第六
Mayo 10, 2018
Recuerdo aquel día donde sucedió todo.
Yo estaba trabajando, no faltaba mucho para poder salir y yo ansiaba tanto verte de nuevo.
Juro que estaba contando las horas para llegar a la casa dónde vivíamos para llenarte de besos toda la cara y decirte lo mucho que te había extrañado. Podía escucharte riendo mientras me decías: “Cariño, nos vimos hace cinco horas”
El recuerdo me hizo sonreír.
En seguida escuché mi celular sonar, en aquel entonces creí que eras tú.
Qué torpe.
Al levantar el móvil de la mesa de roble, ví el nombre de Taehyung. Extrañado contesté.
“¿Qué pasa?” hablé calmado mientras seguía acomodando unos papeles.
“Dios mío, Jeongguk.” dijo el pelirrojo, recuerdo escuchar sus sollozos. “Tienes que venir. Ahora”
“¿Está todo bien? ¿Porqué lloras, Tae?” seguía cuestionando, pues no me daba ninguna explicación y parecía estar alarmado, ni siquiera estaba seguro. Comencé a desesperarme.
“¡Tú sólo ven, maldita sea! No creo ser capaz de decirte esto al teléfono.” alzó la voz y me paré de inmediato “Nos vemos en tu casa” dijo y colgó.
Sin pensarlo dos veces, levanté todas mis cosas apresurado, cuando ya llevaba todo salí de mi oficina.
“JungHyun,” llamé la atención de mi superior “debo salir antes hoy, es importante. Te veo mañana”
Él sólo me miró por un rato, notó la preocupación en mi voz, así que se limitó a asentir y con un leve movimiento de cabeza, me dirigí al elevador para bajar al estacionamiento.
Mientras esperaba dentro del ascensor, comencé a mover mi pie ansioso de arriba abajo. No entendía qué sucedía y el miedo comenzaba a correr todo mi cuerpo.
Cuando llegué a la planta baja, las puertas se abrieron, sintiendo el aire frío del lugar golpear mi cara y caminé a paso apresurado hacia mi auto. Maldije el haberlo dejado a la mitad del estacionamiento.
Había tantas preguntas que tenía en la cabeza y quería llegar a casa de una vez por todas.
Al fin llegué al carro. Me adentré, metí las llaves y al escuchar el rugido emprendí mi camino. Cuando salí del estacionamiento aceleré la velocidad. No quise exceder ésta por temor a que un policía me detuviera y en esos momentos era lo último que quería.
Faltaba una cuadra para llegar a casa y desde ahí comenzaba a ver la ambulancia. No estaba seguro en donde se encontraban parqueados hasta que me fui acercando más.
Estaban frente a la casa.
Logré divisar a TaeHyung con JiMin, ambos abrazados mientras lloraban.
Aparqué el auto y cerré la puerta. Me acerqué a mis dos amigos.
“Ggukie,” dijo Jimin al verme frente a él, mientras se le rompía la voz. “lo sentimos tanto, nosotros...” lo interrumpí.
“Díganme qué mierda está pasando y que no es lo que yo creo que es” pregunté, con un poco de esperanza que, al ver la situación, no tenía sentido. Yo sabía qué había pasado pero no quise creerlo, me negaba a hacerlo. Quería creer que todo era un mal sueño, que me despertaría al lado tuyo como todas las mañanas, con un café y tus besos. Quería creer que íbamos a seguir juntos y que esto no estaba pasando.
“Lo siento, Jeongguk” intervino Taehyung y ni siquiera hubo necesidad de que dijese más. Lo comprendí y cerré los ojos un momento antes de comenzar a correr dentro de la casa.
“Joven, no puede pasar” habló una voz masculina a mis espaldas, mientras me sujetaba del brazo.
Me giré hacia él “No, tiene que dejarme pasar ¡Es mi casa y ése es mi novio!” el señor me soltó y pasé bajo la cinta amarilla.
Corrí escaleras arriba y entré a múltiples cuartos, no encontraba a nadie hasta que pasé el baño de visitas, dónde se encontraban los forenses.
Me quedé parado en frente de la puerta sin saber qué hacer exactamente. Estaban alrededor de ti, mientras te ponían en una bolsa y comenzaban a subirte a una camilla.
Alguien a mis espaldas me tocó el hombro dos veces. En seguida volteé y vi a un chico, tal vez era más joven que yo. No lo sé, ni siquiera me importaba en ése momento.
“¿Usted es Jeon Jeongguk?” habló y asentí con el ceño levemente fruncido. Me tendió un sobre, la tomé aún sin entender “Me parece que es para usted, entonces”
Le agradecí y él sólo se fue, dejándome solo. Leí el sobre.
« Para el amor de mi vida, Jeon JeongGuk »
Alcé la mirada hacia el techo, no me sentía estable ahora mismo para leerla. La leería antes de dormir, porque al ver esto, lo único que necesitaba era tranquilizarme.
Salí de la casa y fui hacia TaeHyung y Jimin quiénes ya parecían más calmados.
El pelirrosa extendió los brazos y lo abracé fuerte, ninguno decía nada pero sabíamos que no era necesario. Sólo queríamos sentir el calor del otro. Sentir que estábamos ahí para el otro. Lo cuál agradecí en silencio.
Mientras volvía a asimilar los hechos, las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas. Jimin acariciaba mi cabeza, jugando con mis cabellos un poco, dándome a entender que todo estaba bien aunque ambos sabíamos que era mentira.
“Lo amo tanto, Jimin” dije entre sollozos, mientras nuevas lágrimas caían.
“Lo sé.” habló en un susurro “Y sé que él te ama muchísimo también”
“Sabía de su depresión pero quería creer que jamás sucedería. Viví con la esperanza de hacerlo feliz y que olvidara sus problemas y con todo lo que cargaba. No fue suficiente” dije también un susurro.
“No, Jeongguk.” ahora estaba serio y me tomó por los hombros, para después separarse de mí. Me encontraba con los ojos, mejillas y nariz roja, quitó las lágrimas con sus pulgares mientras nos mirábamos. “Hiciste lo mejor, quisiste hacerlo sentir mejor. Sé que fue feliz a tu lado y estoy seguro de que está agradecido contigo. No entiendo bien porqué hizo lo que hizo pero aun así no creo que haya dejado de pensar en ti ni un segundo”
No quería culparte. Era inútil. Pero no podía dejar de pensar en que, si JiMin tenía razón y me amabas tanto, entonces ¿porqué dejar a tu pareja por tus problemas? Sabía que era cruel de mi parte. Sin embargo, no entendía porqué habías hecho lo que hiciste.
( 🌠 )
fun fact:
he escrito acá mil palabras wtff
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro