-Entre tanto el mundo divino transcurrieron las horas hasta quedar muy tarde, el mundo humano iba corriendo al mismo compás, horas antes los niños estaban jugando en el patio mientras que la Señorita Soledad se encontraba con Grinto en el aula de clases sentados en diferentes sillas para mirarse frente a frente, lo que no sabían es que el director Bronka estaba desde la puerta observándolos detenidamente.-

Sta. Soledad: me alegra tenerlo acá, digame, ¿qué es lo que tiene para decir?

Grinto: es sobre el tema de los niños faltantes, pienso que deberíamos de hacer algo al respecto pero sin perturbar mucho la paz de su rehabilitación.

Sta. Soledad: ouh si, ¿ha hablado con uno de sus familiares?

Grinto: estoy en ese proceso, necesitó que dispongan del tiempo necesario para que pueda aclarar las cosas con ellos.

Sta. Soledad: espero que eso pueda conllevar a un buen resultado, y que puedan también ir a buenos términos.

Grinto: lo mismo estoy esperando, por ahora solo quisiera pedirle un pequeño favor.

Sta. Soledad: claro ¿en que puedo ayudar?

-Desde afuera el director Bronka no sabia que era lo que decían ya que la puerta no permitía que el sonido se escapase del interior al momento de dar clase, a lo que intrigado miraba sus labios intentando adivinar lo su estarían diciendo aunque no se percataba que su alrededor era dado por los niños que estaban en su mundo, Rafa estaba jugando con Miguel mientras que Mili hacia porras para animarlos, Perla estaba arreglándose en el espejo en lo que Telmo nada mas presumía de su físico fuerte, entre tanto los gemelos estaban dibujando en hojas blancas una escena donde estaban todos los de la escuela aparentemente en el suelo, sin darles importancia alguna su alrededor.-

Rafa: ahora veras este truco.

-Dijo botando de arriba a abajo la pelota mientras Miguel intentaba bloquearle alzando los brazos al mismo tiempo que saltaba, intentando bloquearle aunque Rafa pudo lanzar la pelota muy alto, moverse con su silla de ruedas de un lado a otro atrapando la pelota antes de lanzarla con fuerza hacia el aro más alto.-

Miguel: ¡Woaa!

Rafa: ¡Si!

Mili: ¡wuuu! ¡Vamos equipo!. ¿Huh? ¡Ciudado!

-Les grito a los mellizos quienes estaban terminando su dibujo elevaron la mirada notando que la pelota se dirigía a ellos, Miguel y Rafa intentaron acercarse a ellos lo mas rápido posible para tomar la pelota, sin embargo, los dos mellizos dejaron sus dibujos en la mesa, se alzaron en un salto para quedar a casi par, Rogelio fue el primero en patear hacia arriba apara que Regina diera una vuelta mortal con la cual en el tobillo impacto a la pelota enviándola hacia abajo en donde Rogelio aterrizó para tomarla entre sus manos, seguido su melliza aterrizo en buen pie ante el asombro de los presentes que parpadearon un par de veces, incluyendo Rafa que estaba muy emocionado y asombrado al mismo tiempo.-

Rafa: ¡Cielos, que atrapada tan genial!

-Mencionaba mientras se les acercaba, los mellizos por su parte solo miraban con indiferencia a los presentes que estaban asombrados, ellos solo mantenían la misma expresión con la que llegaron.-

Rafa: ¿nos pueden enseñar cómo hicieron eso?

Miguel: ¡Si! Fue increíble, ¡era como si vooarana de verdad!

Mili: ¿acaso saben jugar Novanok?

-Pero el silencio de parte de los mellizos no les daba una vista muy buena de una respuesta, sin embargo, Rogelio entrego en manos la pelota al muchacho peliazul quien confundido les miraba.-

Rogelio: si, sabemos jugar,

Regina: pero no ahora, por poco arruinan nuestros dibujos.

-Ellos sin mas demora tomaron sus cosas que dejaron a un lado para luego proceder a retirarse de unos confundidos niños que no entendieron el porque de su comportamiento.-

Rafa: oh ¿dijimos algo malo?

Miguel: no lo sé, tal vez fue muy pronto.

Mili: quizás solo no saben que decir, no los conocemos del todo, tal vez si conversamos mas con ellos puedan entrar en confianza.

Miguel: ¡exacto! Además, ellos saben jugar ¿por que no les invitamos un partido?

Rafa: suena excelente, podríamos ser dos contra dos.

Miguel: ooown lástima que Paco no está, el ama el Novanok.

Rafa: ya sé... Esperemos que pronto se recupere para que volvamos a jugar.

Mili: primero, debemos acordar se sea una sorpresa y que ellos no se sientan presionados por nadie.

Miguel y Rafa: ¡Claro!

Mili: ¡bien! Empecemos con el plan.

-Entre los tres se reunieron en privado para susurrar entre ellos sus planes para charlar con los nuevos recién llegados mientras que Perla desde la distancia estaba escuchando un poco lo que pasaba, estuvo presente ante el momento de la hazaña reciente, a lo que una idea se le iba viniendo a la cabeza, Telmo estaba con ella para averiguar el chisme.-

Perla: Telmo, parece que tenemos una competencia difícil.

Telmo: ¿competencia dices? No hay nadie que pueda ganarme. Mírame, ¿quién podría contra esta belleza?

-Ella bufando le jalo de una oreja hasta que quejase.-

Mili: ¡me refería a conocer primero a los nuevos, tonto!

Telmo: ¡Ayck! Auch, ¿y que tienes en mente?

-Tras soltarle el moreno se sobaba la oreja en lo que ella con una mano en la cadera y la otra en el mentón el cual se rascaba mientras pensaba en una idea que le pueda dar un paso adelante de los demás en conocer a los mellizos nuevos.-

Perla: tal vez...

-Pasando unos minutos en los que golpeteaba el suelo con su pie derecho hasta que una idea se le alumbró en la cabeza, chasqueando los dedos junto a una sonrisa maliciosa tomó al moreno del brazo para correr rápidamente hacia uno de los lugares donde planeara todo.-

Perla: espero me sigas el plan o de lo contrario seras el primero en que le diga al director que fuiste tu quien tiro los vidrios en el inodoro.

-El moreno con ojos tan abiertos como platos y una gota enorme que caía desde su cien trago con fuerza su propia saliva dejándose llevar por la chica hacia el sitio elegido, de manera que solo acotaba a sus palabras poniéndose en contexto del propósito.-

Telmo: bien, bien, no esta nada mal salvo un pequeño detalle.

Perla: ¿cuál?

Telmo: ¿dónde haré mi maravillosa entrada?

Perla: ah, bueno eso todavía esta por verse pero de que seras el primero en recibirlos debes hacerlo bien.

-Le señalo con una mirada fija antes de escuchar como la alarma del fin del recreo resonaba con fuerza, la señorita soledad y Grinto se levantaron de sus asientos, el director con alarma busco desesperadamente un lugar donde esconderse, así que en primera instancia opto por ir tras una de las plantas que estaban cerca.-

Grinto: gracias por su tiempo, le avisare cuando tenga novedades.

Sta. Soledad: no hay de que agradecer, puede estar seguro de que esperaré con ansias.

-Los dos se despidieron con la mano antes de que la mujer aplaudiese un poco.-

Sta. Soledad: ¡vamos niños! La clase todavía sigue, esta vez continuaremos con algo distinto, unas marionetas de tela para adornar los molinos.

-Cuando todos entraron el director salió de su escondite suspirando de alivio al no ser visto, se quito un poco de la suciedad y fue caminando de regreso a su oficina pero todavía con la mentalidad de que debía saber que estaban tramando esos dos, que por ahora estaban ejerciendo sus labores cotidianas hasta que fue la hora de cerrar que es donde cada quien se iba tomando por su lado, excepto los niños que estaban reunidos afuera en dos grupos esperando el momento oportuno donde los mellizos terminasen de guardar sus cosas para que Miguel sea el primero en darles la palabra.-

Miguel: ¡hola! Soy yo otra vez jejeje.

-Los mellizos se detuvieron a verle.-

Miguel: eemn, disculpa por lo que sucedió hace un par de horas, solo queremos mostrarles algo que a lo mejor les va a encantar.

Rogelio: tenemos que esperar a nuestra abuela.

Miguel: oh, no se preocupen, todos acá en la ciudad nos conocemos así que no tienen que preocuparse, además, seguro la verán en el camino.

Regina: ¿por donde nos quieren llevar?

Miguel: por allá.

-Señalo un camino a la derecha.-

Regina: ah, es el mismo camino de donde viene.

Miguel: ¡genial! Entonces ¿vienen?

-Los dos se miraron mutuamente, se acortaron de hombros antes de volver con el de anteojos.-

Rogelio: pero date prisa.

Miguel: ¡gracias! Vengan, siganme.

-Emprendiendo una marcha con la cabeza en alto los fue llevando en el camino por el lugar, Rafa y Mili estaban a la distancia cuidando que godo saliese bien.-