Capítulo 5
POV Christian
No puedo creer lo que no dijo el doctor ¡Voy a ser padre! ¡Un hijo mío y de Ana!. Quisiera gritar de felicidad, pero me preocupa que Ana tenga principio de anemia...
Anastasia sigue en shock, ella piensa que es un sueño.
-¡CHRISTIAN!- Ese grito furioso de mi padre, hace que vuelva a la realidad.
¡Joder! Ya se dieron cuenta, que Ana y yo estamos juntos, aunque yo quería que ellos sepan.
-Papá- digo cauteloso, y cojo la mano de Ana
Los observos, la cara de mi madre, es de perplejidad, mi padre está furioso, Elliot está horrorizado, y Mía esta temblando.
¡Mierda!¡Mía está embarazada!
-¿Vas a explicarme, cómo es eso que haz embarazado a Anastasia?- Dice un furioso Carrick Grey
-Carrick, déjate de estupideces, ya todos sabíamos que estos dos, estaban juntos- dice el abuelo Theodore
-¡¿QUEE?!- Gritamos al unísono, Ana, Mía y yo. Me he quedado petrificado.
-Cómo los oyes Christian, ya sabíamos que Ana y tú, estaban enamorados-responde.
-¿Ósea que todos sabían, menos yo? ¡Soy el último en enterarme, que es lo que sucede con mi familia!- Espeta mi hermano
-Tu hermana Mía, era su alcagueta-dice mamá
-Ósea que...¿ Ustedes ya sabian que Christian y yo somos novios? ¿Por que no nos, dijeron nada?- Ana está atónita, estupefacta como yo
-Si lo sabíamos, pero queríamos oírlo de sus bocas- contesta mi madre.
-¡Pero lo que no sabíamos, era que se estaban acostando!-Carrick es el más furioso de todos
-Y que esperabas Carrick¿Que jugaran al super nintendo? ¿Acaso no fuiste joven? ¿Crees que no sabia que te metia por la ventana, para acostarte con mi hija?- Dice el abuelo Ted
-¡Papá!- Grita mi madre, mas roja que un tomate.
-Eh....lo siento, pero no pude, me enamoré de Christian- dice Ana y empieza a llorar.
-Tranquila nena- la abrazo
-Ana, cariño no te sientas mal, nosotros sabíamos que ustedes estaban juntos, por favor no llores, yo estoy feliz, que esten juntos, Christian no pudo haber escogido mejor- mi madre le habla con ternura. Y se acerca a ella, yo le hago un espacio, sin soltar la mano de mi mujer.
-¿No estás enojada conmigo?- Solloza Ana
-Por supuesto que no mi amor- Grace abraza a Ana, y ese acto de amor, hace que me den ganas de llorar. Tenemos una maravillosa madre.
-¡Mia Anastasia! Ahora van a oirme- grita Carrick.
-Están castigadas, estarán un mes sin, teléfonos, ni Internet, ni televisión, me entregaran sus tarjetas, sus llaves de sus autos, y estarán en sus habitaciones, pensando que sus novios no fueron capaz, de usar un puto condón.-
-Dicho esto. Christian, en la tarde te quiero en mi estudio, y tú Mía- señala a mi hermana
-Llamarás a tú noviecieto, y le dirás, que en la tarde quiero hablar con él- termina de decir, todos nos quedamos boquiabierta.
-¡No nos puedes castigar!- Grita Mía furiosa
-Por supuesto que puedo, soy su padre- responde él
-¡Ya no somos unas niñas!- Contraataca Mia
-¡Son mis niñas! Y odio que ya...bueno que ya...
-Que hayan tenido sexo- el abuelo termina la frase.
-¿Y por que a Elliot nunca lo castigaste? Claro por que es hombre ¡¿verdad?! Pero cómo yo y Ana somos mujeres nos castiga, esto es injusto- Mía no se calla.
-¿Y por qué crees, que me fui de la casa? Si prácticamente no me dejaba ni respirar ¿verdad Christian?- Responde Elliot, yo sólo asiento
-Por supuesto, por que los hombres no se embarazan, y andan por ahi, metiendo su pene, en cualquier agujero que vean- no puedo creer que el abuelo haya dicho eso.
-¡Abuelo!- Decimos Elliot y yo.
-Escuchame señorita, puedes patalear y hacer todo el berrinche que quieras, pero no me convenceras que te quite el castigo-
-¡Ya basta todos! - Grita mi madre.
-Ahora quiero, que todos salgan de aquí, y me dejan a solas con mis hijas- ordena Grace.
-No dejaré sóla a Ana- espeto
-Hazme caso Christian, salgan de aquí- pide
-Está bien- digo a regañadientes.
Me acerco, y me inclino para besar los labios de mi mujer.
-Estaré afuera, te amo- digo contra sus labios.
-Y yo a ti- contesta...
Carrick, Elliot el abuelo Theodore y yo salimos de la habitación.
-Iré por un café, me llaman cuando salga su madre.- Dice Carrick.
-Uy, ¿castigaras a mamá? Picaron- dice Elliot burlón.
-Con ustedes no se puede- se da la vuelta, y se va.
Me duele, su actitud. Pensé que a pesar de todo, iba felicitarme por que yo iba ser padre.
-Necesita estar sólo, él necesita asimilar que sus hijas ya crecieron- murmura mi abuelo dándome una palmada en mi espalda.
-Lo sé- digo dolido
-¿Por que nunca confiastes en mí?- Pregunta Elliot
-Me refiero a que fui, el último en enterarme que Ana y tu están juntos.
-Lo siento- le contesto a mi hermano
-Aún asi, déjame darte un abrazo- no me gusta que me abracen, pero con Ana, he superado un poco, el miedo de ser tocado.
-Está bien- abro mis brazos.
-Felicidades por tu paternidad, no puedo creer que voy hacer tío- dice sonriente.
-Si es verdad, Mía también está embarazada- digo
-Sí, ya no son unas niñas- dice mi hermano con nostalgia.
-Yo también quiero darte un abrazo Christian- dice mi abuelo. Y feliz lo acepto
-Me di cuenta, en el juicio de la pedófila, que entre ustedes había algo- comenta
-¿Así?-
-Sí, había que estar ciego para no darse cuenta, que te brillaban los ojos al ver a Ana-.
Sonrío, mientras me pregunto ¿que querrá hablar Carrick Grey, conmigo en la tarde?.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro