El sonido de un balbuceo me saco de mis pensamientos y de mi concentración. Carol que se encontraba a mi lado se acercó a la cuna, tomo en brazos al pequeño bebé que apenas unos segundos atrás se encontraba ahí.

Carol le hizo unos mimos y se escucho la dulce risa del pequeño Rhee. Sonreí por instinto.

-Esta cada vez más grande— Carol sonrió.

-Se parece a Glenn— sonreí con nostalgia.

Rick entro junto a Carl, el mayor se acercó a mi con una sonrisa.

-¿Cómo estas?

-De maravilla, estaba arreglando eso—hice un ademan hacia un arma.

-¿Un arma?

-Creo que todos tenemos una arma propia, pero hay alguien que no tiene— mire a Carl que estaba con el pequeño Rhee.

-Eres lo mejor que nos pudo haber pasado, ¿lo sabías?— tomo mi cara con sus manos.

-En verdad no, no lo dices muy seguido— respondí con burla y él rió.

-Te amo— susurro y me beso.

La puerta se abrió dejando ver a Enid y Maggie, ambas entraron con una sonrisa. Ambos nos separamos y yo me encargue de terminar de arreglar el arma.

-No hay nada peor que ver a tus padres besándose— Carl se acercó junto a Enid mientras Maggie tomaba al bebé y se acercaba junto a Carol.

-Deja de quejarte— rodee los ojos y todos rieron.—Te tengo un regalo.

Él me miro con duda y se acercó más, le extendí el arma, la miro por unos segundos para luego mirarme a mi. Abrió sus brazos y me acercó a él para darme un abrazo.

-Es el mejor regalo que me han hecho, gracias mamá.

Sonreí y lo abrace con fuerza, Rick se unió al abrazo. Luego de unos segundos nos separamos.

Maggie se acercó y se sentó a mi lado en el pórtico de la casa mientras veía como Daryl y Rick hablaban, este último cada un par de segundos dirigía su mirada hacia mi dirección con una sonrisa, la cual lo correspondía.

-Me alegró que estés formando tu propia familia— mire a Maggie.

-Siempre hemos sido todos una familia, a pesar de todo— ella asintió.

-No puedo estar más agradecida de la familia en la que llego mi bebé, Glenn estaría realmente feliz.

-Él lo estaría.

Ella se acercó más y apoyo su cabeza en mi hombro.

-Lo extraño, pero estoy segura que donde sea que este nos está cuidando— asentí.

Rick junto a Daryl se acercaron y se sentaron al lado de ambas, ella se separó y me miro con una sonrisa.

Rick puso una mano en mi pierna y se acercó susurrando en mi oído.

-Te amo.

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Mañana es mi último día de práctica, así que andaré más seguido subiendo