Capítulo 22.- El Secreto de Polaris
Ya en la zona donde se encuentra el núcleo, Heidi y Claudia se apresuran para ya poder desactivar las protecciones que lo aseguraban. La meta era sencilla: apoderarse del núcleo y del puente de mando para poder cerrar el acceso a los haydonitas. Cabe mencionar también que el núcleo posee una altísima cantidad de Matriz de Protocultura.
- Bien, ya estamos aquí. - dice Claudia - ¿Y ahora qué hacemos? -
- Fácil: tú desactiva el núcleo. - contesta Heidi, quien continúa: - Pero para poder desactivar el núcleo, tienes que poner estos poderosos trajes de protección y desactivar los enchufes. Te servirán demasiado. -
Acto seguido, Claudia se pone el traje, y gracias a éste, caminó cuidadosamente hacia los enchufes, con el fin de desactivarlos y así desactivar el núcleo.
- Misión cumplida. - responde Claudia - Ahora, necesitamos ir hacia el puente de control. -
- Tranquila camarada, para esto estoy yo. - exclama Heidi, quien inmediatamente se dirige a la donde se encuentra el codificador del puente, pone la clave, y acto seguido, se empieza a abrir el puente de mando. Ya dentro del puente de control, Heidi utiliza un sintetizador para simular voces y, usando sus capacidades, simuló una voz haydonita con la que permitió lanzar el siguiente aviso a todos los demás haydonitas que se encontraban en la nave:
- ¡ATENCIÓN! ¡ATENCIÓN! ¡A TODOS LOS MIEMBROS DE LA NAVE, FAVOR DE DESALOJARLA LO MÁS PRONTO POSIBLE! ¡ESTO NO ES UN SIMULACRO, REPITO, ESTO NO ES UN SIMULACRO! ¡DENTRO DE UNOS MINUTOS, LA NAVE PRONTO ESTALLARÁ, REPITO, LA NAVE PRONTO ESTALLARÁ! -
Los haydonitas, al escuchar esta voz simulada, haciéndola creer que se trataba de una de los suyos, empezaron a escapar inmediatamente de la nave capturada. Por otro lado, Claudia Baker empezó a bajar de la nave, por un atajo similar a un tobogán, y con una caja llena de armas y planos haydonitas entre sus manos. Una vez que cayó de tajo de la nave, vio el vacío del espacio y, creyendo que llegaría su fin, ésta terminó siendo salvada por Wally Landry, quien se encontraba a bordo de una nave carguera.
- Saludos. - dice Wally - ¿Se puede registrar, por favor? -
- Habla la oficial Claudia Baker. -
- Oficial Baker, la felicito por lograr desactivar núcleo a tiempo. - dice Wally.
- Oficial Landry... - dice Claudia - No tenemos mucho tiempo, los haydonitas se están empezando a escapar y van a creer que el Polaris va a estallar. Haga algo. -
- Tranquila. Nosotros nos vamos a encargar de esto. -
En pocos segundos, Wally empieza a contactar con los capitanes de las demás naves cargueras, las cuales, mediante efectos especiales, empezaron a reproducir una réplica 100% exacta del Polaris Graveyard. Los haydonitas que apenas vieron esta reproducción perfecta de la nave, vieron cómo la réplica empezó a estallar en llamas y casi de inmediato explotó, haciendo que los pocos haydonitas que quedaban en el lugar desaparecieron fulminantemente.
- ¡Se fueron, las flotas haydonitas se fueron! - exclamó uno de los tirolianos pertenecientes a la flota del general Phillips.
- ¡Lo hicimos! ¡Volvimos a ganar! - exclamó otro soldado que se encontraba entre las unidades de la comandante Satori.
Todas las demás flotas pertenecientes a la REF se enteraron paulatinamente de la huida de los haydonitas, por lo que empezaron a contactar inmediatamente a los almirantes Rick Hunter, Max Sterling y Vince Grant de la toma del Polaris Graveyard y de los rastros de la Matriz de Protocultura y algunas armas y mapas haydonitas. El Polaris original, que se había mostrado invisible durante la supuesta explosión de la réplica, poco a poco empezó a mostrarse frente a los ojos de todos los demás presentes. Inmediatamente escucha un mensaje de Heidi: - Saludos a todos los integrantes de la Fuerza Epedicionaria Robotech, hemos capturado la nave insignia haydonita conocida como Polaris Graveyard. Si se preguntan por el núcleo, pues éste ha sido desactivado por la oficial Claudia Baker, quien además recolectó información suficiente sobre la nave. -
- Saludos, habla el capitán Vince Grant; la felicito a usted y a su unidad por lograr semejante trabajo. -
- Así es; no fue nada fácil, pero valió la pena. - respondió Heidi.
Mientras tanto, dentro del Ark Angel, se encontraba Scott Bernard repasando a todos los supervivientes de aquella heroica acción. Momentos después, se encontró con Claudia, a la que vio con la caja que contenía los planos y las armas.
- Señorita, solicito que se registre inmediatamente. - contesta Scott.
- Saludos, comandante Bernard. Soy la oficial Claudia Baker. Me reporto aquí con la novedad de que el núcleo fue desactivado; y además, traigo conmigo una evidencia que nos servirá. -
Scott toma la caja, utiliza los guantes especiales para abrirla, y al ver por un par de segundos un objeto brillante, el cual resulta ser una matriz de protocultura, cierra la caja y la toma con sus mismas manos.
- Suficiente. Esta matriz contiene una energía que nunca ví. No quisiera ser fuerte contigo, pero esta evidencia se la tengo que mostrar al doctor Nichols. -
Una vez que Scott dejó el lugar, se topó con Marcus Rush, Roy Hunter y Lancer Belmont, quienes prácticamente se veían agotados, pero con sonrisas en sus rostros.
- ¿Alguna novedad? - pregunta Scott a los demás.
- Afirmativo. - responde Lancer - Se puede decir que el joven Wally Landry nos contactó a mí y a Sera para que pudiéramos hacer una serie de efectos especiales para hacerles creer a los enemigos que la nave que capturamos se estaba explotando. - después se ríe y continúa - Fue completamente efectivo y nos sirvió de mucha ayuda. -
Scott empieza a ver directamente a Roy, que al parecer luce un aspecto algo triste.
- Oye Roy, ¿Y por qué no estás de humor? -
- Es por Mylene - responde Roy - Resultó herida de gravedad y se encuentra delicada de salud. Lo que pasa es que... -
Marcus interrumpe a Roy diciendo: - Lo que pasa es que los enemigos dieron disparos en cada pierna, y por eso se encuentra ahora en cuidados médicos. Mi esposa, Maia, es la hermana de Mylene, y por eso la está cuidando junto con la doctora Jean Grant, para que se mejore. - después, Marcus se dirige a Roy y lo anima diciendo: - No te preocupes, amigo. Ella va a estar bien. Ya verás que a los pocos días se repondrá. -
- Muchas gracias, Marcus. - responde Roy con una sonrisa que apenas se nota.
Roy se aleja de Scott y los demás y se va directamente hacia el otro pasillo donde, de manera inesperada, se encuentra con su viejo amigo Drannin.
- Drannin, amigo, qué gusto verte de nuevo. - dice Roy entusiasmado.
- Igualmente, viejo camarada. - responde Drannin abrazando fuertemente a Roy, casi asfixiándolo.
- Oye, ¿Podrías soltarme? Es que no puedo res... pi... rar. - contesta Roy, el cual es inmediatamente soltado por Drannin.
- Oh, ¡vaya! - exclama Drannin con preocupación al ver a su amigo con un aspecto pálido - En serio, sí que te dejé casi sin oxígeno. ¿Podrías aceptar mi disculpa? -
- Claro, para esto están los amigos. - responde Roy - ¿Y a ti como te va? -
- Pues al parecer tengo la novedad de que derribé a cinco cazas haydonitas, mientras tú y tus amigas iban a desactivar el núcleo del Polaris. - contesta Drannin y continúa: - Y hablando del Rey de Roma... ¿Qué me cuentas tú? -
- No pues... Resulta que Mylene, tu ya sabes quién, pues resultó herida por dos disparos del enemigo, y ahora está delicada. - responde Roy nuevamente con el rostro lleno de tristeza. Drannin, al ver a su amigo así, contesta: - Vamos amigo, este no es momento de estar lamentando; mientras ella siga con vida, todo saldrá bien. -
Acto seguido, Roy y Drannin van hacia un puesto de snacks, en donde ambos se alimentan de un refrigerio, mientras esperan nuevas noticias con respecto a futuros entrenamientos o simulacros, ya que los militares no pueden estar todo el tiempo sin hacer nada. Por otro lado, ya en el laboratorio principal del Ark Angel, se encontraban Scott Bernard y Lancer Belmont con la caja que contenía la Matriz de Protocultura, el cual estaba por entregarse al doctor Nichols.
- Saludos, comandante Bernard, comandante Belmont. - exclama Louie.
- Muchas gracias, doctor. Tenemos aquí la evidencia de una Matriz de Protocultura que fue encontrado por una oficial dentro de la nave Polaris. - dice Scott.
- Según tengo entendido, existen rumores acerca de la posibilidad de que en este objeto se encuentran rastros de Protocultura. - dice Lancer.
- ¡Wow! ¡Una Matriz de Protocultura! ¡Esto es sorprendente! - contesta Louie sorprendido. - Tenemos que analizarlo con mucho detalle. -
Después de varios momentos, el doctor Nichols, en compañía de la androide Janice, y del doctor Emil Lang, se encargaron de investigar qué contenía el objeto y qué secretos guardaba éste. Tras cuatro horas de ardua investigación, Janice llegó a la siguiente conclusión: - Ésta Matriz posee enormes cantidades de Protocultura, las suficientes como para garantizar su uso en una duración aproximada de 16 años. -
- Los rumores resultaron ser ciertos. - exclamó el doctor Lang - Seguramente la nave haydonita que hemos capturado posee numerosos secretos, algunos de los cuales no han sido revelados. Es nuestra oportunidad de iniciar exploraciones al interior de la nave para ver qué es lo que está detrás.-
Después de algunos días, se empezaron a hacer investigaciones con respecto al gran poderío secreto que ocultaba la nave. Para hacer el trabajo aún más facil, se tuvieron que recurrir a un grupo formado principalmente de mujeres, de entre las cuales se encontraban Ariel, Sera, Janice y Maia. Entre las cuatro se dispusieron a realizar fuertes inspecciones en cada uno de los rincones de la nave. Al ver todo lo que había adentro del Polaris, se quedaron sorprendidas al encontrar numerosos planos de naves haydonitas que todavía estaban por construirse.
- ¿Estas segura que toda esta información es de los haydonitas? - cuestiona Maia.
- Completamente - responde Ariel.
- Maia, mira este plano. - dice Sera al ver una figura peculiar.
- A ver - dice Maia quien, viendo la evidencia encontrada por Ariel y Sera, empezó a reconocer perfectamente algunos de los diseños mostrados. - No sabía que a los haydonitas les encantaba la música. -
- ¿A qué te refieres tu con música? Explícanos de qué se trata. - cuestiona Ariel con muchas dudas.
- Bueno. Por dónde empiezo... ¿Han oído hablar del incidente de Sharon Apple? - pregunta Maia a todas las demás presentes.
- ¿Sharon Apple? Nunca he oído hablar de esta cosa. - contesta Sera, también con dudas.
- Bueno, les voy a contar un poco de historia... - responde Janice ante las dudas de las princesas invid - Sharon Apple era algo así como una cantante virtual, una especie de inteligencia artificial, que en el año 2040 ocasionó un disturbio en Ciudad Nueva Macross. Lo que casi nadie sabía, era que Sharon fue un producto bélico, un arma que los mismos haydonitas regalaron a una humana especialista en la música, que pronto se convirtió en la representante de la artista virtual. -
- No lo entiendo. Resulta que los haydonitas ya querían eliminarnos desde hace tiempo. - dice Maia ante la acalorada respuesta de Janice.
- Los haydonitas podrán tener lo más avanzado en cuanto a tecnología se refiere, pero mucha de esta tecnología resulta ser perjudicial; solo miren lo que ocasionaron con Optera.- dice Ariel, quien inmediatamente pone su mano en la frente de Maia, transportándola espiritualmente hacia el planeta Optera, ahí Maia vio los horrores que ocasionaron la tecnología usada por los "Hijos de la Sombra".
Después de aquella visión, Maia recopiló todos los planos disponibles para mostrárselos a los almirantes Rick Hunter y Max Sterling, quienes se quedaron sorprendidos por los resultados de las investigaciones, y llegaron a la conclusión de usar los planos para diseñar nuevas y mejores naves, todo con el fin de vencer al poderoso ejército haydonita.
Finalmente, las flotas de la REF llegaron a Eris, un planeta ubicado en los límites del Sistema Solar; en este planeta se estableció una base formada por refugiados de la guerra contra los Maestros de la Robotecnia y de la Invasión Invid; ahí establecieron un espaciopuerto y algunos asentamientos permanentes. Ahí, las diferentes naves de la REF, como el SDF-3, el SDF-4, el SDF-7 y el Ark Angel hicieron parada en su largo viaje en dirección hacia la Tierra. Un preocupado Rick Hunter por la tristeza que afecta a su hijo, Roy Hunter, quien cada día vive con la incertidumbre de saber si Mylene Sterling, la hija más joven del almirante Max Sterling, se ha mejorado o no desde aquél día en que recibió dos disparos en sus piernas de parte de un contingente haydonita.
- Hola padre, hola tío Max. - contesta Roy.
- Hijo... - contesta Rick - ¿Podrías venir un rato conmigo? -
- Claro. - responde Roy - ¿Que es lo que me querías decir? -
- Mira, últimamente te he visto pensativo... - dice Rick - Es por lo de la hija de Max de cabello rosa que fue tu amiga cuando eras niño y que cuyo nombre se me va... -
- Se llama Mylene - responde Roy.
- Oh sí. Bueno, ¿Qué te iba a decir? - después de unos segundos dudando, Rick finalmente continúa: - Se muy bien que amas demasiado a esta chica, ¿No es así? -
- Sí, así es. La amo, desde la primera vez que nos conocimos, y no tengo duda de que la amaré por siempre. - responde Roy con fuerte convicción, y continúa: - No me importa si soy criticado por una chusma inconsciente... Prefiero vivir con ella como un cobarde que morir cobardemente sin ella. -
- Tenías razón hijo. - dice Rick de manera serena - Aún no olvido cuando se burlaron de tí en el baile de la boda de Maia. -
- Sí. Jamás olvidaré este día. - contesta Roy.
- Bueno hijo, te pido que vayas con Max. El te va a dar una gran sorpresa. - dice Rick - ¿Vas o no vas? -
- Si. Claro que voy. - responde Roy con entusiasmo. Acto seguido, va hacia donde está el almirante Sterling, quien siempre vio en Roy al hijo varón que jamás tuvo.
- Saludos, teniente Hunter. - contesta Max.
- Hola tío, ¿Cómo has estado? - pregunta Roy.
- Bien. - responde Max - De hecho, tengo muy buenas noticias. Mi hija Mylene ya fue dada de alta; de hecho, la puedes ver en frente en silla de ruedas. -
Roy se dio la media vuelta, y vio a su compañera de cabello rosado, la cual estaba sentada en una silla de ruedas, tal y como lo dijo Max.
- ¡Mylene! - exclamó Roy.
- ¡Roy! ¡Estoy bien! - exclamó Mylene, quien movió rápidamente las ruedas de su silla en dirección a Roy, y una vez que se detuvo frente a Roy, se levantó de su silla y los dos empezaron a abrazarse y ya con un mar de lágrimas en sus respectivos ojos.
- Creí que ya no te volvería a ver. - dice Roy llorando de la emoción.
- Yo pensé lo mismo. - responde Mylene reaccionando de la misma manera.
- No me quiero separar de ti, aunque tengamos que pasar por mil adversidades. - contesta Roy, a lo que Mylene contestó: - Mi corazón y mi mente son y serán tuyos... Por siempre. -
Rick y Max se quedaron con un nudo en la garganta al ver como sus respectivos hijos confesaron mutuamente su amor. Acto seguido, Lisa y Miriya, las esposas de los respectivos almirantes, también estuvieron presentes en el lugar, y al ver a sus hijos abrazados, se apresuraron ellas también a tomar de la mano a sus respectivos esposos. Una vez más, los lazos se han unido, esta vez en las heladas montañas del planeta Eris.
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