Alerta de spoilers
(en caso de que no hayas leído la historia)

¿Qué sabemos hasta ahora sobre la magia que habita en el mundo de Richard Buttons y la hora de las mariposas negras? La verdad no hay mucha información sobre ello, por lo que es difícil de deducir, incluso para la resabida señorita Adenia Ethel.

Según el Prefecto Jean Pevsner, primer personaje en la historia que se refiere de forma explícita a la existencia de la magia, plantea que esta abunda desde tiempos inmemoriales, no obstante, la estampa bautismal o el signo de la magia con que nacen ciertas personas solo será visible a través del reflejo en lunas (espejos) especiales, una vez tomada la Prueba de los Espejos.

Existen seis ramas o marcas de la magia en este mundo, las que definen el flujo en muchas cuestiones de la vida; a continuación veremos cuáles son.

La Belladona:

La Belladona, dulce pero mortal, suele estar asociada con el conocimiento. Son aprendices natas y cuentan con una capacidad cognitiva superior a la de los demás. De temperamento apasionado; jamás pasan un detalle por alto. En tiempos pasados, esta hermosa planta era conocida como Átropos, no por casualidad compartía el mismo nombre con la mayor de las tres Moiras.

El Ermitaño:

Aquellos que poseen dotes extravagantes para la alquimia y la transmutación, suelen nacer bajo el signo del Ermitaño. Caracterizado por sus manos prodigiosas. Personas solitarias, cálidas y de miradas penetrantes, dedicadas al magisterio o a las ciencias.

El Vidente:

Las energías de las almas se palpan diferente para el Vidente, maravillosamente sensitivo y de un refinado olfato para los temas atemporales y agonizantes. Nada escapa a su visión.

El Ahorcado:

En el Ahorcado nunca podrán depositar la confianza, son alimañas astutas que apuestan por una única cosa: su propia supervivencia. Casi siempre se salen con la suya, usando su ingenio.

El Mitómano:

El Mitómano se relaciona con la persuasión y manipulación, la mentira es su mayor virtud. Cuenta con un carisma incomparable, una actitud dócil y amable que le hace pasar inadvertido mientras teje los hilos de sus maquinaciones.

El Creador:

Por su parte, el Creador es fabuloso, un misterio ante todas las miradas, posee características de todas las otras marcas de la magia y una energía desbordante.