Al día siguiente, los cuerpos de ambos chicos amanecieron abrazados y algo adoloridos con la sabana blanca enredadas entre sus piernas. Sus pechos subían y bajaban plácidamente mientras permanecían muy cómodos en los brazos del otro. Jimin se encontraba utilizando el pecho firme de Jungkook como almohada y este último mantenía su brazo rodeado en la cintura del contrario.

Estaban durmiendo con tranquilidad hasta que la alarma del celular de Jimin comenzó a sonar ruidosamente.

—Mhm... —gruñó inmediatamente, removiéndose en su lugar.

Jungkook también logró despertarlo, haciendo que frunciera el ceño mientras fomria dormía.

—¿Qué carajos suena? —preguntó con voz ronca aún sin abrir los ojos.

—Es mi alarma... olvidé apagarla... —respondió de la misma manera.

—Apaga esa mierda, Jimin.

El mencionado soltó una queja y se obligó a despertarse para girar su cuerpo en dirección contraria al castaño, donde se encontraba su mesita de noche. Finalmente tomó el celular y apagó la alarma, mandando después a la mierda el móvil al tirarlo con fuerza donde cayera.

Terminó volteándose hacia donde Jungkook para acurrucarse nuevamente en él.

—Creo que rompiste tu celular —dijo el castaño.

—Me da igual.

Jungkook rió y seguidamente bostezó, bajando su mirada para encontrar la de Jimin. Sonriéndose ambos al instante.

—Buenos días —murmuró, viéndole con cariño.

—Buenos días —repitió el pelinegro, bostezando después— ¿Qué hora es? No me fijé en la hora.

Jeon se encogió de hombros.

—No lo sé, de todas formas creo que dormimos demasiado.

—Pues claro, si no pegamos un ojo en toda la noche —dijo Jimin— Y tras de eso te decía que tenía sueño pero no me hacías caso.

—Lo siento, no podía soltarte aún.

—Fuiste un despiadado —reprochó.

—¿Pero te gustó, no?

—Ay, cállate —le dió un pequeño golpe en el pecho.

Jungkook en ese momento se inclinó para darle un tierno beso en la frente, provocando que Jimin le mirase conmovido.

—Gracias por aceptar salir conmigo, fue una de las mejores noches y no pienso olvidarla —confesó con voz suave el castaño.

Park sonrió, achinando sus ojos.

—Gracias a ti por no rendirte e invitarme.

—Siempre consigo lo que quiero —enseñó una sonrisa arrogante.

—¿Y que quieres ahora?

—Hacerlo contigo de nuevo, ahora mismo... —sentenció haciendo ademán de juntar nuevamente sus labios.

Pero entonces, la puerta de la habitación es abierta.

Entrando la hermana del pelinegro.

—¡Jimin! ¿sabes donde están mis-...? —soltó una exclamación— ¡Oh, Dios mío!

—¡Ahhh! — ¡Mierda! —gritaron ambos, separándose y tapándose inmediatamente.

—¡Maldita sea, Chaeyoung! —gritó Jimin— ¡¿Qué carajos haces aquí? ¿No estabas en una pijamada?!

—¡Uy, lo siento, lo siento! —se disculpó fugazmente, tapando un poco su vista— Sí, pero ya terminó y me vine a casa. No sabía que estabas con alguien... ¿Jungkook, eres tú?

—No... —respondió el castaño escondido bajo las sábanas.

Chaeyoung abrió completamente su boca y miró con sorpresa a Jimin.

—¡Bueno, bueno, mucho por hoy! ¡Ya vete! —habló el pelinegro antes de que su hermana le dijera algo.

—¡Oh, claro! —Chaeyoung giró sobre sus talones y se dirigió hasta la salida no sin antes dedicarle una mirada cómplice a Jimin al cerrar la puerta.

Inmediatamente el pelinegro soltó un fuerte suspiró de alivio.

—Ya puedes salir —avisó Jeon— Aunque es inútil, sabe que eres tú.

Jungkook salió de su escondite, intentando aguantar la risa que tenía en ese momento.

—Fue épico.

—Cierra la boca, no fue épico, fue extremadamente vergonzoso... —espetó, cubriendo su rostro con ambas manos.

—Pudo haber sido peor.

—¡Ahg, no! —exclamó al pensar en ello.

—¿Debería irme ya? —preguntó Jeon, ladeando su cabeza.

Jimin despegó su rostro para mirarle con angustia.

—No, quédate a desayunar.

El castaño sonrió.

—Está bien pero sólo si me baño contigo.

—¿Qué? —abrió sus ojos de golpe— ¿Por qué?

—Porque quiero.

Jimin rodó sus ojos.

—Bien.

Entonces Jungkook le miró con una sonrisa traviesa.

—Esto será divertido.

[🖤]

Tres días después.

Jungkook acorrala a Jimin contra la pared detrás del escenario e inmediatamente une sus labios.

Habían pasado tres días desde su primera cita y a partir de esa noche la relación de ellos cambió drásticamente, llegando a no poder despegarse uno del otro. De un día para otro, en vez de repartirse tímidas e incómodas sonrisas cuando se encontraban en los pasillos de la universidad, comenzaron a darse un beso en los labios. En vez de verse máximo una vez, se veían cada que salían de clases, caminando libremente con las manos entrelazadas y súper cariñosos entre ellos dos. Sin importarles nada, ni nadie.

Inmediatamente todo el mundo comenzó a sospechar y a hablar de ellos, sacando la conclusión de que andaban saliendo. Y efectivamente así era, oficialmente estaban saliendo. Sin embargo habían muchas personas que creían que ellos eran novios cuando la realidad es que ninguno de los dos había dado el siguiente paso, aún.

La verdad es que en aquella universidad los rumores se esparcían a la velocidad de la luz, así que mucha gente chismosa, quería saber todo acerca de ellos y de su relación. Más que todo por ser ambos muy populares. El talentoso Jeon Jungkook con el guapísimo estudiante nuevo Park Jimin. Una locura y una combinación que nadie se esperaba, puesto que varias semanas atrás, ellos ni se podían ver la cara mutuamente.

En fin.

—J-Jungkook... n-nos pueden ver... —avisó Jimin cuando el castaño comenzó a besar ansiosamente su cuello.

—Eso lo hace más excitante —murmuró haciendo ademán de desabrochar el cinturón del pelinegro.

—Espera, espera —le detuvo inmediatamente— ¿Qué haces? —preguntó con un eje de diversión.

Jungkook volvió a acercarse.

—Vamos, nadie nos verá. Un rapidín.

Sin embargo Jimin se negó nuevamente, haciéndose a un lado.

—Estás loco, claro que no —sentenció, alejándose— No es mi culpa que últimamente estés tan caliente, no podemos follar en cualquier lugar y cada vez que quieras.

—¿Pero cómo pretendes que no esté caliente si te tengo al frente siempre? —dijo mientras le intentaba volver a acorralar, mordiendo su oreja— Te deseo a cada hora.

Jimin sintió un escalofrío recorrer su cuerpo y por un segundo estuvo a punto de ceder pero se volvió a negar, apartándose.

—Por Dios, Jungkook. Qué cosas dices, cálmate un poco... —murmuró haciéndose el enfadado y yéndose finalmente de allí.

Jeon se apoyó en una pared, negando con la cabeza mientras una estúpida sonrisa se formaba en sus labios.

Todavía no quería admitirlo, pero sentía que comenzaba a enamorarse de ese rebelde pelinegro.

[🖤]

Jimin se encontraba en los baños de la universidad arreglando su vestimenta y cabello después de haber sido corrompidos por Jungkook, hasta que se detiene al escuchar a alguien más entrar.

—¡Hola, Jimin! —le saludó Hoseok con una enorme sonrisa.

—Hola, Hoseok —le devolvió la sonrisa— ¿Qué tal estás?

—Pues yo bien pero hace días no te veía, es como si hubieses desaparecido... —hizo una mueca.

—Oh, puede que sea porque he estado ocupado... —respondió, volviendo su vista al espejo.

En ese momento el azabache logra divisar desde su posición un chupete en el cuello del contrario y saca rápidamente una conclusión.

—¿Ocupado con Jungkook?

Park le miró inmediatamente con sorpresa hasta que después sonrió un poco y continuó arreglándose.

—Algo así.

—¿Ustedes dos están juntos, cierto? —preguntó.

—¿En qué sentido?

—Pues como pareja, como novios.

Jimin mordió su labio inferior, pensativo.

—Pues... es parecido, pero... aún no sabemos que somos, sólo estamos saliendo y ver después qué sucede. No es nada oficial.

—¿Entonces no hay ningún compromiso de por medio?

—Supongo que no... —se encogió de hombros.

Hoseok asintió y cautelosamente se acercó más a Jimin, observando con admiración su reflejo en el espejo mientras acomodaba su sedoso cabello negro. Dios, ese chico era realmente perfecto.

—¿Entonces... no habría ningún problema si te invito a salir? —se atrevió a preguntar, siendo influenciado por sus pensamientos e instintos.

El pelinegro se quedó inmóvil, viéndolo con la boca ligeramente abierta desde el reflejo para después voltear su rostro y verlo en la vida real.

—¿Qué? —fue lo único que logró decir de la impresión.

El azabache suspiró.

—Jimin, es algo obvio que existe cierta química y atracción entre nosotros... ¿No crees que sería momento de salir juntos?

Jimin permaneció aún en shock. Mierda, así que Jeon tenía razón y Hoseok gustaba de él.

Tragó saliva, no sabiendo exactamente qué hacer o decir al respecto.

—Pero... yo estoy con Jungkook... —dijo de forma cautelosa.

—Sí, pero tú mismo dijiste que no son novios y solamente están saliendo —se encogió de hombros— Si no hay compromiso entonces no le veo nada de malo en estar con otra persona, ¿cierto?

—Pero yo estoy con él... —insistió— No... no podría hacerle eso. A pesar de que no seamos novios, existe un cierto compromiso y fidelidad de por medio.

—¿Fidelidad? —arqueó una ceja— Mira, conozco a Jungkook y dudo mucho que llegue a ser fiel, es un chico que tiene la fama de coquetear con todo el mundo y hay muchas personas detrás suyo muriendo por tener algo con él.

—¿Qué? —soltó, confundido del repentino cambio en el chico— ¿A qué quieres llegar con todo eso?

—¿Crees que realmente lo de ustedes sea algo serio para él?

Jimin inmediatamente frunció el ceño.

—No me gusta a donde está yendo esta conversación, Hoseok. Y además, sea verdad o no, eso no es tu incumbencia. Dehecho, ¿qué tiene que ver con lo que hablábamos antes?

El azabache volteó sus ojos, resoplando con fastidio.

—Te estoy diciendo la verdad. No creo que lo de ustedes sea algo serio, lo más probable es que duren muy poco.

Inmediatamente Park se cruzó de brazos y le miró con cara de pocos amigos.

—Mira, primero que nada no pedí tu opinión sobre mi relación.

—Porfavor, Jimin. No te enojes, sólo te estoy advirtiendo desde ahora porque no quiero que termines lastimado. Jungkook es-

—Y segundo no me interesa que opinión tienes de él —le interrumpió, molesto— Lo único que me importa es lo que yo pienso y mientras no pase algo que me haga cambiar de opinión, no lo haré.

Hoseok asintió lentamente con la cabeza, manteniéndose pensativo por unos segundos.

—Ya veo... entiendo.

El pelinegro suspiró pesadamente.

—¿Sabes? Creo que simplemente estás indignado porque no puedo salir contigo que tu única opción alternativa es intentar alejarme de Jungkook, pero la verdad aquí es, que acabas de perder todas las oportunidades que tenías si llegase a pasar. Porque ya no pretendo hacerlo nunca. Adiós.

Dicho esto avanzó hacia la salida.

—Jimin, espera —intentó detenerlo.

—No vuelvas a hablarme —espetó antes de salir de los baños. Dejando a Hoseok con un mal sabor de boca, la dignidad en los suelos y un pequeño plan formándose en su mente.

[🖤]

Jungkook terminaba de pagar su bebida en la cafetería para después irse caminando con Taehyung a su lado.

—¿Haz visto a Yoongi hoy? Lo he estado buscando desde la mañana pero no aparece y no responde mis mensajes... —dijo el pelirrojo con un puchero en su rostro.

—No, no lo he visto —respondió— Quizás se quedó dormido o dejó pasar la alarma. Él es así, no te preocupes.

Taehyung asintió con la cabeza, dándole la razón. Seguidamente al mirar de reojo a su amigo, notó una notable herida en su labio inferior e inmediatamente sonrió de forma pícara.

—Haz tenido mucha diversión con Park, ¿no?

Jungkook dejó de beber y le miró interrogante.

—¿Por qué lo dices?

—Mhm, no lo sé. Quizás por tu labio roto o los dos chupetes que te acabo de ver desde aquí.

—¿Qué? —llevó una mano a su cuello y sonrió— Ah, eso. Sí, así es. Ha sido genial.

—Tan genial que ya ni tienes tiempo para tu mejor amigo.

Jeon bufó.

—Claro que sí.

—¡Claro que no! En los últimos días solo andas encima de Jimin como una garrapata. ¡Ya no tengo con quién hablar!

—Ay, porfavor, Taehyung. Sólo han sido unos días... —volteó sus ojos— Además, eres súper popular y sociable. Puedes hablar con otra persona.

—Sí, pero no es lo mismo y lo sabes.

Jungkook se detuvo cuando vió a Taehyung decaído.

—Hey, lo lamento, ¿sí? Es que... —suspiró— Nunca había vivido algo como esto y realmente quiero hacerlo bien... ¿entiendes?

Kim le miró sospechosamente.

—Espera, ¿acaso te estás enamorando de Jimin al punto de llevarlo a algo serio?

Jungkook tragó saliva, aquella pregunta tan específica lo descolocó completamente. Poniéndolo nervioso.

—Q-Quizás.

—Wow.

—No digas wow, idiota.

—¿Y qué quieres que diga? —contraatacó— ¿Qué chille como niña o qué? —inmediatamente ambos rieron— Hablando en serio, si te entiendo y espero que realmente funcione porque jamás te había visto tan interesado en un chico hasta ahora. Eso es un avance en tu vida. Perooooo, ¡no tienes por qué alejarme!

—¡No lo hago! —exclamó— Mira, estoy pasando tiempo contigo de nuevo. Así que ya no reclames.

Taehyung entornó sus ojos y Jungkook volvió a su bebida mientras caminaban tranquilamente por el campus.

—Oh... por... Dios... —soltó lentamente el pelirrojo de repente.

El castaño alzó su mirada confundida hacia su amigo, viendo como este veía pasmado hacia al frente hasta que siguió su mirada e inmediatamente se congela en su sitio.

—No puede ser —dijo al instante.

A lo lejos en una mesa, hablando con un grupo de chicas, se encontraba una mujer de cabello negro y largo con flequillo y labios rojos. La cuál ambos jóvenes reconocieron al instante.

—Dime que no es-

—Sí, es ella —respondió Jungkook, tragando saliva.

Pues era Kang Seulgi.

Su ex.

Hola, vengo de antemano a avisar que no tengo nada en contra de Seulgi, ni siquiera staneo red velvet, simplemente la vi perfecta para el personaje ficticio que quiero hacer, porque eso es, un fic 🤠 así que no se lo tomen personal sus acciones, ok? ok. Gracias, tkm. 🖤

See u!