Epílogo 2
Jennie no podía dormir, había quedado con su hija que en realidad lo pensaría y eso era justamente lo que estaba haciendo. Observó el reloj de la mesita de noche, y eran las 5:30 de la mañana, los pensamientos que rondaban en su cabeza, no era mas que preocupaciones y cosas negativas. ¿Y si todo volvía a salir mal? No podría enfrentarlo ella sola.
Lisa volvía a llegar a su mente, ella fue alguien realmente valiente en enfrentarse a todos, aún sabiendo que ponía en riesgo su vida. Pero ella, ella se sentía una cobarde, tenía miedo, demasiado, el temor de equivocarse en algo y traer peores consecuencias, hace que simplemente no se atreva.
Observó la foto de Lisa que tenía cerca de ella, y su expresión entristeció.
Lisa habia echo todo por ella, había enfrentado a un demente solo por protegerla. Comprendió que Lisa la amaba realmente de una manera única, era un amor puro, un amor que ya es poco visto.
¿Ella sentía lo mismo por Lisa?
****
Ella volvía a dormir en su propio cuarto después de mucho tiempo. Fue cuando un movimiento en el hombro la despertó, viendo somnolienta a su madre que estaba a su lado.
_Mamá...
_Voy a hacerlo - pronunció con una sonrisa - voy a volver por Lisa.
****
La joven castaña cargaba con cuidado a su madre, la sentaba con delicadeza sobre el asiento de la pequeña máquina. Ella misma se encargó de encenderlo ya que Jennie no lograba comprender nada, y eso la ponía mas nerviosa.
_¿Segura que funcionará? - preguntó dudosa.
_Segura, pero sólo lo hará una vez, así que no presiones nada - se separó de su madre - cuando cierre la compuerta, lo único que tienes que hacer, es presionar ese botón rojo - señaló - y entonces comenzará. Te enviará de regreso al pasado.
_¿A donde exactamente? - su hija se quedó callada - Ella...
_Mamá...- tomó su mano - ¿confías en mí?
_Claro que confío.
_Entonces no me hagas preguntas, por favor, cuando llegues allí, lee esto - dejó un papel doblado en sus manos - allí te explico todo.
_¿Por qué no puedes decírmelo ahora?
_Porque no quiero que reconsideres tu decisión - volvió a alejarse - sólo confía, ¿sí? - Jennie se tomó un tiempo, pero asintió después de unos segundos - muy bien...entonces - suspiró - que tengas un buen viaje, mamá - sonrió nostálgica - ¿lista para volver?
_Lista - asintió nerviosa - cariño...- su hija se detuvo cuando estaba cerrando la compuerta - gracias por todo...- sonrió - te amo.
_Yo también te amo, mamá - sonrió, y cerró por completo la máquina.
Jennie vio la señal de su hija, y suspirando para tranquilizar sus nervios, acercó su mano al botón rojo que estaba frente a ella, presionándolo con los ojos cerrados.
Un fuerte destello iluminó por completo el lugar, para Jennie fue demasiado fuerte, incluso teniendo aun cerrado los ojos. En cuestión de segundos, sintió su cuerpo inclinarse repentinamente y caer sobre algo echada sobre algo blando.
Su respiración estaba acelerado por la extraña experiencia que acababa de tener. Tenía miedo de abrir los ojos, no escuchaba absolutamente nada a su alrededor, tampoco sentía a nadie a su lado.
Abrió lentamente los ojos, y su visión se fue aclarando poco a poco, observando un blanco techo decorado con estrellas. Eso la hizo sentir como en un deja vu, reconocía perfectamente esa decoración.
Se sobresaltó cuando el despertador que se encontraba a su lado, comenzó a sonar fuertemente. De pronto sintió una sensación tan extraña pero conocida a la vez para ella, la sensación a sus piernas estaba volviendo, podía mover fácilmente el comienzo de sus dedos, logrando mover por completo sus piernas en solo unos segundos.
Sus ojos se llenaron de lágrimas por la emoción, y una gran sonrisa llegó a su rostro. Se sentó lentamente sobre la cama, y efectivamente, reconocía ese lugar. Era su antigua habitación, cuando aún vivía con sus padres, cuando sólo era un pequeña adolescente.
_¡Jennie! - tocaron la puerta - ya es hora de ir al colegio, apresurate.
Jennie estaba en shock, ¿a qué tiempo había vuelto?
De pronto se dio cuenta que sostenía algo en su mano, era la carta que le había entregado si hija. La desenvolvió rápidamente, y comenzó a leerla.
"Hola, mamá. Seguramente ahora estés muy confundida. Pero voy a explicarte, ahora tienes 13 años. Lo sé, es una muy corta edad para volver, pero todo tiene una razón. Y es que ahora mi madre debe de tener 15, y seguramente esté yendo directo a su nueva escuela, ¿sabes lo que significa? Que conocerá a Suga, y si eso ocurre, todo podría volver a pasar. No quiero eso, sé que tú tampoco lo quieres. Así que decidí que la mejor manera de evitarlo, sería que mamá jamás lo haya conocido. Evita que se conozcan, no debe hacerlo. Así podrán estar tranquilas. Pero también tienes que saber algo, así como volviste, todo lo sucedido en nuestra realidad se reinició desde este día, eso significa que muchas personas que murieron en nuestro tiempo, están vivas ahora, eso incluye a Jin. Pero no debes de preocuparte, por que si mamá no conoce a Suga, tampoco conocerá a Jin. Pero debes evitarlo, por favor. Sólo que...lo mas probable es que no tampoco conozcas a tía Jihyo, y es alguien a quien realmente admiro, sólo espero que el destino las vuelva a unir. Devolverte a esta época, también tiene algo a favor, y es que podrás recuperar algo del tiempo que perdieron por culpa de ese tipo. No te preocupes por mí, o por Emily, ahora seguramente ni siquiera existimos en mi época, por que ya fuimos borrados. Pero sé que volveré a nacer, y eso me tranquiliza. Y si quieres que Emily también lo haga, lleva a su madre Dahyun, a ese restaurante que nos platicó mamá cuando estamos juntos. Allí conocerá a alguien especial, a su futura esposa. Espero haber echo las cosas bien, y espero haber sido una buena hija, y si no fue así, no fue tu culpa, porque fuiste una excelente madre, y sé que lo volverás a ser. Tenerlas a ambas como madres, es algo que realmente me llena de orgullo. No podría estar más feliz por eso. Les deseo que disfruten de su nueva juventud, y ya dentro de unos años nos volveremos a ver.
Hasta luego.
Las amo"
La castaña sonreía con lágrimas en los ojos, sin duda alguna, había criado a una hija maravillosa. Estaba orgullosa de ella.
Se quitó las lágrimas rápidamente, y se quitó las sábanas de su cuerpo. Quedó un momento inmóvil cuando sus pies tocaron el piso, era realmente increíble volver a tener sensibilidad en sus pies, poder moverlos.
Con algo de temo, tomó un poco de impulso y se levantó, sonriendo cuando se vio nuevamente de pies.
Tenía que apurarse en llegar a Lisa.
****
Una joven adolescente de catorce años, caminaba alegre por la acera de un parque. Sostenía su mochila en un solo hombro y daba pequeños silbidos, o eso intentaba, porque sólo salía ruidos extraños.
Fue cuando a lo lejos, en una esquina, vio a su gran ¿amiga? ¿novia? Bueno, no sabía realmente lo que eran, pero estaba feliz de verla.
La castaña parecia buscar algo, y cuando giró en su dirección, la rubia simplemente saludo alzando la mano con emoción.
_¡Nini! - sonreía - ¡Aquí!
La castaña sonrió nostálgica al verla, y soltado su mochila corrió en su dirección. La rubia no esperaba eso, y la sostuvo a tiempo cuando Jennie saltó sobre ella, rodeando ambas piernas a su cintura mientras sollozaba.
_Lisa - se escondía en su cuello.
_Nini, ¿Qué ocurre? ¿por qué lloras? - estaba preocupada.
La castaña alejó su rostro, y la miró directo a los ojos, Lisa tragó saliva al estar nerviosa.
_Te amo - pronunció Jennie, la rubia se volvió un tierno tomate por lo roja que estaba - tal vez ahora te parecerá extraño, pero necesito hacerlo.
_Qué es lo que- Lisa casi se desmaya cuando sintió el repentino beso por parte de la castaña, quien la besó delicadamente, casi como si fuera una tortura o un castigo de su parte por haber hecho esa pijamada con Dahyun.
Luego de unos segundos, Jennie se alejó, robándole un suspiró a la joven rubia.
_Nini...- estaba en shock - yo...nosotras, somos muy chiquitas para esto - regañó con los ceños fruncidos, la castaña sólo sonrió con adoración - pero...No sé...si tu quieres, ¿puedes darme otro? - preguntó avergonzada.
_¿Interrumpo algo? - una pequeña Dahyun estaba de pie frente a ellas. Lisa rápidamente soltó a Jennie, quien cayó de trasero.
_No le digas a mi mamá - pidió Lisa, sabía que lo que estaban haciendo, era incorrecto para su edad.
_Claro que no le diré, pero no es correcto hacerlo, y menos con ella - señaló molesta a la castaña que la miraba con una sonrisa - ¿que me ves, mocosa?
_¡Dahyun! - Jennie se levantó sólo para cargarla de la cintura, y sacudirla de un lado a otro, también estaba feliz por volver a verla.
_¡Sueltame! ¡sueltame! ¡acabo de comer pudin! - Jennie la apachurraba contra ella - ¡espera! ¡Lisa, ayuda! - suplicaba.
_¡Jennie! ¡la estás lastimando! - tuvo que meterse por el medio para separarlas. Dahyun rápidamente se escondió detrás de Lisa, y aprovechó para abrazarla y recostar su mejilla en su espalda con una sonrisa y los ojos cerrados.
_No, Dahyun - Lisa veía nerviosa a la castaña, mientras intentaba abrir sus manos para que la soltara - Dahyun, sueltame.
_No - sonreía.
_Dahyun - decía más nerviosa, comenzado a sacudirse. La pequeña sólo reía por su intento de separarla, para luego ambas caer sobre la hierba y seguir batallando, mientras Lisa se arrastraba.
Jennie solo reía al estarlas viendo, sabía que esa pequeña obsesión que Dahyun tenía por Lisa, no dudaría mucho, así que la dejaría jugar por el momento.
Hasta que intentó besarla.
_¡Ni te atrevas! - Jennie se metió en la "pelea"
****
Jennie había acompañado a la rubia a su colegio, con la escusa de que no quería a Dahyun cerca. Lisa se despidió sonrojada de la castaña y se adentró en la escuela, viendo como Jennie se iba solo segundos después.
Luego de cansado período de clases, Lisa salía de su nuevo salón, orgullosa de si misma al mostrar sus conocimientos y ser felicitada por el profesor. Caminaba cerca del baño para caballeros cuando escuchó unos ruidos extraños, parecían gruñidos. Se acercó un poco y esos ruidos se hicieron más audibles, le pareció escuchar rápidamente un "¡no!" que podría asegurar que fue callado de inmediato.
Quizo tomar el pomo de la puerta para poder entrar, estaba segura que estaban golpeando a alguien y ella debía ayudar. Pero al momento de hacerlo, otra mano se posó sobre la suya, deteniéndola.
_¿Jennie? - la castaña la comenzó a alejar del lugar, sin soltar en algún momento de su mano - Jennie, espera - se detuvo, escapando de su agarre - tengo que ir, lo están golpeando, necesita que alguien lo ayude - estaba regresando, pero nuevamente Jennie interfirió en su camino - ¿Pero qué haces?
_No tienes porqué entrometerte en asuntos ajenos - Jennie estaba realmente seria, como Lisa jamas la había visto - puedes ayudar sin necesidad de involucrarte, podrías salir perjudicada.
_Está bien, tienes razón, pero ahora mismo necesita ayuda - Jennie volvió a frenarla.
_Ya llamé a quienes pueden ayudarlo, sólo espera.
Y como Jennie lo habia dicho, en ese momento cuatro personas con traje se dirigían al baño de hombres, eran de la Unidad de Gestión Educativa. Esa escuela va tener serios problemas.
Minutos después, una de las mujeres salía junto a un joven Suga de catorce años, lo ayudaba a poder caminar, el rubio estaba sollozando por todo esos golpes en cuerpo. Luego salía los tres hombres que venían con ella, tenían sujetos a los bravucones que se veían asustados, como si fueran débiles cachorros queriendo llamar a sus padres.
Suga junto a la mujer, cruzaron delante de Jennie y Lisa, su mirada se cruzó por un segundo con la de la rubia, pero sólo la ignoró y siguió caminando a dolorido, seguido de los demás.
_¿Como lo supiste? - Lisa preguntó a la castaña, que sólo mantuvo silencio y tomó su mano para sacarla de la escuela.
A la mañana siguiente, Suga había sido trasladado a un nuevo colegio por petición suya, y los chicos que lo golpeaban, habían sido expulsados y castigados seriamente por sus padres.
****
El rubio caminaba tímidamente por el patio de su nueva escuela, cargaba sus libros con la cabeza gacha y se dirigía a la biblioteca, era el único lugar donde se sentía tranquilo.
_¡Cuidado! - Suga no reaccionó a tiempo, y el balón pegó fuertemente en su cabeza sin poder evitarlo. Él no soltó sus libros, pero si cayó levemente en el suelo, sentado - ¡Idiota! ¡Ten más cuidado! ¡Le pegó a alguien! - escuchó esa voz acercarse.
_¡Lo siento, no fue mi intensión! - respondió apenado el otro muchacho.
_¿Te encuentras bien? - Suga levantó su mirada, y se encontró con un pelinegro algo despeinado, él solo asintió - ven, te ayudo - ofreció su mano, pero el rubio negó.
_Yo...puedo sólo - dijo en voz baja, levantándose por su cuenta - pero gracias.
_Soy Jin, ¿eres nuevo en la escuela? - el rubio asintió sin mirarlo - genial, si necesitas algo, sólo dímelo, te puedo ayudar.
_Sabes...¿donde está la biblioteca? Me dijeron que era por aquí, pero no lo encuentro.
_¡Oh! Es por aquí, ven, yo te llevo.
_Yo pued- no pudo terminar de hablar, porque Jin ya se lo llevaba abrazado por los hombros mientras sonreía, pero frenó en secó cuando su hermana apareció en el otro pasillo - Oh rayos.
_¡Allí estás, pendejo!
_Luego hablamos, adiós - salió corriendo al lado contrario.
_¡Vuelve aquí! ¡te dije que no te comieras mi refrigerio! - lo atrapó del cuello.
_¡Espera! ¡Jisoo! ¡no fui yo! ¡auch! - la pelinegra le rascaba la cabeza con su puño.
Suga los miraba raro, no dejaban de pelear a la vez que reían, él solo sonrió tímidamente, y siguió con su camino.
****
Lisa miraba nerviosa la mano de Jennie, quería sostenerla y entrelazarla con la suya, como lo a querido siempre. Sí, lo a hecho miles de veces, pero siempre de manera juguetona, y ahora quería hacerlo como algo mas que solo "amigas".
Estaban sentadas sobre un banco, sólo mirando el parque lleno de niños mas pequeños. Jennie tenia una sonrisa de tranquilidad en su rostro, como el de alivio, y eso a Lisa le gustaba, la hacia saber que estaba feliz, y le alegraría saber si la razón de esa sonrisa es ella.
_Nini...- jugó con sus manos.
_Dime, Lili.
_¿Por qué me besaste? - fue casi un susurró.
Jennie giró a verla.
_Porque estoy enamorada de ti.
_¿¡En serio!? - Lisa se puso de pie rápidamente, junto a una gran sonrisa en su cara - digo...- se dio cuenta de su excesiva emoción y volvió a sentarte, está vez en pose seductora - ¿en serio? - le guiño el ojo.
Jennie solo rió.
_¡Oh, Lisa! ¡ven aquí! - la tomó de su cuello y girándola, la inclinó hasta sus piernas, para volver a besarla sorpresivamente. Ambas sonrieron en el beso. Sólo era un beso suave, no quería aprovecharse de la inocencia de Lisa.
Se aprovecharía a los diecisiete.
_Nini...- Lisa se separó - ¿Quieres...ser mi novia?
_Por supuesto que sí, Lisa, te amo - volvieron a sonreírse.
_Yo...también te amo - decía sonrojada.
Voten ❤
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