-A medida que el tiempo iba transcurriendo en el mundo divino, en el mundo humano pasaba un poco diferente, pues apenas la tarde estaba comenzando a duras penas por ese lado, bajo el sol de aquella cabaña de trecho a mano realizada, estaban los dos hombres echados en el suelo todavía bajo el efecto del tranquilizante de hace un buen rato de hora les habían dado para su primer encuentro en medio de aquella selva, a pesar de que no estaban conscientes de que ellos se habían topado con algo serio, veían que en sus iris había un ligero resplandor palpitante que les llevaba a un sendero, lo sorprendente es que ninguno de los dos podía hablar, solamente se empezaron a comunicar por señas sobre el camino a tomar, el cual era realmente largo pero con el paso seguro que tenían pero en los alrededores habían cosas tan raras como inesperadas.-

-En sus alrededores habían personas corriendo a los alrededores gritando desfavorecidas gracias al gran temor que se avecinaba a sus espaldas, en un principio Diadoro creyó que huían para ir a verlo, pero al momento de darse la vuelta había una enorme sombra que estaba postrada delante suyo, era una silueta desconocida de un ente de tamaño casi grande, una capa llena de plumas y ojos blancos que les daba una mirada amenazante, ninguno de los dos podía moverse por más que intentaban forzar sus pies a hacerlo, era como si sus piernas se hubieran convertido en piedra pesada para no moverse en ningún momento, aquel ente estiró sus brazos para alcanzar a ambos sujetos antes de llevárselos de golpe hacia una extraña cueva donde en golpe ambos seres pudieron finalmente gritar cuando vieron a cuatro bocas abrirse de golpe para ellos, como si quieran decir o hacerles algo fuera de lo común, agitados y con algunos que otros temblores en sus cuerpos como si de un enorme frío se tratase.-

Gomez: J-jefe, jefesito ¿se encuentra bien?

Diadoro: e-eso creo Gomez, ¿dónde demonios estamos ahora?

Gomez: eehh... Parece que estamos en una especie de habitación, jefe.

-Mirando un poco a los alrededores como examinando el espacio en el que ahora se encontraban, habían mascaras mirándoles fijamente, cuadros con pinturas hechas a mano aguardando una originalidad bastante destacable en los colores y formas que contrastaban una a la otra, algunos mostrando belos paisajes, otros revelando parte de la cultura, pero lo que les llamo la atención fue aquella puerta abrirse con lentitud llevandose la atención a lo que podría suceder, pero al no ver nada se miraron mutuamente acortándose de hombros.-

Grinto: que bueno que despiertan.

-El sonar de aquella voz les hizo sobresaltar del miedo tras llevarse el susto sobre aquel que estaba a uno de los lados de piernas cruzadas como de costumbre, un gesto relajado con la mirada a medio abrir, los dos parpadearon un par de veces, también se rascaron los ojos tratando de no verse tan afectados por la grata sorpresa de ver a aquel físicamente demacrado hombre delante suyo.-

Diadoro: ¿G-grinto? ¿D-de verdad eres tu?

-Preguntó en una mezcla de nervios e incredulidad al ver de quien se estaba tratando, obviamente mas sorprendido por su físico que por el hecho de que estaba delante suyo aquel que por un tiempo ha sido un poco mas que su compañero de clases.-

Grinto: si, así es.

-El maestre respondía con su típica voz calmada a diferencia de los dos que estaban con un tono de voz algo nerviosa, la cabeza de piedra estaba cerca de Grinto mirando con seriedad aquel par sin decir una sola palabra durante esos minutos.-

Grinto: ha pasado un buen tiempo desde la ultima vez.

Gomez: s-señor Grinto, n-n-no pensábamos que estaría por estos lares.

Grinto: no suelo frecuentar mucho estos sitios, pero agradezco haber venido.

-Suavemente acomodó sus piernas para cambiar el orden de su cruce.-

Grinto: siento haberles dado un susto tan repentino, solamente esperaba a que pudieran estar bien para entablar una conversación con ustedes, si están dispuestos.

Diadoro: ay siempre tan formal hasta para hablar.

-Quejó mientras se rascaba la nuca en una mueca de fastidio.-

Diadoro: ¿que mas quieres hablar? Crei que nuestro acuerdo estaba claro.

Grinto: y lo sigue siendo.

Diadoro: ¿y entonces?

Grinto: es solo que ha surgido una situación especial donde aparentemente habrán cambios significativos en el curso de la vida, y en esos cambios ustedes parecen verse involucrados en algunas cosas.

Gomez: ¿n-no-nosotros?

Grinto: así es.

Gomez: n-no tenemos idea de lo que dices, de-debe tratarse de una equivocación.

Diadoro: si, lo que dijo Gomez, no tenemos nada que ver en esas cosas tan raras en la que estas metido.

Bernie: ¿cómo que no?

-El sonido de la otra voz que vino a acompañar al maestre hizo que los dos saltasen del miedo ahogando un grito antes de buscar el causante del ruido de una piedra golpetear el suelo, espantandose más cuando aquella cabeza revotar delante de ellos con una mirada de enojo y seriedad.-

Bernie: ¿ya se olvidaron de las lecciones donde les enseñe a no mentir?

-El temblor en sus cuerpos hacia notar que el temor en ellos era mas que palpable.-

Diadoro: ¡u-una cabeza que habla!

Gomez: ¡Esta hablando!

-La mencionada cabeza se movilizó hasta quedar delante de ellos.-

Bernie: ¡y puedo hacer más si ustedes no responden a la pregunta!

Diadoro: e-espera, espera, espera, te... Creo conocer de algún lado.

Bernie: deberías de hacerlo.

-El ex-alcalde parpadeó un par de veces, también se rascó los ojos en esas veces tratando de asimilar de que no era sueño sino la realidad, entonces cayó en esa cuenta de que era mas real de lo esperado.-

Diadoro: ¿Señor Bernie?

Bernie: ¡Maestre Bernie para ti!

-La mandíbula parecía colgarle de la sorpresa.-

Diadoro: ¿Q-que haces aquí? Creíamos que estabas...

Bernie: ¡pues no!

-En uno de sus saltos alejó al par por el susto.-

Bernie: desde que casi me llevan al mundo divino me he convertido en una cabeza de piedra por el resto de no vida, por eso aun sigo aquí.

Gomez: ¡E-eso es increíble!

Bernie: no tanto con lo que tuve que ver en estos días, de un par de malagradecidos abriendo portales al mundo divino para traer a los divinos al mundo humano el cual tanto Grinto como sus alumnos intentan salvar cada que dicho divino hace estragos.

-Replicó con un enojo palpable en su voz mientras que en su mirar iba de un lado a otro para ver esos rostros que una vez han sido parte de su infancia hasta que cada uno había tomado la decisión de ir por su propio camino, a diferencia de Grinto que estaba mas calmado solo su sonrisa bajo un poco en ver como el par al reconocerlo no hayan dado una señal de que fuese grato su visita, sin embargo, ese mismo par al verse acorralado trataba de evadir el tema.-

Diadoro: ¿n-nosotros? ¿Abriendo portales? ¡N-ni siquiera sabemos como se hace!

Bernie: no se hagan los tontos, hemos visto con estos ojos de piedra que ustedes han liberado un divino justo frente a nuestras narices solamente para liberarse de los Combo Niños.

Gomez: e-eso no tiene ningún sentido, n-no estamos en contra de ellos.

Diadoro: si! Digo no! Nuestro deber no es tener que hacerles algo de mal a los Combo Niños, solo queríamos.... Eeh... ¡Darle una sorpresa a la alcaldesa!

-Una gota enorme resbalaba en las cienes de los dos, pero la cabeza de piedra al conocer esos síntomas de nerviosismo solamente les dio una mirada penetrante que sin duda alguna hacia que loa dos se sintieran observados bajo la mirada del viejo maestre que una vez habían visitado con algo de constancia en su infancia, añadiendo que Grinto conrinuaba mirandoles con esa calma característica suya fue entonces que sin tener opciones de alguna excusa los dos fueron bajando un poco sus nervios.-

Diadoro: ¿p-pero porque preguntan eso?

Grinto: solo quisiéramos hacerles unas preguntas, no tiene que ver con el pasado de nosotros, sino del presente.

-Parpadearon un poco antes de verse mutuamente, ligeramente se fueron alejando uno del otro para el rubio volver a tener la misma arrogancia y orgullo de siempre.-

Diadoro: claro, espero que no tenga que ver con esos divinos.

Bernie: oh por supuesto que tiene que ver.

Diadoro: oh por favor...

Gomez: ¿para que quieren saber?

Grinto: solamente queremos aclarar algunas cosas, luego de esto lea dejaremos por su lado.

Diadoro: ¿lo prometes?

Grinto: si mintiera no les estaría asegurando eso, podemos hacer un justo trato que nos pueda hacer las pases al final de este día, ustedes nos dicen la información que les preguntamos y nosotros hacemos como que nunca nos conocimos, es un traro justo, ¿no creen? Yo si.

-Los dos se miraron mutuamente durante unos segundos antes volver a con ellos, no estaban seguros si debían de confiar plenamente en las palabras ajenas, pero el agregado final era un sello que solo Grinto podía hacer cuando hablaba en serio.-

Diadoro: mmmmm bien! Pero no aseguró responder a todas hoy en día.

Grinto: puedo conformarme con eso.

-La cabeza de piedra solo regreso un poco para quedarse alado de su alumno mas leal.-

Diadoro: y trata de no tardar mucho, tengo una agenda importante y muchas cosas que hacer.

-El maestre solo se acortó de hombros ligeramente, pero estaba listo para iniciar sus preguntas, mientras tanto afuera del sitio, la alcaldesa estaba llegando con su pequeña caravana al sitio encomendado donde esperaría al líder de la tribu que venia portando su bastón característico para sostenerse de pie durante aquellos momentos, ambos se miraron mutuamente un par de minutos antes de ser escoltados a un sitio especial donde las sillas eran de troncos cortados con el tiempo y pulidos por los habitantes de la aldea en compañía de sus distintivos adornos, ambos se sentaron lo mas cerca pero respectivamente distanciada posible para no tener incomodidades, la traductora de ambos estaba a la orden de traducir las palabras de cada uno después de que los diálogos se dieran entre las dos partes.-

Alcaldesa Ruelas: muchas gracias por aceptar esta reunión con usted, espero no poder quitarle mucho de su tiempo.

-La traductora hacia su trabajo mientras que la rubia estaba con una sonrisa tranquila y mirada serena mientras que el líder de la tribu escuchaba la traducción dada y responder en su idioma.-

Líder de tribu: el gusto es mio, espero podamos llegar a un buen termino en este aniversario que se aproxima

Alcaldesa Ruelas: lo mismo digo, las cosas están acelerándose a un paso poco común de lo habitual, pero estamos muy emocionados de poder resaltar la importancia de nuestros orígenes tanto como siempre solemos hacer.

Líder de tribu: nosotros también estamos muy emocionados por el aniversario de este año, es donde el universo estará con una sorpresa bajo la manga para nosotros.

Alcaldesa Ruelas: ¡Es una gran noticia! Esperamos con gran emoción esa sorpresa tan grande que nos depara el universo para este año.

Líder de tribu: universo siempre tiene una sorpresa, este año, promete darnos una gran sorpresa que nos dejará a todos en el borde de la sorpresa y el trance.

Alcaldesa Ruelas: me encantaría poder conocer dicha sorpresa, pero sé que no debo intervenir hasta que sea momento, en ese caso, me gustaría conversar un poco con usted respecto a algunas cosas referentes a ustedes.

-En la espera de que el ajeno pudiera responderle, ella saco una hoja con el boceto de los posibles adornos y actividades exclusivas del festival conmemorativo, luego la entregó despacio al señor.-

Alcaldesa Ruelas: aquí tenemos un boceto de las actividades conmemorativas para las actividades, nos encantaría que ustedes pudieran ser parte de ellas, se que ustedes tienen maestrías en estas artes tradicionales y su Novanok es especial, su Capoeira y arte es la gran inspiración para la ciudad, por eso quisiera saber si nos darían el honor de ser participes de las actividades conmemorativas.

-Mientras la traductora hacia su trabajo, el señor veía con detalle el boceto y cada una de las actividades que se planteaban, aunque había una cosa que le llamó la atención, misma que señaló.-

Líder de tribu: ¿esto que ser?

Alcaldesa Ruelas: oh, es la palza para una estatua que planeamos hacer a los salvadores de nuestra ciudad actual, así como abajo colocar un conmemorativo de todos los combo niños que por siglos han salvado la ciudad de los Divinos, sabemos que ustedes tienen godos estos registros bien cuidados, y respectamos si no quieren darnos muchos detalles, es solo que la gente de Novanizza está tan encantada con los Combo Niños que estábamos planeando hacerles una estatua en su honor, pero primero quisiéramos tener su aprobación para empezar.

-El señor miraba fijamente la susodicha plaza mientras la traductora trabajaba profesionalmente, la mirada que tenia no mostraba una decisión alguna mas que estar analizando la situación con calma mientras que con su mano libre acariciaba su barba larga.-

Líder de tribu: es un gesto muy generoso de su parte, pero debo consultarlo primero con el pueblo, nuestro anonimato como parte de nuestro trato hacia nuestros Capoeristas es una regla que no debemos romper.

Alcaldesa Ruelas: lo entiendo perfectamente, por eso quise venir en primer lugar para conocer su opinión.

Líder de tribu: dejame consultarlo primero con mi gente sobre el asunto, con respecto a lo otro, nos honraría ser participes de sus actividades.

Alcaldesa Ruelas: ¡Que honor!

-Exclamo ella juntando sus manos con una sonrisa ampliada.-

Alcaldesa Ruelas: usted digame cuando pueden venir y con gusto les recibimos para los ensayos.

Líder de tribu: considero que venga usted misma a corroborar primero, a estas horas mi pueblo esta esperando.

Alcaldesa Ruelas: ouh, bueno, supongo que no hay problema con eso.

-Los dos se fueron levantando lentamente para así ir siguiendo al líder de la tribu que aun portaba un rostro relajado y neutro.-

Líder de tribu: a mi pueblo le encantará conocerla en persona, y no dudará en aceptar su petición.

Alcaldesa Ruelas: espero darles una buena primera impresión y no incomodar en su labor.

Líder de tribu: para nada.

-Así fue que los dos se dirigieron a la aldea, que no diferenciaba mucho de la ciudad salvo que no habían grandes edificios ni mucha tecnología, solo era una tecnología que era amable con el medio ambiente, pinturas de vivo color adornaban las paredes, los niños jugando y saltando en piruetas, juguetes tradicionales rodando por todos lados, abuelos recostados en sus sitios descansando, maestres tocando sus típicos instrumentos, los jóvenes creando, parecía la ciudad ideal para vivir una vida plena sin muchas preocupaciones, salvo que al momento de ver al líder todos pararon sus quehaceres para hacerse reverencia delante de su líder, la alcaldesa estaba un poco nerviosa pero la confianza del señor a su lado le calmo inmediatamente.-

Líder de tribu: ¡hermanos, hijos! La alcaldesa Ruelas nos da el honor de visitarnos hoy en día, trayendo con el viento buenas y nuevas noticias.

-Mientras la traductora hacia lo suyo, la rubia escuchaba como murmuraban entre ellos y la miraban, ella solo respiro hondo para dar su mejor sonrisa.-

Alcaldesa Ruelas: nobles y respectados ciudadanos, es un gran honor para mi poder conocerlos en persona.

-Decía con la voz en alto pero dulce como siempre.-

Alcaldesa Ruelas: he venido por ustedes para así poder dar con su permiso una gran noticia para todos.

-Ninguno década algo.-

Alcaldesa Ruelas: como sabrán, el festival de aniversario esta próximo, y este año me complace decir que les invito cordialmente a cada uno de ustedes a formar parte de las actividades conmemorativas del aniversario de nuestra historia, donde ustedes podrán expresar ante toda Novanizza su creatividad, cultura, gastronomía, tradiciones y habilidades con todos los ciudadanos de la ciudad, he pedido permiso a su líder para comunicarme hacia ustedes en espera de su aprobación.

-Sorprendidos por lo que la traductora les tradujo en su idioma las palabras de la rubia, ellos empezaban a mostrar emoción por ello, lo cual, daba un aire positivo para todos, incluyendo al señor que la miro unos minutos antes de volver con su pueblo.-

Líder de tribu: ¡este año vendrá lleno de sorpresas! Debemos estar preparados para recibir lo que el universo nos trae para nosotros, en nombre de nuestra sangre y nuestros antepasados, recordar las hazañas e historias de cada uno de los nuestros será una huella imborrable escrita en la piedra, ¿ustedes quieren resaltar nuestra existencia con la gente del pueblo?

-La traductora le ayudaba a entender a la rubia lo que decía tras ver a la gente exclamar un a respuesta afirmativa con una emoción equivalente a la de un niño que se emocionaba por ir a algún lado, al menos país lo veía, fue entonces que al cruzar miradas unos con otros el señor asintió suavemente con la cabeza.-

Líder de tribu: aceptamos ir.

Alcaldesa Ruelas: mil gracias por eso.

Líder de tribu: sobre lo otro, debo consultarlo con los mios, le haré llegar nuestra respuesta cuando tengamos un veredicto.

Alcaldesa Ruelas: estaré esperando dicha respuesta, sea cual sea, será respectada a puño y letra.

-Los dos extendieron sus manos y estrecharon las mencionadas.-

Líder de tribu: ¿no gusta quedarse un rato mas?

Alcaldesa Ruelas: me encantaría, pero tengo una agenda que cumplir.

-En lo que la traductora trabajaba, el líder se le acerco a ella para marcar su frente con una tinta roja a base de su pulgar.-

Líder de tribu: tenga cuidado en el camino de regreso.

Alcaldesa Ruelas: gracias, lo tendré.

-Escoltada hacia la salida, llamó a los suyos para que le ayudasen a salir del lugar, mientras que detrás suyo escuchaba a loa tambores retumbar con alegría y emoción, los cánticos aullados y los cascabeles/maracas sonaban como gotas de lluvia cayendo sobre aluminio o como piedras resbalando en manada hacia un mismo destino.-