Lisa sacudía su cabeza intentando quitar ese mareó, se levantaba apoyándose de l trataba de ver que era lo que estaba pasando, pero su vista era borrosa, tampoco lograba escuchar nada, solo un molestó zumbido dentro de sus oídos.

Inmediatamente después, por fin aquel mareo se fue y recobraba la vista y la vista y la audición, logrando escuchar los gritos de Jennie llamándola.

Reaccionó al instante y vio a aquel sujeto que vestía de negro y usaba pasamontañas, igual al que había grabado la cámara de seguridad del banco.

_¡Dejala! - corrió hacia ella y el tipo sin inmutarse la apunto con un arma que sacó de su espalda, Lisa frenó al instante, levantando sus manos al nivel de sus pechos - tranquilo - pedía - sólo no la hagas daño. 

Jennie era sujetada del cuello y sollozaba, el tipo la abrazaba por la espalda para que no pueda huir. Ambas cruzaron miradas y fue cuando ambos corazones se estrujaron, al nunca imaginarse estar en una situación así.

_Te lo ruego - suplicó Lisa - por favor dejala ¿quieres dinero? Yo tengo mucho, sólo pidelo - trataba de negociar pero el tipo ni parecía pensarlo - te lo entregó todo si es lo que quieres pero sueltala, por favor, es una mujer embarazada - mencionó teniendo la esperanza del que el sujeto recapacite, pareció funcionar.

El tipo miró por un instante a Jennie y luego a Lisa, pensándolo al ver la forma en cómo se miraban, parecían necesitarse a su lado, veía amor, un amor que hace mucho no encontraba.
Para sorpresa de ambas, él comenzó a soltar de manera lenta a Jennie, sin quitar la vista de la tailandesa, fue retrocediendo a paso pausado, dirigiéndose a la puerta sin dejar de observarlas, ninguna se movía para evitar que cambiará de opinión. Lisa observó el detalle de que él tenía la llave de su casa, hace mucho había desaparecido una llave, tal vez fue él.   El sujeto guardó el arma y decidió marcharse, cerrando por fin la puerta. Ambas chicas suspiraron de alivio y Jennie al verse a salvo, corrió directo a los brazos de Lisa, las dos con una gran sonrisa y lágrimas en los ojos.

_Tuve mucho miedo - Jennie sollozaba, abrazando aún más fuerte a su novia.

_Tranquila amor, ya pasó, ya se a ido - o eso pensaban.  

Un disparo resonó por todo el lugar.

Lisa se paralizó al oír el jadeo por parte de Jennie sobre su oído, sintiendo al instante un líquido recorrer sus manos, comenzó a negar con desesperación, no queriendo soltar a Jennie.  

El sujeto estaba asomado en la puerta, con el arma apuntando hacia ellas y humo saliendo de la pistola como prueba del disparo.

_No no no, Jennie...- Lisa sintió el cuerpo de la castaña más pesado, Jennie no podía mantenerse de pie, se sentía débil. La rubia se arrodillaba abrazando a su novia y colocándola con cuidado en el suelo - amor...- lloraba acariciándole el rostro - Nini...por favor - la castaña respiraba con dificultad, estaba agonizando, la bala había impactado en su espalda, quedando entre sus pulmones. Lisa miró hacia la entrada y el tipo seguía allí, mirando la escena - ¿¡Quien demonios eres!? - gritó ya harta de todo - ¿¡por que no me matas de una vez y acabas con esto!? - su voz se quebró - ¡Matame ahora! ¡Dispara! - lo retó - ¡Vamos! ¡Matame joder! - lloraba - matame de una vez...- se desmoronó por completo, mirando a su novia que yacía ensangrentada.

El sujeto no hizo nada, sólo bajo la mirada y dándole un último vistazo se marchó. Lisa volvió a abrazar a Jennie y besaba su frente con cariño.

_Tranquila...- le habló al pegar su frente con el de ella, cerrando sus ojos - voy a volver...y voy a salvarte...tu solo confía en mi - la observó con cariño - voy a volver y vamos a cumplir nuestro sueño de tener una hermosa familia, lo prometo Jennie - besó su mano - lo haré.

Le sonreía con nostalgia a la castaña, mientras seguía acariciando su suave cabello.

_Es una mujer - pronunció con dificultad Jennie, reuniendo las últimas fuerza que le quedaban.

_¿Que?

_Lo sentí, es una mujer - respiraba con dificultad  y le era difícil formular una palabra - no se...lo que estás haciendo...pero...confío en ti - acarició su mejilla - siempre lo hago Lili - jadeaba débilmente.

_Así es amor - posó su mano sobre la de su amada, observando con nostalgia como la mujer que amaba, perdía por completo la mirada, observando un punto muerto y dejando de respirar, soltaba su mano - solo confía - habló con dolor - yo siempre lucharé por ti princesa, como lo prometí cuando eramos una niñas.

*****

Lisa se encontraba abrazada a sus piernas, no se movía de aquel lugar desde hace minutos. El cuerpo de Suga y Jennie seguían en sus respectivos lugares, todo era un absoluto silencio y Lisa sentía que se volvía loca, estaba cansada de todo esto, no sabría hasta cuándo podría soportar estas situaciones tan dolorosas y traumantes para ella, quería rendirse de una vez,pero en tan sólo el echo de pensar cuanto a luchado, cuanto tiempo a dado, todo eso ¿para que se rinda? No lo va a hacer. Tiene dos motivos para no darse por vencida y seguir hasta donde sea que la lleve esto, su prometida Jennie y su tan esperando hijo, se lo había prometido.

A lo lejos se podía escuchar las sirenas de las patrullas acercándose, al parecer alguien habia llamado a la polícia.

Lisa se quitó las lágrimas amargamente y se levando corriendo a la parte trasera del patio, se inclinó entre los arbustos y tomó las minicamaras guardándolos en sus bolsillos de su casaca y cerrándolo con el cierre.

_SALGA CON LAS MANOS EN ALTO, ESTA ATRAPADO - se escuchó el megáfono.

Lisa ingresó nuevamente a la cocina y tomó su gorra y pistola que se encontraban en suelo, viendo una ultima vez a Jennie, salió corriendo.

El oficial a notar que nadie salía dio la orden de ingresar.

Policías con armas en mano, intentaron abrir la puerta pero esta estaba con el seguro desde dentro. Hicieron un espacio y el oficial al mando pateo con todas sus fuerzas, tres veces logrando romper la llave y que la puerta se abriera con un fuerte estruendo al chocar con la pared. Ingresaron apuntando con sus armas y observando por todos lados, atentos a lo que fuera, hayando dos cuerpos en el piso, uno cerca de la puerta y otra en la entrada de la cocina.

El oficial al mando tomo sus pulsos colocando dos dedos sobre las venas del cuello, comprobando que ya habían fallecido.

_Hay dos cuerpos sin vida - habló a través de su radio - al parecer el culpable huyó.

_¡Aqui! - su compañero gritó.

Todos corrieron al patio de atrás, siguiendo a su colega quien señalaba a alguien quien trepaba la cerca de uno de sus vecinos.

_¡Detengase! ¡no me obligue a disparar! - pero como era de esperarse, Lisa no le hizo caso - ¡Maldicion! - vociferó cuando la vio desaparecer. 

Lisa salía en la esquina de la otra calle, colocándose su bufanda y gorra para ocultarse, mientras veía a lo lejos las patrullas rodeando su antes pacifica casa, su hogar.

Observaba todo detrás de un poste de luz, como colocaban cintas de seguridad en la entrada y como llegaban los especialistas en criminología. Se quedó allí por mucho tiempo, tanto, que no supo cuanto tiempo realmente habia pasado. Finalmente sacaban los cuerpos en camillas, cubiertos en sábanas blancas y los subían en una ambulancia sin la necesidad de encender las sirenas.

Tragó un nudo que tenía en su garganta, cerró los ojos y suspirando, dio media vuelta y se retiró caminando, parecía que cada vez se hacía más fuerte, pero el dolor era el mismo, o mucho peor que el anterior. 

****

Al estar casi frente a la casa de Rosé, vio a su amiga salir muy inquieta sin darse cuenta de su presencia, parecía tener prisa y colocándose de manera desesperada su abrigo, corrió a su auto. Tenía una expresión de angustia y encendía con urgencia el vehículo. Apretó el acelerador y frenó al instante en que vio a su amiga frente al auto, las luces delanteras alumbraban a Lisa y esta solo mirada a Rosé sin ninguna exp

Rosé se sorprendió al ver a la rubia, no pensaba encontrarla allí, no después de lo que vio en las noticias. Se quitó el cinturón de seguridad y se apresuró a ir a donde estaba la tailandesa.

_¿Tú la mataste? - preguntó de manera directa.

_¿que?

_Lo acabo de ver en las noticias Lisa, dime ¿que fue lo hiciste?

_¿Que es lo dicen las noticias? - preguntó por curiosidad, igual no tenía importancia, después de todo, volvería.

_¡Que mataste a tu prometida Lisa!

_Yo no lo hice - quiso avanzar pero Rosé intervino en su camino.

_¿Entonces por que huiste? ¡Ahora todos piensan que fuiste tú!

_Me sorprende que una de mis mejores amigas desconfíe de mí - habló fuerte y claro - no tengo tiempo de discutir, tengo algo que hacer - esquivo a su amiga, pero esta la tomo de la parte trasera de su casaca y sin querer alzo la prenda, haciendo que el arma cayera, lo tomó y lo observó con decepción, Lisa no sabia que decir, simplemente negaba.

_No es lo que crees - se sentía acorralada.

_¿Que fue lo hiciste Lisa? - negaba mirando con tristeza a la tailandesa.

_Que yo no lo hice, debes de creer en mí - se acercaba lentamente - soy tu amiga Rosé, me conoces. 

_Dime por que tenías está arma...Y te creeré.

_Rosé...

_Dimelo ¿Por que no puedes? ¿Acaso escondes algo?

_Dame eso - quiso arrebatarlo pero Rosé era mucho mas alta y la alejo de ella - ¡Que me lo des!

_¿¡Explicame Lisa!? ¿¡por que carajos parece como si esto no te afectará!? ¡Jennie acaba de morir y te comportas de esta manera! ¡Tan tranquila y fría!

_No lo entenderías - evitó su mirada - dame el arma que tengo que irme, sólo pido que confíes en mí, yo jamás le haría daño.

Rosé la observó con decepción, no la reconocía, esa mujer no parecía su amiga, se ve tan tranquila, que la hace dudar. ¿No que era el amor de su vida? ¿Por que no está destrozada por la noticia?

_Damelo Rosé - ordenó Lisa perdiendo la paciencia, estirando su mano para que se lo entregara.

Cuando parecía que se lo iba a dar, alzó el arma y apuntó directo a su amiga, tomándolo con firmeza con ambas manos.

_¿Que crees que haces? - preguntó Lisa con incredulidad.

_Lo siento - se disculpó - pero debo entregarte.

_¿¡Estas loca!? - Lisa se alteró, ella no podía quedarse, la encarcelarían y la culparían de todo. Entró en pánico al escuchar las sirenas de las patrullas - ¿tú llamaste a la policía? - preguntó decepcionada.

_No...Yo no - decía la verdad - seguro te están buscando - explicó - pero de todas maneras debo entregarte, sé que eres inocente pero si huyes, te perjudicarás más.

_¡No entiendes! - se asustó al escuchar las sirenas aún más cerca de donde se encontraba, si la habían visto como hiba vestida en tan sólo volver a verla se darían cuenta que era ella. No tenia opción más que decir la verdad - ¡vengo del futuro! ¡vengo del futuro Rosé!

_¿Que? - era una idea tonta.

_¡Que vengo del futuro! ¡ya sabia lo que iba a pasar, por eso es que no me veo tan afectada, pero lo estoy! - veia a cada segundo las calles, rogando que la policía no aparezca - por favor creeme, te estoy diciendo la verdad.

_Esa...esa es una idea muy estúpida - rió con incredulidad - Lisa ¿En serio crees que me creeré eso?

_¡No te estoy mintiendo! - estaba desesperada - ¡Tu misma me ayudaste en volver! ¡juntas construimos una maquina del tiempo!

_¿Al menos te estas escuchando? Eso es absurdo, no es posible que...

En un rápido movimiento, Lisa sorprendió a Rosé e intento quitarle el arma, la pelirroja reaccionó a tiempo y lo tomó con fuerza para no soltarlo, ambas forcejeaban.

Lisa jaló con fuerza hacia su dirección, cayendo y llevándose consigo a Rosé, quien cayo sobre ella.

Un disparo se logró oír, dejando estáticas a las dos chicas.

_Rosé...

_Oh Dios, Oh Dios - Rosé se quitó de encima y retrocedió a rastras con pánico en sus ojos, observaba a Lisa quien no se levantaba y hacia presión a un lado del estómago - perdoname, yo no..Yo no quise...- sollozaba asustada - no quise disparar.

Lisa respiraba profundamente, tratando de tranquilizarse.

_No dejes...que la policía me atrape - tragó nerviosa - llevame adentro - presionó un poco mas su vientre y gritó del dolor.

_Lisa...- dudó un momento pero en seguida asintió - sí...esta bien - con mucha torpeza se levantó y corrió a la puerta, tomó sus llaves de su pantalón y con manos temblorosas la abrió - tranquila...- corrió donde su amiga y se inclinó para cargarla - vas a estar bien...

Sorpresivamente, Lisa la empujó, tomó el arma y corrió dentro de la casa, cerrando con las llaves que colgaba de la puerta.

_Pero...- decía una confundía Rosé, que al darse cuenta de todo enfureció - ¡Lisa! - le habían visto la cara de estúpida.

La bala por suerte habia caído a sólo unos centímetros de distancia de Lisa. La tailandesa habia pensado que Rosé era la que estaba herida pero, al verla retroceder asustada y pidiéndole perdón, se dio cuenta que no era así y rápidamente ideó un plan.

Ahora bajaba corriendo hacia el sótano mientras Rosé golpeaba insistentemente la puerta.

Las patrullas estaban frente a la casa, habían escuchado el disparo y bajaban a interrogar a Rosé quien dejó de golpear y miró a los oficiales llegar, no sabia que hacer.

Pero ya no era necesario contar nada. Lisa ya estaba dentro de la maquina y ya estaba devuelta en su presente, borrando todo lo que había pasado en esa realidad.

Suspiró tranquila, ahora tenía otra oportunidad. Se asustó al notar que alguien golpeaba la compuerta y regañó con la mirada a Rosé, ella le hacia señas para que saliera.

_¿Por que regresaste? - preguntó Rosé al instante en que Lisa bajó.

_Tenemos otro problema - caminó hasta una mesa que se encontraba en el lugar y sacó las minicamaras.

_¿Que mierda fue lo que les pasó? - pregunto incrédula, tomando los objetos totalmente destruidos.

_No lo sé, pero ese no es el problema, creo que lo que te voy a contar, tiene algo que ver con la destrucción de las cámaras y te va a sorprender tanto como a mi.

****

_¿¡Alguien más!? - Rosé se levantó alterada sin poder creerlo - ¡eso es imposible! ¿¡Acaso no es suficiente con Suga!? - caminaba intranquila - ¡ahora tenemos que lidiar con otro asesino!

_Rosé - Lisa la tomó de la mano y la volvió a sentar - aún hay más.

_Me estas jodiendo

_Sospecho que aquel tipo sabia la ubicación de las cámaras y aprovechó de que Jennie fue a comprar el vestido de novias...- hizo una pausa - además es mujer...

_¡ES DAHYUN! ¡LO SABIA! ¡LO SABIA! ¡ESA HIJA DE PU...

_¡Rosé!

_No la defiendas, ni te atrevas - le advirtió

_No podemos estar seguras, por eso traje las cámaras - se dirigió a la mesa - estoy segura que alguna de las memorias debe funcionar - tomó una pequeña tarjeta sd y observó con atención - allí estará el culpable...

_Eso dejamelo a mí, es mi especialidad - se acercó

_Ya lo sé tonta - sonrió - confío en ti.

_Oye ¿como supiste que era una mujer?

_Jennie me lo dijo...estaba pegada a su pecho cuando la atrapó así que lo sintió...le debemos esta información.

_Gracias Jennie - señaló hacia el cielo.

_No hagas eso que me pones nerviosa - le tiró un lapo en la cabeza.

_Perdón - giró los ojos - ahora hazte a un lado que tengo que trabajar - la corrió.

_Esta bien, pero tengo otra duda.

_Dime - Rosé tomaba su laptop.

_Cuando llegó la hora en que el crimen iba a ocurrir...- recordó -No estaba lloviendo.

_¿Y por que llovería? - tomaba unos pequeños cables.

_Por que en todas mis idas siempre llovía a esa hora...- Rosé dejó lo que estaba haciendo y la observó extraña - eso no debió de ocurrir, algo cambio y es lo que me preocupa.

Rosé apoyó sus manos sobre la mesa y bajó la cabeza pensando, definitivamente eso era demasiado extraño, además que aparezca alguien más lo complicaba todo.

_Ok, no debemos de preocuparnos, en este momento todo está normal así que olvidemoslo y enfoquemonos en esto - volvió a su trabajo.

_Tienes razón, está todo normal - miró a su alrededor

Su celular comenzó a sonar, asustando a ambas. La rubia tomó su celular y era una llamada de su madre, contestó de inmediato por miedo a que algo haya pasado.

_¿Mamá? ¿esta todo bien?

Rosé giró con duda al escuchar algo caer, miró al piso y era el celular d Lisa.

_¿Que ocurre?

Lisa estaba sin palabras, sentía que su voz no le salía.

_Lisa...me estas asustando.

_Suga...- pronunció sorprendida - acaba de fallecer.

Un capítulo más por parte de Eclipse.
Voten, amenme y no me dejen ❤