006: ¿"Viejo" amigo?
Al entrar al aula vio a Hyunjin sentado en el asiento de él (Felix) pero hablando con Changbin, quien se encontraba atrás; Así que rápidamente descendió su mirada y suspiró profundamente, pero antes de caminar a su asiento, una chica del consejo estudiantil se asomó por detrás y hablo fuertemente, para que el grupo pudiera oírla:
— Chicos, debido al evento semanal, no tendrán las clases como normalmente, debido a la falta de docentes, por lo que los profesores se encuentran ocupados, así que ese tiempo serán de estudio y práctica a quienes vayan a participar en el evento. —una sonrisa se dibujó en sus labios antes de hacer una reverencia e irse.
— Clase libre, que extraño... —murmuró Jisung viendo como la chica se alejaba por el pasillo—. Es la segunda vez desde que entramos. —su vista regresó al pecoso junto a él.
— No son del todo libres. —sonrió luego de ver la expresión de confusión en el rostro del mayor—. ¿No ibas a abrir el evento cantando junto a Seungmin? —arqueó su ceja y rió al ver el cambio facial ajeno.
— ¡Seungmin! —soltó la mano del menor—. ¡Mierda, debe de estar en el auditorio esperándome! —acomodó su mochila sobre su hombro y besó rápidamente la mejilla del rubio—. ¡Te veré luego!
Salió disparado del salón, Felix sólo rió tras verlo; Seungmin era alguien impaciente así que estaba seguro que le reclamaría o le regañaria, lo cual le parecía adorable y gracioso. Tras suspirar decidió entrar al aula y sólo relajarse o incluso dormirse, Chan también iba a participar en el evento, él iba a cantar en compañía de su mejor amiga, Sana. Por lo que se relajaría ya que esta vez no quiso participar.
Al dar la vuelta se encontró con Hyunjin, quien estaba frente a él con una leve sonrisa.
— ¿Evento semanal? —fue lo primero que preguntó el mayor.
— Ah... Sí, cada viernes hacen un evento donde los alumnos pueden presentarse ya sea bailando, cantando, rapeando, modelando, actuando... ¡Y muchísimas más cosas! Es para atraer la atención del público y sobretodo apoyar a los estudiantes. —mostró una amplia sonrisa.
— Eso suena maravilloso. —dijo emocionado—. ¿Tú no participaras?
— Esta vez no... —antes de seguir hablando, el mayor tomó su mano y caminó junto a él fuera del aula. por lo que algo confundido desvió su mirada y notó como su exnovio se acercaba, eso le hizo entender—. Mi última participación fue hace tiempo... —continuó hablando— Canté junto a alguien...
— ¿Por qué no participas otra vez? Me dijiste que sabes bailar, deberías hacerlo. —inclinó un poco su rostro para mirarlo y sonreírle.
Hyunjin abrió la puerta de un aula y se aseguró que estuviera vacío, éste parecía ser de prácticas ya que sólo había una mesa en el extremo del mismo. El mayor lo jaló suavemente y volvió a cerrar la entrada, antes de soltar al menor y adentrarse más en la habitación, pero prestándole claramente atención a Felix.
— Me prometí a mí mismo que mi próxima participación en un evento sería como diseñador... —se encogió de hombros, sintiéndose triste ya que hasta el momento no había logrado crear un buen diseño—. Sin embargo, aún no soy bueno en eso...
— ¿Puedo ver alguno de tus diseños? —se sentó sobre la mesa que se encontraba ahí y ladeó un poco su rostro, sonriendo.
— Ah... Claro. —caminó lentamente hasta él mientras sacaba de su mochila una libreta— Sólo que no los he terminado, he perdido la inspiración...
Abrió el cuaderno en el inicio de sus diseños y lo extendió al mayor, quien lo tomó entre sus manos, comenzado a admirar los dibujos plasmados en las hojas blancas. Conforme más iba avanzando más se iba convenciendo de que no eran malos diseños, sino que aún no estaban terminados por lo que la idea que el menor quería transmitir con la ropa no estaba muy clara.
Sin embargo, fue hasta que notó el nombre del rubio en la parte inferior de todas las hojas, que volvió su vista al mismo, parecía sorprendido.
— ¿Tú los creaste desde cero? —cuestionó.
— Sí, algunos llevan más tiempo que otros.
— ¿Y en todos pones tu nombre?
Eso confundió a Felix.
— Por supuesto... —sacudió su cabeza un poco desconcertado— Aquí hay que cuidarse mucho del plagio, por ello pongo mi firma.
Hyunjin desvió su mirada a la ventana, frunciendo su ceño después. Felix intentó hacer que el mayor volviera a mirarlo, acercándose e inclinándose un poco también.
— ¿Hyunjin? —murmuró.
De repente el mayor volvió su vista a él, sobresaltando al pecoso quien quiso retroceder, pero Hyunjin puso una de sus manos en la espalda ajena, sosteniéndolo para mantenerlo cerca. Felix tras eso puso sus manos en los hombros del mayor y se inclinó hacia atrás.
Parecía ser el único avergonzado por ese movimiento, ya que Hyunjin se veía tan neutral como siempre.
— ¿Has compartido esto con alguien? —su tono de voz le indicó que estaba sorprendido.
— ¿Eh? ¿A qué te refieres con alguien?
El mayor se puso de pie pero aún así no soltó al menor.
— Me refiero a que si has compartido tus diseños con alguna empresa, diseñador o alguna persona que pueda estar asociada a una marca.
— ¿Qué? —confundido cuestionó, pero inmediatamente reaccionó—. No, claro que no... —sonrió de forma leve— Quería presentar primero en la universidad, después quería mostrar los diseños con la marca Kiyang bajo la familia Yang...
Hyunjin se sorprendió más de lo que ya estaba, obviamente conocía a la familia Yang, los conocía perfectamente y sabía cómo ellos se mostraban en la prensa. ¿Y aún así Felix quería asociarse con esa familia? Estaba claro que al entrar como trabajador de la marca Kiyang se estaría trabajando bajo el cuidado de las tres, pero en el mando sólo se estaría bajo una, la desición ya era de cada quien.
— ¿Por qué...? —finalmente soltó a Felix y éste pudo retroceder.
— Mh... —se encogió de hombros y también alejó sus manos del mayor—. Admiro demasiado a tu familia, a ti... Incluso a la otra familia pero los Yang son muy estrictos, diría que los más estrictos, siento que para ser perfecto debo trabajar con ellos para así lograr ser tan perfecto como ustedes...
No obstante, antes de que Hyunjin pudiera hablar, Felix continuó:
— Seguramente piensas que es tonto, ¿No? Por ello estás tan sorprendido... —una risa nerviosa escapó de sus labios— Tú eres el que está detrás de las pantallas, tú conoces mejor que nadie a las familias y cuál es mejor... —suspiró.
— Tú de verdad... —murmuró alejándose un paso, lo cual hizo que el pecoso volviera a mirarlo—. ¿Tú de verdad piensas que somos perfectos?
— ¿Eh? ¡Por supuesto que lo son! —esta vez él fue quien tomó las manos ajenas—. ¡Sus diseños, su forma de vestir, hablar... Todo!
Eso más que halagar a Hyunjin, le hizo sentirse triste. Al menos aún no, pero pronto él sería visto así ante los ojos de todos, como el hijo perfecto cuando en realidad no tenía nada de perfección ya que eso ni siquiera existía como tal. Sin embargo, ser visto así, y tener que aparentar eso... No lo quería.
— Felix. —soltó sus manos y pasó las suyas por el rostro del mismo para sujetar sus mejillas con delicadeza—. No somos perfectos...
— Para ti es fácil decirlo. —bajo el volumen de su voz—. Eres muy guapo, millonario, hijo de una de las más famosas familias del mundo... Sabes bailar, cantar, rapear, modelar... —apretó la mandíbula antes de desviar su mirada.
— ¿Eso me hace perfecto? —frunció su ceño pero no dejó que respondiera—. Si no tuviera esas características, ¿Seguiría siendo perfecto?
— No quise decir —el mayor le interrumpió.
— ¿Tus amigos son perfectos para ti? —esta vez su tono era un poco más alto, fácilmente se podía deducir que estaba molesto debido a su actitud tan tranquila—. ¿Seungmin es perfecto para ti?
— Hyunjin... —nuevamente fue interrumpido.
— ¿Y Jisung? Él te gusta, ¿No crees que es perfecto? —poco a poco el enojo disminuyó luego de decir eso, pero la emoción anterior se convirtió en decepción—. ¿O sólo yo lo soy ya que tengo bonito rostro, dinero y habilidades que aprendí a base de muchísimo esfuerzo como todos aquí?
Finalmente lo soltó, apartandose de él lentamente. Sabía que Felix veía a su familia y a las otras dos como personas perfectas, pero esperaba una razón que no fuera esa tan superficial. No quería sentirse "especial" sólo por sus privilegios, sin mencionar sus habilidades, claramente.
Tomó su mochila de regresó y salió del aula. No quería pensar que de verdad ese era el pensamiento del pecoso, pero realmente se había molestado al oírlo. Su vida no era color de rosa, día a día se le exigía ser de una forma en la que no era él, simplemente para "encajar" con la imagen perfecta de sus padres. Sin embargo; Ellos, a quién todos veían como perfectos, le exigían todos los días volverse superficial, arrogante, ambicioso, cruel y de más cosas.
En su casa habían discusiones, peleas y de más, además desde pequeño le quisieron inculcar una estúpida rivalidad con los hijos de las otras dos familias, que lamentablemente habían logrado un poco con uno de esos chicos que no tenía la culpa. No era algo de lo que se podría sentir orgulloso, pero a lo que se refería era que realmente absolutamente no había NADA de maravilloso y perfecto en su vida.
Felix permaneció quieto hasta que la puerta se cerró. No esperaba que Hyunjin tuviera una actitud tan fuerte e intimidante, estaba claro que no lo conocía de toda la vida para saber eso, pero se mostró como alguien tranquilo, tan tranquilo que parecía de esas personas las cuales preferían no molestarse.
Por supuesto ahí entendió que hizo mal... Fuera Hyunjin de esas personas o no, suponer que se iba a quedar callado ante una falta de respeto u ofensa era humillante.
Reaccionó finalmente.
— Mierda... ¿Qué hice? —murmuró fastidiado consigo mismo.
El mayor se había portado tan amable con él, no podía ni quería dejar las cosas así; Por lo que luego de tomar su mochila, inmediatamente salió del salón, olvidando sobre la mesa su cuaderno. Miró por ambos lados del pasillo pero no logró visualizar al rubio, por lo que corrió a su salón, esperando encontrarlo allí.
Entró lentamente al auditorio, habían sillas por todo éste frente al escenario y algunas mesas estaban situadas a los costados. Algunos docentes y alumnos ponían alimentos sobre las mismas, comida que parecía ser hecha por los estudiantes, lo cual le hizo sonreír ampliamente, pensando en lo talentosos que eran todos ahí.
Tras distraerse un rato viendo lo que ocurría, y luego de ayudar en lo que pudo (ya que algunos estudiantes se acercaban a pedir ayuda), miró al escenario. Jisung y Seungmin habían comenzado a cantar con micrófono abierto y sin música, por lo que los admiró por el tiempo que duraba la canción, la cual pudo reconocer inmediatamente.
Zombie, Day6.
Era una de las bandas que últimamente se escuchaba demasiado, conocía la canción a un punto donde podía apreciar de los rangos vocales con facilidad. No era experto, pero como alguien con un oído agudo, debía admitir que esos dos lo hacían bien. Jamás esperó que la voz de Jisung pudiera ser tan... Adictiva. Por otra parte, tenía que confesar que no creía que Seungmin cantara.
Cuando terminaron del ensayo ambos regresaron detrás del telón, así que los siguió luego de subir las escaleras que llevaban a lo que era la parte trasera del escenario.
— No sabía que cantabas. —fue lo primero que dijo al castaño.
Éste (quien estaba acomodándose el audífono) volteó un poco, sólo lo suficientemente para mirarlo de abajo a arriba y de reojo. Luego se levantó por completo y suspiró, mientras continuaba acomodándose el micrófono.
— ¿Cuáles creías que eran mis habilidades?
Respondió Seungmin.
— No lo sé. Te ves más del tipo fotógrafo. —sonrió y ladeó un poco su rostro a la derecha—. Ya sabes... Tal vez del tipo que fotografia diseños... ¿robados?
Eso bastó para que el castaño frunciera su ceño antes de girarse al rubio, haciendo contacto visual con él.
— Que mala imagen tienes de mí... Y es peor teniendo en cuenta que ni siquiera hablamos tú y yo. —suavizó su expresión—. ¿Tan mala impresión te di, Hyunjin?
— ¿Cómo crees? No podría juzgarte sin tener ninguna razón. —retrocedió hasta recargarse en la pared detrás de él.
— Ah ya entiendo. —una sonrisa finalmente se formó en sus labios—. Felix te dijo que yo tomé uno de sus diseños, ¿Cierto? —no esperó a que respondiera— Ese mocoso suele tirar los bocetos que no necesita, y ya sabes lo que dicen; "La basura de unos es el tesoro de otros."
Hizo un ademán con sus hombros y después tomó el vestuario que había sobre algunas cajas de allí, quitando su mirada del rubio.
— Y si te preocupa que pueda tomar sus bocetos para terminarlos y hacer pasar sus diseños como míos entonces puedes estar tranquilo. —sacudió la camisa que tenía en manos—. Jamás le haría eso a Lix.
— ¿Te gusta?
Esa pregunta creó un silencio. ¿A qué viene eso? Pensó Seungmin sintiéndose incómodo y algo... Agobiado al sentir que sobrepasaba una línea de límites. Pero antes de que pudiera responder, el mayor se justificó.
— Lo siento. —sonrió amablemente—. El otro día no pude regresarte tu pregunta, Seungmin... —una leve risa escapó de su boca—. ¿Y entonces?
El nombrado volvió a mirarlo, manteniendo así más tiempo el contacto visual pero sin responder nada. Sentía que no tenía porqué responder si no quería hacerlo, pero en cierta parte también sentía que le debía la respuesta; Ya que aquella vez él fue muy directo, ahora Hyunjin le había volteado eso.
— No. —contestó.
— ¡Hyunjin!
Antes de que alguno pudiera decir algo más, la voz de un tercero les interrumpió; Hyunjin ni siquiera pudo voltear, sólo sintió unos brazos rodearle pero sabía de quién se trataba, por lo cual se sorprendió.
— ¿Felix?
Seungmin se dio la vuelta y continuó juntando el vestuario junto con los accesorios que usaría.
— ¡Perdón, perdón! —dijo Felix con un tono alto para así no ser interrumpido— ¡Asumí algo muy tonto! —se aferró más al cuerpo ajeno— Creer que tienes habilidades sólo por venir de donde vienes y minimizar todo tu esfuerzo es... Tan estúpido de mi parte...
El castaño sorprendido volvió a girarse a ellos, consiguiendo así la mirada de Hyunjin pero eso no le importó. Se acercó un poco, seguía sorprendido así que no pudo avanzar tanto.
— Felix... —murmuró el mismo— ¿Estás llorando?
La pregunta sorprendió a Hyunjin, ¿De verdad estaba llorando? Quiso voltearse para confirmar las palabras del castaño pero el agarre tan fuerte que Felix tenía en él se lo prohibió, lo cual le dio validez a lo antes mencionado por Seungmin.
— Lo siento... —murmuró sin soltarse.
— Hyunjin, tú...
— Perdona. —hizo una pequeña reverencia ante el castaño—. Hablaré con él en otro lugar.
Tras asegurarse que Jisung no estuviera cerca, finalmente pudo girar su cuerpo pero eso no hizo que Felix lo soltará, simplemente hizo que el abrazo que tenían se volviera frontal; Sin embargo, gracias a que ahora estaban de frente, Hyunjin pudo moverse con más facilidad en compañía del menor.
— ¿Cómo puedes llorar una hora completa?
Murmuró Hyunjin picando la mejilla del pecoso (quien estaba limpiando el resto de lágrimas) pero eso provocó otro sollozo y que el llanto regresará, por lo que asustado se alejó.
— ¡Ah... Lo siento! —avergonzado se disculpó.
Felix nuevamente continuó llorando, pero no podía evitarlo, hace rato quería dejar de llorar pero simplemente no podía; Tal vez era el hecho de ofender a alguien que siempre se mostró tan dulce con él, o quizás fue suponer cosas tan erróneas de alguien, o probablemente había sido el hecho de que minimizó los esfuerzos de otros, haciéndoles sentir que no eran suficientes.
— Oye... —murmuró— No estoy enojado contigo.
El menor eventualmente miró al rubio, pero éste tenía su mirada en otro lugar del aula.
— Fue simplemente que estoy harto de que piensen eso de mí. —suspiró— No quiero ser visto como alguien perfecto, sabes. Porque así tendría que seguir un estereotipo, no podré vivir, no podré hacer lo que yo quiero... —volvió su vista al pecoso, sonriéndole al cruzar miradas.
— Como... —dejó de hablar al ver que se acercaba.
— Como los medios del entretenimiento. —sentenció y después con la yema de sus dedos limpió las mejillas foráneas, manteniendo su dulce sonrisa.
— Lo lamento... —intentó desviar su rostro pero Hyunjin con el agarre que tenía lo regresó, chocando sus miradas otra vez.
— Está bien. —acarició con sutileza los pómulos impropios—. Tenías un punto de vista erróneo, pero lo que importa es cuestionarse y mejorar, ¿No crees, bonito?
— Realmente no quería ofenderte...
— Hey, shh... —bajó el volumen de su voz para calmar al menor— Dije que estaba bien, ¿Entendido? Deja de preocuparte por eso, sé que te sientes mal, pero mírame... —deslizó con lentitud su diestra hasta alcanzar la foránea, entrelazando sus dedos— No estoy molesto, bonito.
Felix asintió con su cabeza.
— Entendido, perdón...
Hyunjin rió suavemente.
— Para ya de disculparte. —mediante la mano que aún se encontraba en su mejilla, alzó un poco más el rostro ajeno, teniendo así un contacto visual más cómodo—. Te dije que estás perdonado y aún así continúas pidiendo mi perdón... —inclinó ligeramente su rostro a la derecha— No me gusta cuando la gente se disculpa sin haber hecho algo malo antes, así que Felix... Detente.
El pecoso mantuvo su mirada en él sólo unos pocos segundos ya que al sentirse intimidado inmediatamente descendió ésta, asintiendo de forma lenta. Su corazón comenzó a latir muy rápido y sus manos habían empezado a temblar. El tono de voz de Hyunjin y su mirada... Era tan dulce pero al mismo tiempo fue... Agresivo.
— ¿Qué está pasando?
Felix salió se su burbuja al oírlo nuevamente. Hyunjin ya se encontraba de pie mirando por la ventana así que algo confundido se levantó y también miró a través de ésta, observando que muchas personas estaban entrando al campus.
— Ah, siempre vienen personas al evento semanal. —respondió.
— Entonces el auditorio está llenándose, ¿Cierto? —preguntó mirando al menor quién asintió—. En ese caso deberíamos ir, me gustaría ver a tus amigos cantar. —sonrió dulcemente.
Sin esperar respuesta tomó la mano de Felix y así lo llevó consigo por los pasillos hasta el auditorio. Había demasiada gente, algunos alumnos saludaban al resto ya que al menos la mayoría se conocían, pero sin importarle ésto continuó caminando.
Al entrar al lugar, al menos más de la mitad de los asientos estaban ocupados; Lo cuál le sorprendió al darse cuenta que en verdad mucha gente había ido a ver actuaciones de alumnos de universidad, todo ahí parecía como si de un concierto se tratase.
— ¡Ah, iré a animar a Seungmin y a Jisung! —habló Felix soltando la mano foránea—. Si quieres puedes tomar asiento, ¡Ya vuelvo!
Una sonrisa bastó para despedirse e irse. El de cabellera larga acató lo antes dicho y buscó algunos asientos libres y con un ángulo bueno para presenciar todo a la perfección. Cuando los encontró, iba a ir a ellos pero una voz que le dejó helado lo detuvo;
— ¡Hyunjin! ~
La voz del menor le erizó la piel. ¿Qué hacía ahí? Se preguntó sorprendido. Aún así se dio la vuelta lentamente, quedando de frente con el pelinegro quien mantenía una amplia sonrisa la cual no fue correspondida.
— Jeongin. —murmuró.
• ¡Hola! Espero estén teniendo una linda mañana/tarde/noche y que estén disfrutando de ésta.
Perdonen si tuve algún error ortográfico o en la redacción, si es así pueden decirme y lo editare.
Muchísimas gracias por leer y por todo el apoyo, y lamento la tardanza.
¡Hasta luego!
♥︎
© CB97ONEB
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