Mientras Hibiki y Zara son retenidos por los asistentes a la reunión de las FLT, el anfitrión de dicha reunión le hace una oferta a Hibiki, la cual es rechazada por éste último, mientras queda retenido por un par de guardias. 

- Y... tal y como si salieras del mundo de la televisión. Si se difunde tu vídeo, ya no verás la luz del día. - comenta el anfitrión con una sonrisa malvada - Bien, ahora esto es un poco más un escenario conveniente. Conveniente para nosotros, no para ti. - 

- ¿Por qué estás haciendo esto? - cuestiona Hibiki - ¡El Mundo ahora vive en paz! ¡Ahora las cosas son mejores puesto que se exponen las verdades históricas! -

- ¡Mhm! Un mundo de paz es muy aburrido sin una lucha humana que ya de por sí está muy estancada. Ya es hora de que hagamos esclavos para la siguiente raza extraterrestre que tratará de conquistar al mundo. Vamos a hacer una humanidad fuerte. Una vez más, el mejor camino que sabemos para mejorar, es atreves de la fricción. -

- ¿Qué tipo de fricción, guerra entre países? - pregunta Hibiki con más enojo - Las autoridades de la Tierra ya eliminaron las fronteras por hace ya un largo tiempo. -

- ¡Y se las devolveremos, No te preocupes! Pero primero dejemos que los humanos tomen la culpa de todo el problema que causamos. Será el combustible que necesitamos para sembrar el odio otra vez. -

- ¡La gente ignora esto! -

- Suficiente de esta broma. ¡Guardias, llévenselos! -

Zara reacciona inmediatamente y comienza a patear fuertemente a un sujeto que contaba con una pistola, la cual salió volando; Zara pide a Hibiki tomar el arma que aún está en el aire; éste lo agarra, y pone la pistola en la cabeza del anfitrión. Esto hace que otros guardias que cuidaban el lugar sacaran sus rifles también.

- ¡Todo el mundo se queda quieto o éste hombre terminará finado! - amenaza Hibiki a los demás miembros de la reunión, luego dirige su atención a Zara - ¡Vamos a salir de aquí. Nadie nos detendrá! - vuelve a dirigir su atención al público y exclama en un tono de voz alto - ¡Muévanse, tengo un arma cargada! -

- ¡No lograrás escapar, tonto! - exclama el viejo - ¡Atrápenlos! -

- Hibiki, trata de mantenerlos alejados mientras yo abordo uno de los Robots. - ordena Zara a Hibiki, mientras éste retiene al señor.

- ¡Si Hazlo! - responde él.

- ¡Llévatelo Hibiki, y luego ven! - ordena ella mientras se sube al mecha.

- ¡OH OH! - reacciona Hibiki al percatarse de que los guardias comienzan a aproximarse a él con tal de detenerlo, por lo que Hibiki decide patear al jefe para dejarlo ir - ¡Aquí no cabemos los dos, así que te bajas! - 

Hibiki cierra la puerta del taller, corre hacia el mecha y se sube a él como copiloto junto con Zara.

- ¡Fue un buen golpe! - exclama Hibiki

- ¡Sujeta bien la correa! - ordena Zara a Hibiki - ¡Esto será rudo, así que mete esa cinta en el reproductor así como las otras cintas! -

- ¡Muy Bien! - responde él mientras el mecha comienza a ser disparado por los guardias.

- ¡Podemos acabar con esta farsa de una vez! - exclama Zara ¡Hora de decir adiós a los otros mechas! -

- ¡TODOS CORRAN! - gritan los demás miembros, quienes comienzan a correr despavoridos mientras la máquina comienza a disparar repetidamente por todo el lugar.

¡Rápido, alguien envíe al Modelo Omega! - ordena el anfitrión.

- ¿Dónde aprendiste a manejar esta cosa? - pregunta Hibiki.

- Soy una piloto Mecha experimentada. - responde Zara - Fui una miembro de las tropas de reserva. - 

- ¡Grandioso! -

Inmediatamente, una pared comienza a romperse, y resulta ser el mecha que había sido ordenado para detener a Hibiki y Zara.

- ¡No puede ser, Zaxu ha enviado al Modelo Omega para impedir nuestra salida! - exclama Zara.

- Pero, ¿Qué? - duda Hibiki

El Mecha Omega comienza a saltar, provocando un gran estruendo. El Mecha de Zara, al percatarse de sus movimientos, vuela a toda velocidad mientras que el Mecha Omega lo está persiguiendo disparándole.

- ¡El Mecha Omega es sólo un prototipo! - comunica Zara - ¡Este es superior al que hemos robado! Nuestra única esperanza es evadirlo durante el tiempo suficiente para que las fuerzas armadas de la Tierra vengan por nosotros. -

- Interesante. - responde Hibiki.

- ¡Ríndete Zara! - exclama Zanta, una piloto que encargaba de pilotar el mecha enemigo - ¡No quiero matarte! -

- Estoy sorprendida, Zanta. - responde Zara - Pero si no me atrapas, los otros lo harán... -

En ese momento, los dos Mechas sale volando de manera repentina y muy rápida a través de la ciudad. El mecha de Zanta lanza misiles que se disparan en medio del tránsito, con el objetivo de impactar contra el Mecha de Zara. Mientras la persecución duraba, los Mechas seguían lanzandose más misiles provocándose explosiones múltiples.

- ¡Maldición, ella está tratando de inhabilitarnos! - dice Zara mientras ve al mecha enemigo seguirla.

- ¿Quién es ella? - pregunta Hibiki. 

- Una vieja amiga. - responde Zara. - ¡Ahora sujétate! - 

El mecha de Zara comienza a volar a alta velocidad hacia el cielo, con tal de hacer perder el rastro al mecha enemigo. 

- Zara, escucha: Hay una garantía para tu arresto. - ordena Zanta - Nuestros agentes te van a reportar con la policía, y no tendrás posibilidad de escapar tan pronto seas arrestada. Esta vez no podrás ganar. - 

- ¡Esto no puede ser bueno! - exclama Zara, quien hace a su mecha dar la media vuelta y comienza a disparar en dirección hacia su enemiga, rafagueando una serie de misiles que logran impactar el mecha de Zanta, el cual se hace pedazos y cae al suelo.

- ¡Sayonara! - despide Zara a su antigua amiga Zanta entre lágrimas de impotencia y desesperación - ¡¿Por qué tenías que ser tú?! -

- Um, creí que tuvimos una oportunidad contra ella. - cuestiona Hibiki con algo de preocupación.

- Ella dejó sus sentimientos empañados por su actuación. - contesta Zara - No podemos cometer el mismo error.  ¡Aquí vienen las Valquirias! ¡Enciende el Modo Sigilo! - el mecha de Zara comienza a volar en una dirección donde los cazas de las fuerzas armadas no los descubrieran.

Mientras tanto, en el Cuartel General de las Fuerzas Armadas de la Tierra...

Silvie Gena es escoltada por un par de guardias, quienes la acompañan en su visita al Comandante Exxegran, para informarle sobre las novedades acerca de los movimientos de las FLT.

- Gracias por venir, comandante Exxegran. - saluda Silvie.

- No hay problema, Silvie. - contesta Exxegran - Podemos hablar ahora que estamos solo nosotros en este lugar. Hay un asunto de extrema urgencia y se trata de tu novio. Hibiki ha estado muy ocupado. Tenemos un reporte de un Mecha de batalla, en el sector 19. Nuestra policía descubrió el paradero del Mecha en medio de la ruta 97. Las siguientes pistas nos llevaron a un precipitado y abandonado escondite de las FLT, que fue el escenario de una reciente batalla. -

- ¿Qué tiene que ver esto con Hibiki? -

- Siguieron los localizadores de su cámara compacta y su tarjeta de crédito hasta la base de las FLT. La policía cree que su prueba fue elaborada por ellos. -

- ¿Pero qué hay de Hibiki?, ¿Él está bien? -

- Creo que es posible que él haya sido retenido por las FLT, pero que escapó en uno de nuestros Mechas. Él debió ser acompañado por un piloto experto. -

- ¿Cuál es el mecha que siguieron en la autopista? -

- Una mujer no identificada. - responde Exxegran - Ella sigue viva, pero inconsciente y en una condición crítica. La tenemos bajo resguardo en el hospital quién siempre supo lo que ellos estuvieron haciendo. Ellos salieron antes de nuestros cazas llegaran, y no hemos sido capaces de descubrir donde estuvieron. -

Mientras tanto, en el basurero de la ciudad...

- Gran idea para esconder el Mecha en este lugar, pero: ¿No crees que necesitemos más cubiertas? - pregunta Hibiki

- Es lo mejor que puedo hacer. - responde Zara - A no ser que puedas levantar carros. 

- Buen punto, ¿y qué más? -

-Obviamente, debemos llevar esto a tus superiores. -

- Si, pero estamos siendo buscados por las autoridades que estarán viendo la estación de televisión. ¡Y sabes MUY bien que las FLT también quiere! -

- Bien. Ahora, usa ese holo-disfraz. ¿Puedes ser más discreto? -

- Si, pero si solo puedo actuar como una buena persona. -

- No importa que ellos estén viéndote como un hombre o una mujer. Tu cara es más famosa que la mía. Tan solo usa este disfraz. -

- ¿Usarlo para qué? -

- Para que te vean como una mujer. - responde Zara - Dos mujeres no llaman la atención. -

- Bien. No es una idea loca, sino todo lo contrario, es una buena idea. - comenta Hibiki - Así que... ¡Cambio! -

El holo-disfraz de Hibiki se activa, y esto hace que Hibiki se transforme en una hermosa mujer.

- ¡Luces muy bien! - contesta Zara algo sonrojada.

- ¡No permitiré que me toquen! - responde Hibiki al mostrarse en su holo-disfraz de mujer.

Mientras tanto, en el Cuartel General de las Fuerzas Armadas de la Tierra...

- Silvie Gena. - exclama el vigilante.

- ¡¿Qué quieres?! -

- Tu novio es un hombre buscado. La policía le rastreo su evidencia a la sede de las FLT. Pero antes de él hubo otros también, y puedes apostar que él no vivirá si quiere verte otra vez; claro,  si es que él llega. -

- ¡¿Quién eres tú?! ¡Cómo te atreves a venir a hablarme así! Les diré a tus superiores lo que me contaste. -

- Oh, mi jefe sabe todo acerca de esto. Me ordenaron que yo viniera aquí para animarte. Por como van las cosas, tu compañera de celda volverá esta noche, pues está interesada en como intenta sobrevivir. -

- ¿Te preocupas por ella, cuando tu prioridad es apoyarme? -

- ¡Ja Ja Ja! Te estaremos vigilando. Oh si... vigilando. - el guardia se aleja de la celda donde se encuentra Silvie, mientras esta última espera ser liberada.

Centro de Ciudad Nueva Macross

Mientras tanto, en el mero centro de la ciudad, Hibiki y Zara, quienes estaban en sus respectivos holo-disfraces, caminan por la ciudad y entre la multitud, con la esperanza de no ser encontrados por nadie. El crepúsculo y las nubes de tormenta se están juntando.

- Parece que va a llover. - comenta Zara - Eso podría ayudarnos, mientras las personas comienzan a irse. -

- Bueno. Pero nos estamos acercando a la estación, de todos modos. - señala Hibiki - Solo quedan un par de cuadras por ese camino. -

Inmediatamente, la pantalla panorámica comienza a mostrar un mensaje de "SE BUSCA", donde señalan a Hibiki Kanzaki y a Zara como delincuentes acusados de terrorismo, asesinatos y robos a mano armada.

- Creo que nos hemos convertido en celebridades... de la peor manera posible. - dice Hibiki con mucha preocupación.

- ¡Diablos! - responde Zara.

- ¡Mamá, Papá, ahí están los terroristas! - un niño señala con su dedo a Zara, quien se escondía en una capa.

- No corras, pero muévete rápido. - dice Zara a Hibiki - Tenemos que salir de aquí. -

- ¡Esa es la terrorista! - grita el padre del niño señalando también a Zara - ¡Alguien llame a las autoridades! -

- ¡Rápido! ¡Corre! - 

- ¡Habla 763! - comunica uno de los agentes que estaba en el lugar - ¡Tenemos un avistamiento en el Sector K, calle 90! -

- Tendremos que dividirnos. - exclama Zara - Hibiki, ve a la estación.

- De acuerdo. -

Zara y Hibiki tomaron caminos separados. Hibiki fue a donde estaba la estación, mientras que Zara, sabiendo que su cruel destino le iba a llegar, se esperó a que llegara el resto de la policía para que éstos la detuvieran.

En un lugar cercano a la estación de televisión...

- Bien, no parece que alguien me persiga. - piensa Hibiki - Y la estación está justo en frente de la esquina. -

Inmediatamente, el temporizador del holo-disfraz de Hibiki comienza a timbrar, indicación de que casi se acaba el tiempo.

- ¡Maldición, tiene que ser una broma! -

Hibiki se mete a un baño público y se encierra en una de las puertas, para poder ocultar su verdadera identidad, la cual estaba por ser mostrada. Entonces se toma un tiempo para poder volver a usar su holo-disfraz, lo cual le daría ventaja en su trayectoria hacia la estación de televisión. Ésta vez, ya no hay nadie en quién Hibiki puede confiar. ¿Qué pasará ahora en estos momentos? ¿Recibirá Hibiki la mayor sorpresa de su vida? ¿Cuándo llegará el día en que Silvie será liberada? ¿Será Zara un riesgo para la sociedad?