-La ceremonia termina, tus hermanas son llevadas al sepelio y tú te vas a sentar cerca de una fuente-

Tn: *Miras la fuente mientras esta hace correr el agua y tú vuelves a sonreír sintiéndote ahora más liberado que antes* Gracias Señor, por permitirme dar este paso, en verdad... gracias.

Sebastián: *Se acerca a ti* Tn.

Tn: *Lo volteas a ver* ¿Sebas?

Sebastián: ¿Cómo estás?

Tn: He estado mejor, al menos más liberado que antes.

Sebastián: Me alegro, y... lo lamento tanto.

Tn: *Te pones de pie* No fue tu culpa, tampoco la mía, ni de Riko, ni de Ako, ni de mis padres; todo... ya estaba previsto por él desde antes de que tan siquiera pasara.

Sebastián: Quizás me reservé mucho de decírtelo, pero... me sorprende lo maduro que eres para tomarte las cosas, en verdad... que te admiro muchísimo.

Tn: No me admires a mí, no me conviertas en tu centro de atención cuando yo he cometido tantos errores, tantos que ya hasta perdí la cuenta; solo... trato de convertir mis experiencias en algo bueno y digno de mi aprendizaje para ser cada vez mejor persona en el mañana.

Sebastián: Sí, ahora me he dado cuenta, ese discurso que diste en verdad que me aclaró mucho la visión hacia ti.

Tn: Ni siquiera lo preparé, todo fue improvisado, pero tenía que desahogarme a como diera lugar, despedirme de mis hermanas y convertir todo esto en un punto y aparte de mi vida.

Sebastián: Y yo que te taché de cretino cuando estuviste con Ako, lo lamento.

Tn: No Sebastián, tú perdóname a mí; no te quise escuchar, te hice a un lado e ignoré tu opinión aún y a pesar de que eras mi mejor amigo, muchas veces te creí capaz de ser como mi ex amigo Luis, pero tú... nunca fuiste así, fuiste el mejor amigo que he podido tener en mi vida, el alma más pura y noble que pude conocer, y yo... no te di el respeto que te merecías, aquí el pésimo amigo fui yo.

Sebastián: No hay ningún problema Tn, eres mi amigo.

Tn: *Te pones a llorar* Mejor amigo.

Sebastián: Sí.

-Se abrazan mutuamente recobrando con ello su amistad como mejores amigos-

Sebastián: *Viéndote de frente* Perdóname por haberme ido.

Tn: No te preocupes más por eso, el ayer es pasado, y el ahora...

Sebastián: Es nuestro presente.

Tn: Así es.

Adachi: *Llega hasta con su hermano* Sebas... ya casi tenemos que irnos, mamá y papá... *te voltea a ver* ¿tú no eres el que pasó al frente?

Tn: *Viéndola con algo de curiosidad* Sí, ese soy yo, ¿tú eres...?

Sebastián: Tn, te quiero presentar a mi hermana Adachi, es un año menor que yo.

Adachi: *Te alza la mano* Encantada.

Tn: *Viéndola impresionado* Espera, recuerdo haberte visto antes.

Adachi: ¿Ah sí?

Tn: Yo... este... recuerdo que en el 2016 te encontré perdida en un mercado y te ayudé a regresar con tu mamá, ¿no sé si lo recuerdas?

-Año 2016 en la historia de Hitori Bocchi X Tu-

-Una niña te pasa por un lado y se te cae la carne-

Tn: *Molestándote* Eh, oye fíjate por donde... *lo volteas a ver* ¿estás bien?

¿?: *Cae al suelo* Ah... auch.

Tn: *La ayudas a levantarse* Disculpa, ¿te encuentras bien?

¿?: *Se levanta* Si, ay... *poniendo su mano en su cabeza* me golpeé mi cabeza.

Tn: *Riéndote* Jeje, lo bueno es que no es nada grave.

¿?: *Se ríe también* Jeje.

Tn: Bueno, tengo que irme *te das vuelta*.

¿?: *Poniéndose triste de nuevo* Señor, ¿podría ayudarme?

Tn: *Te vuelves a voltear* ¿Qué pasa?

¿?: Perdí a mi mami, ¿puedes ayudarme a encontrarla?

Tn: *Compadeciéndote* Claro, no te preocupes, vamos a encontrarla juntos.

¿?: *Te sonríe*.

Tn: ¿Cómo te llamas?

¿?: Me llamo Adachi.

-De vuelta al presente-

Adachi: Cierto, ya me acuerdo de ti, me ayudaste a encontrar a mi mamá cuando apenas tenía 11 años y tú... fuiste mi héroe aquella vez.

Tn: Ja, gracias, te lo agradezco.

-Los tres se van a sentar a las áreas verdes-

Sebastián: Me sorprende que ambos se hayan conocido antes de tan siquiera yo haberte conocido a ti Tn.

Tn: Solo fue algo momentáneo, a parte... estoy seguro que tú hubieras hecho lo mismo por Riko o por Ako si las hubieras visto en la misma situación.

Sebastián: Lo hice en situaciones peores, y ahora cargo factura por ello.

Adachi: Incluso yo le di a una de estas una cucharada de su propia medicina, se la merecía.

Tn: *Viendo a Sebastián* Hermano, si existiera algo que pudiera hacer o tan siquiera compensar lo que te hice pasar con ella en aquella ocasión, tú solo dímelo, desde ahora pondré y aseguraré toda mi prioridad sobre ti, porque eres mi amigo y mi amigo desde ahora lo vale todo para mí.

Sebastián: Eres muy amable Tn, pero no espero ninguna indemnización de tu parte, gracias.

Tn: Al menos si existiera algo que pudiera corregir en tu vida, o tan solo... pudiera compensarte de alguna manera, dímela, y yo estaré dispuesto a echarte la mano.

Sebastián: Bueno, este... *se pone a pensar brevemente en una situación, pero duda en decírtela* este...

Tn: ¿Sí?

Sebastián: Yo... *se arma de valor y te lo dice* me gustaría que me ayudaras con Adachi.

Tn: ¿Ah?

Adachi: ¿Ah?

-En tu casa-

Tn: *Sentado junto con él y Adachi* Explícame.

Sebastián: Para empezar, me gustaría decirte algunas cosas que decidí omitirte el día en que nos conocimos empezando el tercer grado.

Tn: Dime, tenemos todo el tiempo que sea.

Sebastián: Bien, este... te dije que tenía un padrastro que es el hombre que se casó con nuestra mamá y tomo el papel como nuestra figura paterna.

Tn: Sí, me lo mencionaste.

Sebastián: Bueno, Adachi y yo, antes de irnos a vivir con él y antes de que mi madre lo conociera, mi madre vivía sola cuidándonos a mí y a Adachi luego de haberse separado de nuestro padre biológico; nunca tuvimos mucho dinero, mi madre como te hice la mención trabajaba haciendo la limpieza en varias casas y nosotros apoyábamos sacando buenas calificaciones y vendiendo cosas en la escuela.

Tn: ¿Vendiendo cosas en la escuela?

Sebastián: Sí, Adachi y yo lo hacíamos de niños.

Adachi: Todos los días, con tal de sacar dinero.

Tn: Entonces vivías en carencias cuando yo... siempre pensé que tu vida era tal y como me la habías mostrado en primer lugar.

Sebastián: Pasamos de pobres antes de vivir como ahora vivimos, yo... ni siquiera lo he olvidado ni dejado atrás para no dejar que el orgullo se me suba a la cabeza y hacerme indiferente con respecto de donde salí.

Tn: Es bueno que lo hagas, porque dentro de las carencias siempre termina existiendo la humildad, que es algo que todos debemos de tener por igual, sin importar que tan rico o pobre seamos.

Adachi: Aunque últimamente... aunque hemos tratado de vivir modestamente con nuestra nueva forma de vida.

Sebastián: Porque aunque no lo parezca, empezó recientemente desde que entramos a la secundaria.

Adachi: Tú a la secundaria, yo... a sexto de primaria.

Sebastián: Sí, pero el caso es que no llevamos mucho en la vida que tenemos ahora.

Adachi: Pero sin embargo, Sebastián y yo nos hemos distanciado mucho en estos últimos años; puede que parte de ello haya sido mi culpa *bromeándole* o... también la de él, no lo descarto.

Sebastián: *Viéndola* Ira tú que chistosita.

Tn: ¿Qué están pidiéndome que haga?, ¿quieren que los ayude a mejorar su relación?

Sebastián: Si puedes apoyarnos considerando el buen hermano que eras con tus hermanas, te lo agradeceríamos mucho.

Tn: Ayudarlos con su hermandad ¿eh? *te pones brevemente a pensar* -lo que hubiesen querido mis hermanas para nosotros-.

Sebastián: ¿Qué dices?

Tn: Los apoyaré Sebastián, pero... *te pones de pie* creo que lo primero que tenemos que hacer es comer.

Sebastián: ¿Comer?

Adachi: ¿Comer?

Tn: *Vas a la cocina y les sirves un plato* Sí, compartir la mesa, llenar el estómago y convivir juntos.

Adachi: Hace mucho que no compartimos la mesa.

Tn: *Te vuelves a sentar* Malamente, una de las partes más cruciales e importantes que unen a una familia, es la hora de la comida, el compartir la mesa es esencial para definir los lazos entre los unos y los otros.

Sebastián: *Viéndola* Quizá eso fue lo que nos fue separando Adachi.

Adachi: *Bromeándole* Fue tu culpa.

Sebastián: Mocosa.

Adachi: Feo.

Sebastián: Castrosa.

Adachi: Alimaña.

Tn: *Viéndolos* Bueno, al parecer se comienzan a llevar bien.

-Tn y Sebastián pasan el resto de sus vacaciones de verano apoyándose y enseñándole cómo recuperar su buena relación con su hermana Adachi, logrando con ello hacerle tener a Sebastián lo que descuidaste con Riko y con Ako; la situación, la amistad y la relación entre Sebastián y Adachi vuelve a dar sus frutos y Sebastián queda enormemente agradecido contigo, debido a ello su relación se fortalece mucho más al momento de entrar a la prepa-.