//Igual que la vez anterior, era una premisa, de las creo que 4 o 5 premisas que se debían hacer en los retos wattys, y aprovechando las ocaciones aprovecharé de reescribirlos para hacerlos oneshots sin perder las premisas originales :3 //

*Era una mañana fría y llena de nubes, las aves cantaban al sol de los rayos de Helios quien estaba asomándose desde los páramos para alumbrar las verdosas llanuras que se mostraban en el pasar del camino, mis padres habían preparado todo para que mi hermano y yo podamos asistir a la escuela en la cual soy la única mujer de la clase, el resto eran puros chicos amigos de mi hermano, ninguno se me ha acercado de esa manera por lo que no puedo preocuparme de nada por los momentos, además no es que él tampoco quiera permitir que otros lo hagan, por algo ha insistido en que vaya a la escuela, que no es más que una asamblea en pleno Acrópolis, el profesor le daba igual si estoy ahí así que no tengo problema.*

Hermano: Vamos, ya deben estar esperándonos-

-Si, ya voy!

*Los dos nos apuramos en ir bajando hacia la ciudad de dónde estaremos para escuchar las clases del viejo señor que nos estaba esperando para que podamos iniciar totalmente las clases de manera oficial y solamente tener que atender las lecciones que tenía pautado para ese momento.*

X: Hey Sofía! ¿Cómo estas?

-Hola! Bien gracias ¿y tú?

X: bien, me alegra verte por aquí, quería preguntar si querías venir conmigo la siguiente semana junto a tu hermano a una reunión con mi familia, estaremos todos reunidos y me gustaría verte por ahí ¿quieres?

-Oh, bueno... Debo hablar con mi hermano y padres para consultarlo primero, ya luego te diré ¿vale?

X: de acuerdo, esperaré respuestas Sophy

-Esta bien.

*Y cuando se separó de mi aproveché a tomar asiento alado de mi hermano quien conversaba tranquilamente con sus amigos en lo que el viejo estaba empezando con las clases, añadiendo un poco de sus anécdotas que le ha ocurrido en similitud de lo que estaba explicando en el momento, así que solo anotaba en mi hoja todo lo que sería necesario para mi vida durante mi estadía familiar hasta que sea el día de que tenga que heredar alguna parte de la casa o bien lo que decidan mis padres, aunque no tengo deseos de casarme todavía (que es lo que mi madre quiere) por lo que espero poder convencer a mi padre de que en su momento pueda defenderme por mi misma ante cualquier cosa, pero primero que nada, debo convencer a mi hermano primeramente ya que es un tanto posesivo cuando se trata de que los chicos se acerquen a mí.*

Hermano: ¿Qué haces tan cerca de ella? ¡Dale su espacio personal!

*Y así como es de educado, no teme en decir las cosas en las caras de los demás.*

-Vamos hermano, no ha hecho nada malo.

Hermano: oh si, estaba invadiendo tu espacio personal.

-Eres un exagerado.

Hermano: no lo soy.

-Que si~

Hermano: ¡que no!

-Jajajajaja eres infantil cuando te enojas ¿sabes?

Hermano: si es lo que debo hacer para alejar a esos depravados de ti pues no tendré de otra.

*Solo me quedé riendo levemente hasta que el viejo nos llamó para que sigamos prestando atención a las clases que estaba dando en el momento, así que mi hermano y yo nos quedamos callados en el mismo sitio hasta que luego de que terminase de decir las lecciones de hoy es que nos fuimos caminando de regreso a nuestro hogar aunque los amigos de mi hermano estaban siguiéndonos para saber si nos convencían de ir a esa reunión que pese a que será en unos días deberíamos de estar preparados para hablar con nuestros padres para entonces, por sé que será difícil convencerlos de que por lo menos hagan algo que los haga escuchar las palabras de los dos pero valía la pena intentar.*

Hermano: entonces... ¿Quieres ir o no?

-Aun lo pensaré, estoy entre sí y no.

Hermano: bueno, yo si iré... Pues necesito hablar con el sobre algunos asuntos previos antes de ir al olimpo.

-¿Es sobre la competencia o de algo mayor?

Hermano: algo mayor a eso.

-Espero que no sea grave o malo, o si no quién aguantaría la furia de mamá.

Hermano: eso sí, mejor apurémonos antes de que llegue papá.

*Y así es como aceleramos el paso hacia casa después de que nos despidiéramos de todos los demás y así ir a la montaña para adentrarnos en la casa donde mamá nos esperaba como siempre para que la ayudemos a preparar la cena, momento perfecto para que podamos hablar los 4, por ahora solo debemos estar atentos a lo que podría pasar, por mientras le contábamos a nuestra madre sobre lo aprendido en el día de hoy teniendo su sonrisa estable para que nos diera relajo de estar en su compañía, a pesar de que no tengamos mucho de lo cual tener en cuenta como preocupante ya que al parecer ella prefería hacer que nos entiende en vez de seguir preguntando sobre lo que entendimos pero supongo que ya debe ser por ello que no me debería meter en su forma de ser de la cual fue criada.*

*Cuando terminamos fui a mi habitación a guardar todo lo que había traído en la mañana y durante el camino, entre ellas una suave planta que encontré en el camino para mi pequeño huerto que quiero montar en mi habitación para tener algo de la cual poder auto sustentarme en casos de emergencia pues nunca se sabe cuando puede volver haber una seguía inesperada durante el invierno.*

Madre: Sophy! Tu padre llegó, es hora de cenar.

-Ya voy mamá!

*Gran momento para iniciar uno de los debates serios de la familia ya que de esa forma podremos dar en cuenta lo que queremos contarles; al principio era algo tedioso encontrar el momento para hacer ya que a tras de nada encontraba un tema diferente con el cual conversar así que en cualquier momento que no se le ocurra algo teníamos que decirle, mi hermano fue el primero en ganar una oportunidad para contarle sobre lo que estaba aconteciendo con respecto a la invitación de los dos, nuestra madre no lo tomó a bien como es de esperar y nuestro padre se puso dudoso al respecto pues al saber que yo iría así que solo mi hermano estaba tomando la palabra para dar con mis padres.*

*A veces me gustaría haber intervenido pero al notar que ninguno me quería escuchar no podía tener oportunidad de dar mi opinión, por lo que mientras que estaban ahí yo solo atinaba a escuchar lo que decían hasta al final de la cena que es donde han acordado en visitar el hogar de ellos para entablarlo seriamente, bueno, al menos era un proceso.*

-Bueno, al menos es un buen avance ¿no?

Hermano: ¡tu crees? Viste la cara que puso padre, parecía que quería gritar.

-Claro que lo vi, es una suerte que su cansancio no le permitió hacerlo.

Hermano: eso si... Aaah pero ahora tendré que acompañarlos a casa de el para que puedan asegurarse de que estarás bien.

-Oh vamos, no es la primera vez que me ha tocado lidiar con un depravado, solo una buena patada baja y en la cabeza y ya está.

Hermano: no es por eso, irán demasiados, solo los dioses sabrán lo que podrá pasar si en conjunto se les ocurre hacer algo.

-Puedo saber arreglármelas, en medio de improvisaciones y planificaciones podre darles la cara.

Hermano: lo que sea que vayas a planear hazlo conmigo, para asi estar seguros de que si el plan A no funciona el plan B pueda estar listo.

-Claro que lo planearé contigo ¿quién más que tú sabe como lo planifico a la perfección mis planes?

Hermano: si fuera posible leería tu mente en cualquier momento.

*Los dos nos reímos con levedad ante esas palabras en lo que estábamos preparándonos para dormir, nuestras habitaciones eran separadas así que yo solo estaba mirando por la ventana terminando de anotar algunas ocurrencias que se me habían ocurrido, la verdad son muchos ideales que argumentan lo que sería la educación para ambos géneros, aparte de los eventos que se realicen pues sé que hasta entonces las fiestas privadas solo están para las mujeres en compañía de las clandestinas, pero ¿qué más se puede hacer si ambos géneros trabajan en un solo camino? Podrían ser muchas posibilidades con talentos diferentes en lo que respeta el ser humano como tal.*

*Sin embargo al final de cuentas la última palabra la tienen los dioses que siempre nos gobiernan a plenitud, independientemente del género que seas siempre estarán por encima de los humanos para que solo puedan tener adoración alguna para ellos mismos, pero a veces me pregunto ¿cuál es el origen de ellos para creer que eso es cierto? A veces me gustaría conocer sus estilos de vida o por lo menos tener algún acercamiento con ellos para que de alguna manera u otra pueda tener una conversación, claro, sin que alguno de ellos se enoje conmigo después.*

-Bueno, supongo que por los momentos solo tengo que seguir soñado.

*Después de terminar de escribir mis ideales para cerrar mis hojas y dejarlas guardadas en su sitio seguro para irme a recostar en la cama, dejar la ventana 90% cerrada para que el viento frío pueda entrar a mi habitación, la luz de la luna y las estrellas para solo arroparme con las sábanas y quedarme dormida profundamente sin tener idea de lo que realmente estuviera pasando a mi alrededor por lo que tal vez solo lo sepa de ello cuando despierte si es que alguien me quiere decir algo al respecto.*

*Al día siguiente mis padres y hermano salieron temprano para aclarar con el tema de la fiesta y la invitación para que vaya con seguridad, aunque eso no se sabe si realmente importa o no, de cualquier forma esperaba que no se diera ningún problema.*

Madre: volveremos cuando terminemos, no salgas mucho de casa cuando el ocaso esté cruzando la montaña.

-Por supuesto madre, cuídense mucho por favor.

*Cuando finalmente se han ido pude tener la casa para mi sola, me puse a limpiar y ordenar entre otras cosas más solo porque no tenía nada que hacer al respecto, por lo que estaba nada más y nada menos que haciendo de todo un poco para matar el tiempo en lo que el día se tornaba más calmado ya que el sol estaba tras las nubes que le cubrían totalmente de pies a cabeza como si fuera una manta de la cual solo quedaba el tener que esperar a que el cielo mismo se tornara de tonalidades oscuras, aunque tardará mucho en suceder por lo que he visto.*

-Bueno, creo que ya es todo.

*Dije mirando todo el resultado que obtuve al limpiar todo que tome mi cesta para ir saliendo de casa de camino a la montaña ya que quería recoger algunas cuantas cosas de éstas, y como conocía el sendero más seguro no tenía ningún problema en tener que ir cuesta arriba rodeada de ovejas junto a todo animal silvestre que se encontraría ahí, pero a mi preferencia los más lindos eran los carneros que subían tranquilamente la montaña sin problema alguno, como si ya les viniera de nacimiento el poder escalar grandes alturas siendo ellos tan pequeños en comparación, simplemente eran especiales en lo que sería su naturaleza.*

*Mientras continuaba mi camino el viento solaba fuerte de repente, cosa que no suele pasar en la montaña pues las nubes no estaban tan juntas como para provocar ese tipo de viento o algo similar, pero de todas formas me fui apresurando el paso para llegar a la sima pues sería tedioso el no tener dónde refugiarse mientras que una tormenta o posible tormenta se aproxima, aunque no creo que se haga una de esas así como si nada... ¿O sí? Cuando llegue a la cima no dude en hacer lo que tenía pensado hacer y prepararme para ir a casa hasta que escuché un retumbar de un relámpago que había caído cerca de mí, me extrañé demasiado ya que no había ninguna nube cerca de mi o por lo menos alguna cercana, por un momento creí que solo sería parte de mi imaginación así que seguía haciendo mis deberes pero pronto otro relámpago había caído desde el cielo mismo sin ninguna nube que la pudiese haber sido la provocadora de la misma.*

-¿Qué...?

*No tenía palabras para explicarlo, mis ojos quedaron perplejos de lo que sucedía y ni siquiera tenía una explicación para dar en el momento, pero más de uno empezó a aparecer para solamente quedar mirando hacia arriba buscando alguna forma lo que pudiese provocar aquellos extraños estruendos, por lo tanto, solo me quedaba una extraña estrella de luz que pronto llegó a la tierra en un arcoíris que de la nada había chocado con la tierra hasta tener el punto en que había quedado ciega por un par de segundos.*

-huh.. ¿Qué paso...?

*Luego, empecé a escuchar unas cuantas voces que venían de la cercanía, cuando mi vista se aclaró mis ojos se abrieron tanto como era posible de ver, pues lo que tenía ante mis ojos eran personas quienes portaban armas que hasta ahora no se han visto jamás, al menos no para mí, por lo que me quedé un par de minutos viéndolos hasta que mis oídos quedaron en mejor estado, lo que estaba escuchando era ¿una discusión?*

Hera: no me tienes que mentir, ¡sé que has estado con ella otra vez!

Zeus: n-no sé de qué estas hablando querida jejeje...

Deméter: ajá, claro, como si esas cosas te pasaran.

Hestia: vamos, no empiecen otra vez.

Poseidón: te lo dije, debiste ser una cosa material para que escaparas de su vista.

Hades: no sé para qué me han llamado aquí, no tengo nada que ver.

*Realmente esperaba que todo fuese simplemente un sueño, pero no lo fue cuando una mujer se manifestó con cuerpo humano se dirigió hacia ellos.*

Rea: ya basta todos, ustedes, deben dejar de comportarse como un par de niños que la tierra ya está más que cansada de sus actos.

*Y verdaderamente no estaba para nada segura de que si lo que estaba diciendo era por broma o no sé qué podría procesar mi cerebro.*

Rea: los mande aquí para que de una vez puedan conversas sobre sus problemas, ustedes como dioses deben dejar de lado estos berrinches de una vez por todas.

*¿Acaso escuche bien? ¿O no será que mis oídos ya me están jugando una broma?*

Rea: por eso, decidí llevarlos a la tierra para que puedan solventar sus problemas.

Deméter: pero madre ¿y si los humanos se enteran?

Rea: lo sé, pero para eso sé que debe haber un sitio donde ustedes 6 deberán de lidiar con sus diferencias, y por eso contacté con su abuela para que me mantuviera seguro del lugar donde podrían hacerlo.

*A juzgar por su voz, si que se le notaba enfadada con aquellos 6 quienes parecían ser bastante problemáticos ¡y como no! Si estamos hablando de los mismos dioses por lo que realmente esperaba que cualquier alma desafortunada que esté con esa labor de tratar con aquellos dioses que siempre quieren hacer de su voluntad en la tierra como en el olimpo quieran verdaderamente escuchar a todos bajo el mismo cielo, algunos otros parecían que también querían entrar en el tema de conversación pero por temor a que la madre de todos ellos les pudiera dar una replicada ante el silencio formado.*

Rea: ¿y bien?

*Ninguno tenía algo para decir, a lo que ella suspiro y ¡¿me miró a mí?!*

Rea: jovencita, ¿quieres ayudar a estos chicos a tratar de dialogar?

-E-eh... S-su señoría

Rea: fufufu no te preocupes, sé que eres Sofía, pero tu tranquila, solo quería saber si querías ayudarme.

*Bien, mi cerebro estaba procesando toda la información del momento ¿acaso la mismísima Rea me está pidiendo que la ayude con los problemas de sus 6 hijos? Por khaos todo es tan repentino.*

-E-eh... B-bueno... P-primero ¿cómo podría yo una humana como yo ayudarle?

Rea: oh no hay problema, si te refieres a que puedan provocar problemas con lo que ya sabes seguramente, por eso les pedí a los demás que se hicieran cargo por cualquier anomalía.

*Me dirigió una voz dulce y suave mientras que una sonrisa que poco a poco podría dejarme pensando, podría ser una buena idea ¿pero sería apta para tal trabajo? Es bien sabido que si le niegas algo a los dioses el precio a pagar es caro así que si viene de la madre de todos ellos, no creo que tenga opción alguna.*

-Hu-hum... P-por supuesto! P-puede contar conmigo para ello!

Rea: ¡que bien! Vamos, tú di la dirección y te seguimos.

-E-e-eh... Jejejeje... Clcaro... Conozco el lugar.

*Mirando detrás de ella, aquellos 6 tenían u naura muy fuerte al decir verdad, y eso que usaban una forma humana para evitar matarme, así que tragando duro o duré más en tener que darme la vuelta para empezar a caminar y ser seguida por todos ellos, era como si me siguieran perros de guerra esperando que su presa baje la guardia para abalanzarse encima de ésta sin piedad.*

----Unos momentos después----

*Todavía me cuesta creerlo, desde ese día en que los cielos comenzaron a retumbar y la misma tierra comenzara a temblar como si se quisiera abrir de golpe a plenos ojos de todos sin importar lo que estuvieran diciendo al respecto o haciendo, la gente corriendo de un lado a otro entre gritos buscando un refugio salvaguardando sus vidas con esperanza de que todo pueda terminar, yo por mi parte solo podía ver como poco a poco las esferas de luces iban bajando hacia la tierra, ¡por khaos! ¡Los dioses vinieron a la tierra! ¿pero a qué? Desde la distancia pude observar como todos, especialmente los 12 olímpicos se reunían en una fuerte discusión que dejaban los 6 principales y algunos primogénitos, cada uno salió disparado a un lugar como si quisiera tener territorio ¿de qué estarán peleando?*

"Solo un bando podrá gobernar la tierra como es debido. Sin guerras, sin muertes y sobre todo sin desastres provocado por ustedes 6 ¿me han entendido?"

*Fue lo que escuché sobre nada más y nada menos que Gea, la mismísima madre tierra, diosa primogenita después de Khaos y madre de todo ser viviente mortal que nació en ella, no solo ella estaba ahí presente, Eros el dios del amor también, Ares el dios de la guerra (vaya miedo que me dio al verlo, se notaba a simple vista que era de temer) entre otros más, ¿acaso habrá una nueva guerra santa? ¡Ninguno de nosotros la aguantaría! Ni hoy, ni mañana, ni nunca si se podría decir.*

-Eh... D-disculpen mis señores...-

*Dioses jamás me sentí tan nerviosa como ahora, todos tenían cuestiones diferentes, Ares quería venganza contra su padre, Hera ni se diga, Atenea defendía a su padre, los demás parecían querer aprovecharse de la situación para hacer de las suyas, algunos apostaban, otros animaban a los que querían y demás... Esto sería un derramamiento de sangre total.*

-P-pe... Pero no es necesario llevar a una guerra mis señores...-

*Creo que con eso puse fin a mi ciclo vital, obviamente que pregunten porqué mi atrevimiento hacia ellos era tan simple, no negaba que tenía mucho miedo pero por el bien de mi pueblo...*

-P-po-podemos llevar esto a una solución... Sin necesidad de pelear...-

---Unos meses después---

*Al principio me costó mucho convencerlos, si no fuese por la ayuda de ciertos dioses que no querían pelear, ellos fueron Eter, Helios, Selene, y algunos otros primogenitos, les recomendé el Monte Parnaso para empezar en lo mínimo un dialogo...*

Hera: ¡bájate de ahí ahora mismo!

Zeus: ¡S-solo si bajas esas tijeras!

Hera: ¡¡Lo hare cuando estés castrado!!

Zeus: ¡noooooooooo! T-T

Hades: -comiendo con las patas encima de la mesa.-

Hestia: -acariciando animales mientras cantaba una melodía de Blancanieves.-

Poseidón: -estaba detrás de démeter- ahora si˜

Démeter: -le hace una chilena contra el suelo- ¡alejate!

*O bueno, al menos se puede decir que es un comienzo, día tras día buscaba un tema de conversación que a todos les agrade y no vayan a formar una pelea por eso, pero las Arpias (que son mujeres con cuerpo de pájaro) no ayudaban mucho, y que los 3 hermanos me acosaran no me dejaba de otra que dormir bajo el manto de Hera o de Hestia, pocas veces de Artemisa, aun así, me alegro de que por lo menos estos dioses decidieran dar un nuevo paso (y un dolor de cabeza enorme) para comenzar a resolver sus cosas a medida de conversaciones y discusiones no tan fuertes como antes, lo que si cuido es que nadie lo sepa aún...*