaban en el lugar defendiendo a los trabajadores.

- Vaya... Nunca creí ser feliz al ver a la policía aquí. - exclamó Hibiki con una sonrisa satisfactoria.

Más tarde...

Hibiki y Silvie regresaron a su vida normal; ésta vez ambos ahora viven en una casa compartida que el comandante Exxegran otorgó, pero ambos no estaban solos, ya que también Zara se ofreció como nueva inquilina.

- Como resultado de la transmisiónno autorizada, las Fuerzas de Liberación de la Tierra y sus líderes han sido arrestados. - comenta una reportera en el noticiero nocturno - El comandante Exxegran hablará al respecto... -

- ¡Tipico! Él tiene toda la gloria del mundo... Mientras yo... - se lamenta Hibiki al ver cómo le "roban" nuevamente el crédito.

- Bien, has salvado al mundo una vez más. - responde Silvie - Eso es lo que realmente importa. -

- Si, y yo todavía sigo esperando un aumento. - responde Hibiki con una pequeña risa.

- Bien Hibiki, creo que ahora te corresponderá un último trabajo. - dice Zara - ¿Te gustaría manejar un Mecha, para seguir pateando los traseros de esos terroristas? -

- ¡Claro! -

En ese mismo momento, Zara ayudará a Hibiki a pilotar Mechas y a pelear en batallas. ¿Qué es lo que le deparará a Hibiki en el futuro?