Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

13

Namjoon penetró con el microbús en una calle peatonal. Lo que le llamó inmediatamente la atención fue la cantidad de infectados en uniforme militar que se encontró por el camino. También los destrozos que, aunque eran frecuentes por todo Busan, destacaban especialmente en esa parte de la ciudad.

Varios edificios se habían derrumbado, dejando tal cantidad de escombros, que hacía imposible proseguir. Jimin le indicó el desvío que debía tomar para llegar a su destino, dado que la clínica se encontraba justo detrás del percance.

Los infectados se abalanzaron contra el microbús, creando cierta tensión entre los integrantes. Taehyung tuvo que cerrar los ojos del mareo que sintió. El dolor de cabeza que tenía era tan intenso como el de una fuerte migraña.

Jungkook le acarició con afecto mientras su mirada se desviaba hacia los seres del exterior. Eunha había tomado asiento con Mellie a los pies de Taehyung. La perrita no se movía de su lado y tampoco se dejaba intimidar por el ruido externo.

Jackson se acercó a Hoseok al ver el respingo que dio cuando una infectada se golpeó la cabeza contra su ventanilla.

—No dejaremos que entren— se acomodó a su izquierda —Respira hondo y no te alteres. Tienes trabajo que hacer.

Hoseok sabía que se refería a Taehyung. El pelirrojo aceptó su consejo y tomó aire.

—Así me gusta— Jackson bajó la mirada hacia sus manos temblorosas. El anillo en su dedo anular le saltó a la vista —¿De dónde lo has sacado?

Hoseok se sobresaltó por la pregunta pero trató de disimular lo mejor que pudo.

—Estaba en el apartamento... Donde nos refugiamos— lo tapó con la mano —Esos bichos me están poniendo de los nervios...

—Entiendo— murmuró, desviando la vista hacia Namjoon —Creo que ya no falta mucho.

La clínica veterinaria se encontraba en la planta baja de un edificio de seis pisos. La persiana de seguridad se mantenía bajada, por lo que no había forma de saber si había gente en el interior. 

Namjoon paró el vehículo justo en la entrada. Algunos infectados se habían quedado por el camino, otros seguían pegados al microbús, esperando ansiosos a que saliesen al exterior. Yoongi, Namjoon, Jimin y Jackson no les hicieron esperar demasiado. Los cuatro fueron los encargados de enfrentarse a ellos.

Mientras se ocupaban de crear un camino seguro, Jungkook alzó a Taehyung en brazos y se volvió a sentar en el asiento.

—Van a limpiar el terreno, solo tienes que aguantar un poco más— le animó con cariño —Te prometo que pronto te encontrarás mejor.

—S-Sí— respondió en un susurro.

Hoseok le tomó la temperatura; su expresión seria preocupó al maknae.

—Tiene fiebre— contestó al notar su insistente mirada —Espero que se den prisa...

Eunha se levantó y dejó a Mellie sobre el asiento. La muchacha tomó uno de los machetes de la mochila.

—¿A dónde vas?— le preguntó Hoseok.

—Taehyung oppa está a salvo con vosotros. Aquí no puedo hacer nada por él, pero ahí afuera puedo ayudar— afirmó tajante —No voy a permitir que muera nadie más. Llegaremos juntos a la isla.

Hoseok y Jungkook asintieron con el corazón en un puño. La muchacha les dedicó una última mirada y salió al exterior, donde vio una docena de cuerpos sobre el terreno.

Yoongi estaba a pocos metros de ella, decapitando a un militar con la katana. Namjoon seguía otorgándole varios golpes a un infectado obeso cuyos sesos se habían esparcido por el suelo. A Jackson lo encontró delante de la clínica, intentando forzar la persiana metálica mientras Jimin lo protegía de los seres que llegaban.

Eunha traspasó el cráneo de una mujer y se posicionó cerca del rubio.

—Cada vez llegan más— jadeó Jimin fuera de aliento —Ten mucho cuidado.

La joven tragó saliva. El aspecto de aquellos infectados era distinto. La gran mayoría estaban cubiertos de polvo y les faltaba alguna extremidad.

Jackson tardó unos minutos en forzar la cerradura. Cuando la persiana se alzó y mostró el interior de la clínica, vio a varios infectados a través de los cristales.

—¡Necesito ayuda!

Jimin y Eunha intercambiaron una breve mirada. La muchacha asintió y corrió hacia Jackson.

—He contado cinco pero puede que haya más— le explicó agitado —¿Podrás con esto?

—¿Podrás tú?— alzó el machete ensangrentado.

—Buena respuesta— sonrió pícaramente —Vamos a cargarnos a esos hijos de puta.

—Las damas primero— le contestó Eunha, refiriéndose a él.

Ambos se sonrieron antes de pisar la clínica. Dos infectadas se apresuraron inmediatamente hacia ellos. Eunha se encargó de la joven empleada mientras Jackson neutralizaba a un más que probable cliente. Otros dos seres, que estaban algo más alejados de la entrada, corrieron con la misma suerte. Al último lo empotró Jackson contra el mostrador, antes de que Eunha lo liquidara con el machete.

Cuando se aseguraron la entrada y la sala de espera, se lo notificaron a Jimin.

—¡Hyung!— el rubio le hizo una señal a su primo —¡Ya!

El joven de Seúl golpeó a un hombre con tanto ímpetu, que un fuerte calambre le llevó a soltar el bate. El infectado siguió en pie, a pesar del brutal impacto que recibió. Namjoon no se la jugó y sacó un cuchillo del cinturón. Acto seguido se lo clavó en mitad de la frente. El desconocido cayó al suelo, para alivio del chico.

Namjoon se apresuró en recoger el bate y en subir al microbús. 

—¿Estáis listos?— le dijo a Hoseok y Jungkook mientras ponía el motor en marcha —Vamos a entrar.

Yoongi y Jimin se metieron dentro de la clínica antes de que Namjoon detuviera el vehículo a centímetros del edificio. El joven dejó el microbús de forma que la puerta del transporte diese con la entrada del lugar.

Jungkook entró con Taehyung en brazos. Hoseok se encargó de cargar a Mellie hacia el interior mientras Namjoon volvía a bajar la persiana y cerraba la puerta.

El lugar quedó sumergido bajo una intensa oscuridad. Yoongi y Jimin encendieron las linternas que habían encontrado en el maletero del furgón del búnker.

—Hay que asegurar la clínica— Yoongi le dio una a Namjoon —Matad a todos los infectados que encontréis.

Jungkook tomó asiento en la sala de espera y aguardó junto a su novio a que los demás revisasen las habitaciones. El maknae le besó la mejilla cariñosamente, pero Taehyung apenas lo percibió.

—Aguanta, mi amor— suplicó entre gran tensión —Aguanta un poco más.

Mellie saltó contra la pierna de Jungkook, intentando llamar su atención. La perrita parecía estar preocupada por su «papá».

—Se pondrá bien— dijo con un nudo en la garganta —Tranquila, Mellie. Él es muy fuerte.

La clínica no era demasiado grande. Consistía de tres consultas, un quirófano, la sala de espera junto a la entrada, un baño para los clientes y un lugar de almacenaje.

Los jóvenes se dividieron en tres grupos; Namjoon y Hoseok; Jackson y Eunha; Yoongi y Jimin.

El primer equipo se encontró con un infectado nada más abrir una de las puertas. El hombre de aproximadamente cincuenta años de edad, parecía por su vestimenta el veterinario de la clínica. La luz de la linterna que sostenía Hoseok lo cegó durante unos segundos, ocasión que aprovechó Namjoon para reventarle la cabeza.

—¿Hay más?— el pelirrojo alumbró hacia todas partes —Deberíamos subir las persianas para ver algo.

—Es mejor dejarlas bajadas— respondió su novio —Desde fuera se puede ver el interior y los hombres de Bogum nos estarán buscando.

—Entonces habrá que apañárselas así— resopló resignado —Oh, Joonie— Hoseok señaló hacia su izquierda —Mira eso.

El segundo equipo dio con una habitación llena de reptiles. Jackson alumbró las jaulas y comprobó que, aunque el aspecto de los animales seguía siendo corriente, todos estaban muertos.

—¿La habrán palmado de sed?— preguntó el chico.

—Probablemente— Eunha sintió un escalofrío —Menos mal que la puerta estaba cerrada. Si llegan a convertirse... No quiero imaginarme lo que supondría enfrentarse a una serpiente infectada.

—¿Y a esto?— Jackson alumbró una jaula en el suelo. En su interior había un caimán.

—Oh Dios mío— la muchacha retrocedió asustada —¿Pero qué...? ¿De dónde han sacado eso?— comenzó a decir atropelladamente. 

—El tráfico ilegal de reptiles es una práctica bastante habitual— el joven contempló el cadáver del animal —Quizá se dedicaban a eso.

—Salgamos de aquí, oppa— pidió atemorizada.

Jackson echó un último vistazo a la habitación. Aquel lugar cerrado y sin ventanas, con cientos de jaulas amontonadas, parecía un auténtico cementerio de animales.

El último equipo inspeccionó el quirófano. La puerta estaba atrancada pero entre Yoongi y Jimin lograron forzarla. Al entrar se toparon con un infectado en silla de ruedas. La luz de la linterna mostró que tenía un mordisco en la muñeca y otro en la pierna. Una manta estaba tirada a sus pies, junto a un cuchillo y una cartera.

Yoongi iba a matarlo pero Jimin lo detuvo. 

—¿Qué pasa?— preguntó al ver su rostro desencajado.

—Es Taemin.

—¿Cómo...?— Yoongi desvió la mirada hacia el individuo, impactado por la noticia —Espera... ¿Acaso te referías a él con lo de tu amigo de la academia?

—No— Jimin seguía sin saber cómo reaccionar —Me refería a otra persona... Ni siquiera sabía que tenía animales... Quizá vino a acompañar a alguien o se refugió aquí cuando todo comenzó...

El mayor notó su nerviosismo. Jimin dio un paso al frente, sin apartar la vista de la cara demacrada de su ex novio. Taemin alzó los brazos y se agitó sobre la silla; quería alcanzar al rubio pero su discapacidad se lo impedía.

Yoongi lo agarró del brazo, evitando que se acercase más.

—¿Qué quieres que haga con él?— preguntó en un tono frío —¿Quieres que lo mate?— Yoongi giró el rostro de su chico para mirarle a los ojos —¿O quieres dejarlo como esta?

Jimin guardó silencio. Por una parte sentía lástima, pero por otra parte seguía albergando un profundo resentimiento hacia él.

—Intentó abusar de Jungkook— contestó dolido —¿Se supone que debo perdonarle algo tan grave? ¿Se supone que tengo que liberarle de su sufrimiento?

—No tienes que hacer nada que no quieras hacer— aseguró tajante —Yo no te voy a juzgar, tomes la decisión que tomes.

—La vida de TaeTae es lo único que me importa— le apretó la mano —Ahora no puedo ni quiero lidiar con esto, Yoon. Vámonos, por favor.

Yoongi le besó en los labios. Aquel leve contacto calmó la ansiedad de Jimin. El rubio salió de la habitación mientras su novio se quedaba atrás. 

El mayor le dedicó una última mirada a Taemin pero justo cuando iba a irse, vio que algo sobresalía del interior de la cartera.

Yoongi se agachó para tomarla. Al abrirla encontró una fotografía. En ella aparecía Jimin junto a un joven de cabello negro. El desconocido miraba a cámara, sonriente, mientras el menor lo observaba a él. Aquella mirada de afecto que vio en su novio le irritó de sobremanera.

—Lo tenías todo. Todo— soltó asqueado —Jimin te quería, maldito imbécil. Te quería de verdad y tú le jodiste la vida.

Taemin seguía con los brazos en alto, desesperado por devorar su carne.

—¡No tienes ningún derecho a llevar una fotografía de él!— Yoongi le dio una patada a la silla; el joven chocó contra la pared y cayó al suelo —¡No tienes ningún derecho de arrepentirte por lo que le hiciste!

El chico no pudo controlar la rabia que surgió en su interior. Por cómo había encontrado la fotografía, intuía que Taemin la había mirado antes de convertirse.

—Tenías el amor de un chico increíble— apretó el puño, arrugando la fotografía —Eres patético por haberte dado cuenta cuando ibas a morir.

El infectado trataba de arrastrarse en su dirección, pero la falta de fuerza en los brazos y sus piernas inservibles, impedían que pudiera avanzar hacia él.

—Déjame decirte una cosa. Jimin ha superado lo que le hiciste y ahora es muy feliz. A pesar de las circunstancias que nos rodean, conmigo a encontrado lo que jamás halló contigo— Yoongi rompió la fotografía ante su intensa mirada —Eres parte del pasado, Taemin. Alguien que ya no tiene cabida en su vida y que con el paso del tiempo, caerá en el olvido— el joven tiró los trozos de papel sobre su cabeza —Y eso es justo lo que te mereces.

El infectado se retorció agitado, lo que dibujó una sonrisa en el rostro de Yoongi. 

—¡Jungkook, lo tengo!— gritó Hoseok.

La voz del pelirrojo alarmó a todo el grupo. Los jóvenes corrieron inmediatamente hacia la habitación en donde se encontraba Hoseok.

Yoongi, Namjoon y Jackson se encargaron de iluminar el cuarto con las linternas. El maknae dejó a Taehyung con sumo cuidado sobre la camilla. Hoseok comenzó a pedirle algunas cosas a Eunha, quien no dudó en ponerse a su completa disposición.

Taehyung abrió los ojos al oír tantas voces entremezclándose. Hoseok estaba sujetando algo en la mano pero no fue capaz de distinguirlo por la poca luz que había. El castaño giró la cabeza hacia el otro lado y se sorprendió un poco al ver a todos en la habitación.

«¿Por qué tienen esas caras tan serias?» se preguntó inquieto. Unos segundos después recordó que le había mordido una serpiente.

Taehyung sintió un pinchazo pero no supo si había sido en el brazo o en la mano. Tenía una sensación extraña; sentía mucho calor pero al mismo tiempo notaba escalofríos. La debilidad general que emanaba de su cuerpo junto a los continuos hormigueos, el dolor de cabeza y la sequedad de su boca, le hacían sentirse desorientado.

—Tranquilo, bebé. Te vas a poner bien.

La voz de Jungkook le hizo mirar hacia su izquierda. El maknae estaba junto a él, apretándole la mano suavemente. Detrás pudo ver a Yoongi, quien se esforzó por mostrarle una sonrisa despreocupada.

—El suero antiofídico ya está entrando en su organismo— Hoseok se quitó los guantes —Ahora hay que esperar para ver cómo responde.

—Todo irá bien, Tae— Yoongi se acercó y le pellizcó la mejilla —Hierba mala nunca muere.

Aquellas palabras causaron una sonrisa en Taehyung.

—Deberíamos buscar velas, linternas o algo que nos pueda dar más luz— sugirió Eunha.

—¿Cuánto tiempo vamos a quedarnos?— preguntó Jackson —Es probable que nos estén buscando.

—El tiempo que necesite TaeTae— respondió Jimin —Cuando esté mejor, pondremos rumbo al puerto.

—Ya estoy bien— contestó Taehyung con un hilo de voz —Vámonos...

—Tu única tarea es recuperarte— Namjoon le quitó la palabra a Yoongi de la boca —Quédate tumbado y no te sobreesfuerces. Déjanos el resto a nosotros.

Taehyung suspiró resignado. La aparición de Mellie le dibujó una suave sonrisa en el rostro. La perrita saltó encima de la camilla y se acurrucó contra su pecho.

—Mira quién ha venido a verte— Jungkook le dio un beso en la mejilla —Mellie estaba muy preocupada por ti.

El castaño la abrazó inmediatamente. Namjoon aprovechó ese instante para ir a buscar las linternas. El chico salió de la habitación acompañado por Jackson.

—Eh— Yoongi los alcanzó en el pasillo —En el quirófano hay un infectado. No entréis ahí.

—¿Y eso?— Jackson frunció el ceño —¿Por qué no lo has matado?

—Porque es el ex de Jimin— respondió incómodo.

—No jodas— Namjoon no pudo ocultar su sorpresa.

—Coño, pues razón de más para matarlo— Jackson puso los brazos en jarras —Si yo me encontrara al desgraciado de mi ex, lo apuñalaría treinta mil veces al muy hijo de un sapo.

—Jackson...

—¿Qué?— se giró hacia Namjoon —Cualquier terapeuta me lo aconsejaría.

—Ningún terapeuta te aconsejaría algo así.

—Después de conocer a mi ex, cualquier terapeuta me acompañaría a apuñalarlo— se encogió de hombros —¿Conclusión? Jimin debería rajarle. Seguro que fue un gilipollas.

—Ni te lo imaginas— Yoongi miró hacia la puerta del quirófano —Es decisión suya pero yo lo dejaría ahí, pudriéndose.

—Entonces no entraré ahí— Namjoon quería respetar la decisión de su primo —Miraré en el almacén a ver si encuentro algo.

Yoongi asintió y regresó con su hermano mientras Jackson acompañaba a su amigo al almacén. El cuarto no era muy grande y tampoco tenía ventanas. Solo había una puerta que llevaba al portal del edificio. Por el suelo se encontraron con varios botes de pintura, plásticos, cuerdas y otros materiales.

—Parece que iban a reformar la clínica— Namjoon se agachó para abrir los muebles —¿Puedes alumbrarme?

—Oye Nam— Jackson se acercó e hizo lo que le pidió —Gracias por lo de ayer.

—Olvídate de eso— el chico apartó una telaraña sin inmutarse.

—Eres demasiado generoso— se mordió la carne de la boca —Si hubiese sido al revés, yo no te habría perdonado.

—Sabes que eso no es verdad— alzó la vista hacia él —Eres temperamental pero no rencoroso. Al menos no conmigo.

El mayor sonrió un poco avergonzado.

—Aquí no hay nada— Namjoon se levantó y fue hacia otro armario.

Jackson le siguió, enfocando la luz en su dirección. El menor miró en cada rincón, tratando de dar con algo que le sirviese. Gracias a su insistencia consiguió encontrar una linterna grande.

—La tengo— Namjoon la agarró del asa y la encendió —Parece que tiene pilas— sonrió de oreja a oreja.

Jackson también sonrió al ver que el objeto aportaba el triple de luz que una linterna corriente.

—Ya podemos volver con los demás— comentó mientras toqueteaba la carcasa.

—Antes de eso... Hay algo que necesito saber— Jackson lo sujetó del brazo —¿Hay algo entre tú y Hoseok?— preguntó sin titubear.

Un silencio tenso e incómodo se alzó entre ellos. Jackson soltó el brazo de su amigo al no recibir una respuesta inmediata.

—Siento que las cosas entre vosotros han cambiado— prosiguió nervioso —¿Tengo razón?

—Sí— afirmó en un tono sereno —Hobi y yo estamos saliendo.

Jackson le sostuvo la mirada, a pesar del dolor que le causaron sus palabras. El chico asintió levemente y luego se giró hacia la puerta.

—Jackson— el mencionado se detuvo al oír su voz —No quiero que te alejes de nosotros. Yo nunca he...

—Lo sé— le cortó —Nunca me has mentido. Lo nuestro solo era sexo... Lo acepté desde que comenzó.

—No es solo eso— Namjoon se acercó a él —Eres mi amigo y me importas.

—Hoseok también era tu amigo y sin embargo a él sí le has dado una oportunidad— dijo con cierta amargura —Hasta lleváis anillos similares... Pensé que eras alérgico al compromiso. ¿O solo lo eras conmigo?

—Hay muchas cosas que desconoces de mí— contestó sin perder la calma —Entre Hobi y yo hay mucha historia.

—¿Porque os conocéis desde niños?— le miró dolido —Podrías haberme dejado conocerte mejor.

—Uno no manda sobre sus sentimientos, Jackson.

—Lo sé— el chico bajó la mirada —Por esa razón sigo enamorado de ti...

Namjoon vio cómo se dirigía hacia la puerta.

—¿Sabes? Ahora entiendo por qué estabas tan tranquilo— Jackson se dio la vuelta y le miró a los ojos —Mientras yo lloraba la muerte de Jihoon, tú te follabas a Hoseok en el otro edificio.

—En el búnker murieron muchas personas, amigos tuyos entre otros— le recordó sin tapujos —Y lo primero que hiciste en la casa de los Park fue pedirme sexo.

Jackson no dijo nada, solo se mordió el labio inferior.

—Cuando mataron a mi padre no me quedé llorando junto a su cadáver— continuó en un tono más tajante —Hobi estaba en peligro así que fui a por él. Pero eso no quiere decir que su muerte me haya dolido menos.

—Parece que Hoseok siempre ha sido tu prioridad...

—Sin él me habría hundido en la oscuridad— contestó con total sinceridad —Hobi ha sido mi apoyo desde que era un niño.

—¿Tanto le quieres?— se obligó a preguntar.

—Daría mi vida por él sin dudar.

Jackson sintió un dolor punzante en el pecho. El joven de origen chino sabía que la relación entre ellos era estrecha, pero desconocía hasta qué punto.

—Nam, yo...

Un contundente sonido interrumpió la conversación. Namjoon y Jackson se asomaron al pasillo y vieron cómo varios hombres entraban por la puerta principal de la clínica. El menor agarró a su amigo de la ropa y tiró de él hacia el interior del almacén.

—Me habéis hecho venir a una puta pocilga— Bogum pisó el cráneo de un infectado sin inmutarse —Joder, esto os va a costar unas cuantas vidas. 

Quién iba a imaginar que Taemin estaría detrás de una de las puertas de la clínica. Si estuvierais en la situación de Jimin, ¿qué haríais con él? 🤔

Taehyung ha logrado aguantar hasta recibir el suero antiofídico, pero ¿responderá su cuerpo favorablemente al antídoto? 👀 Namjoon y Jackson tenían mucho que decirse pero la entrada de Bogum ha interrumpido la conversación. Y ahora las circunstancias vuelven a complicarse mucho para el grupo... 

Los próximos capítulos van a ser muy intensos. Deberíais leerlos en casa, no en mitad de la clase o en el trabajo, que os veo.  🧐 Pasad una buena semana y no os enferméis. 💜

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro