XVIII
Elizabeth choca una de sus espadas con la guadaña de El Estabilizador, provocando una leve onda expansiva que los empuja un poco a ambos, luego intenta cortarlo con ambas armas, pero el villano bloquea los ataques con su arma y trata de darle un golpe cargado de energía a la hechicera, pero esta rápidamente deshace sus espadas y conjura un escudo con el que se cubre del ataque, sin embargo, es empujada unos metros atrás.
—¿Fueron mis mascotas, verdad? —pregunta el villano.
—No sé de qué me hablas —disimula Elizabeth.
—Si fueron entonces... —suspira—. Sabía que en algún momento iban a dar problema, pero The Supremacy no me escuchó.
—Porque tal vez no lo sabes todo.
—Pero tuve razón... Al igual como tengo razón al querer destruir esta realidad por el bien de las otras... Ustedes, los hechiceros saben igual que yo que en el gran cálculo del multiverso, una o muchas vidas pueden valer menos o más que otras —pasan unos segundos y Elizabeth, pensativa, no responde—. Supongo que quienes los llaman hipócritas tiene razón —la hechicera maestra se enfada y desde sus manos lanza rayos láser anaranjados que se multiplican conforme avanzan—. ¡Vamos! —recibe los ataques sin intentar cubrirse, dejando una muralla de humo que atraviesa rápidamente para golpear a Elizabeth, pero esta crea un pequeño portal frente al puño de su enemigo que da al lado de su cabeza, provocando así que este se golpee a el mismo.
Al golpearse, el villano sale volando hacia un muro, luego de reponerse mira hacia su enemiga y ve que esta le lanzó una espada, por lo que se teletransporta para esquivarla y aparece detrás de la hechicera, donde intenta cortarla con su guadaña, sin embargo, esta se da vuelta y con su otra espada desvía el ataque para luego lanzar un poderoso rayo láser desde su mano izquierda al enemigo.
Mientras se cubre, el que solía llamarse G'nilsog dice:
—Cuando acabe con ustedes, tendré que darles una visita disciplinaria a las criaturas —se vuelve intangible traspasando así el ataque de Elizabeth e incluso a esta misma para inmovilizarla por la espalda.
—No te corresponde hacerles nada... —dice Elizabeth mientras intenta soltarse.
—Claro que sí... Déjame mostrarte —toca su frente y en los ojos de la hechicera se ve el dorado poder del señor multiversal de la guerra.
Flashback
El Estabilizador, en sus inicios como equilibrador del multiverso, en ese mismo lugar, lleva a cabo un ritual especial con el que activa finalmente todo el poder del Cälem y con ello, apenado destruye todo en dicha realidad, no queda ni polvo de ella, solo un enorme vacío del que después se retira.
En el punto entre realidades, nuestro antagonista se encuentra con The Supremacy nuevamente, quién no lo ve muy feliz con su tarea.
—¿Creíste que ibas a disfrutar esta tarea?
—Claro que no —responde el sirviente de la supremacía—. Solo... son demasiadas las realidades que deben ser eliminadas —trata de disimular que ese no es realmente el problema.
—En ese caso... —le sigue el juego, extiende su mano hacia la derecha y de esta salen cuatro esferas de luz que los rodean sin parar.
—¿Qué es esto? —las esferas se tornan verde, azul y negra respectivamente, mientras una se mantiene blanca.
—Serán tus mascotas, seres que tendrán la misión de elegir avatares que cuiden las realidades con tal de que no se vuelvan peligrosas para el multiverso, tu misión ahora será eliminar los mundos en los que ellos fallen.
—¿No se podrían volver un problema?
—Poco probable, aun así, mantenlos a raya y corrígelos si es necesario, si llegan a hacer algo en contra de lo que creemos.
—Gracias.
—Sabes bien lo importante que es tu labor, pero si no quieres cumplirla, otro ser podría sobrevivir a la guerra y tomar tu lugar, sin embargo, no le desearías ese tormento a nadie.
—Correcto.
—Eres un héroe... Considéralo así, ahora adiestra a tus mascotas, enséñales lo que deben hacer y cómo hacerlo.
—Si señor —arrastra las esferas hacia un portal que las lleva al palacio del vacío, luego las coloca en un círculo y se pone en medio, finalmente agarra la esfera verde—. Luz, velocidad, tiempo y espacio —la devuelve y toma la azul—. Electricidad, poderío, condena y oscuridad —deja esa y agarra la esfera negra—. Mente, emociones, pensamientos, planos mentales y combate —devuelve y toma la esfera blanca—. Átomos, estructura molecular, sigilo y conexión —la regresa y extiende sus brazos hacia sus respectivos lados mientras levita—. ¡Surjan y asciendan mis sirvientes, mis seguidores! —las esferas empiezan a girar alrededor de él mientras se alejan—. ¡Ayúdenme con esta misión y sean héroes también! ¡Levántense mis criaturas de poder! —las esferas empiezan a emitir sonidos, como balbuceos—. Tomarán en cada realidad una forma que sea reconocible para sus avatares y les encomendarán proteger el espacio-tiempo de sus mundos, de lo contrario... Tendré que ir yo a terminar el trabajo.
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